-Con esto pondremos en marcha este bebé... –Dijo Franky quien estaba terminado de hacer unos pequeños arreglos a un bote -¿Y bien...? Ah... –Miró a su nakama que ya se encontraba sentado y durmiendo sobre la mesa –Bueno, no lo culpo... Me ayudó arreglando este bote. –Franky se levantó de su lugar para ir por una cobija que tenía en algún rincón y con ella cubrió a Sanji y acarició con ternura su peinado –Quien diría que detrás de esa imagen de chico rudo se ocultaba alguien de corazón puro... Bueno, hora de ir a dormir. –Cargó a su nakama y salieron del taller para ir finalmente a dormir –Me pregunto qué es lo que habrá pasado entre él y Roronoa...
-También me pregunto lo mismo... –Dijo a lo lejos Robin quien estaba a fuera de la cocina -¿Quieres ayuda...?
-Nico Robin...
-Fufufu... –Acompañó a Franky a dejar a Sanji en su cama, Salieron de la habitación y fueron a platicar un rato en el jardín –Eres muy bueno con Cocinero-san...
-¡Mm..! –Se sonrojó un poco al escuchar el comentario de su compañera –No es para tanto...
-Fufufu... Serias un excelente padre...
-¡¿Tú crees...?! –Dijo con pena al escuchar el alago de la arqueóloga –No, creo que no... Por cierto...
-¿Si...?
-¿Sabes algo de lo que pasó esa noche...?
-¿La noche del festín...? Sí, pero prométeme que no se lo dirás a nadie... Lo seguiría guardando en secreto, pero tal vez sirva de algo...
-Palabra de hombre...
-Bueno... Lo único que sé es que ese día, el de la idea fue Cocinero-san en hacer la fiesta, lo había hecho para Espadachín-san... Y así pudiera hablar con el...
-Por eso lo hizo... Ese día Brook y yo...
-Descuida, el ya me lo contó...
-Ya veo... Nunca lo había visto tan triste... Ese día vi que estaba guardando algo en la alacena, pero no vi muy bien que era.
-Debe ser algo que le iba a dar a Espadachín-san...
-...
-Ese día, saqué en conclusión que Cocinero-san... Siente algo por el...
-No esperaba eso...
-Sólo es una suposición...
-Ah, bueno... –Se sonrojó un poco al escuchar las palabras de Robin –Si fuera así...
-Pero no creo que Espadachín-san sienta lo mismo por Cocinero-san... No lo quiere...
-Es duro cuando no correspondes a los sentimientos de alguien...
-Si ese fuera el caso... ¿Cocinero-san le habrá dicho lo que siente...?
-No lo creo... Si fuera así, Zoro no pensaría más de dos veces en rechazarlo... Cuando le muestras lo que sientes por esa persona y esta te rechaza, ya no hay nada que pueda hacer que se olvide de lo que le dijiste, hará lo posible por evadirte, y si hubiera pasado eso, aun con la situación en la que Sanji está, inconscientemente Zoro lo rechazaría... Bueno, ese es mi punto...
-¿Alguna vez te pasó...?
-Jajajaja... Fueron varias ocasiones... Pero estoy seguro que llegará esa chica... ¿Y a ti te ha pasado...?
-No, eh tenido tantos percances que no me habia dado el tiempo para saber que es amar a alguien... Nunca eh estado con un hombre...
-Pensé que nunca conocería a una verdadera señorita, hasta ahora... Jajajajajaja...
-Fufufu... Bueno... Si llega el indicado para mí, y si él me ama, por supuesto que no lo dejaría... Y estoy segura que cuando encuentres a la chica correcta la harás muy feliz...
-¡Nnnn...!
-¿Franky...?
-¡No es nada...! ¡Se me metió algo en el ojo...! ¡Buaaaa...! ¡Qué bellas palabras...!
-Fufufufufu... –Posó su mano en el hombro de su nakama para calmarlo –Pero ahora, tenemos un sueño que cumplir... Nunca será tarde para amar...
-¡Buuuuaa...! ¡Eres tan sabia, Nico Robin...!
-Los ayudaré en lo que pueda para saber qué fue lo que pasó...
-¿Harías...? ¿Eso por mi...?
-Si... –Dijo con una cálida sonrisa
-¡Gracias...!
Al día siguiente:
Hoy era día de lavar la ropa de los muchachos. Entre su tarea y diversión, Luffy, Usopp y Chopper estaban entretenidos con las burbujas de jabón que salían al momento de lavar las prendas, Sanji estaba terminando de lavar algunas camisas; se le ocurrió formar un círculo con sus manos y sumergirlas en la jabonadura, con sumo cuidado sacó sus manos y sopló lentamente entre ellas sacando una gran burbuja, al ver esto, los chicos se acercaron a él -¡Es una enorme burbuja! Hazlo de nuevo, Sanji... –Dijo Luffy sorprendido.
