Se podía escuchar el canto de las gaviotas y el sonido de las olas al chocar con las rocas, pero no le ponía atención, se concentraba en observar su reino: casas, mercados y las siluetas de las personas que iban y venían desde el balcón de su habitación. Pero su atención estaba más que fija en el cielo, esperaba que se abriera un hoyo en la barrera y descendiendo, acompañado del rukh negro que tanto lo caracterizaba, Judal. Recordó la última vez que lo vio, como siempre se burló de él pera después alejarse.
Sinbad dio un suspiro cuando llegaron a su mente, los recuerdos de aquella noche que convivio con la “jovencita” que ahora ocupaba sus pensamientos y que sus labios con sabor a durazno aún estaban impregnados en los suyos. Una sonrisa se dibujó en su rostro, más cuando días después de esa noche, se dio cuenta que la “ruda jovencita” en realidad era Judal; pero eso no le importo, lo único que quería ahora era volver a verlo.
El tiempo siguió pasando y la barrera seguía intacta, solo suspiro y se puso de pie, quizá otro día, el sol negro aparecería. Pero los días seguían su curso, el magi caído no aparecía y eso le causaba frustración al rey de Sindria, quien seguía esperando su llegada. Por su parte, en su oficina, Ja'far entraba para dejarle los últimos informes de otros reinos pero la habitación estaba sola, eso hizo suspirar al albino cuando
- Otra vez no esta
- Ah, Hinahoho… no, ¿Qué le pasa estos días?
- ¿Has vuelto a insistirle en que busque esposa?
- Sabes que si porque es uno de sus deberes como rey: tener una esposa que le dé un heredero que ocupara el trono de Sindria cuando Sinbad ya no este
- Lo sé, pero ambos sabemos que él dice que no necesita una esposa
- Entonces que tenga un hijo con alguna de las chicas de su harem, si no quiere hacerla su reina al menos como su concubina - el peli azul se ríe
- Sabes que nunca hará eso
- Lo sé - suspiro- de hecho, me han informado que ya no las llama
- ¿Qué?
- Así es, desde hace 1 año y 6 meses no las ha llamado ni visto
- ¿Cuándo exactamente? - el albino cerro sus ojos y pensó
- Fue cuando celebramos un Mahjaran
Ja'far vio extrañado al ver a Hinahoho sonreír
- ¿Qué pasa?
- Dime Ja'far, si Sinbad hubiese embarazado a alguna de las chicas de su harem, ¿estarías de acuerdo en que ese niño o niña, fuese rey o reina de Sindria?
- Si se comprueba que es hijo de Sinbad, por su puesto
- Bueno, ahora imagina si ese hijo o hija tiene como “madre” a un doncel, ¿también tiene esa posibilidad?
- ¿Hay algo que sepas? - viéndolo extrañado
- Solo es curiosidad, si bien Sinbad se rodea de chicas lindas, tal vez existe la posibilidad de que también haya conocido a un doncel y no nos lo haya dicho
- Se bien que los niños y niñas nacidos de un doncel son más fuertes y sanos. Dudo que Sinbad se haya encontrado con uno, con lo despistado que es, no lo reconocería aunque estuviera en sus narices
En otra habitación, Sinbad dio un estornudo
- ¿Está bien mi rey?
- Si Drakon - volviendo a estornudar- que raro
- Alguien estará hablando de ti Sinbad - rio Spartos- quizá alguna de tus chicas a las cuales tienes muy abandonadas
- ¿De verdad? - hablo Pisti - eso es raro de ti, Sinbad-sama
Pero los tres callaron al ver a Sinbad bastante pensativo, mirando hacia el cielo de forma perdida, Drakon sonrió y con una seña a Spartos y Pisti se disponían a dejarlo solo, pero el dragón antes de irse
- Debes extrañarla tanto para que te tenga así
- ¿Eh?, ¿Qué? - viendo a su general - ¿de qué hablas?
- Sinbad, sé que casi nunca hablamos de nuestras cosas personales, pero desde hace tiempo te noto preocupado - sonriendo- en especial desde que ese magi te pregunto por Aladdin y te dijo sobre una posible guerra
Sinbad solo se le quedo viendo para después dejarse caer sobre el sofá y de nuevo fijar su vista al mar
- Drakon, ¿puedo preguntarte algo? - viéndolo y el general asintió - ¿Cómo supiste que Saher era la indicada?
