Todo comenzó en un día completamente normal, parecía como si nada pudiera perturbar la paz de la aldea de Konoha. Todos hacían sus labores cotidianas y reían con fecilidad, parecía que era un dia perfecto, después de todo el sol estaba en su máximo punto y el clima parecía tan calido.
Todo era dicha y felicidad hasta que en la Torre Hokage, la representante Tsunade Senju comenzó a gritar a todo pulmón, algo que alarmo a todos, y más por el contenido de sus palabras.
— ¡Todos escuchen mis palabras!... ¡Tenemos que evacuar!... —parecía bastante agitada y alarmada, en sus ojos se podía ver un gran miedo y terror.
Todos murmuraban entre ellos y algo confundidos no quitaban la vista de su Hokage.
—…Esto es el fin del mundo… Está apareciendo un fenómeno desconocido y las aldeas estamos entrando en pánico, no sabemos que hacer… no parece ser ocasionado por ningún ninja, yo no lo entiendo…la única solución es totalmente arriesgada, fue propuesta por la aldea de las rocas… y esa es… cruzar un portal hacia un mundo alternativo para poder salvarnos, parece que el mundo en el que vivimos ahora se romperá en dos en cualquier momento…—
Si el bullicio antes era grande, ahora era gigantesco, algunos aldeanos incluso se atrevieron a afirmar que talvez morirían, algo que asusto a los otros. ¿La muerte de un día para otro?
— ¡Tenemos tres portales en la aldea!, uno está en la salida de esta, otra en la oficina de la Hokage, y por último, uno en la tumba del tercer Hokage—esta vez hablo Shizune con firmeza, ella también tenía miedo, pero no quería verse débil ante los demás, quería darles seguridad de alguna manera, sabía que era duro, la noticia había sido tan de repente.
Cuando la chica termino de decir esto un fuerte temblor sacudió el lugar agrietando el piso, algo que hizo a todos entrar en pánico.
Algunos rápidamente comenzaron a correr y empujarse para llegar a los dichosos portales, era lógico, nadie quería morir y la situación iba rápido.
Las grietas se hicieron aún más grandes, tragándose algunas personas por completo sin dejar un solo rastro, los edificios comenzaban a derrumbarse. Todos corrían y lloraban, ¿enserio era el fin del mundo?
Una parvada de pájaros inundo el cielo, como si ellos también huyeran del apocalipsis, parecían tan desorientados como la gente de la aldea…
En alguna parte de la aldea, un chico rubio y de ojos azules corría por el lugar esquivando las grietas y los edificios. Solo podían ver cómo la gente peleaba, los niños lloraban y rezaban. En el coro de llantos y gritos solo corría con fuerza y desesperación, no importaba nada… el mundo estaba colapsando por completo, tenía y debía ayudar a todos, pero primero debía ir por Sakura y sus amigos, era egoísta, pero estaba más preocupado por ellos que por el mismo.
Muy cansado y agitado llego a la Torre Hokage que aún se mantenía en pie para suerte, ahí pudo ver a Tsunade, Shizune, y Kakashi metiendo gente en el dichoso portal que salvaría todos del fin del mundo.
Cuando Tsunade intento meterlo también el portal Naruto intento escapar de ahí, aun no podía irse, tenía que ir por Sakura… aunque para su mala suerte Kakashi lo tomo con fuerza del brazo y lo metió en el portal…
Lentamente su conciencia se fue desvaneciendo, pero antes de que lo hiciera por completo escucho la voz de Kakashi diciendo un “Lo siento” de forma nostálgica y amarga…
Cuando recupero su conciencia estaba en una habitación de color blanca, rápidamente se levantó asustado, y ahí los vio a todos… a Sakura, Ino, Sai, Chouji, Neji, Shikamaru, Tenten, Hinata, Lee, Shino, Konohamaru y Kiba.
Sus ojos lentamente se inundaron de lágrimas y se lanzó sobre ellos… estaban a salvo… aunque, ¿y los demás?, ¿Dónde estaba la vieja Tsunade y Kakashi?...
Cuando sus amigos despertaron decidió poner en marcha la investigación, la cual consistía en saber dónde estaban, al parecer el portal funcionaba, pues no estaban muertos, pero ahora estaban perdidos sin nadie que los guiara.