Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Lazos por Tina Black

[Reviews - 65]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Al fin, y ahora mi perversa mente esta dando frutos XDD

Disfruten el capitulo y no me maten.

Yuko and Sanji by Nadin-Black on DeviantArt

-Sabes, es curioso, porque en un principio yo fui su enemiga.

-¿De verdad...?

Robin y Sanji se encontraban sentados en la banca del mástil  –El único que me dio la bienvenida el primer día que nos conocimos fuiste tu...

-¿Y-Yo...?

-Sí, tu...

-Miró sus pies sin saber que decir más -...

-Alguna vez estuve sola... Y fue durante mucho tiempo... Pero ahora estoy con las personas que me quieren y haré lo que sea por protegerlos. Nadie en este mundo nace completamente solo...

-Robin... –En esos momentos el cocinero fijó su vista hacia la arqueóloga.

-Es un poco extraño que me llames sólo por mi nombre... Fufufu...

-Ah, yo...

-Está bien. –Dijo con una leve, pero cálida sonrisa.

-Quisiera saber... –Volvió su vista al suelo – Qué fue lo que hice mal...

-Estoy segura que no has hecho nada malo.

-Creo que Zoro me odia...

-La verdad, desde que los conozco tienen una forma de llevarse algo peculiar... Aunque...

-¿Si...?

-No, nada. Lo mejor será que por ahora no le hables...

-De a cuerdo...

-Ven... –Se levantó de su lugar y tomó la mano de su nakama –Acompañame con los demás a tomar un poco de café.

-Ah... ¡Sí! –Dijo con una linda sonrisa. Sanji se levantó de su lugar de inmediato yendo con Robin al mirador, pasaron el resto de la tarde platicando en compañía de Franky y Brook; cayó la noche, Nami llamó a toda la tripulación para organizarse para el turno de vigia.

-Bien, esta semana le tocaría a Sanji-kun vigilar el barco, pero se lo pospondremos para la siguiente semana... Así que Usopp, tú te harás cargo esta noche.

-Está bien... –Dijo con pesadez el narigudo.

-No hay problema, Nami. Yo pasare la noche en vela. –Dijo el  cocinero dejando un poco sorprendidos al resto del grupo.

-¿Estás seguro...?

-Por supuesto. .Dijo con ánimos.

-Muy bien, esto es lo que harás... Pasaras la noche en la torre de vigía. Si ves algún barco aproximándose a nosotros, llámanos por el microfono o si llegas a ver alguna isla, avísame.

-¡Bien!

-Has lo posible por mantenerte despierto, ¿está bien?

Asintiendo con la cabeza, Sanji fue a preparar las  cosas que necesitaría para esta noche, mientras que el resto se dirigió a sus respectivas habitaciones. Sin más que decir, fue a la torre; llevaba consigo una manta. –Tal vez deba ir por algo de... –Antes de terminar de hablar, fijó su vista a la puerta, vio unas manos sosteniendo un envase que tenía en su interior algo de té y una bolsita con bocadillos, sin dudarlo se acercó y agarró las cosas, las manos desaparecieron por arte de magia. Sanji miró desde la puerta del mirador -¡Robin! –Dijo con alegría.

-Fufufufu...

-¡Gracias! –Dijo esto moviendo la mano. Colocó las cosas en el sofá y se sentó–Haré mi mayor esfuerzo... –Se cubrió con la manta y observó desde la ventana las brillantes estrellas. Todos habían ido ya a dormir a excepción del espadachín quien estaba a por la ventana del observatorio al cocinero desde las escaleras.

-Cocinero idiota... Con o sin memoria, sigue siendo un estorbo... –Miraba con total atención a su nakama, aun sin sus recuerdos se podía notar una tristeza –Me pregunto en que estará pensando... Aun no he olvidado nuestro duelo, haré que recuerdes todo aun si tengo que torturarte... –Zoro reaccionó cuando dijo eso, era algo que había dicho sin pensar, giró su vista a los lados para ver si no había nadie más despierto –Iré a hacerle una pequeña visita...

