Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Lazos por Tina Black

[Reviews - 65]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Otro capitulo mas, les dije que no tardaria XDDD Disfrutenlo.

Al ver de quien se trataba, se levantó de su silla con pánico y retrocedió un poco. Aquel sentimiento regresó. Era una  terrible sensación que jamás había experimentado, en especial con él -¿Qué...? ¿Qué haces aquí...? –Dijo con sorpresa y con ese inexplicable temor, hizo lo posible por qué no le temblaran las piernas.

-También vivo en este barco... No logré encontrar el lugar... –Zoro se acercó a una silla y se sentó recargándose en el respaldo.

-... –Estaba mirando a su nakama con algo de coraje –Si lo que quieres es sake, no hay... –Se dirigió a la salida, tuvo que pasar a lado del espadachín haciendo todo por no mostrar intimidación, cuando pasó junto a Zoro, este lo retuvo con brusquedad del brazo.

-¡Oye...! –Zoro miró a Sanji, mientras que él le daba la espalda.

-No me digas “oye”, sabes que me molesta...

-Quiero proponerte algo...

-Suéltame... –Deshizo el agarre y sin mirarlo continuó –Antes de que me digas una de tus tonterías, no quiero que me vuelvas a hablar...

-¿Te tengo que recordar qué...?

-Mi vice capitán... ¿No tienes algo mejor que decir...?

-Deberías cuidar más tus palabras, cocinero idiota... –Como acto seguido, se levantó de su asiento y fijo detenidamente la nuca de su nakama, por otro lado, Sanji pudo presentir esa acción. Lo único que quería era alejarse lo más posible de Zoro.

-Sólo... Déjame en paz... Te lo pido como un favor... –Zoro desenfundó su espada y la posó delante del cocinero, el filo estaba rozando con su cuello -...

-Ya que no pude llegar al pueblo y aprovechando que estamos solos, juguemos un rato...

-Tú... –Dijo con rabia –Quita tu sucia espada de mi...

-Vamos a divertirnos un rato... Oh más bien, tú me vas a divertir...

-No lo haré... –Dijo frunciendo el ceño.

-No te lo estoy preguntando...

-No seré tu juguete...

-¡Ja...! Lo sabía, Sólo eres una persona débil, no deberías seguir en esta tripulación.

-Mira quien lo dice, el niño perdido... –En rápido movimiento, Zoro le hizo un corte en el hombro izquierdo al cocinero -¡AH! –Se apartó del espadachín y se recargó en la pared -¡¿QUÉ CARAJOS TE PASA MALDITO ENFERMO...?!

-Nunca debes bajar la guardia, sin importar de quien sea...

-¡Eres un...! ¡Ah...! –Fue interrumpido por otro ataque, por suerte logró esquivarlo quedando petrificado al ver la mirada de su nakama, esto hizo que su miedo regresara invadiéndolo por completo, aquel miedo que presenció ese día pero ahora con mayor fuerza, era tal la magnitud que apenas si su cuerpo podía responderle –Zoro... ¿Por qué...? –Era como si hablara con alguien mas –“Sus ojos... Es como si me desconociera... Y por lo visto no se detendrá... Y tampoco dudará en lastimarme... ¿Por qué me odia?” –Pensó al observar su herida –“Zoro...”

-Ese corte no fue gran cosa, no puedo creer que por tal insignificancia estés llorando... Quieras o no, me divertiré contigo esta noche...

-¡¿POR QUÉ ME HACES ESTO?!

-...

-¡¡¡DIME!!!

-¿No te ha quedado claro lo que te dije, cierto...?

-... –Se sorprendió al escuchar eso, Zoro se limitó acercándose con asecho hacia donde estaba Sanji invadiendo por completo su espacio –A-Aléjate... –Zoro estampó con fuerza su mano en la pared cerca del rostro del cocinero y acercó más su penetrante mirada a la de Sanji -...

-Así que te doy miedo...

-...

-Si... Lo suponía –Se acercó a su oído y le dijo con un incomodo y tétrico susurro –Te daré cuarenta segundos de ventaja... –Sanji apenas pudo digerir lo que le dijo –Yo en tu lugar ya estaría corriendo... –Dijo esto último acercándose aun mas al cocinero –Uno...

