Tu vez un fin donde hay un comienzo
Y si, su viaje había comenzado fue Naruto el encargado de arreglar los documentos necesarios, y a pesar de su miedo y por qué no también nervios, sasuke se encontraba ya en el asiento de un vuelo comercial, mirando atrás vez de la ventanilla del avión se preguntaba si todo aquello daría frutos, ¿el en verdad recuperaría la memoria? ¿ podría ser así de fácil?... en secreto lo deseaba, le bastaba con ver el rostro de Naruto sentado a su lado, para saber de la gran decepción que sería para el rubio si las cosas no sucedían como quería, la opresión en su pecho y la adrenalina en la sangre, lo mantenían con un constante escalofrío y temblor incontrolable, no fue hasta algunas horas después, que logró observar algo tan unico, tan maravilloso e inimaginable, que su mente por fin logró despejarse un poco de toda sus preocupaciones.
Los ojos de sasuke miraban con asombro e incredulidad hacia abajo, el hermoso tono que a ratos era azul y a ratos turquesa del mar, le impedían prestar atención a otra cosa, y ahí mismo en todo aquel lienzo de matices y agua, le fue divertido ver el como nubes de formas tan redondas flotaban apenas algunos metros ( al menos desde su perspectiva) sobre el agua, dejando que sus sombras se dibujaran sobre la superficie del mismo, y era aún más asombroso ver cómo las alas del avión Cortaban los depósitos de vapor, dibujando una estela, que si bien no era permanente, sabía que desde el suelo por algunos minutos parecía que podía ser eterna.
El calor de la mano de Naruto sobre la suya, lo hizo volver su atención a el, solo entonces pensó en el tiempo que llevan sentados uno l lado del otro y que pesar de eso, ningúna palabra había salido de sus labios. El azabache se sintió algo culpable,.
- Lo siento, no era mi intención mantenernos en este silencio. – el rubio le dio otra sonrisa y acaricio su rostro.
- No hay nda de lo que debas disculparte, me hace feliz saber que a pesar de la situación puedes distraerte en otra cosas y no sólo presionarte. – le contestó
Y aque intercambio de palabras fue el único por todo lo qué resto del viaje, y se podía considerar algo normal, que más se podía hacer?, si acuestas cada uno de ellos llevaba la carga del fracaso absoluto y el éxito a medias, la noche les dio la bienvenida aún nuevo lugar, tal vez un nuevo País, o continente, sasuke no lo sabía a ciencia cierta , y si era sincero consigo mismo, no le importan, finalmente el cansancio del día mermó su resistencia, y fue Naruto quien tuvo que sacarlo en brazos del taxi que habían tomado, se alojarían en un hotel sensillo, y en cuanto las personas vieron la curiosa escena, no se hicieron esperar los flashes de alguno que otro despistado que había olvidado apagarlo y que movido por la morbosidad , curiosidad o simplemente ternura, tomanban algunas fotos de la pareja, y como no llamar la atención, si el rubio cargaba en brazos a sasuke co una devoción y amor que era imposible de ocultar, bastaba con ver cómo protegía el cuerpo del otro como si no quiesiera que el más mínimo de los males le aquejara, y aún que para Naruto al inicio fue incomodo aquel momento, después agradeció la atención que le prestaban, se sintió feliz, se sintió completo, que el mundo entero volteara a verlo si quería, que lo juzgará, lo apoyará o rechazara, no le importaba, por qué el, con el simple hecho de tener a la persona que tanto amaba a su lado, podía decir que su vida tenía un significado.
Después de algunos inconvenientes, producidos por el hecho de no querer despertar a quel que cargaba, Naruto pudo llegar hasta la habitación que le correspondía. Ahí colocó a sasuke sobre la cama, lo admiro por algunos minutos, jugó con los mechones negros de su cabello, disfrutó del cosquilleo de estos en sus manos, y finalmente, decidido a no presionar aún más, se permitió depositar un beso en aquellos labios para después dejarlo descansar.
