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La casa chica por Edy10

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Cierro mis ojos ante el ardor que me produce la gasa con alcohol, Bárbara pasa la gasa arriba de mi ceja izquierda. Me mantengo acostada en su cama respirando hondo soportando el dolor en mi rodilla.

Durante todo el tiempo de curación nos mantenemos calladas, observo las gasas en la bandeja y cada vez son menos los rastros de sangre. Termina de limpiar mis heridas en la cara, manos y rodillas recostándose a mi lado,

Su mano en mi cabello relaja mi cuerpo al grado de sentir sueño, la luz del sol que entra por su ventana toma una coloración rojiza. Después de unos minutos u horas su cuerpo se mueve.

¿A dónde vas?

Voy por comida – me dice tranquila, regalándome una sonrisa al final.

Tomo su mano evitando que se levante de la cama.

Voy a la cocina…

Fue en la secundaria; había una niña, era la abanderada de la escolta y me sentía atraída a ella aunque no podía explicar en qué forma, me gustaba su cabello largo, su tez blanca y el lunar en su mejilla. Todas las niñas se morían por Choco u Oscar, era un niño alto, moreno con pelo chino, él daba las órdenes en la escolta.

Nunca entendí que le veían era muy normal, pero tenía miedo, todas las niñas incluso mis amigas decían que era rara, se rumoraban entre ellas que tal vez yo era una machorra.

No era indiferente a esa palabra, mis tías, primas y personas cercanas solían decirle a mamá que si no tenía cuidado yo podría hacerme una machorra. Yo quería ser el Power Ranger rojo, quería ser Oliver o Tom de los Súper Campeones, prefería jugar con pelotas, trompos y autos. Mi primera película de Barbie la vi hasta la secundaria - no puedo evitar sonreír – no sabía lo que significaba machorra, pero por la forma en que lo decían debía ser algo malo.

Cuando papá nos abandonó tenía siente años, así que solo éramos mamá, abue, mateo y yo. Mamá me comprobaba vestidos y el abuelo botas, mamá me mandaba a clases de piano, baile, pero abue me enseñaba carpintería, jardinería – mis lágrimas comienzan a descender – Mamá lloro en el lago de los cisnes, abue me llevo al estadio de fútbol y llore porque nuestro equipo perdió – la dos comenzamos a reír – tenía nueve años

Todo mejoro cuando llegue a la preparatoria, me di cuenta de que no era la única niña que se sentía atraída por otras, que era algo normal, no tan común, pero al final de cuentas normal. Ashley fue la encargada de enseñarme eso y en menos de dos meses estaba perdidamente enamorada de ella, nos besamos y después me dijo que tenía novia - sonrió con melancolía -  En ese momento no fue divertido

Tres meses antes de que ella termina la preparatoria termino con su novia, por un mes fuimos novias y en un mes viví lo que nunca pude con mis tres novios – noto la sorpresa en la cara de Bárbara – también tuve mi fase de negación; fueron noviazgos de un mes, una semana. Al final ella me acompaño en el funeral de mi abue y después regreso con su novia.

Papá regreso y al poco tiempo abue murió. Me sentía triste, pero también estaba feliz porque él estaba en casa, prometió jamás dejarnos de nuevo, pidió alejarnos de su vecindario, no saludarlo en público o decirle a alguien que lo conocíamos, su justificación era que se estaba divorciando. Sí, era una mentira

Un día le pregunté ¿Qué pesaba de las personas que se enamoraban de su mismo sexo? No sé si lo conozcas, él parece un hombre correcto, abierto de mente, respetuoso y carismático – centro mi mirada en la mancha blanca del techo – como cualquier político de este país.

Debiste ver mi cara de sorpresa cuando dijo que eso era una asquerosidad, una aberración de la naturaleza, porquerías, los que lo hacían eso eran unos cerdos, malvivientes, él prefería tener un hijo muerto…

A un hijo homosexual – miro por unos segundos a Bárbara – Sofía

Claro – Bárbara limpia mis lágrimas de mis mejillas – mamá les llama machorra y papá les dice cerdas asquerosas, sabía la definición de esas palabras, pero mi mente termino por relacionarlas con lesbiana; así que preferí callar por miedo. Papá es de los que educan con golpes y mamá es de la que calla.

En la preparatoria yo era lesbiana y en la casa era heterosexual. Yuli y yo nos conocimos desde el primer semestre de preparatoria, antes de mudarnos su casa estaba a tres o cinco minutos. El último verano antes de la universidad convivimos tanto que el cariño de amigas se convirtió en atracción.

Empezamos a andar un día antes de entrar a la universidad al principio lo escondíamos, pero después lo hicimos público a nuestros amigos. Ella practicaba tenis y le hacía falta una pareja, así que como buena novia termine jugando solo para hacerla feliz.

Mamá y papá se volvieron locos de la emoción, había dejado el futbol por un deporte más femenino, mamá se alegraba al verme usar falda, papá cubrió los gastos de nuestras competencias, ganamos a nivel facultad, universidades y fuimos a los nacionales. Papá decía que era su orgullo incluso el abuelo nos fue a ver.