Drakon solo lo miro de reojo para después sonreír y cruzar sus brazos. Dio un suspiro y alzo el rostro
- Cuando me di cuenta que no era amor lo que sentía por Serendine - Sinbad lo ve atento- como sabes, Saher era una de sus doncellas, por lo que era inevitable que tuviéramos que hablarnos o de vez en cuando hacernos compañía en algunas misiones. Conforme más nos tratamos, más nos íbamos conociendo y fue ahí que me di cuenta que el cariño que le tenía a Serendine seguía siendo el de un hermano a su hermana mayor
- Ya veo - ladeando su mirada
- Mi rey, ¿acaso ya hay alguien que está ocupando su corazón?, ¿será la princesa del Imperio Kou?
- No - respondió el peli morado- de hecho… olvídalo - poniéndose de pie- retírate y no le digas a alguien de nuestra conversación
- Como ordene mi rey - reverenciándolo - recuerde que no solo las mujeres pueden procrear - Sinbad lo ve de reojo - hay hombres que pueden tener hijos y que son llamados donceles
Antes de que Sinbad pudiera decir algo más, Drakon salió de la habitación dejándolo pensativo. El peli morado trataba de recordar lo que eran los donceles, por su parte, cuando Drakon salió de la habitación se encontró con Yamuraiha
- Drakon
- Yamuraiha, ¿buscas a Sinbad? - la maga asintió - está en su sala de descanso pero lo mejor será que lo dejemos solo un rato más, ¿puedo saber para que lo buscabas?
- Bueno es Ja'far quien lo busca por…
- ¿La elección de una reina? - la chica asintió de nuevo y rio - Ja'far debería rendirse ya
- ¿Por qué lo dices?
- Porque, nuestro rey ya tiene a alguien, solo que aún falta que se dé cuenta de lo que en realidad siente por el - la joven se asombra
- ¿Él?, pero sabes que Ja'far junto con algunos miembros de la corte no estarán de acuerdo con…
- Pero no es un él cualquiera - apareció Hinahoho sonriendo
- Hinahoho, ¿acaso? - el peli azul puso un dedo en sus labios
- Hablemos en otro lado
Drakon y Yamuraiha solo asintieron, sin notar que Spartos los había visto pero por suerte, el peli rojo no escucho nada de la conversación, cuando escucho la puerta abrirse
- Ah, Spartos
- Sinbad - dándole una pequeña reverencia - ¿se te ofrece algo?
- Sí, tengo una misión secreta para ti
- ¿Secreta?
- Si, ven conmigo. Te diré que es
Por su parte en la habitación de Drakon
- ¿QUÉ?, ¿ESTAS SEGURO DE QUE ES ÉL?
- Yamuraiha, baja la voz - hablo Hinahoho
- Lo siento
- Simplemente - hablo Drakon - no lo puedo creer, aunque era de esperarse. Después de todo, esos dos constantemente están peleando desde que se conocieron, sin contar que siempre le pide que se una a él
- Pero esta vez será al revés - siguió el peli azul- ¿recuerdan que hace casi dos años, Sinbad desapareció de la fiesta durante el Mahjaran? - sus compañeros asintieron- bueno, el motivo fue, porque paso la noche junto a…
- El magi del Imperio Kou, Judal
Hinahoho asintió y procedió a contarles lo de esa noche: el peli azul, luego de conocer a Alibaba y los demás, había perdido de vista a sus hijos por lo que comenzó a buscarlos sin poder dar con ellos. Casi a punto de rendirse, se sentó a descansar un poco cuando sintió que algo iba a pasar. Sin saber porque, el gigante miro al cielo, dándose cuenta que el magi oscuro descendía lentamente.
El guerrero se puso en alerta al mismo tiempo que se debatía si dar alarma pero decidió observar al joven para saber sus intenciones, pero noto que Judal solo paseaba y parecía buscar a alguien y no se equivocó. Cuando el azabache vio a Sinbad muy cómodo con su harem, Hinahoho pensaba que Judal atacaría pero en vez de eso, el magi olio las comidas que servían y ni tardo ni perezoso, a distancia, vio al sol negro servirse brochetas sin verduras.