 

********************************************

Dos días después del festín:

Los chicos habían logrado dar con una isla veraniega. Buscaron un lugar para ocultar el barco, pero no encontraron nada –Supongo que alguien se quedará a cuidar el barco esta noche –Dijo Nami –Esta isla tiene un centro vacacional oculto, sólo tomará dos días para que el log pose vuelva a indicar la siguiente dirección.

-¿Qué te parece si lo arreglamos con estas varitas? A quien le salga la varita más pequeña se queda a cuidar el barco esta noche. –Dijo Usopp mostrando su mano sosteniendo las varitas. Los muchachos se acercaron y cada uno tomó una, Sanji fue el quinto en tomar la varita, para sorpresa tomó la mas pequeña –Suerte esta noche, Sanji-kun –Dijo divertido el artillero.

-Bien, bien... –Dijo con cansancio el cocinero.

-Descuida, Sanji. Volveremos mañana. –Dijo el capitán acercándose a su nakama –¿Quieres que alguien te ayude...?

-Ah, no. Estaré bien, creo que no hace falta. Parece un sitio tranquilo. No pasará nada.

-Partiremos en la tarde, ¿quieres que te traigamos algo...? –Dijo la navegante.

-No, está bien. Aun hay suficientes provisiones para la comida.

Después de preparar todo para pasar la noche en alguna casa de huéspedes. Se despidieron de Sanji y bajaron del barco para ir por fin a su destino. –Parece largo el camino, tomaré un atajo... –Dijo el espadachín separándose del grupo.

-¡Zoro, espera! –Gritó Usopp

-Sé lo que hago. –Dijo esto siguiendo su camino

-Es un torpe... –Dijo Nami resignada.

-El regresará... Shishishishi... ¡Franky, deprisa o se nos hará más tarde! –Dijo Luffy con un poco de impaciencia.

-¡Ya voy! –Gritó el carpintero dirigiéndose a la orilla del barco -¿Seguro que no quieres compañía? –Dijo posando su mano en el hombro de Sanji

-Sí, no hay problema. Váyanse con cuidado. –Dijo con una sonrisa y colocando su mano sobre la mano de Franky. –Nos vemos mañana, Franky.

-Bien, nos vemos luego, Sanji. –Bajó del barco y se unió con el resto. Sanji los observó mientras el grupo iba d camino al pueblo, por una parte no tenía muchos ánimos de ir a algún lado, sólo quería despejar su mente por el incidente de antier; sin darse cuenta, se sentía menospreciado.

-Ellos... ¿Qué pensaran de mí...? Zoro me terminó diciendo lo que en verdad piensa de mí, pero... ¿En verdad seré lo que me dijo...? –En esos momentos miró el vendaje de su mano. -...

++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Era una tarde muy atareada en el Baratie, el restaurante tuvo la dicha de recibir muchos clientes, pero por supuesto, por tal cantidad el servicio de los chefs y de los pocos meseros que trabajaban en el lugar hizo que algunos clientes se empezaran a desesperar un poco -¡Oye, Sanji! ¡Muévete, lleva esta orden a la mesa ocho! –Gritó Patty. Un pequeño Sanji de diez años se acercó rápido para recibir el platillo -¡Ten! Y no lo arruines...

-No te preocupes, si se cae tal vez le haga un gran favor a la persona que pidió esto... –Dijo con sarna el pequeño.

-Si no tuviera las manos ocupadas ya te habría matado, pequeño insecto...

-En tus sueños... –Salió de la cocina y entregó el platillo a la mesa –Aquí tiene su comida, señor... Disculpe por la tardanza –Hizo una reverencia y se fue de nuevo al lugar –Ya llevé el platillo... ¿Ahora...? –Pero antes de decir otra cosa, se escuchó un terrible estruendo en la entrada del restaurante.

