Tony despertó muy agitado hasta el punto de levantarse de sopetón, como si hubiera tenido una pesadilla, ¿una pesadilla? ¡Qué va!, como un terror nocturno para ser más exactos. El millonario se quedó sentado en su cama, observando un punto fijo; sus piernas cubiertas por la fina cobija. Fue entonces que recordó lo que había sucedido. –Estúpido Rogers. –maldijo con odio. El haberlo besado no era excusa para que lo hubiera tratado como un perro sarnoso.
Se levantó de la cama y caminó hacia el baño, se quedó de pie en frente del lavabo, abrió la llave del mismo y mojó su rostro, se observó a sí mismo en el espejo, unas cuantas lagrimas corrieron por su cara; estaba llorando por lo que sucedió, pero no lo iba a admitir delante de nadie, él es el Gran Iron Man, pero realmente estaba dolido.
Salió del baño y se cambió de ropa, no podía volver a dormir, observó su reloj y se dio cuenta de que todavía no amanecía, pero eso no le importó.
-J.A.R.V.I.S –le llamó serio. –Prepárame una taza de café, la espero en el taller.
-Como diga señor. –Tony podía jurar que la I.A. notó algo en él pero que no se animaba a mencionar, de seguro porque J.A.R.V.I.S. se había equivocado.
-También niégale el acceso a toda persona, si alguien quiere entrar al taller me preguntas primero. –no recibió respuesta pero estaba seguro que la I.A. lo había escuchado.
Por fin ya había amanecido, el Capitán ya había terminado con su rutina diaria de ejercicio y tomado una ducha, por qué vamos, a nadie le gusta el olor a sudor. Cuando salió de su habitación se dirigió a la cocina a preparar el desayuno para todos y especialmente darle de comer a su lindo castaño.
El fortachón se había decidido por cocinar huevos fritos, preparar una ensalada y para beber un jugo de naranja o de toronja. Steve quiso hacer un desayuno que Tony no se negara a comer, pero tampoco podía dejar que su amor se alimentara de pura comida chatarra.
Poco a poco los vengadores más Loki iban llegando a la mesa para desayunar, sin embargo Rogers no vio a Tony por lo que creyó que seguía durmiendo, así duró pensando en eso, no fue hasta que sus compañeros terminaron de comer y cuando Banner y Barton se retiraron a realizar sus labores, fue cuando decidió preguntarle a la I.A. después de todo faltaban 5 minutos para las 11 de la mañana, para el Capitán ya era demasiado tarde.
-J.A.R.V.I.S ¿Tony sigue dormido?
-No Capitán, el señor Stark lleva despierto desde las 4:30 de la mañana. –le respondió cordialmente.
-Oh, el enano se levantó temprano. –dijo Loki. -¡Auch! ¿¡Y eso por qué fue Thor!? –expresó, ya que el Dios del trueno le había dado un zape.
-Solo cállate Loki. –Habló Thor, que su hermano haya hecho un comentario de ese tipo, significaba que tal vez cometió una travesura.
-¿Y dónde está Tony? –preguntó el Capitán.
-Se encuentra trabajando en el taller. –respondió la I.A.
-Bueno, tal vez le lleve el desayuno y… -El Rubio no pudo terminar cuando fue interrumpido por el mayordomo virtual.
-Me temo que mi señor no desea ver a nadie.
-¿Qué? ¿Por qué? –preguntó Rogers confundido.
-No sabría decirle con exactitud, pero sospecho que usted es el responsable. –comentó la I.A.
-¿Yo? –se extrañó el Capitán.
-Por Dios Steve. –empezó Natasha que había estado en silencio viendo lo que sucedía. -¿Qué hiciste?
-No recuerdo haberle hecho nada malo.
-Trata de recordarlo… -habló la pelirroja.
Steve se quedó pensativo un rato, por más que intentaba recordar si le había hecho algo malo o que lo lastimara su cabeza no le daba eso, al contrario, recuerda que ambos la pasaron bien, entonces… ¿Qué es lo que estaba pasando?
-¿Y bien? –preguntó Thor que también estaba al tanto de la situación.
-No, realmente no creo haberle hecho algo malo. –se llevó una mano a su barbilla.
-Steve… -comenzó Natasha. -¿Qué hicieron ayer?
El Capitán observó a sus compañeros para finamente hablar convencido de que no había hecho nada. –Pues estuvimos en el taller de Tony, él ordenó una pizza luego llegó el doctor Banner pero no duró mucho, después llegó el repartidor, comimos mientras veíamos una película que no entendí para nada, hablamos y luego a al final de la película Tony se quedó dormido, supongo que estaba muy cansado, así que lo llevé a su habitación para que descansara.
-¿De qué se trataba la película? –preguntó Thor.
-¿Eso que tiene que ver? –cuestionó Natasha.
-No entiendo… -dijo Steve.
-Fácil. –Comenzó Thor –Cuando a Loki no le gusta lo que ve en la caja parlante se enchucha y luego en la noche no me da de “cenar” porque esta malhumorado.
-Oh si Thor, cuéntale nuestra intimidad a todos. –Habló con sarcasmo el hechicero. –Pedazo de idiota.
-Tony también dijo esa palabra… -recordó el Capitán.
-¿Cuál? –preguntó la espía.
-Enchuchar… ¿De dónde sacaron eso Thor?
-Es un secreto mío y de Tony. –sonrió. –no lo diré.
