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Haciendo irlandesitos. por nezalxuchitl

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El señor Willbond estaba durmiendo hecho rollito sobre unas nuevas y fragantes lonas del numero 8. Unas manos fuertes lo sujetaron y otras, de uñas largas, pintadas, descarapeladas y llenas de accesorios volvieron a sumirlo en la inconciencia con un pañuelo impregnado de cloroformo.

*

Navegaban tranquilamente hacia Europa en aguas de la corriente del Golfo. Will despertó atado, sujeto de rodillas a una polea central que le mantenía los brazos juntos y arriba. Estaba en un amplio lecho montado a propósito, cubierto de seda roja.

-¿Qué? ¡No! – exclamo, viendo a Rollo sentado cerca, con los tatuajes vistiendo sus brazos y pecho y nada mas - ¡Va contra la ley que me violes! – se defendió alarmado, descubriendo que estaba desnudo e incluso un poco frio.

-Pero yo no. – susurro la voz siseante, el aliento alcohólico.

El horror de una decente turra de la Armada.

-¡Sparrow! ¡Pirata asqueroso! ¡Quitame tus sucias manos de encima! – descubrió con horror que además de Sparrow, un indignante enjaretado en miniatura estaba atrás.

-Me las lave. – le remedo.

Estaba desnudo también, aunque no lo pareciera por la cantidad de accesorios que llevaba: el pañuelo y las cuentas del pelo, los collares, los tatuajes, los piercings, incluido uno muy interesante en la polla.

Se las habria lavado, pero se sentían sucias sobre su piel: violentando la privacidad de su pancita que lo avergonzaba, bien redondita aunque no estaba embarazado ni por asomo. ¿Cómo, si estaba enamorado de un varon imposible?

Sus minibubis, curvitas deliciosas creadas por lo pasadito de peso que estaba, se dibujaban tan bien con aquel atado, en aquella pose. Sus muslos bien carnosos, blancos y blanditos estaban también resaltados, doblados medio abiertos, con sus partesillas ineficazmente ocultas en la sombra entre ellos.

-Rollo… por favor. – le dijo con los ojos brillantes de lagrimas.

-¿No te lo pedi yo también por favor? – replico este, hechandose adelante amenazante, con lo que su erección se balanceo – Sufre.

-No, Rollo, no es legal…

-Para mi. Pero para Sparrow si.

Este seguía sobándolo, desde atrás. Olfateandolo, desde atrás.

-No, Rollo, tu lo ayudaste.

-Colaborar en un rapto no es un delito lindura. En absoluto. – se cruzo de brazos, con lo que cada musculo de su poderoso torso se remarco. Torso y brazos: perfectamente varoniles, musculosos, remarcados. Ligeramente bronceado, en las piernas también, pues solia andar por cubierta en unos cortos pantalones.

Sparrow empezó a besarlo en el lateral del cuello y el gimio. Sparrow, una turra viciosa a la que no hubiera querido ahorcar, tocandolo. Pegandosele por detrás, con todo el frio del metal y sus rarezas, la erguida punta de su polla.

Rollo miraba con interés, deleitado. Como a todo buen varon, le encantaban los espectáculos lésbicos. La oficial habia resistido su conquista durante tanto tiempo que lo tenia mas encandilado que al principio: a todas las turras inglesas las habia poseído, a todas, menos a ella. Y era especial: madurita, bonita, tenia agallas. Una shieldmaid de los ingleses, y con rango.

Llenito y sensual, su hermosa piel blanca, lisa, contrastaba con la bronceada de Sparrow, sin línea de demarcación. Tatuajes en los lugares mas interesantes; delgada, tirando a bajita, con rastas largas y desordenadas y unos ojos vivos, castigados sus contornos por la vida que se daba.

Avejentada, Sparrow era una turra avejentada. Probablemente era mas joven que Will, aunque nunca se sabe, menos cuando llevan sangre navaja en las venas.