-¡Piratas...!

-¿Otra vez...? –Dijo con mucha molestia Carne quien terminaba de preparar otro platillo. La gente salió despavorida y dejando un desierto en el lugar. –Cuando al fin nos había caído una buena racha... ¿Qué debemos hacer...? El jefe no está...

-Conociéndolo, no los dejará sin comer... A veces no lo entiendo... ¿Por qué recibirá a todos por igual...?

-¡Eso es porque...! –Gritó el pequeño rubio, pero antes de decir más prefirió callar ya que le había invadido la pena. –Bueno... Yo...

-Deja de ser un escandaloso... Muy bien, ¿algún valiente que quiera atender a esos sujetos...? –Pero al voltear a su alrededor, Patty no se había dado cuenta de que los pocos meseros que quedaban se marcharon junto con el resto de los clientes -¡Cobardes! -Mientras estaban discutiendo en la cocina, nuestros invitados mostraban un aspecto muy desagradable, eran cuatro piratas que tenían muy malas intenciones, su estrategia era deshacerse de los cocineros a como dé lugar, uno de ellos quien al parecer era el capitán, era bastante enorme con algunas cicatrices en su rostro, era de cabello negro y corto, tez morena y con una barba descuidada; con un poco de miedo, Sanji agarró el valor suficiente y se dirigió a la salida de la cocina para atenderlos –¡Espera, Sanji! No hagas una locura, mejor espera a que vuelva el jefe de su encargo... –Dijo con inseguridad Patty.

-Bueno, soy el único mesero hasta ahora... –Abrió la puerta y salió

-¡Mocoso tonto...! ¡¿Qué demonios quieres hacer...?! –Dijo Carne

Estaba caminando hacia su infortunio, tragó saliva, sacó el cuadernillo y un lápiz y antes de decirles algo, escuchó la charla de los piratas –Me pregunto cómo serán las cosas de ahora en adelante ya que el Germa acaba de exterminar otro reino... –Dijo con total calma uno de los subordinados.

-“Germa...” –Estaba petrificado después de escuchar el nombre.

-Escuché que uno de los hijos del líder había muerto hace un par de años... –Agregó otro de los piratas –Corrimos con suerte al haber encontrado un atajo para llegar a la Gran Línea... Podríamos empezar de nuevo aquí en el East Blue...

-... –Sanji no podía mover ni un solo músculo, inconscientemente se abrazó a sí mismo y comenzó a retroceder lentamente con el miedo de ser reconocido por esas personas –“Si llegaron a ver por lo menos a uno de ellos... Me delataran... No puedo dejar que eso pase...” –Pensó.

-¿Qué rayos le pasa a ese mocoso...? –Preguntó entre murmullos Patty –Deberíamos ir a arreglar esto...

-No, espera. Aun no se han dado cuenta de la presencia del chico...  –Dijo Carne.

-Vuelve rápido  la cocina, Sanji...

A paso lento, se dirigió de vuelta a cocina, pero antes de dar un paso mas... –¡Crunch! –había pisado un trozo de pan. Esto logró llamar la atención de los intrusos –No...

-Vaya, vaya, vaya... Miren que tenemos aquí... Una linda señorita... –Dijo con lascivia el capitán.

-¿Qué deberíamos hacer con el...?

-Hay que divertirnos un rato con el... –Dijo uno de los subordinados mientras se relamía los labios.

-¡Metanse con alguien de su tamaño! –Gritó a lo lejos Patty con un enorme cuchillo en las manos.

-Si sólo vinieron aquí a causar problemas, será mejor que se larguen... –Dijo Carne sosteniendo dos cuchillos más.

-... –Sanji comenzó a correr hacia donde estaban sus compañeros, pero algo lo retuvo de los pies logrando que cayera al suelo –¡Ah! –Ese algo fue un látigo que lo aprisionó.