-Ah, claro... Sólo hay que hacer esto... –Volvió a hacer lo mismo y sacando otra burbuja, Luffy y los demás hicieron lo mismo sacando muchas burbujas –Son muy bonitas... Jajajaja... –Dijo el cocinero moviendo su cola de la felicidad.
-Idiotas... Dijo Zoro quien los estaba mirando desde los tendederos –Ah, parece que se les acabó la fiesta... –Dijo con cinismo al ver que Nami se iba acercando a ellos
-Oigan dejen de jugar y terminen de lavar la ropa... –Dijo Nami
-Ah, lo siento mucho, Nami... No volveré a hacerlo... –Dijo Sanji levantándose de su lugar y agachando la cabeza en señal de disculpa.
-¡Mira esto, Nami...! –Dijo Luffy quien alargó los dedos de sus manos y con ellos hizo el procedimiento de sumergirlos en el jabón para sacar una burbuja aun mucho más grande que antes.
-Eso no es nada... ¿Quieres ver lo que yo hago...? –Dijo algo retadora la navegante, sacó su báculo y con él hizo una técnica especial sacando muchas burbujas, tanto grandes y pequeñas, dejando asombrados a los chicos.
-¡Woow...! Has practicado mucho... –Dijo Usopp sorprendido
-No es gran cosa... –Dijo divertida.
-Qué divertido... Jajajajaja –Dijo con alegría el cocinero.
-¡Ah, carajo...! –Zoro había pateado una cesta llena de mandarinas por el coraje al ver que no había pasado nada de acción.
-¡Ya te vi, Zoro...! –Nami volvió a usar la misma técnica pero ahora como ataque contra el espadachín, invadiéndolo con muchas burbujas de a montón.
-¡Basta...! ¡Basta...! –Cayó de sentón.
-Jajajajaja... –Rieron Luffy, Usopp y Chopper.
-Muy bien, dejen de distraerse más y terminen con sus deberes –Dicho esto, dejaron a Sanji sólo, y sin dudarlo fue con Zoro para ayudarlo.
-¿Estás bien...? –Dijo llegando con su nakama y le tendió la mano para ayudarlo a levantarse. Zoro hizo un gesto de disgusto, pero aceptó la ayuda de su compañero -¿No te pasó nada...?
-¿Qué me pueden hacer un montón de tontas burbujas...?
-Pero te caíste...
-¡Ah, ya déjame...! –Dijo haciendo una graciosa cara de enojo. Sin prestarle mucha atención, el cocinero se retiró a su lugar para terminar de lavar su ropa –Es tan molesto... –Zoro, continuó tendiendo su ropa. En esos momentos llegó Brook.
-Zoro-san... ¿Todo bien...?
-Sí, eso creo...
-Hay algo que quisiera preguntarte...
-¿Qué sucede...?
-Bueno, la noche del festín vi a Sanji-san muy triste... ¿Sabes que fue lo que pasó...?
-No tengo idea... Bueno sea lo que sea, todos sabemos que es un chiquillo llorón...
-Esa noche se veía muy mal... Cómo si alguien le hubiera hecho daño...
-... –Zoro recordó esa noche –No creo que haya sido algo muy importante...
-Tú sabes algo... Y lo averiguaré...
-¿Tienes pruebas...?
-No, pero no descansaré hasta descubrir lo que pasó...
-¿De qué sirve perder el tiempo por alguien que no vale nada...?
-...
-... –Se miraron cara a cara. Por supuesto en Brook no se podía ver su semblante, pero Zoro mostraba una mirada fuerte –No pierdas tu tiempo, te recuerdo que el ha olvidado todo...
-Creo que me estoy dando cuenta de muchas cosas ahora, te veo luego... –Brook dejó a Zoro yendo a ver que estaban haciendo los muchachos.
-Aun no entiendo lo que quiso decirme esa mujer... <<Hábito>> Eh... –Esa palabra retumbó en sus pensamientos –Hábito... Sólo lo dijo para asustarme, es todo... Yo, un hábito... Claro...
Mientras tanto en la tienda:
-Lo sabía... La piedra no se detendrá... Ha comenzado a girar más rápido... Era de esperarse... Alguien que tiene un hábito encima de él no lo reconocerá aun si este lo lleva a su fin... –Yuko se encontraba recostada en su sofá fumando su pipa, inhaló y exhaló el humo del tabaco –Roronoa Zoro... Vinsmoke Sanji...–Sonrió –El mundo es muy pequeño, en ocasiones los lazos te llevan a conocer a otras personas... –Se levantó de su lugar y fue a la bodega. Una vez que llegó fue a uno de los estantes para buscar un artefacto que le habían dado como pago.
De vuelta en el barco:
Sanji se encontraba tendiendo las ultimas camisas que le faltaban, en eso vio a lo lejos a Zoro quien se encontraba entrenando con sus pesas –Es muy fuerte... Me gustaría tener esa fuerza... –Giró su vista al tendedero y se percató que estaba el haramaki de Zoro –Ya está seco... Iré a llevárselo... Pero antes... –Hizo un pequeña risita picara.
