IMPERDONABLE por Liss83

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Notas del capitulo:
Volvi!!! Ojala les guste y los señores Pottee les caigan bíen. Sin mas, aqui esta el nuevo capitulo

Fleamont y Euphemi Potter eran una de las parejas más queridas por la prensa mágica. La imagen perfecta de los sangre pura con la irreverencia característica de los mestizos, hacía casi veinte años habían dado su venia para que su único hijo se casara con un mestizo sin nombre ni familia. Dejar que Riddle entrase a su vida había sido una de las mejores decisiones que habían tomado. El joven les había demostrado grandes aptitudes en el campo de los negocios, incrementando la fortuna familiar, pero por sobre todo haciendo feliz a su hijo y nieto. Marido ejemplar y padre cariñoso, a veces los señores Potter creían que Tom debía ser un santo, de esos a los que los muggles les rezaban cuando se encomendaban a una divinidad, para soportar estoicamente a su irreverente hijo y nieto Aunque ellos no habían sido precisamente un ejemplo a seguir, ni lo eran tampoco ahora. Durante el verano era común que la pareja regresase a Londres, desde el condado de Kerry, en Irlanda, para visitar a su hijo y su familia, sin embargo en ese momento habían aparecido en Hogsmeade, para ver a su nieto a escondida de los padres de este. Temprano les había enviado una lechuza diciéndole que irían a visitarlo durante su salida de ese día al pueblo y este le había contestado que tenía una sorpresa para ellos. Al llegar al pueblo fueron al bar Las Tres Escobas, donde lo encontraron acompañado del menor de los Malfoy mientras conversaban amenamente - Harry – dijo sonriente el anciano de la mano de su esposa - Abuelos – dijo este poniéndose de pie para abrazarlo – ¿Cómo están? - Bien, bien. Draco, muchacho – dijo sonriendo y dándole la mano a ambos - Tu papá nos escribió el otro día nos dijo que estabas dándole lata – dijo Fleamont - ¿Yo? – dijo Harry – para nada - ¿Entonces a que se refería? – dijo Euphemi - Ni idea, abuela – dijo Harry simulando inocencia - ¿y tú, Dragón? - No se me ocurre nada, cielo – contesto el rubio con el mismo tono - ¿Cielo? ¿Dragón? – dijo Fleamont – ¿Nos perdimos de algo? - Desde hace unas semanas Draco y yo somos novios – dijo Harry - y mis papás se enteraron que soy animago - Y enlazamos nuestras magias – puntualizo Draco - Ah si – dijo Harry – casi olvido ese detalle - ¿Quieren matarnos? – dijo Euphemi sorprendido - No – dijeron los adolescentes al unísono – ¿Por qué? Después de que los señores Potter se enteraran de las ultimas novedades y regañarán a sus, ahora dos, nietos, se dedicaron a ser ellos mismos, ósea a malcriarlos a gusto. Acabando de terminar de almorzar fueron a la sucursal que los gemelos habían abierto en el pueblo donde los adultos pagaron todo cuanto los adolescentes quisieron. Dos horas más tarde y antes de despedirse, el pelinegro se animó a hacer la pregunta que tanto le rondaba la mente y por lo que había concertado esa reunión. Para darles mayor intimidad, Draco invito a Euphemi a ver la sucursal de una tienda de escobas, ya que esta entendía del tema, al ser comentarista de quidditch - Abuelo – este lo miro – hay algo que te he querido preguntar, pero no sé cómo lo iras a tomar - ¿Draco esta embarazado? – dijo este mirándolo fijamente - No – dijo Harry automáticamente - Entonces tú – dijo el hombre entrecerrando los ojos - No hemos tenido sexo todavía – dijo Harry, rogándole paciencia a Merlín – así que no. Aun deberás esperar para la nueva generación de Potters. Yo quiero que me hables del señor oscuro - ¿Qué hay con él? – dijo Fleamont - Cuéntame que sabes de él – dijo Harry - Lo que saben todos – dijo el anciano sentándose en una banca – Tu papá lo derroto un tiempo antes de casarse con tu padre - Sí, pero – insistió – ¿y su cuerpo? - La verdad es que nunca se supo, – dijo Fleamont pensativo – ahora que lo mencionas, nadie se cuestionó nada. Todos estábamos tan felices que no nos detuvimos a preguntarnos nada. El ministerio se encargó de todo - Entonces, – dijo Harry – ¿simplemente desapareció y ya? ¿no te parece raro? - Pues, si y mucho – dijo pensativo – pero en la biblioteca del colegio debe haber algo. Espera… - dijo mirándolo con los ojos entrecerrado - ¿Qué tramas? - Nada – dijo de forma inocente – es una tarea para Historia de la Magia con el profesor Binns - ¿Seguro? – y Harry asintió frenéticamente cuando Draco y Euphemi se acercaban - Harry, ya es hora de volver al castillo – recordó el rubio Después de los chicos se despidieron y se fueron, la pareja estaba a punto de ir a la oficina de aurores para hablar sobre la curiosidad de su nieto, cuando le llego una lechuza de la oficina de aurores, al tomar la nota de entre las patas del animal, lo desenrollo y leyó: “Ayúdame papá. Estoy detenido por culpa de Snivellus que vino a buscarme para pelear, yo solo me