Sparrow lo toqueteaba, suave aun, dándole el gran show al vikingo que lo habia hecho a un lado luego de poseerlo en el fragor de la batalla. El correcto oficial lo excitaba: una vez habia intentado encajar, una vez, en su lejana juventud, y oficiales como el, correctos y obedientes, perfectos, se habían encargado de sacarlo de quicio.

Al violentarlo, se vengaba de todos aquellos que lo habían violentado a el. Que volverían a hacerlo, si lo agarraban.

-¡No! ¡Gwaine! – grito fuerte, de improviso, revolviéndose.

-¡¿Qué carajo!? – respingo también Rollo - ¿Por qué llamas a ese irlandés? ¡Le arrancare la cabeza!

-¡No! No lo hagas – lo miro – Nunca me ha tocado; esta enamorado de su esposa.

-Lo mismo que yo y mírame.

-Pero el es fiel. – dijo con un tono encantado.

-Y luego llaman locos a los finlandeses. Continua, pirata. – indico a Sparrow, deslizándose en el asiento con la espalda recargada y las piernas abiertas.

-Rey pirata. – corrigio con el dedo en alto. Luego acaricio el cabello de Will para ponerlo a un lado. - ¿Alguna vez te han… - el resto de susurro se perdió en su oreja.

-¡¿Qué!? –sus ojos se agrandaban - ¡No! ¡Pirata sucio!

-Que me lave – alzo el brazo y se olio la axila - ¿Qué, no se nota?

-Hazlo, hazlo – instigo Rollo, que se frotaba la punta de la polla calmadamente con la palma de la mano.

Sparrow se quito una de las tiras de tela negra de la muñeca y le vendo los ojos. Will respiraba agitado mientras la nena pirata se le restregaba por atrás, pasándole la polla entre las pompas como un jueguito o una amenaza. Lo examinaba por un lado y por el otro, su expresivo rostro muy cerca, haciendo muecas sin cesar, cambiantes, de acuerdo a lo que veian.

Luego se separo y llamo a Rolo con un dedo.

-El jueguito se llama “adivina de quien es la lengua que te esta chupando”.

Will estaba mas agitado. Junto las rodillas, trato de bajar los brazos. Rollo subio de rodillas y ambos gatearon en torno a la presa. Rollo se habia recortado la barba para que no resultara tan fácil descubrirlo. Saco la lengua, una larga, humeda, gruesa lengua de seme y le lamio un pezoncito. Luego lo rodeo, sintiendo como se erectaba, chupándolo cuando lo hizo.

Sparrow veía, fascinado, y luego Rollo metio violentamente la mano entre los muslos de Will, haciendolo soltar un gritito, pujiditos, cuando agarro lo que ahí habia.

Sparrow le lamio el otro pezón, acaricio a Rolo, cuyos fuertes musculos lo atraían. Siguio, con su uña, el tatuaje del sol en el pectoral mas cercano, miro el de la luna en el otro. El seme lo masturbaba, olvidado del juego que tenían que hacer. Molesto, se recostó detrás del oficial atado, de ladito, sobándole esas carnosas pompas, y la espalda. Se le marcaban ligeramente unos hoyuelos, como si fuera chico, y sus hombros también eran mas anchos que los de una turra. Estaba en ese delicioso limbo, como la mayoría de la población, que combinaba rasgos de uno y otro genero.

Sobo, palmeo, la hacia chillar. Rollo jadear, y cuando lamio le arranco un grito.

Rollo lo beso, excitado, olvidándose de la ley y haciendo una incursión vikinga en sus amígdalas. Le poseyó la boca como quería hacerlo con el resto del cuerpo. Frotandolo, en el costado y la polla.

-Please… - susurro, cuando le dejo la boca con un hilillo de saliva.

Noto entonces que Sparrow estaba muy atareado atrás; comiéndole la cola a la turra, separándole las nalgas con ambas manos, pues no quería cooperar.

-¿Qué? ¿Ya hacemos el sándwich? – dijo, cuando lo toco en el hombro.

Rollo asintió. Necesitaba follar, lo necesitaba con urgencia. El pirata le metio dos dedos y Will se quebró, de voz y de cuerpecito.