-... –Respondió con una gran patada en el estomago de su nakama logrando que cayera al suelo derrapándose y salió corriendo de la cocina.

-Cuatro...

-... –Sanji salió del barco de un solo salto fallando en el aterrizaje. Se levantó con trabajos y se adentró entre la vegetación de la isla, miraba por momentos atrás suyo; sus pies no respondían con agilidad, sentía pesado su cuerpo; los hilos se hicieron presentes eran los responsables de alentarlo, no podía verlos, pero si podía sentirlos –“Debo perderlo...” –al ver de nuevo el camino, vio una silueta avanzando con calma hacia el –“No... Debo correr más rápido, pero no puedo” –Comenzó a perder más sus fuerzas –“¿Qué me está pasando...? Tengo mucho miedo...”

-Veinticinco...

-...

-Veintiséis...

-¡Déjame en paz, por favor...!

-Veintisiete...

-... –Los hilos lograron que se alentara aun mas, algunos hacían que la herida brotara un poco más la sangre del hombro –“ ¿Qué está pasando...? La herida es grande, pero no tan profunda...” –Los hilos continuaron afectando su huida –Por favor... –Dijo entre jadeos.

-Treinta y tres... –Desenfundó su segunda espada.

-“No...” –Terminó su camino al toparse con una roca que rodeaba gran parte de él. Estaba muy asustado, volteó a ver a Zoro quien se aproximaba sin perder la calma, Sanji estaba bastante agotado, los nervios no lo dejaban dar un paso más para poder escapar -... –Hizo lo posible por concentrarse para la pelea –Puedo hacerlo...

-Treinta y siete... –Llegó por fin hacia donde estaba Sanji.

-... –Quedaron frente a frente.

-Treinta y ocho...

-Por favor no sigas...

-...

-Zoro... –Se acercó y recargó su cabeza en el hombro del espadachín como muestra de tregua, en un intento fallido de calmar la situación –Por favor... –Estaba muy asustado, ya que le recordó un horrible momento de su pasado –Tú no eres así... Si te hice algo, por favor perdóname...

-Cuarenta...

-Zoro, no me ignores... –Levantó su vista sólo para ver la sonrisa burlona de su camarada –Zo-Zoro... –Se apartó de él y no tuvo más remedio que prepararse para la batalla.

-Por ahora sólo usaré mis dos espadas... –Se preparó para efectuar un ataque.

-“No cometas el mismo error... No dejes que te invada el pánico...” –Zóro comenzó la pelea intentando atacar a su rival, pero Sanji logró esquivarlo saltando arriba del espadachín, aterrizó y quedó a sus espaldas. Zoro volteó a verlo y efectuó el mismo ataque, antes de que lograra su cometido, Sanji retuvo el ataque con su pie, se quedaron en esa incómoda posición por un rato esperando para ver quien se movería primero.

-Sólo eres un estorbo para esta tripulación...

-...

-Esto no es un juego...

-Yo no tengo... Intenciones de abandonar el barco... No he cometido ninguna falta a alguno de ustedes...

-...

-No le he perdido el respeto a mi capitán y a ninguno de ustedes...

-Pero si sigues aquí, la reputación de la tripulación caerá... No voy a permitir que sigas con nosotros...

-¿Qué tontería estás...?

-Tal vez sea buena idea que sigas aquí, pero si no recibes el castigo que mereces no lo toleraré...

-...

-Ha habido ocasiones en las que has sido un inútil... –Aumentó más su fuerza haciendo que Sanji perdiera un poco el equilibrio. –Yo no pienso irme si se te perdona, pero si te sacaré como sea, aunque deba matarte...

-“Ahora lo entiendo... Pero... ¿Por qué contra mí...?” –Sanji había comprendido lo que estaba pasando por la cabeza del marimo.

-No te dejo quedarte con nosotros de a gratis... Tú, cocinero oportunista...

-¡Aquí el oportunista es otro...! –Agarró fuerza y esta vez logró que Zoro retrocediera –Y encima un caprichoso...

-...

-Sé que no soy perfecto y que no fui de gran ayuda con estas últimas batallas que hemos tenido con nuestros adversarios... Y créeme cuando digo que en verdad lo lamento...

-...

-Pero nadie es perfecto... Uno aprende de sus propios errores...

