Simplemente no puedo mirarlo a la cara. Me da tanta vergüenza.
Saber que fuí suyo. Me hizo el amor con cariño y delicadeza. Cómo si fuese de cristal y no tratara de quebrarme. Años que no me sentía tan querido... Tan amado y deseado.
Me hizo sentir especial, y descubrí una faceta en mi que no conocía...
¿Y si piensa que soy un fácil?
Dios...
Tengo miedo de ver su reacción cuando nos veamos.
No resistiría que me rechazará. No lo soportaría.
El sonido del teléfono hizo que dejara de escribir. Era una vídeo llamada.
-Hola.
-Hola Kōki-san/ Kōki-chan- eran sus amigos donceles.
-¿A que se debe la conferencia?
-Nada más saludar...
-Sí, claro...
-La verdad es que estamos llegando a tu casa. Será mejor que bajes por nosotros.
-1204
-Gracias, Kōki-chan. Nos vemos.
Cuando se cortó la conferencia corrió a la sala y medio limpió el desastre que tenía.
Cuando sonó el timbre corrió lo más que pudo, el leve dolor y la incomodidad no lo dejaba caminar libremente.
—Bienvenidos.
—Buenas noches, Kōki-san/Kōki-chan.
—Buenas noches, entren.
Entraron directo a la cocina para tomar platos y demás para poder acomodar la comida que llevaron.
Kōki se había quedado parado viéndolos. Siempre hacían lo mismo.
—Ahora si— se dirigieron a la sala y comenzaron a platicar.
—¿Shinobu-kun?
—Con Shin-chan. Tienen su día padre e hizo.
Kōki dudo que pudieran tenerlo, ya que Shinobu iba a cumplir un año.
—La verdad estamos aquí para confirmar algo, Kōki-san— dijo un inexpresivo Kagami Tetsuya.
—¿Qué?
—Yuu dice que hoy estuviste en raro.
Solo pudo cerrar los ojos.
—Que te picaron muchos bichos y caminabas cómo pollo recién nacido.
Un fuerte rojo inundó su cara.
—¿Follaron?— preguntó Kazunari con una sonrisa traviesa.
Se cubrió el rostro. No los podía ver.
—¿Y qué tal? ¿Es muy bueno en la cama?
—Kazunari-san lo está avergonzado— dijo Ryō nervioso. Ya sabía que procedía. Ahora que recordaba,por las pocas veces que veían al castaño, él no estaba al tanto del "trato".
—Veras Kōki-chan. Todos tenemos un acuerdo.
—¿Acuerdo?
Kazunari sonrió mientras se levantaba de su lugar, se acercó al castaño y le susurró en que consistía el acuerdo.
—No.No.No.
—Oh vamos. No es para avergonzarse.
—Pero...
—Aun recuerdo mi primera vez— suspiro Kazunari —Shin-chan me dió tan duro que no pude pararme dos días.
—¿Dos días?— Murasakibara Tatsuya movió la mano —Eso es no es nada. Atsushi me dejó fuera de combate la semana entera. Jamás han conocido dolor.
—Sí claro— Tetsuya se burló — Mi tigre le hace todo el honor al apodo.
—Sí... Tanto que el otro día te dejó bien marcada la espalda.
—No quiero oír eso de sempai. Recuerdo que golpeaste a Kise por tenerla "grande". No te rías Ryō, te recuerdo que Ahomine la tiene pequeña.
—Mi Daiki es más grande que "tigre" ¿seguro le hace honor al nombre?
—Hey, tranquilos — Yukio trataba de calmar a ambos.
¿Desde cuándo son así?
No podía creer lo que escuchaba ¿Esos eran sus santos amigos?
—No olviden porque estamos aquí— le recordó Kazunari a los donceles —¿Y bien, Kōki-chan? ¿Quién es mejor?
Sabia que era mejor hablar —Seijūrō-san.
—¿Tan bueno? ¿Esta bien dotado?
Se sonrojó aun más. Por supuesto que estaba muy bien dotado.
—No saldrás de aquí hasta que respondas~