||Sweet Love por hideky

Primer caso:


Kenta paseaba con Yuki cuando está se detuvo y ante su sorpresa su "suegra" había aparecido entre los arbustos.


El albino se veía agitado y soprendido ante el encuentro.


Y-Yuki... - comentó.


Mamá ¿te están persiguiendo nuevamente?- inquirió con perspicacia su prometida.


Son dos alfas estúpidos pero hoy no estoy de humor cómo para corregirlos sin matarlos- comentó.


Kenta sintió un escalofrío ante la mirada que le dedicó la madre de su prometida.


Más se sintió curioso cuando el albino giró la mirada y la posó frente a ellos y bajó la mirada de forma imperceptible


¿Pasó algo Zero? ¿Qué era ese sonido mientras hablaba contigo? -cuestionó una voz tras ambos haciéndolos brincar del susto.


Su prometida se giró y reprendió a su "padre" y el tembló al saber que Kaname Kuran estaba tras él.


No es que le tuviera miedo, bueno tal vez eso era mentira, pero es que con la visita que le dio el alfa fue suficiente para no querer convivir mucho con él.


El alfa aún miraba al omega esperando respuesta cosa que Yuki notó.


Zero al ver que toda la atención de dirigía a él tomó una postura hostil.


Eran unos estúpidos nada del otro mundo - murmuró.


Yuki soltó una risa al ver la timidez de su madre y él mejor se aguantó la risa, no quería morir.


Kenta observó cómo Kaname se acercaba y apresaba en sus brazos al más bajo mientras le susurraba unas cosas.


Yuki sonrió mientras lo arrastraba del lugar.


Lo único que Kenta pudo ver antes de alejarse, fue el sonrojo de Zero.



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Claro que ahí se dió cuenta de la conexión que tenían ambos pero eso no le aseguraba que ambos eran destinados; eso lo descubrió en la segunda ocasión que tuvo contacto con ambos.



Segundo Caso:

No era novedad saber que Kiryü Zero era cotizado en los edificios de la luna, lo que si era inusual era ver que un alfa tuviera el atrevimiento de tratar de llamar la atención de Zero.


A mitad de año se había realizado un intercambio y a decir verdad el alfa que había llegado era desagrable por lo que cuidaba más de su prometida advirtiendo también al prefecto.


Tras varios días vio cómo el alfa perseguía a Zero y muchos pensaban que eso no podía terminar bien, más cuando Kaname Kuran terminase sus asuntos en el pueblo y regresara a la Academia.


Casualmente aquel día tan estipulado, él estuvo allí, aquel estúpido alfa se había atrevido a usar a Yuki para atraer al prefecto, cómo he de suponerse no estuvo muy feliz por sentir a Yuki tan asustada y disgustada.


Su instinto simplemente actuó pero Zero había aparecido para evitar que se manche las manos en vano.


Y entonces aquel alfa con descaro había tomado a Zero por la cintura mientras daba pequeños mordiscos desesperados en su gargantilla.


Aquello era una gran falta de respeto así que cuando se dispuso a defender al albino su amada lo detuvo mientras lo obligaba a alejarse un poco.


Aléjate - se oyó una voz realmente intimidante, el lo hizo por instinto protegiendo a Yuki y el alfa se alejó.


Kaname Kuran apareció con la expresión más terrorífica que se hubiera visto, se acercó al omega y lo protegió entre sus brazos liberando su aroma.


Y vio al padre de su prometida fruncir el ceño al percatarse de lo que el alfa había tratado de hacer pues había dejado su aroma en la gargantilla.


Yuki y él temblaron al ver los ojos del mayor teñirse de carmín mientras veía al alfa frente a ellos.


De rodillas - ordenó con voz dura mientras presionaba a Zero en sus brazos.


El alfa se arrodilló tembloroso y aterrado, él estaba paralizado de miedo pero aún así protegía a Yuki que temblaba aferrada a él.


Vio cómo Kaname se acercaba y golpeaba con él dorso de su mano en la cara al alfa - pide disculpas a Zero y a Yuki, te advierto que si vuelves a tocar a mi pareja o a mi hija voy a ahorcarte con mis propias manos - dijo haciendo temblar a los presentes.


L-Lo siento -


Kenta supo que no era suficiente pero algo sucedió cuando el ambiente cambio pues vio que Zero abrazaba a Kaname y le susurraba cosas.


Y supo que Zero estaba usando su voz de omega ¿cómo se dio cuenta? Pues el Estado de furia de Kaname había desaparecido para dar paso a una mirada llena de amor y dulzura.


Yuki sonrió a su lado al saber también que ocurría y ambos compartieron un pensamiento por su enlace.


=Son destinados-


Pues se sabía que la voz omega funcionaba sólo con la familia del omega y su alfa.



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*§weet Love
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Kenta recordó que aquel día su dulce prometida no cabía en su felicidad, ambos admiraban mucho a la pareja y se sentían tranquilos al saber que su unión no iba a perecer.


Kenta - llamó su dulce Yuki mientras ingresaba a la cafetería.


Ambos estuvieron charlando para luego ir a recoger el vestido que llevaría en la ceremonia de mañana.


Finalmente el director y su esposo habían cedido para dejar que su hijo se prometiera( vaya que él se rió cuando Yuki le contó la razón de por qué el albino aún llevaba collar)


Yuki estaba feliz al saber que sus padres finalmente de unirían.



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||Sweet Love||

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En la Academia Cross: Casa de Zero




Kaname solía ser muy pacífico pero su futuro suegro no parecía aceptar aún que Zero ya no era un cachorro.


Además que ambos revelaron que eran destinados el día que ese alfa de intercambio agredió a Zero; ambos habían dejado de tener momentos de privacidad.

Por eso a la hora de la cena, no era de extrañarse que apareciera la familia de su omega.


Yagari Touga y Kuran Kaname eran enemigos naturales, ambos se enfrentaban en una lucha de miradas venenosas.


Los presentes por otra parte observaban la escena con gracia(dígase por Kai e Ichiru), Kein estaba muy cerca de Zero y ambos observaban la escena con una gotita en la cien.


Todos se habían reunido para "visitar" a la pareja aunque Zero sabía que eso no era cierto ya que las risas de sus hermanos a su costa y la actitud de su padre los delataban.


El único cuerdo (para su sorpresa) era Kein, el inusual director infantil estaba completamente serio y calmaba a su pareja.



Zero estaba feliz aunque no lo expresara abiertamente, todos ahí lo apoyaban. Su familia estaba feliz por él y lo agradecía.



El calorcito en su corazón llenaba y aliviaba sus sentidos, estaba en un estado de felicidad que no podía ser opacada y Kaname lo notó por su lazo observando a donde estaba para conectar sus miradas mientras le sonreía.


Zero se sonrojó devolviendo de forma tímida la mirada junto a una dulce sonrisa.


Nuevamente podía sentir que en esa conexión nadie podía interferir; eran sólo el de ojos vino y él.


La puerta fue tocada y Yuki entró observando con curiosidad a todos reunidos en la casa, Kenta que estaba tras ella sudó frío; genial, estaban el tío y el abuelo de su prometida.


Yagari desvió la atención al "otro" intruso y está vez se le unió Kaito.


Kenta quería soltarse a llorar.