-¡Mi turno...! –Forcejeó aun mas contra Sanji –Eso es algo que diría un inútil... Si hubiera estado presente el dia que Luffy te aceptó a formar parte de la tripulación, yo me habría opuesto...

-Pero tú no eres el capitán... Y si no estuviste fue por la derrota que tuviste con ese hombre... –Sin más que decir, Zoro aventó a Sanji tirándolo al suelo.

-No tienes derecho para decirme eso... Sólo eres la falla... –Dijo con gran autoridad. Al decir esto, las ondas se hicieron presentes acorralando a Sanji

-No es cierto... –Dijo con coraje.

-Ni siquiera sirves para un sacrificio... ¿Cómo es posible que yo haya logrado sobrevivir al ataque de ese robot y tú a duras penas estabas de pie...?

-Tu... Me dejaste inconsciente...

-Porque sólo ibas a ser un estorbo y nada mas... Nunca fue mi intención salvarte...

-... –Eso logró que se quebrara mas su corazón –¿No significo nada para ti...?

-Si fuera por mí, te entregaría a la marina, ni siquiera mereces tener esa recompensa... Si no te quedó claro lo que te dije... Sólo eres la falla... No vales nada para mí...

-... –Regresaron sus recuerdos, reviviendo por todo lo que sufrió alguna vez y viendo la silueta de aquel hombre -<<Tu eres la única mancha de mi vida... La única cosa de la que me avergüenzo>>

-Yo me encargaré de hacer un mundo en el cual tú nunca hayas existido... Sólo eres un simple gasto de espacio y aire... –Se volvió a preparar para continuar con la pelea, pero en eso, Sanji se levantó con la cabeza abajo. –Aunque debo reconocer que eres un excelente juguete –Dijo con burla.

-... –Sanji levantó la cabeza con sorpresa, antes de que Zoro lo volviera a molestar, corrió hacia él y lo empujó, huyó en dirección al barco y claro, el espadachín no se quedó atrás y lo persiguió. Cuando llegaron al Thousand Sunny, Sanji subió de un salto y fue directo al baño cerrando la puerta con llave; después puso su mano en la cara, estaba devastado. Sus pensamientos fueron interrumpidos por los estruendosos golpes de la puerta -...

-¡Sólo estás atrasando tu destino!

-¡YA DÉJAME, POR FAVOR! –Corrió a la segunda puerta del baño y colocó el seguro, se sentó en la tina y se recargó en la pared; se aprisionó con un abrazo y tapó su herida con su mano -¡Vete, déjame sólo...! –En eso se escuchó la primer puerta abrirse de un golpe y regresaron los molestos ruidos a la puerta que tenia frente suyo -¡Zoro, basta! –La puerta se abrió. Se congeló al ver al peli verde; estaba completamente indefenso, Zoro se acercó con lentitud y se sentó en la orilla de la bañera –Te lo pido... No sigas...

-Parece que logré tenerte donde te quería... Esto sólo es el principio –Se acercó más y fue recibido por una fuerte patada en la cara, cayó al suelo y se sobó la boca y notó que tenía un hilo de sangre en ella -... –Se limpió con su mano y miró con atención el semblante de pánico de su rival.

-... –Respiraba con agitación –Vete...

-Esto aun no termina... –Se levantó y se retiró del lugar dejando al fin al cocinero.

-Ngh... –Se colocó en una posición fetal y con unas lágrimas desbordando en toda su cara –No soy una falla... No lo soy... Ngh... Lamento haber nacido siendo débil... Lo siento mucho... Yo... Yo... –Hasta que se cansó de llorar, salió del baño y se dirigió a la habitación con el miedo de encontrarse con Zoro. Por suerte y por ahora no lo encontró y se recostó en su cama abrazándose y a duras penas hizo un vago intento por olvidar. –Un juguete.

 

*********************************************************************************

Sanji salió un rato del mirador para contemplar mejor la luna, llegó a donde estaba el timón del barco y se sentó sin quitarle la vista al océano y al bello cielo cubierto de brillantes estrellas –Es hermoso... –Escuchó algo detrás suyo, era nada más y nada menos que Zoro haciéndole compañía recargado en la toldilla –Zo-Zoro...

-...

Notas finales:

Esto ya se puso bueno, eso creo. La ultima palabra la tienen ustedes. Nos vemos pronto y gracias por leer.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).