-No le tomes tanta importancia Joey.- trato de tranquilizarlo Yugi, el también estaba molesto con el profesor no tenía por qué haber humillado de tal forma a su amigo solo le quedaba reconfortarlo.
El y sus amigos se encontraban en la azotea de la escuela, estaban comiendo el almuerzo, había llegado la hora del receso. Joey regularmente iba a ese lugar para tranquilizarse, ver el cielo le relajaba, aunque sonara infantil y tampoco confesaria en voz alta se distraía imaginado forma a las nubes.
-Bueno.- comenzó hablar Tea para cambiar de tema y no incomodar así su amigo por el suceso con el profesor.
-Muy pronto acabarán las clases y seguiremos caminos diferentes, ciertamente la idea de separarnos me pone triste pero al mismo tiempo, estoy ansiosa por emprender una nueva aventura, estoy segura que me convertiré en la mejor bailarina del mundo.- termino de hablar con demasiada confianza, se le veía cierto brillo en los ojos.
Hubo un momento de silencio todos voltearon a ver a la única chica del grupo, la observaban con cierta admiración después de todo sabían todo lo que le costó asegurar esas palabras, después de clases ya no la veía puesto que tenía que ir a su trabajo, cada centavo lo ahorraba para poder ir a Nueva York y estudiar en la mejor escuela de baile.
-Yo.- hablo Mako comiendo con la boca llena.- Me convertiré en el mejor pescador, no habrá mar por el cual no haya navegado, escuche bien el nombre de Mako Tsunami será conocido por todos los 7 mares.-Estuvo a punto de atragantarse ya que casi se ahoga con la comida.
-Honestamente estoy un poco harto del estudio, e decido darme un año sabático y dedicarme a trabajar después de todo no tengo prisa, pero pienso estudiar ingeniería en mecánica .-Dijo Tristán hablando despreocupadamente.
Tea comenzó a regañar a su amigo por tomarse el futuro tan a la ligera, mencionando el tiempo es muy corto para no aprovecharlo.
Joey estaba taciturno, aquella platica solo lo desmotivaba.
Elno tenía un futuro. El pensar que haría después de terminar la preparatoria le daba miedo.
Ni siquiera sabía si la aprobaría no podía meter sus papeles para alguna universidad prestigiosa.
Lo más seguro es que trabajaría para mantener al haragán de su padre y pensaba el esperar a alcanzar la mayoría de edad para poder salirse de su casa, ya después sabria que hacer.
No solamente era su padre el que le preocupaba, también lo era su madre la cual le pedía dinero solo para comprar tonterías usando de escusa a su pequeña hermana.
También debía checar como le pagaría a Mokuba, el solo recordad que tuvo que acudir a un chico menor que el para solucionar su problema le avergonzaba.
No podía considerarse hombre.
Sin darse cuenta le habían golpeado.
-Pero ¿que te pasa? grito molesto a Mako, quizo regresarle el golpe pero no puso el peliazul era más rápido que el.
-Yugi te habló varias veces y no reaccionaba tu solo entiendes a golpes.- le dijo burlo su amigo tristán
Ante aquel comentario no dijo nada, solo forzó una sonrisa, su amigo lo había dicho en broma, pero aquello era verdad, así lo han criado su padre.
Yugi estaba preocupado por Joey estaba más distraído de lo usual y se veía muy desanimado, sabía que no solo era por lo sucedido en clases esperaría en preguntarle en privado, tal vez solos le tendría más confianza.
Dime joey ¿que piensas hacer terminando la escuela? le pregunto intentando tranquilizarlo
El rubio se quedó en silencio por unos minutos, no sabia que contestar, más bien no quería.
-La verdad.- dijo.- no le eh pensado aún, creo que es demasiado pronto para preocuparme por esas cosas. Finalizo seriamente.
Todo se rieron. Todos menos Yugi
-No sé me hace extraño, un chico tan despreocupado como tu no toma este tipo de cosas enserio.-se burlo Tristán
-Ciertamente- hablo Tea regañandolo.- Deberías empezar a tomar mas enserio tu futuro, solo falta medio año para terminar la escuela, lo que elijas en este momento, marcará el resto de tu vida.-
-Joey- le llamó Mako.-Tienes una gran personalidad, pero si no tienes inteligencia eso no te servirá para nada.-
Joey estaba molesto con ellos, podrían ser sus amigos pero no sabían nada de su vida, no tenían derecho a juzgarlo y menos decirle lo que debería o que no debería empezar hacer.
Antes de que pudiera decir algo la campana sonó dando por finalizado el receso todos caminaba para ir al salón de clase.
Vienes Joey-le habló Yugi al ver que su amigo estaba parado observando el cielo
-Si en un momento.- Realmente no tenía ganas de ir, apretó los puños por el coraje que sentía pero otra vez debía guardarse aquel sentimiento, no tenía con quien desahogarse, el debía de arreglárselas como pudiera.
-Como me gustaría tomarme mis propias desociones.- Susurró para si.