Por la mañana el día se anunció con tonalidades grises, algunos relámpagos y una fina lluvia que parecía cargar la melancolía de mil años, pero eso no fue impedimento para que el vampiro y el lobo tomados de las manos salieran a buscar aquello que tanto anhelaban, para sasuke era tan extraño, saber qué cosas tan magnificas podían existir, pues su boca se abrió en una expresión de asombro, en cuanto llego A aquel rincón que era considerado un santuario, el verde de los árboles contrastaba en demasía con el gris y los colores artificiales de la ciudad que minutos antes dejo atrás, las copas de estos. Debido a la altura que alcanzaban, producían un sonido similar al del correr del agua en un río, era tan claro, parecía tan puro , y los gruesos troncos los hacían ver cómo árboles indestructibles, y aquel poder de la naturaleza hizo surgir la curiosidad en el, ¿ podría alguien llegar a la cima? ¿ podría e, llegar a la cima? ¿ la vista desde esa altura sería aún más hermosa? . Y su corazón latió fuerte y seguro al levantar a un más el rostro las finas gotas de agua lo acariciaban y podía jurar que cada una de ellas era un deseo contenido, un nuevo latido, el podría hacerlo, el lo haría…
Pero la mano de Naruto lo detuvo en cuanto sasuke tocó la corteza del árbol hasta el que había avanzado , volvió en sí, y pudo adivinar que Naruto sabía lo que planeaba, y aún que había culpa en el rubio, por haber detenido aquel avanzace, sasuke entendió enseguida, que no sería normal que todo un grupo de turistas lo vieran trepar un árbol simplemente con sus manos y pies en medio de la constante llovizna.
- Perdón, en verdad lo lamento, pero, no es el momento, - y sasuke notó el timbre de voz del rubio, aquello probablemente le había dolido más a el, pues sin duda era renunciar a una oportunidad para que sus recuerdos regresarán.
- Está bien, yo no pensaba en lo que hacía. – intentó consolarlo de cierta forma el azabache.
- No, no lo está, actúe tan desesperadamente, que no investigue antes, la cantidad de personas que visitan el lugar ni en qué fechas, si hubiese esperado un poco, tal vez hasta podía haber logrado que solo tú y yo entráramos. – sasuke se habrazo al cuerpo del más alto, no era algo que había pensado o planeado, simplemente su cuerpo, o tal vez parte de su corazón actuaron, y Naruto atesoro aquel gesto, y lo devolvió de la misma forma.
Lo siguiente en su excursión fue la visita al antiguo castillo que ahora funcionaba como museo, un deje de arrepentimiento golpeó el corazón de Naruto, pues hacía tantos años y con un dolor cruel había tenido que renunciar a este, ¿Cómo se suponía que buscaría a sasuke sin salir del castillo? Y durante años habían emprendido viajes largos. En su búsqueda, para al final volver a aquel castillo, pero era algo que comenzó a ser contra producente, el tiempo que volvían para mantener todo en orden y en buen estado en la edificación era tiempo que perdían de búsqueda, y si a eso se le sumaba que entre el personal que contrataban para se hiciera cargo de el, los rumores comenzaba a surgir, expresando lo extraño que era que aquella familia parecía no envejecer o que de alguna forma lograban que sus descendientes fueran una copia de exacta de su antecesor, solo incrementaba sus preocupaciones y les cerraban aún más la oportunidad de seguir siendo dueños de tan valioso lugar, y al final, simplemente lo habían “donado” nadie supo que había sido de la familia que vivía ahí y a nadie pareció importarle,
Ahora Naruto entraba a pasos lentos y nerviosos, sentía ser un traidor cuando en su mente los recuerdos fluyeron aún a pesar del tiempo y los cambios de aquel lugar, su cuerpo resintió la inseguridad alojada en su corazón, pero enseguida se recompuso al notar como sasuke se aferraba con fuerza a su brazo, y las siguientes palabras del azabache, estremecieron su corazón, e incluso, por un momento, se asombró de que este pudiera latir con esa fuerza en su pecho.
- Yo… nací aquí, verdad?, este fue mi hogar. – Naruto solo pudo asentir, mientras sasuke seguía viendo todo a su alrededor, - itachi y shisui, - las lagrimas de sasuke brotaron el mismo vampiro se sorprendió al notarlas y , un leve hipo se dejó escuchar. Naruto se inclinó hasta el, colocando las manos en el rostro del menor, secando al mismo tiempo las lágrimas que ya recorrían sus mejillas.