-¿Qué clase de secreto? –los celos de su hermano se estaban haciendo notar.
-A mí también me gustaría saber. –Steve había tomado el mismo barco de celos que Loki.
-Suficiente chicos –habló la pelirroja. –nos estamos saliendo del tema.
-Cierto. –Continuó Steve.
-No creas que te salvaste Thor. –amenazó Loki, incluso los demás notaron como un aura oscura emanaba del pelinegro.
Fue entonces cuando el Dios del Trueno recordó algo que había sucedido ayer, tal vez esa era la causa, aunque había notado la situación en orden, no obstante de inmediato pero mentalmente culpó a Loki.
Flashback
En el pasillo, cerca de la sala se encontraba Loki acompañado de su hermano, el pelinegro esbozó una enorme sonrisa y una risita media sospechosa que rápidamente atrajo la atención del Dios del Trueno.
-¿De qué te ríes hermano?
-De la conversación de aquellos dos… -sonrió el pelinegro.
-¿De Tony y Steve?
-Así es.
-Por Odín, No hiciste nada ¿Verdad? –preguntó el rubio, estaba seguro que su adorado hermano había hecho algo.
-¿Cómo crees? –cuestionó con sarcasmo.
-De acuerdo. –finalizó, ambos asgardianos se fueron a su habitación, pero antes Thor les echó un vistazo a sus amigos para asegurarse que todo estuviera bien. “Parece que todo está en orden, no hay de qué preocuparse”.
Fin del Flashback
-Oh… -expresó Thor.
-¿Qué pasa? –preguntó la pelirroja.
-Nada, solo estoy pensando…
-Wow ¿Tú piensas? –Cuestionó Loki burlándose.
-Bueno, nosotros dos nos retiramos. –el Dios del Trueno se levantó de su asiento y jaló al hechicero para retirarse del comedor e ir a su cuarto.
-¡Ey! Mastodonte ¡suéltame! No me jales. –Se quejó el pelinegro. Después de todo su hermano mayor tenía asuntos que resolver con él y vaya que ahora no tenía cuartada.
Ambos vengadores observaron cómo se alejaban del comedor los asgardianos, Steve dejó salir un largo suspiro, cosa que fue vista por su amiga.
-Relájate Steve, si no hiciste nada posiblemente Stark esté estresado o se levantó con el pie izquierdo. –Animó la espía.
-Pero J.A.R.V.I.S dijo que Tony estaba así por mi culpa, por fin las cosas estaban saliendo bien y pasa esto.
-Vamos fortachón… -la pelirroja lo miró preocupada. –Ya sé…
-¿Qué?
-Le contaré a Potts, de seguro sabrá que hacer. –sacó su celular y comenzó a marcar.
-¿Tienes su número? –preguntó el rubio sorprendido.
-¿Con quién crees que estas tratando? –presumió la mujer.
-Tienes razón…
-¿Bueno? –habló la pelirroja por el celular.
Steve estaba muy atento a cómo iba avanzando lo que decía su amiga, al término de unos cuantos minutos la pelirroja había colgado y guardado su celular.
-¿Qué te dijo? –la curiosidad en Steve estaba al borde.
-Pues que ella se encarga de esto, que no te preocupes. –finalizó Nat.
Mientras tanto en otra habitación; el cuarto que Thor y Loki comparten. Se encontraban ambos hermanos, Loki estaba sentado en una de las sillas al muy estilo diva mientras que Thor estaba de pie mirando a su hermano acusatoriamente. Así es, el hechicero sabía lo que venía.
-¡Loki te dije que ya no siguieras! –gritó enojado.
-No grites que no estoy sordo. –dijo en tono de diva mientras agitaba una de sus manos lentamente.
-¿Fuiste tú?
-¿Qué cosa?
-Tú hiciste de las tuyas de nuevo ¿verdad? –Poco a poco el rubio comenzaba a perder la cordura.
-Si te digo que no ¿me creerías? –se burló el pelinegro.
-¡No!
-Ahí tienes tu respuesta. –contraatacó.
-Por Odín, Loki esto es serio.
-Ay no me digas… -habló con sarcasmo.
-¡Suficiente! –el rubio ya estaba completamente arto de la actitud de su hermano-amante. –Vas a disculparte y a explicar que el causante de todo esto fuiste tú.
-¿Y si no quiero que? ¿Vas a obligarme?
-Le diré a Padre que te quite tus poderes por completo. –amenazó.
-No serías capaz.
-¿Seguro? ¿Quieres arriesgarte? –Thor ya estaba que golpeaba a su hermano.
-¡Bueno pues! –gritó eufórico. –Está bien me disculparé, pero tal vez más tarde.
-¡Ahora!
-Primero deja que se arreglen ¿Vale? Quizá incluso hagan cosas lujuriosas cuando se reconcilien. –Loki hizo comillas. –Además no tendría nada de divertido si les dijera en este momento, ya no haré nada más pero déjame ver cómo termina, también puede ser un espectáculo para ti ¿Qué opinas?
-Mmm… -lo pensó por unos instantes. –Está bien, pero cuando todo esto termine te disculparas. –el rubio lo señaló con el dedo índice.
-Trato hecho.
-Bien…
-Por cierto Thor.
-¿Qué?
-Si me castran será tu culpa… -amenazó el pelinegro.
-¿De qué estás hablando? –preguntó algo confundido y asustado, pero lo asustado no se notaba.
-Ya dije… -finalizó Loki.