Al llegar al salón de clases vio un papel en su pupitre lo desenvolvió y leyo:
Te veo atrás del gimnasio al terminar las clases, tus problemas serán resueltos.
Aquello le extraño, le intrigaba saber quién había escrito ese papel no tenía remitente.
Volteo a ver a sus compañeros pero no creía que alguno pudiera haber escrito aquello, la duda le sigo lo que quedaba de las clases
"Carajo." -pensó.-
Se despidió de sus amigos a los cuales les rechazó una invitación a comer, era viernes los días en donde hacía horas extras debido a que no iba a trabajar al día siguiente.
Llego al gimnasio pero se asombró de la persona que estaba viendo, era Seto Kaiba mirando lo con superioridad, no estaba de humor para sus burlas pero si decidía pelear con gusto lo haría tenía tantas ganas de golpear algo o a alguien.
-Que quieres.- inicio la conversación, el solo verlo hacia que se enoja más.
-Esa no es ma manera en hablarle a tu amo, mide tus palabras Wheeler.-Hablo autoritario.
-Tanto trabajo te daño el cerebro, tu no eres mi amo, deja de decir estupideces.- levanto los puños dispuesto a golpearlo.
El golpe iba directo a la cara del castaño, pero fue detenido con facilidad por Kaiba el cual lo arrinconó a pared inmovilizado lo.
-Comportste o sino haré que te metan al reclusorio por extorsionar a un menor.- le susurró muy cerca del oído para después alentarlo a suelo
-Que miérda.- Joey estaba aturdido y demasiado confundido, no tenía fuerzas para levantarse.
-Me enteré que le pediste a Mokuba dinero, eso me tomó por sorpresa, el orgulloso perro callejero pidiendo prestado a un niño, debe ser demasiado humillante, la verdad es demasiado divertido.- se dijo en sus labios una sonrisa burlona
Joey se levantó lentamente, no decía ni una sola palabra, estaba avergonzado de haber sido descubierto
-No creo que llegaría a ver el día donde el perro dejara de ladrar.- seguía burlándose.- Quiero que seas mi novio, si aceptas la deuda quedará liquidada más aparte que me encargaré de tus padres, hasta un idiota como tú debe saber cuando la vida le da una oportunidad única
¿Que clase de trato es este? Pregunto incrédulo sin procesar la situación.
-Veo que no estas entendiendo la situación, no es ningún trato pues si llegarás a negarte, simplemente diré que engañaste a mi hermano menor para darte dinero y tu club de papanatas no podrían hacer nada para ayudarte. Sobre tu hermana haría que se la llevaran tan lejos que jamás la volverías a ver en tu vida, después de todo tus padres no son aptos para cuidarla... así que tú decides wheeler.
Joey lo miraba anonadado sin poder procesar sus palabras, esto debíaser una mala broma.
-No puede ser.- susurro lo suficientemente para que el castaño lo escuchara.
-Pero si puede y lo haré.- contesto, tengo un puto jet con la forma del dragón blanco de los ojos azules si no te has dado cuenta para mi no existen imposibles.
-¿Pero por que yo?-
Mokuba me contó el por qué recurriste a el, al principio no quiso contarme nada al parecer había jurado que no se lo diría a nadie, pero somos hermanos y me tiene una confianza infinita, me dijo sobre como te trata tu padre y como te chantajea tu madre, siempre creí que eras un idiota más, que solo sabia sonreír por que no sabia lo cruel que era la vida. Pero me equivoqué contigo de todos los idiotas que forman tu grupo de la magia de la amistad,eres tu el que más sabe cuan desdichado es este el mundo, n pocas palabras llamaste mi atención.
Maldita sea pensaba internamente, debio saber que Mokuba sería descubierto o que se lo contaría a Kaiba, de nuevo lo dejaban sin opciones.
Le daba igual lo que le ocurriese a sus padres, pero si se negaba la persona que tenía frente a el, le quitaría lo más importa que tiene que es su hermana
-Acepto.- dijo a regañadientes.
-Disculpa no te escuche.- pronunció Kaiba, regocijandoce de su éxito, después de todo no había nada que el no obtuviera.
-¡Dije que sí seré tu pareja, o que eres sordo!- grito irritado, apretando con frustración los puños.
En aquel momento lo único que quería hacer era golpear al chico que tenía frente a el.
-Sabia que tomaría la elección correcta, tus modales será algo que mejorará con el tiempo ya aprenderás a comportarte adecuadamente.-Se acercó lentamente a Joey y le dio un beso en sus labios.
Aquel contacto lo tomó desprevenido, sintió demasiado asco. Siempre imaginó que la primera persona que besaria sería May pero como siempre se había equivocado.
- Ven es hora de que conozcas tu nuevo hogar.-camino hacia la limusina que lo llevaría a la mansión. Joey dudo en subir tenía el presentimiento de que no debía de ir, se encontraba asustado.
-¡Que esperas una invitación! vámonos.- le ordeno Kaiba molesto.
Joey subió de mala gana, se regocija al creer que no le puede peor, pobre ingenuo poco sabe lo que vendrá a continuación.
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