-¿disculpe no quiero se un entrometido pero le gusta la alquimia?- pregunto el pelirrubio un poco nervioso se notaba el pobre ya que podría congeniar con esa persona y tener un amigo con su mismo interés
-en verdad si me gusta la alquimia ¿algún problema en eso?- cuestiono un pelinegro de cabellos cortos, ojos negros, piel un poco pálida, y una voz que podría seducir a cualquier mujer
-no es que yo tengo la colección de este autor en mi casa ademas de que es la primera ves que veo que alguien le guste la alquimia como a mi-
-cual es tu nombre- pregunto el pelinegro con algo de curiosidad le agradaba el chico quizás por que les gustaba la alquimia
-Edward, Edward Elric y el tuyo- extendió su mano en forma de saludo el pelinegro toma la mano de Ed para responder el saludo
-Mustang, Roy Mustang- sonríe el pelinegro Ed sintió un latido fuerte en su pecho pero no sabia que hacer su cabeza daba vueltas era la primera vez que sentía eso por alguien se le hacia extraño pero a la vez no eran tantos sentimientos revueltos en el que no podía descifrar
-¿oye quieres ir a un café para charlar un poco?- pregunto el pelinegro sacando de sus pensamientos al pelirrubio
-claro hay una cafetería muy buena cerca de aquí- dijo el pelirrubio con un poco mas de calma el pelinegro le toma la palabra el Ed sobre el lugar los dos van a pagar los libros y salen dirijiendoce a la cafetería a charlar un poco sobre la alquimia y algunas cosas que salían a flote de algunos de los dos, pasaban los días ellos dos se volvían mas cercanos era extraño ya que avanzaban un poco mas rápido de lo que parecía pero no les importaba, el pelirrubio sentía sentimientos de amor hacia el pelinegro pero creía que no eran mutuos y creyó que seria mejor estar solo como amigos para poder estar con el, Ed se encontraba en su día de descanso caminaba feliz por la calle cargando una bolsa de víveres el pelirrubio tarareaba contento, a lo lejos se escuchaba que alguien llamaba a su nombre la voz no era muy entendible hasta que volteo a ver quien era encontrando se con la mirada al pelinegro que corría detrás de el
-Ed te encontré después de varias cuadras- decía el pelinegro algo cansado y agitado
-¿Roy que pasa por que me seguías?- pregunto el pelirrubio viéndolo
-quería decirte que podrías ir a mi casa a cenar esta noche- tomo un poco mas de aire para relajar su reparación acelerada
-claro ¿a que hora voy a tu casa?- sonrió después de a ver hecho la pregunta Roy le dijo la hora el lugar, Ed al llegar a casa limpia un poco para que las hora no se le hagan largas tomo una ducha se arreglo para la ocasión salio de su casa para dirigirse a casa de el pelinegro contento, toco el timbre espero, después de unos minutos el pelinegro abre la puerta dejando pasar al pelirrubio, el pelinegro lleva a el pelirrubio al comedor donde estaba todo listo una pequeña cena con velas y vino con algunos detalles que hacían especial la velada todo transcurrió normal y relajado hasta que el pelinegro cambio de conversación de pronto
-Ed hemos pasado muchos momentos como buenos amigos y quisiera ser mas que eso así que seré directo…-respira hondo- Edgard Elric me concebirías el honor de ser tu pareja- el pelinegro esperaba una respuesta ya que el pelirrubio quedo mudo creía que había escuchado mal o estaba confundido el se le había declarado estaba feliz Ed reacciono rápido y sonrió
-si Roy si quiero ser tu novio- las mejillas se marcaban de un color carmín a Ed el pelinegro toma la mano del pelirrubio dando un suave beso en ella sacándole una dulce y tierna sonrisa a Ed
FIN