Cuando vio a Sinbad acercársele, pensó que iban a pelear como siempre, en especial, después de que Judal le estampara su plato de comida en la cara al peli morado; pero grande fue su sorpresa al ver a su rey besando al magi para después cargarlo cual costal de papas, hasta su habitación. En esto último, Hinahoho se debatía si seguirlos o no pero decidió hacerlo por si las dudas, pero al momento de escuchar los gemidos, decidió regresar a la fiesta.
- Eso lo explica todo - comento Yamuraiha
- ¿A qué te refieres? - pregunto Drakon
- Bueno, una de las chicas me conto, que cuando Sinbad la llamo para... - sonrojándose- ustedes saben - los varones asintieron- me conto que Sinbad, no pudo continuar
- ¿Cómo?
- Si, dejo al principio empezó cariñoso y dando sus habituales piropos, luego comenzó a tocarla y darle besos, pero luego, Sinbad la llamo Judal. Cuando ella pregunto que quien era, Sinbad reacciono y trato de seguir, pero no pudo
- ¿Sinbad no consumo el acto? - la maga asintió - no me lo esperaba, pero, ¿Qué pasara cuando Ja'far se entere, si Sinbad acepta su amor por el magi del Imperio Kou y este le corresponde
- Bueno, no podrá oponerse - Drakon y Yamuraiha ven a Hinahoho atentos - y más cuando hay una poderosa razón
- ¿Cuál es esa? - hablo el dragón
- Que Sindria - sonriendo- ya tiene a su heredero
- ¡¿Qué?! - el dragón y la maga sorprendidos
- Pe-pero como
- Porque tres meses después de aquel Mahjaran y que nuevamente lo celebrábamos, Judal regreso
- Un momento, ¿sabías que vendría? - pregunto Yamuraiha
- Lo intuí y más después de esa noche. Cuando lo vi - sonriendo- bueno, ¿Qué creen que haya pasado?
- ¿Pero cómo lo
- Bueno, se lo que es ver a tu mujer embarazada
- Cierto
- Sin embargo…
- Escucho lo que Sinbad dijo - completo Drakon
Hinahoho asintió serio y Yamuraiha mostro un gesto triste, pese a las atrocidades que sabía que Judal había hecho, la chica sentía que ese hijo o hija había cambiado el carácter del sol negro cuando recordó algo
- Hinahoho, Drakon… ¿recuerdan la última vez que vino?
Los mencionados abrieron los ojos de sorpresa
FLASH BACK
Luego que Judal se burlara de Sinbad al fingir llorar, el azabache expreso su verdadero motivo por el cual fue a Sindria
- Así es, como lo oyes - con expresión burlona- la próxima vez que nos veamos, será en la guerra que está a punto de iniciar
Al escucharlo Sinbad no ocultó su sorpresa y al ver a Judal empezar a levitar
- Espera Judal… - el magi se detiene
- ¿Dime?
- ¿De verdad disfrutas tanto destruir?, a pesar de que viste tu pasado… a tus padres morir, ¿deseas seguir obedeciendo a Al Thamen?
Judal solo lo vio fijamente para posarse en el suelo, Kougyoku lo veía de lejos con atención, cuando abrió los ojos con sorpresa
- ¿Acaso, el rey Sinbad es…
El silencio seguía, por lo que Judal y ladeo su rostro, aunque por dentro quería responder otra cosa, sabía que no podría decirle simplemente que tenía un hijo… un hermoso niño que constantemente era usado por la organización para chantajearlo. El magi oscuro cerro sus ojos para evitar llorar y decirle: “no, no lo disfruto ya, ¿Por qué?, porque tenemos un hijo… un hijo que puede perder su vida si no hago lo que Al Thamen me mande”; pero su mente pensó rápido
- Dime, rey idiota, ¿Por qué le temes tanto a la guerra? - colocando sus manos en su cintura - después de todo, tu eres el conquistador de siete calabozos, podrías proteger a la gente del pueblo - adoptando una actitud despreocupada
- ¡¿Cómo puedes decir eso?! - reclamo Sinbad - es verdad, puedo proteger a mi gente con ayuda de mis djinn, pero tú sabes que sus poderes incluso tienen límites -apretando sus puños- ¿acaso no piensas en las niños que se separan de sus padres?