-No… - gemia, con mas saliva escurriendo – Rollo…

-¿Si? – le agarro la mandibula con su mano enorme.

-… prefiero que seas tu.

Rollo lo beso violentamente, jalándole las piernas, cargándolas contra sus caderas.

-¡Oye! – protesto Sparrow, a quien habían prometido ser el relleno de un sándwich de turra y seme.

-Tambien tengo para ti. – dijo jalándolo, dándole su besote y repegandolo a Will y a el. Le quito la venda de los ojos, viendoselos mas lánguidos, desprotegidos que nunca.

Sin soltarlo de las manos lo cargo sobre sus rodillas desnudas, enfilo a buen puerto y se lo metio en un quejido largo y lastimero.

Rollo estaba fascinado. Sparrow, celoso. Se repego al vikingo por detrás, sabroceandolo, mientras este desahogaba el deseo largamente contenido.

Lo poseía, lo miraba, lo acariciaba. Suyo al fin, con esas minitetas gorditas, esa cara de turra buena. Le gustaban asi, aunque le gustaban de todas, y en su terruño, solia encontrar mas al tipo belicosas y malas. Esta era dulce, amanerada en sus movimientos, hasta estando atada. Su culito apretaba tanto que se pregunto si seria virgen, a sus años, y se lo pregunto.

-No te importa. – le dijo ofendido, ladeando el rostro.

Pero el se convencio que si y la beso. Fue mas brusco, entusiasta, lo poseyó tan completamente como pudo.

Sparrow, recostado al lado tras ser empujado, juguetaba al lado, esperando a que acabasen.

-¿Listo? – pregunto cuando Rollo acabo, bramante.

Jalo a Will por detrás, hurtándolo del abrazo de Rollo.

-¡No, no! – se debatio frenético, atarantado por el placer - ¡El pirata no!

Pero no habia nada que Rollo quisiera hacer, encorvado, como su pene.

-Ya supéralo. – le dijo Sparrow, amarrándolo de pies y manos al enjaretado como si fuera a recibir una azotaina, restregando y separándole las pompotas a la fuerza, con lo que la gran cantidad de semen que habia estado conteniendo cayo, en forma de gota.

La turra oficial lloro, avergonzada. Ser rellenado asi. Estar de rodillas e indignamente amarrado, a la merced de ese vil pirata que lo manoseaba, se lo comia sin ninguna pudicia, ni decencia.

Y Rollo, recostado, disfrutándolo todo con una sonrisa canallesca.

 

***

¡Lo que le faltaba! ¡El sobrinito! Otra estúpida turrazuela, esta concentrada en tener bebes.

Philip despreciaba a las turras a quienes agradaban las cosas típicamente  turras: ser mama, ser esposo, ser bueno, dócil, cocinar. Coser, tejer. Odiaba las cosas de turra que no fueran arreglarse y embellecerse, bitchear, coquetear; ser la mas gozada y la que mas gozara.

El estúpido sobrinito tenia un aliciente enorme sobre Pacino: claro, era su heredero. El y esas crias lloronas, que brotaban como margaritas.

Se habia quedado helado al verlo, al llegar tarde por estar solazándose con Mulder, uno de sus amigos del haren.

La presuntuosa zorra italiana esa lo habia visto feo, y el habia tenido que sonreir, todo humilde, disimulando que disimulaba lo desatendido que tenia a la estúpida campesina, con su cabello sin arreglar y su rostro desmaquillado, pero los pomos, carísimos pomos, a medias y untados en el.

Tampoco la ropa de su “señora” estaba en buenas condiciones. La dejaba repetir traje en la misma semana, adrede, para que Pacino la encontrara descuidada y desaliñada.

Pero Pacino la adoraba, a la estúpida esa con la que se habia casado.

Si hasta la juntaba con el sobrinito, a quienes ellos no podían dirigirse. Los mantenía aparte, ni siquiera podían verlo; como si fuera mejor que ellos.