- Ellos están bien ahora, me escuchas están bien. – el rubio le hablo con tal seguridad y confort que sasuke pudo volver a la realidad.
- Si, ahora están bien – contestó finalmente el azabache. – kozu, a kozu le agradaba este lugar.
- Era su adoración – respondió Naruto con una sonrisa radiante y el pecho inundado de alegría, podía funcionar, podía estar funcionando.
- Hay..., otro lugar, no es aquí, - sasuke llevo una de sus manos a su pecho – sé qué hay un lugar aún más especial. – y entonces fue turno de que Naruto dejara escapar una lagrima.
- Si lo hay. Vamos.
Aquello resultaba increíblemente familiar y desconocido, los olores de la naturaleza sus sonidos, hechizaban a sasuke a cada paso, y entonces tras algunos minutos tuvo frente a él un sitio que solo podía existir en sueños, era su mente viajando a otro tiempo quien se lo mostraba, con aquellas flores silvestres brotando desde la alfombra tan tupida que era el pasto, con la luz de la luna bañando todo en arte y técnica “claro-obscuro” con las luciérnagas jugando a ser estrellas y el viento susurrando lo que creyó distinguir como notas, que con el pasar de los segundos, se volvían más claras, dejando que la voz se percibiera al ser arrastrada en el viento, aquella canción de amor, que viajaba atrás vez del tiempo, envolvió su corazón en una calidez nunca antes experimentada, y sasuke apretó su mano a la de Naruto, por qué sus piernas temblaban, su mundo giraba y su corazón quería estallar víctima de tan arremolinandtes sensaciones, con cuidado el rubio lo hizo sentar y el hizo lo mismo para permanecer a su lado, para sasuke el momento fue duro, se sentía como aquel trozo de carbón que ardía al rojo vivo pero que a pesar de ello no lograba que la llamarada de fuego brotara.
Y es que su mente tenía ahí sus recuerdos, el lo sentía, el lo sabía, pero no podía recuperarlos, se abrazo a Naruto, el dolor que viajaba por su cuerpo y su alma se volvió insoportable. ¿Por qué? ¿Por qué el tiempo, la vida y el destino se negaban a devolverle sus recuerdos?, el llanto brotó esta vez, pero lo hizo expresándose con gritos y gemidos de auténtico martirio, y Naruto nada podía hacer para terminarlo, con aquel llanto comprendió, que a pesar de sus esfuerzos, no solo habían perdido la batalla si no también la guerra, y la desesperaciony decepcion amenazaron con ahogar su alma. No había ningún otro plan, no había nada más que intentar después de esto, por lo tanto el rubio pensaba que era momento de darse por vencido y dejar que sasuke siguiera su camino.
Y a sasuke le seguía doloendo, tantas expectativas, tantos anhelos hechos trizas, pero su corazón aún con todo el sufrimiento, fue capaz de mostrarle una salida.
¿En verdad eran tan necesarios los recuerdos?
¿En verdad no hay nada que hacer si se pierden estos? Y su mente capto aquel desesperado intento del corazón, y al fin razonó.
Era verdad que los recuerdos valen aún más que El Oro, es verdad que se atesoran de forma entrañable, es verdad que son parte fundamental en los sentimientos, pero, si estos se pierden, no solo se puede luchar por volver al pasado y arrancárselos de tajo, no sólo así se puede volver a amar, por qué en ese caso, no vale lo mismo el amor que se tiene en el presente?, o no es posible llenar ese “hueco” de vivencias y amores pasados, con nuevas experiencias, no se tiene ya, la intuición necesaria, para saber evitar los errores de aquel pasado y hacer más ameno el futuro.
Por qué el sentimiento, tal vez un tanto inexperto, inseguro y “nuevo” tiene todo el potencial para evolucionar a más que eso, siempre y cuando haya constancia.
. Y no es el amor algo inmedible?, así que como se puede asegurar que el amor del pasado vale más que el que puede brotar?
Y sasuke se obligó a callar el llanto, abrazo con más fuerza a Naruto y beso su mejilla.