-¿A dónde crees que vas muchachito...? La diversión acaba de comenzar... –Dijo con lujuria el capitán.

-¡Suéltame, maldito loco...!

-¡Sanji! –Sin pensarlo dos veces, Patty fue a ayudar al pequeño, pero uno de los subordinados se interpuso en su camino y sacó de las mangas de su gastado saco unas espadas y así dio por iniciada una pelea entre ellos. Carne se dirigió al lugar y fue emboscado por otro de los sujetos.

-Capitán, sería buena idea llevarnos al chico –Dijo con cinismo el subordinado restante.

-Acaben con ellos, no tarden... –Dijo el líder y fue tras Sanji quien estaba tratando de zafarse del látigo –Veamos... Dependerá que tan satisfecho quede contigo... Si resultas ser muy buena mascota, tal vez hasta te deje formar parte de mi tripulación... –Se agachó para contemplar mejor al pequeño rubio –Pero, si haces algo que no me agrade, date por muerto... –Posó su mano en la mejilla derecha de su víctima y aun desnudándolo con la mirada –Aunque creo que serás una mina d oro para mí –Como respuesta, Sanji deshizo el contacto y con rapidez mordió con fuerza la mano del sujeto –¡Maldito hijo de...!

-Prefiero morir a ser el juguete de un maldito asqueroso... –Dijo con asco el pequeño. El capitán se levantó y le propinó una patada en la cara aventándolo en alguna parte, Sanji aterrizó de nuevo al suelo, pero ahora con un pequeño rio de sangre saliendo de su boca –¡Agh! –Se arrastró con trabajos en dirección a la salida, pero sus esfuerzos fueron en vano ya que el subordinado que acompañaba al capitán lo tiró del cuello de la camisa -¡Su-Suéltame!

-¡SANJI! –Gritó Patty. Como pudo, apartó a su contrincante para poder ayudar a Sanji; sin embargo, recibió una fuerte apuñalada por la espalda baja -¡Aaagh!

-¡Patty...! ¡Aah! –Al igual que Patty, Carne fue herido por tremendo golpe de parte de su enemigo dejándolo tanto a él como a su compañero mal herido y sin poder ayudar al joven cocinero –San-Sanji...

-¡Patty, Carne...! –Miró con horror el estado de sus colegas y regresó su vista a su atacante -¡Déjenlos en paz!

-¿O si no que...?

-¡Yo...! ¡Yo...! –Sintió una impotencia que no lo dejó pensar con claridad –Sólo... Déjalos en paz... Por... Favor... –El miedo hizo que no coordinara bien sus palabras.

-Que dulce... Si haces lo que te digo, los dejaré vivir...

-Yo... –Fue cargado por el pirata, este se sentó en la primera silla que vio y acto seguido puso a Sanji en sus piernas -... –Sanji estaba paralizado del miedo, no sabía qué hacer en esos momentos.

-¡No lo hagas Sanji! –Gritó Carne desde lo lejos y antes de poder mover un dedo, su cabeza estaba siendo apuntada por un arma –¡Malditos...!

-Un movimiento en falso y te llenaré a ti y a tus amigos de plomo en sus cráneos... Jejejeje... –Dijo su contrincante.

-Ve a vigilar que no venga nadie... –Dijo el capitán a su subordinado.

-Por supuesto. –Salió del restaurante.

-Ahora, vamos a divertirnos... Si haces lo que te digo no mataré a tus amigos –Dijo esto acercando su horrible cara a la del pequeño.

-... –Sanji lo miró con total horror y asco -...

-Abre tus piernas... –Posó una de sus manos en la pierna de Sanji

-Pero... –No quería hacer lo que su agresor le estaba ordenando –Yo...

-Hazlo... Te dolerá, pero te prometo que te va a gustar, tanto que me pedirás por más... -Dijo esto lamiendo con repulsión la mejilla de su inocente victima.

 

Sanji Fox by Nadin-Black on DeviantArt


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).