La aburrida turra bobalicona, casandose y teniendo hijos.

Y habia tenido el descaro de regañarlo, ¡a el! Y el habia tenido que reverenciar y bajar la cabeza cuando en realidad quería ahorcarla, hundirla en el fondo de la tina, del estanque, como se sentia tentado a hacer con Domhnall.

Su único consuelo era que lo estaba poniendo gordo. Gordo, además de embarazado, con esa antiestética, atemorizante panza delante. Que comiera bien era lo único que procuraba. De mas. Dulces, chocolates, pizzas fritas; le daba pan con dosis noruegas de mantequilla, incluso en la receta, para que engordara. Le hacia beber litros de leche con miel y al darse cuenta de que, como la campesina que era, se comia los frutos decorativos del jardín mando poner mas a su alcanze.

Se puso las manos en la baja espalda, como si estuviera embarazada, luego del exfuerzo de arreglar el cuarto de su señora, con sus propias manos, como si fuera una sirvienta.

Esa habia sido la orden que habia dado la sobrinita, a la que dejaría sin un centavo de herencia si todo le salía bien.

Se recompuso, pues no era la campesina irlandesa, para bajar modositamente al recibidor, la salita de abajo, que con primorosos muebles ocupaba TODO el piso de la torre, como cada habitación destinada a la zorra esa.

Hizo una reverencia estirando los lados de su vestido azul, y espero a que se dignara atenderlo.

La campesina ya lo estaba viendo, pero no hacia nada, angustiada y boba como campesina a la que no le alcanzan los centavos para pagar las papas.

Vinny lo dejo en la incomoda posición por un minuto entero, cediendo para no angustiar a Domhnall.

-¿Terminaste? – lo miro con una superioridad que el otro entendería muy bien.

-Si milady. – sonrio con dulzura, buscando la ayuda de la campesina.

-Muy bien. – Vinny termino la partida de cartas que estaba enseñándole a jugar a Dom, con el carrito de sus bebes (primoroso y lleno de encajes) al lado, como si los bebes también fuera a aprender el oficio de tahúr. – Trae el estambre y las agujas. Les enseñare a tejer.

Philip tuvo una mala corazonada mientras iba por las canastitas. Tres.

-¿Qué color prefieres, Dom?

-Me gusta el verde.

Philip rodo los ojos. Por supuesto que lo preferia.

-Yo tomare el azul. Philip, te toco el rosa.

Como un movimiento de mandibula podía ser tan altanero era algo que causaba envidia a Philip.

-¿Yo, milady?

-Claro – lo miro con sus enormes ojos castaños - ¿Quién crees que va a tejer las cobijitas y el forro del moises de mi primito? Ademas, debes aprender a hacer ropita de bebe, para cuando te cases. No te puedes pasar la vida de criada.

Philip se puso livido.

-Tal vez no sea bendecido con el matrimonio, milady. – dijo con un tono que a Dom le sono extraño.

-Si te quedas solterona, a lo que todavía no tendrías que resignarte – Vinny lo decía como conteniendo una gran carcajada – porque no eres tan vieja,  igual te servirá lo aprendido, pues las turras viejas a los monasterios o a los cementerios. ¿Te imaginas que alegría, tejerles chambritas a los pobrecitos huérfanos?

Philip lo miraba, tenso, a los ojos. Se le notaba hasta en el cuello, entendida la advertencia.

Tomo las agujas y sonrio con su mohín de coneja mala, alzando la naricilla y mostrando un diente cuando en realidad quería dar una dentellada.

-Seria muy bonito ayudar a los niños desamparados.

Domhnall, que lo creía de verdad, asintió. Estaba muy atento a las manitas de Vinny, que lento y en alto enseñaban a hacer el nudo inicial.

 

Continuara...

 

Notas finales:

Ya he oido Awaken from the dark slumber, y soy muy feliz. Y cuando estoy en esa felicidad aparece este trailer con la cosa mas hermosha que he visto y supero la felicidad:

https://www.youtube.com/watch?v=IsAlKzokl-8

Slán!


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