Sinbad apretó más sus puños al mismo tiempo que recordó como su propio padre, Badr, había sido forzado a ir a la guerra, alejándolo de Esra y el mismo Sinbad. Judal al verlo, solo bufo
- Oh, veo que si te preocupas por los niños, ¿pero también te has puesto a pensar que si hay guerra?, ¿Qué pasaría con los niños de Sindria y Kou? - sonriendo - y por como hablas no te gusta ver a las familias separadas, pero en ocasiones el padre o la madre deben quedarse atrás por el bien de los hijos - todos se extrañan ante la frase
- ¿De qué rayos estás hablando ahora hablando?, ¿desde cuándo te importa alguien?
Al escucharlo, Judal tuvo que contener su ira pese a que el rukh mostro lo contrario, al grado que se dejó ver para los demás quienes comenzaron a sentir miedo, excepto Hinahoho quien ya comprendió la situación desde aquella noche en que vio al magi escondido y que se alejó llorando. Pero al mismo tiempo, sintió frustración por lo idiota que en ocasiones era Sinbad
- Como sea ya estas avisado
Dicho eso, el magi se alejó del lugar, aunque esperaba que Sinbad lo llamara y explicara que le estaba tratando de decir, el rey no le prestó atención a las palabras. Incluso Hinahoho quiso acercarse y preguntarle que iba a hacer pero Ja'far se le adelanto planeando una estrategia de defensa. El gigante peli azul ya no pudo acercarse, sin notar, que Yamuraiha se quedó pensativa, pues el rukh que emergió del magi no era de ira si no de frustración al mismo tiempo que se preguntaba, porque
FIN DEL FLASH BACK
Ahora Hinahoho, Drakon y Yamuraiha, entendían las palabras de Judal: estaba tratando de decirle a Sinbad que era padre, pero al parecer este no presto atención. Por su parte, en la sala de descanso
- Pe-pero Sinbad… ¿Por qué quieres que busque a ese lunático?
- Porque tiene días sin venir, la última vez fue cuando Alibaba y los demás estaban en el calabozo de Zagan
- ¿Y eso que?
- Solo piénsalo, algo debe estar tramando, no olvides que él es como el mensajero de Al Thamen
- Ja, más bien su títere
Pronto, la expresión burlona de Spartos cambio a una de miedo al ver la dura mirada de Sinbad, por lo que solo trago saliva
- E-está bien, investigare que paso con el magi del Imperio Kou
- Y recuerda, ni una palabra a nadie mucho menos a Ja'far. Cuando regreses con la información, les diremos todo
- Como ordene, mi rey. Entonces, parto hoy mismo, con permiso
Sinbad asintió, ya una vez solo se dirigió a la ventana cerca de ahí, había una mesa con una jarra de vino y una copa. Se sirvió un poco y antes de beberlo, lo olfateo un poco: el suave aroma del jugo de la uva fermentada, le recordó al dulce perfume en el cabello de Judal
- Es el cabello más bello y dulce que jamás haya tocado - olfateándolo de nuevo- impregnado con el perfume más suave del mundo
Al mismo tiempo, recordó la blanca pero tersa piel del magi, sus suaves labios
- Ah… Sin… - el mayor comenzó a embestir con fuerza- AH…. SINBAD
- Judal… - susurro
Sinbad suspiro para luego colocar la copa de nuevo sobre la mesa sin haber tomado un trago. Salió de la habitación para dirigirse a su cuarto, una vez dentro, miro su cama, recordando las imágenes de un molesto Judal tirado en su cama para después recordar las múltiples posiciones que habían hecho, donde hizo suyo al magi. De nuevo suspiro con pesar, cuando recordó las palabras de Drakon
- Pero mi rey, tener una esposa es lo mejor de este mundo: tener con quien hablar, alguien que te espere en casa
- ¿Cómo supiste que Saher era la indicada?