- ¿ Qué importa?, ¿Qué importa si no puedo recordar lo que vivimos, cuando estoy seguro de que aún así quiero estar a tu lado?. – aquellas palabras tuvieron un efecto inmediato en Naruto, que levantó la mirada, y con los ojos azules cristalinos por las lágrimas, sonrió con esperanza. – no importa el tiempo, no importa nada más, mi alma y la tuya ya son una misma, y estoy seguro de que, siempre encontrarán la forma de estar juntas, yo te juro que, no importará si mis ojos no pueden ver para buscarte, si mi voz no existe para llamarte, encontraré la manera de que tú sepas que soy yo, que soy yo quien te ama.por más confuso que sea al inicio.
- Y… y yo sé, que aún con lo tonto y despistado que puedo ser, entenderé el mensaje, y sabré, que en esta y mil vidas, soy tuyo por toda la eternedidad.
Aquella breve pero potente confesión, encendió una chisposa en ambos corazones, algo que calentó su cuerpo y sus espíritus por igual, algo sublime que estaba por encima de todo lo demás, algo que a pesar de los besos regalados y las caricias brindadas, seguía siendo inmedible, irrazonable, y como en aquel pasado caprichoso, la luna brotó de entre las nubes solo para volver a ser testigo del amor de aquellos seres, que se escapaban de las leyendas, que por esa noche dejaban de ser un mito, para golpear al presente con la realidad de su sentir, con sus cuerpos danzando volviéndose sombras, sombras que experimentaban placer y amor a cantidades iguales, con la entrega del cuerpo y el alma entera, Naruto agradeció por todo lo vivido , pues todo ello lo trajo hasta ese momento, en el que podía volver a recorrer con sus labios, cada centímetro de la piel del azabache, al fin, la calidez del vampiro borraba la soledad de los años, al fin después de tanto, ellos se complementaban, aquellas sombras, siguieron volviendo se una, adoptando estremecedorasprovisiones , y el viento, ahora no solo arrastraba aquella canción, si no también algunos suspiros y gemidos.
A la mañana siguiente, cuando sasuke despertó, lo hizo consciente casi al instante de su desnudez recordó las manos de naruto tocando todo de él, el extasis de ser penetrado por el lobo, de estar lleno de su esencia ya no estaba solo, ya no se sentía solo, y la brisa, que aún esa mañana persistía no le afectaba en lo más mínimo por qué Narut o en su forma de lobo lo rodeaba protectoramente , y no pudo evitar sonreír, cuando su piel cosquilleo, sus sentidos mismos lo hicieron, el no noto el destello rojo en sus ojos, pero si percibió la vitalidad de su cuerpo, la alegría y euforia controlaron sus movimiento, en su mente, una sola idea punzaba insistente, se levantó dejando atrás el suave pelaje de Naruto, y se vistió únicamente con sus pantalones.
Aquel vampiro dio rienda suelta a sus deseos por qué ya no se sentía atado a nada, ni al pasado , ni al sufrimiento, ni a lo venidero, ahora era completamente libre. trepó el árbol que se mostraba imponente frente a el, despertó con sus risas al lobo duermiente, que con cierto jugueteo se lanzó en un intento por alcanzarlo. Cuanto se amaban, y por aquel santuario, el gigantesco lobo persiguió al vampiro, que a carcajadas de auntentico gozo y alegría, se lanzaba de una rama a la otra , y solo por esa vez, nada más importaba, que importaba si el aullido del lobo, surcaba el lugar entero apenas al despuntar la mañana, ya no importaba si entre los humanos, aquel incidente pasaba de boca en boca, después de todo nadie nunca sabría , que aquel lobo en verdad éxistia tanto como el vampiro, que lo miraba desde lo alto, con amor absoluto, por qué, ellos habían superado miles de pruebas y podían plantarse ante todo.
Por ahora disfrutarían de la libertad que tenían, por ahora no se preocuparían, por ahora, solo disfrutarían, de ser uno mismo, y aquel lugar tan especial, sería su refugio.
Después de todo amar es eso, es trascender en el corazón de alguien, es dejar aquella marca que puede no recordarse a exactitud pero que aún así se sabe que existe y por lo tanto ya a tocado el ser. e irónicamente, el ampr es algo incomprensible, que mueve mundos, vidas y voluntades, quien hiba a decir, que una de las obras del irracional amor, y en uno de sus místicos caprichos, se lograba instalar en un par de corazones tan iguales y a la vez tan distintos, y al final el amor brotó y siempre lo haría entre ese lobo y ese vampiro.
Fin
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