-Uff... Necesito tomar un baño... –Dijo el espadachín dejando las pesas en el suelo, Sanji se acercó a él –Ah, eres tu... ¿Qué pasó...?
-...
-¿Por qué esa cara...? ¿Qué llevas atrás...?
-... –Sanji sacó el haramaki que estaba ocultando en su espalda, esto hizo que Zoro se enfureciera y fue hasta él para quitarle la prenda, pero Sanji fue más rápido y corrió –Primero tendrás que atraparme... Jajajajaja...
-Eres un... –Zoro lo persiguió en círculos en el jardín –¡Ven aquí...! ¡Cuando te atrape, te haré picadillo...!
-Jajajajaja...
Desde el mirador estaban Robin, Brook y Franky viendo la escena.
-Es tan tierno Cocinero-san...
-¿Pudiste sacar algo, Brook...? –Preguntó Franky mientras bebía un refresco.
-No mucho, pero si dijo algo que me dejó sorprendido...
<<¿De qué sirve perder el tiempo por alguien que no vale nada...?>>
-¿Eso fue lo que te dijo...? Maldito...
-... –Robin seguía observando lo que estaban haciendo los muchachos.
Sanji se sentó en el pasto, estaba agotado por todo lo que corrió, pero al mismo tiempo se divertía mucho estando en compañía con Zoro –Esta bien... Jajajaja... Ten... –mostró el haramaki para devolvérselo a su dueño, pero antes de recibir respuesta; Zoro lo empujó logrando que cayera completamente al pasto. Esto hizo que Sanji se asustara antes de decir más, vio esa mirada tan fría; Sanji sintió mucho miedo lo único que pudo hacer es quedarse inmóvil –Zo-Zoro... –El espadachín se fue encima de él –Yo... Lo...
-Dame eso... –Dijo con un tono muy escalofriante.
-Yo... no quería... –Sanji le entregó con mucho miedo el haramaki al peli verde
-... –Se lo arrebató con gran violencia de las manos
-Yo... –El miedo lo invadió completamente, que unas lágrimas amenazaron con salir, pero hizo lo posible por no llorar –Discúlpame...
-La próxima vez que lo intentes, dile adiós a tus manos...
-Zo-ro... –Intentó apartarlo de el, pero era muy pesado –Me estás asustando... Basta...
-¿O qué...? –Se preparó para darle de lleno con un puñetazo.
-¡¡¡Diez Flour!!! –Sin darse cuenta, Zoro fue aprisionado por el ataque de Robin, la arqueóloga se encontraba a unos cuantos metros de ellos –Son mis nakamas, pero si te atreves a hacerle daño no dudaré en asesinarte... –Robin hablaba en serio, no mostraba ningún gesto de bacilo –Ahora que el no recuerda nada... ¿Crees que puedes aprovecharte de la situación...?
-¡Suéltame...!
-Entonces déjalo en paz... –Dijo con gran firmeza
Zoro se rindió y decidió ya no seguir con la pelea. Al ver que ya no iba a continuar, Robin deshizo el ataque; el espadachín se levantó dejando a Sanji en el suelo, Se dio la vuelta y antes de irse dijo sin mirar al cocinero –La próxima vez no tendrás suerte...
-Zoro... –Sanji se levantó con temor y se dirigió hacia donde estaba Robin -...
-¿Estás bien...?
-Si... Gracias... –Abrazó a su nakama.
-Cocinero-san... Ya pasó... –Robin respondió al abrazo de su camarada
-No era mi intensión hacerlo enojar... Sólo quería... –Dijo entre lágrimas
-Lo sé... Lo vi todo...
-Ni siquiera pude... Defenderme... Lamento haberte molestado...
-Está bien... No pasa nada... –Deshizo un poco del abrazo para hablar bien con el cocinero –Escucha, tú no eres una persona débil... En realidad eres muy fuerte, y yo te ayudaré a recordar cómo defenderte...
-Robin... ¿En verdad harías eso por mi...?
-Por supuesto...
-... –Agachó su cabeza -¿Qué fue lo que hice para que Zoro me odiara...? Cuando fuimos a visitar el pueblo no se portó de esa forma... Pero ahora, es como si fuera otro...
-Tú no hiciste nada... Por ahora será mejor que lo dejes tranquilo por un tiempo... Y si te molesta, dímelo o al resto de los muchachos, ¿de acuerdo?
-Si...
-¿Qué te parece si mañana entrenamos un poco? –Dijo esto secando las lágrimas de Sanji
-Si... Muchas gracias Robin.
-Ahora ven conmigo, estamos tomando un poco de café en el mirador. Hay lugar para uno más.
-Robin... Gra-gracias...
-¿De qué...?
-¿Puedo preguntarte algo...?
-Claro.
-¿Cómo fue que nos conocimos...?