Drakon solo lo miro de reojo para después sonreír y cruzar sus brazos. Dio un suspiro y alzo el rostro
- Cuando me di cuenta que no era amor lo que sentía por Serendine - Sinbad lo ve atento- como sabes, Saher era una de sus doncellas, por lo que era inevitable que tuviéramos que hablarnos o de vez en cuando hacernos compañía en algunas misiones. Conforme más nos tratamos, más nos íbamos conociendo y fue ahí que me di cuenta que el cariño que le tenía a Serendine seguía siendo el de un hermano a su hermana mayor
- Pero, ¿tu serás el indicado, Judal?
Con ese pensamiento, Sinbad se acostó en su cama y tomo la almohada que estaba del lado derecho, la cual y a pesar del tiempo, aun tenia impregnado el aroma de Judal. El peli morado se abrazó a ella para quedarse dormido.
En otra parte: Judal caminaba de un lado a otro, arrullando suavemente a Juba, quien poco a poco se iba durmiendo, el azabache solo miraba de manera tierna al mismo tiempo que tarareaba una canción de cuna. Finalmente, el bebé se quedó dormido, acurrucado en los brazos de su papi. Al verlo, Judal dio un suspiro, miro la cuna del pequeño y aunque al principio pensaba dejarlo ahí, el tan solo recordar las veces que se quedaba solo, siendo amenazado por Al Thamen opto por acostarlo en su cama no sin antes tomar una manta para el pequeño.
Con cuidado, Judal acostó a Juba en la suave cama para luego cobijarlo. El magi se acostó de su lado derecho, apoyando su cabeza sobre su mano y brazo derecho; mientras su mano izquierda estaba sobre el pechito del bebé. En eso, escucho que la puerta se abrió, viendo entrar a Sinbad con una tierna sonrisa misma que fue correspondida
- ¿Ya se durmió?
- Si - Judal ve con una dulce sonrisa a Juba - solo porque es un bebé, le permito que sea un perezoso, no como tu
- Oe… no seas tan duro
- Es la verdad
Sinbad se sentó en la cama para luego acostarse de la misma manera que Judal colocando su mano sobre la del magi en su hijo, quien dibujo una sonrisa en su carita, como señal de que se sentía amado y protegido por sus padres, quienes sonrieron de la misma forma
- Judal
- ¿Si?
- Gracias…
Judal iba a reprochar, pero en vez de eso, ladeo su rostro avergonzado, pero la mano de Sinbad lo tomo del mentón para acercársele con cuidado dándole un suave beso
- Te amo - se dijeron mutuamente…
Lentamente abrió sus ojos escarlatas, cuando estos aclararon su visión, levanto su cabeza, viendo que seguía en su habitación y que su ropa era la misma, ya que pensó que estaría vestido con su traje de oráculo
- Solo fue un sueño - se dijo para si
Dio un suspiro, para luego ver a Juba acurrucado en su pecho, eso le dibujo una sonrisa al magi
- No necesito una esposa e hijos, porque en realidad, yo tengo una enorme familia. Toda mi gente es mi familia
Esas palabras le hicieron sentir el mismo dolor que sintió cuando las escucho por primera vez y aunque sintió enojo, no pudo odiar a Sinbad, después de todo, es el padre de su hijo y el hombre al que ama. Judal cerró sus ojos, para luego acercarse a su bebé y besar sus cabellos
- Juba, nuevamente te reitero mi promesa: aunque ese rey idiota no te ame, yo lo compensare y si esos vejestorios de Al Thamen, te tocan un solo cabello, los matare a todos, así me cueste la vida - el bebé se acurruco más a él- no olvides que te amo y que eres mi vida, Juba… pese a todo el mal que he hecho, gracias por dejarme ser tu papi
Juba despertó para sorpresa de Judal, el pequeño acaricio su mejilla para luego sonreírle y dormirse de nuevo al acurrucarse en el cuerpo del mayo. El azabache vio un pequeño rukh blanco el cual tomo en su mano y una sonrisa se dibujó en su rostro; la mariposa también expresaba el amor que Juba le tenía. Nuevamente, el papi e hijo, se quedaron dormidos como Sinbad quien estaba a una larga distancia de ellos.