defendí y ahora estoy encerrado con el grasiento. Y Tom no quiere pagar la multa. Ayúdame. Tom dijo que Sirius esta en San Mungo internado y no que Remus no quiere saber de mí. Sácame de aquí” Fleamont releyó la nota con boca abierta y se la entregó a su esposa que lo hizo rápidamente y luego se cubrió la boca. ¿Por qué su hijo había peleado con su consuegro? ¿Y por qué Tom lo había abandonado a su suerte? Merlín, iba a ser un largo, largo día * * * Severus Snape estaba tirado en el suelo con su túnica negra rasgada, sendo moretes sobre su blanca piel y un ojo morado llorando en silencio. En la misma celda estaba James Potter de Riddle, pero en el extremo contrario sentado sobre el piso con la ropa en el mismo estado, mientras hilos de sangre corrían de su nariz y boca - ¡Te odio! – dijo Severus –, mira como dejaste mi ropa. Y aun no te disculpas por lo que hizo tu cría de basilisco - No lo llames así – exigió James – ¡Snivellus grasiento! - ¡Por tu culpa Lucius no quiso pagar mi fianza! – dijo Severus furioso - ¡No quiso pagarla porque eres un murciélago feo! – dijo James poniéndose de pie - ¡Y tú sigues aquí porque eres un fastidio y este es tu lugar! - dijo Severus también poniéndose de pie - ¡Cállate! – exigió James - Cállame – desafío el profesor - No lo puedo creer – dijo Fleamont entrando molesto con su esposa – ahora entiendo porque Tom y Lucius no quisieron pagar la multa - Papá, papito, sácame de aquí – suplico James - Llorón – dijo Severus con un tobo despectivo - Mira como me trata – protesto James - Les trajimos esta frazada – dijo Euphemi entregándole una a cada uno - ¿Le trajiste también una al grasiento? – dijo James indignado - Y ni intentes quitársela, James Potter – sentencio su padre – porque esta hechizada para que no puedas hacerlo - ¿Por qué? – Protesto - Por Draco – dijo Euphemi – él es importante en la vida de Harry y Severus es su papá. Así que es parte de esta familia, a pesar de no comportarse adecuadamente - Gracias señora Potter – susurro Severus bajando el rostro - ¿Pagaras nuestra multa? – dijo James esperanzado - Nosotros le devolveremos hasta el último galeón – dijo Severus mientras James asentía frenéticamente - Queríamos hacerlo chicos, pero tanto Tom como Lucius se nos adelantaron y lograron que tu jefe hiciera un juramento inquebrantable – dijo Euphemi mirando a su hijo – de que los retendría un día más por cada vez que pelearan - ¿Qué? – dijo James – pero eso… seria… - Una semana – susurro Severus con los hombros caídos mientras se miraban en silencio * * * El chisme había corrido como el fuego sobre la pólvora. El auror más prestigioso del mundo mágico y uno de los profesores más respetados de Hogwarts estaban detenidos, y no solo por una, sino por varias peleas consecutivas en el mismo día centro del cuartel de aurores londinense. Sus respectivos esposos se habían negado a pagar la fianza, por lo que ambas personalidades dormirían, al menos esa noche, en las celdas mágicas Harry acompaño a Draco una tienda para comprar tinta, cuando vio llegar a Teddy con un periódico entre las manos, quien al ver a la pareja iba a dar media vuelta y escabullirse del lugar - Primo – dijo Harry - Harry. Draco – dijo el castaño sonriendo de manera forzada y mirando el cielo – Lindo día - ¿Qué tramas? – dijo Draco entrecerrando los ojos - Nada – se apresuró a contestar Teddy Black - ¿Por qué tendría que tramar algo? - Porque eres Teddy Black – dijo Harry – siempre tramas algo - Que bajo concepto tienes de mi – dijo simulando estar ofendido - Confiesa – exigió Draco - ¿Qué tienes ahí? – dijo Harry señalando el periódico que este intentaba esconder - Un periódico viejo – dijo el león – es para una travesura. Luego les cuento - Chicos, ya se enteraron de la última noticia – dijo el irlandés - Callat… – susurro Teddy - ¿Qué noticia? – dijo Harry mientras Draco le quitaba el diario a su amigo de las manos y lo leía deprisa - ¡Merlín! – exclamo el rubio mientras leía – “Batalla campal en el departamento de aurores”. ¿sabes qué significa esto, Harry Riddel? – y sus amigos juraban haber visto un extraño brillo en sus ojos grises - Hoy no tendremos detención – dijo sonriendo - ¡Y podremos comer en la cocina! – dijo Draco emocionado – ¡Es hoy o nunca! - ¿Estás seguro que quieres ir? – dijo el pelinegro con simpleza - ¡Mi papá no está! – dijo Draco – será divertido - Tu papá y el papá de tu novio se pelearon – recalco Seamus - Están presos – insistió Teddy - Pero nosotros no – dijo Harry sonriendo - ¡Y hay que celebrarlo! – dijo Draco – vamos a las cocinas a robar pastelillos - Mi abuelo nos enseño como llegar hasta el horno mismo – dijo Harry – ¿Vienen?

Notas finales:
Que les parecio? Les caen bien los señores Potter? Yo quiero ser su nieta. Espero sus comentario y los invito a leer mi nuevo fic, "Miau". Besos. Nos vemos pronto

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