Baekhyun se entretuvo tarareando una canción mientras movía uno de sus pies al ritmo, cuando escuchó una voz que le resultó vagamente familiar referirse a él.
-Yo te conozco – El de pelo rosa volvió la cabeza para encontrarse con un chaval que seguramente sería de su misma edad, pero que, al mirarle a los ojos, un escalofrío le recorrió la espina dorsal de arriba abajo. Era uno de los chicos con los que se contoneó en la pista de baile un par de días atrás, y no quería tener que encontrarse a nadie de aquel lugar, mucho menos justo ahora.
-No recuerdo haberte visto – Se hizo el desentendido y el otro acortó la distancia entre ambos.
-Oh pero seguro que recuerdas cómo restregabas tu culo sobre mí, ¿verdad que sí? – El más bajo entrecerró los ojos, sin querer contestar y deseando que la tierra se lo tragara en ese instante. Desafortunadamente, el otro muchacho continuaba hablando, avergonzándole aún más:
-Realmente me la pusiste dura, pero te perdí la pista poco después – Baekhyun esbozó una mueca de asco pero el otro chico aún no terminaba y el bajito se preguntaba cómo Chanyeol podía estar tardando tanto – Una grata sorpresa haberte encontrado de nuevo. Podremos terminar lo que empezamos – Agarró el mentón del bajito, obligándole a mirarle mientras pasaba su pulgar por el labio inferior de este – ¿Qué me dices?
El castaño frenó delante del restaurante para encontrarse con una escena bastante desagradable. La expresión de Baekhyun dejaba bien claro que se sentía incómodo con la presencia del muchacho que le acompañaba, y eso a Chanyeol no le hacía ninguna gracia. Bajó rápidamente del coche y se dispuso entre los dos chicos.
-¿Qué pasa, Baekhyun? –Preguntó despreocupadamente fulminando con la mirada al desconocido, quien espetó con sorna:
-Y tú quién eres, ¿ah? – El de pelo rosa pretendía responder, pero el más alto se le adelantó, escupiendo con las cejas alzadas:
-Soy su novio. ¿Algún problema? – Baekhyun sintió su cara volverse completamente roja de escuchar aquello, abriendo los ojos como platos y tragando saliva. ¿Por qué le había gustado escuchar esa palabra de los labios de Chanyeol? No. No. No. Cortó tajantemente una vez más los pensamientos involuntarios que pretendieron inundar su cabeza, y se concentró en la expresión sarcástica del otro chico, que bufó frente al castaño:
-Pues vigila dónde le dejas, porque va calentando otros rabos además del tuyo – Y se abrió paso, dándole un empujón a la teatral pareja antes de alejarse a paso rápido. Chanyeol suspiró y volvió el cuerpo hacia un ruborizado Baekhyun, que mantenía ahora su mirada fija en el suelo.
-Siento eso. Parecía que ese chico no te agradaba demasiado. Solo quería “espantarle” – Murmuró quitándole importancia al hecho de que habían sido novios por unos segundos a ojos de aquel desconocido. Chanyeol no iba a negar que había sido increíblemente emocionante aquella treta, y aún le gustaba más el hecho de que Baekhyun no se hubiera molestado por ello, haciendo que en su interior floreciera una especie de sentimiento que aún no quería determinar con una etiqueta, pero que le hacía sentir realmente bien.