Los rayos entraban por la ventana de su habitación, hoy seria el día en que se atrevería a hablar con Sasuke, hoy aclararian todo los problemas que tuvieron en antaño.
Se levantó lo más rápido que pudo aunque en su estado no podía moverse como antes, ahora le costaba un poco más debido a su enorme vientre, sonrió con melancolía pues aquel bebé era fruto del amor que ambos se tuvieron, ese bebé que vendría en camino era fruto de su amor.
- Buenos días Gaara, Sai - le hablo a la pareja que estaba ya sentada en la mesa tomando un desayuno.
- Buenos días Naru - dijeron ambos al unísono.
- Naruto - le hablo Gaara - hoy vendrá Sasuke no es así - más que pregunta sono como una afirmación.
- Si - contesto y al mismo tiempo sonrojandose.
- Bien - dijo - te dejaremos la casa libre para que hables tranquilamente con el - le completó el pelirrojo.
- Gracias - fue lo único que salió de los labios del rubio.
La tarde ya había llegado y como prometieron tanto Sai y Gaara se fueron a dar un paseo para así ellos dos pudieran hablar tranquilamente.
Eran las 3:45 y el rubio estaba más que nervioso por fin hablaría con Sasuke, después de tanto tiempo, se dijo que queria arreglar las cosas con el, le extrañaba y demasiado.
Sin que el rubio se diera cuenta ya era la hora de que Sasuke llegará. El timbre sono asegurando así la llegada del moreno, Naruto se paró lo más rápido que le permitió su vientre y fue a abrir la puerta.
- Sasuke - dijo cuando le vio más que guapo, vestía informal y eso era lo que más le gustaba, amaba cuando el vestía de esa forma, le daba un aire de alguien joven además de que se veía muy sexi.
- Hola - le contesto con una sonrisa en los labios, no pudo evitar abrazar a su rubio, por que aún era suyo, cosa que casi no pudo por el enorme vientre del rubio.
- Pasa - le dijo al separarse del abrazo - siéntate - señaló el sofá.
- Gracias - fue lo último que dijo.
Ambos parecían unos adolecentes, sonrojandose en cuanto se veían fijamente, realmente ambos se amaba y demasiado, no sabían como explicarlo pero ambos se sentían bien al estar el uno con el otro. Podrían pasar horas sin hablarse pero con sólo tenerle a lado era más que suficiente.
- Sasuke - el rubio fue el primero en hablar. El moreno sólo le miro atento a cualquier cosa que este pudiera decir - mis padres van a venir en dos semanas - le dijo lo más tranquilo que podía aunque por dentro se moria de los nervios, si sus padres venía eran problemas seguros.
- Ya veo - fue lo único que salió de sus labios - esos son problemas - le completó a lo que el rubio asintió - puedo - dijo refiriéndose al vientre del rubio.
- Por supuesto - Naruto no podía estar más que feliz, ¿Cuántas veces había soñado con algo asi? Muchas, muchas fueron las veces que el soño con el moreno así, tocandole el vientre donde crecía su hijo.
- ¿Que va será? ¿Niño o niña? - pregunto un poco entusiasmado.
- No lo se - contesto sinceramente el rubio.
- ¿No has ido al doctor? - le preguntó un poco preocupado.
- Por supuesto que si, sólo ... - pensó por un momento - aún no quiero saber que será, sino hasta que el o ella nazca - le completo.
Sasuke se encontraba de rodillas y su cabeza estaba apoyada en el vientre del Naruto, pasando su mano una y otra vez, acariciando su vientre. Naruto más feliz no podía estar, deseaba que así fuera todos los dias que quedaba de su embarazo, deseaba tenerle cerca de el, dudo durante unos segundo si acariciar o no el cabello del moreno y al final optó por hacerlo, mientras el rubio jugaba con su cabello, el moreno acariciaba su pancita.
Era la escena perfecta, el rubio pensó por unos minutos que debía hacer apartir de ahora, sabía que Hinata le había mentido de la peor manera, que habia destruido su matrimonio pero ¿Le daría el gusto de verlo completamente destruido? No, por supuesto que no, el le demostraría que aún ellos tenian salvación, le demostraría que aún puede haber confianza entre ellos dos y que nada ni nadie los volvera a separar.
El moreno tendría que hacer miles de cosas inimaginables con tal de recuperarle nuevamente. Sasuke le quería y por que le quería inmensamente le recuperaría costase lo que costase.
- Sasuke - le hablo el rubio - ya se toda tu historia con Hinata - el moreno se sorprendió sin embargo no se separó de el en ningún momento - ella me lo contó - dio un largo suspiro - de hecho me contó demasiadas cosas, cosas que no creí que ella fuera capaz de hacer, ella sentía celos, le dejaste era obvio que eso le afectó.
- Naruto, yo no le deje, ella fue la que me dejó - le corrigió.
- Como sea - volvio a hablar el rubio - se sentía mal, la entiendo de veras, tal vez yo hubiera actuado igual - cerró sus ojos para pensar bien las palabras que de ahora en adelante saldrían de su boca - no te he perdonado y no se cuanto tiempo necesite para hacerlo.
- Lo se y lo entiendo - interrumpió el moreno.
- Sin embargo quiero volver a creer en ti, quiero que nuestra hija o hijo crezca con un padre cerca así con yo lo hice, no quiero alejarle de ti - el moreno nuevamente le iba a interrumpir pero el rubio no le dejo - Si Sasuke es tuyo - respondió la muda pregunta del moreno - anteriormente - le iba a contar lo que le dijo Hinata - cuando nos casamos quede embarazado más nunca me di cuenta, siempre le hice caso a Hinata, todo lo que me decía que era bueno para mi salud lo tomaba sin darme cuenta que era todo lo contrario, desde ese día nunca mas pude embarazarme, el último mes, antes de que les encontrará ustedes dos juntos, deje de tomar todo lo que ella me dijo y dos meses depues que te deje me di cuenta que estaba embarazado, quien lo diría, ella siempre quiso lo peor para nosotros - terminó de decirle con una sonrisa en su rostro, por fin se sentía en paz, por fin había sacado todo lo que le lastimaba, por fin volvería estar con Sasuke, aunque no podía admitirlo todavía, no quería que ese idiota que tenía aún por marido se le subiera el ego.
- Yo te juro que cuando nos casamos nunca tuve nada que ver con ella, tampoco cuando comenzamos a salir, no te niego que si tuve una relación con ella pero fue antes de conocerte, una vez empecé a salir contigo, ella ya no tenía nada conmigo, siempre fuiste y serás tu - le dijo el moreno.
- Te creo Sasuke - eso alivio al moreno - pero eso no quiere decir que te perdone ¿Entiendes? - le dijo y el moreno sólo pudo asentir.
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