En un torneo corto papá había sido el patrocinador y cuando recibimos el trofeo tuve que fingir no conocerlo, mamá recorto la foto del periódico, la enarco y colgó en la sala. ¡Odio con el corazón esa foto! No hay mejor recordatorio que somos la casa chica que ese. Incluso papá pidió que usaran el apellido de mamá en la nota, para evitar cualquier relación con él.

No me quejaba o decía algo, pensé que éramos una familia especial y algún día las cosas iban a cambiar.

Un día invité a Yuli a ver una película en mi casa, sabía que íbamos a estar solas, luego de un rato la película paso a segundo plano, estábamos…

 

Podríamos saltar esa escena, por favor –

Lo siento

No está bien, solo que no quiero imaginarte con...

Entiendo. El punto que cuando estábamos… Víctor entró a la sala, le pedí, le rogué que no le dijera a mi papá, incluso le ofrecí dinero y él dijo que aceptaba. Quede más tranquila y pude dormir esa noche, hasta que sentí como me tomaban por el cuello de mi pijama y me arrojaban contra mi escritorio…- Bárbara toma mi mano dándome fuerza

Papá me golpeo en la cara, me pateo mientras gritaba que era una cerda, asquerosa, una puta, ¿Cómo me atrevía a hacerle eso?, dijo que con madrazos iba a entender, me golpeo con su mano, cinturón, patadas, libros, todo con lo que se le atravesaba. Antes de desmayarme miré a la puerta y mamá estaba ahí llorando sin decir nada, solo detenía a mi hermano que gritaba que me dejara – mis lágrimas vuelven a aparecer.

Desperté en el hospital con dolor en todo el cuerpo: tenía cuatro costillas rotas, un esguince en rodilla y tobillo, mi ojo izquierdo estaba cerrado, me dolía hasta respirar. Lo primero que escuche fue a mamá explicándome que había unos policías a fuera y que tenía que declarar que unos hombres me habían golpeado.

Rasco mi cabella ya sin poder contener mis lágrimas, Bar me abraza intentado que me tranquilice.

Amor, está bien si quieres parar – su voz entrecortada me dice que también está llorando.

Después de un rato mis sollozos se hacen más lentos, dejándome respirar el perfume de Bar, cuando ya estoy más tranquila deshago el abrazo y Bárbara pasa un pañuelo por mis mejillas.

¿Estás bien? – Me pregunta limpiando con cuidado mi pómulo - ¿Quieres comer?

Quiero que sepas el final de la historia ¿está bien? – Bárbara asiente con la cabeza – declare que me habían intentado asaltar después de que mamá me lo pidió. Estuve una semana en el hospital cuando regrese a casa volví a ver a papá, me pregunto si ya se me había quitado lo lesbiana asquerosa, sentí tanto miedo, pero negué

Él se paró y me empujo contra la puerta, dijo que o se me quitaba lo lesbiana o iba a hacer de mi vida y la de Yuli un infierno. Todo el tiempo que estuve en el hospital no me pude comunicar con ella, habíamos sido descalificadas del torneo y su sueño de estudiar en el extranjero había terminado.

Mamá habló conmigo para decirme que no valía la pena, papá había dicho que no pero yo podía andar con niñas a escondidas, ella iba a intentar hablar con él sin embargo debía poner de mi parte, como quiera podía ser una etapa o algo así … Nunca supo que la niña era Yuli o al menos nunca lo dijo

Cuando volví a la escuela la mayoría de las heridas habían sanado, se rumoró que me había ido de vacaciones. Yuli me pidió que habláramos y cuando la vi para frente a mí, preocupada, enojada y triste me di cuenta de que no valía la pena arrastrarla a mi vida de mierda.

Me grito pidiendo una explicación, solo dije que era mejor terminar, me golpeo y se fue. Me quede sin novia, amigos – sonrió recordando lo siguiente – Fernanda apareció de la nada para hacerme compañía, se quedaba a mi lado sin hablar, me seguía a todos lados, comíamos juntas, regresábamos a casa.

Pensaba que si estaba sola no iba a lastimar a nadie, pero ella no se iba, poco a poco fuimos hablando, nos conocimos, volví a reír y cuando ella necesitó de mi ayuda me di cuenta de que me importaba, la había aprendido a querer en mi soledad, en el silencio. No quería estar sola y ella se dio cuenta de eso – pensé que se me habían terminado mis lágrimas.

Fernanda suele decir que le conté mi historia solo porque la de ella es peor, no le digas esto; su mamá me agradeció dijo que desde que llegue a la vida de Fernanda yo había aliviado su carga porque ahora tenía una confidente, una amiga, una hermana con quien contar. – me relajo controlando mis lágrimas.

Había encontrado a mi alma gemela, el destino nos había unido para que ninguna estuviera sola, le conté mi historia porque se ganó mi confianza, mi cariño, respeto y apoyo sin pedirlo

No puedo imaginar mi vida sin ella, quiero que esa loca se quede a mi lado, quiero que ella cumpla sus sueños, quiero ser la madrina y que ella sea la madrina de mis hijos – Ojos de gatito ríe

Podría decir que es lo mismo contigo, pero es diferente, confié en ti desde el principio, perdón si te hago sentir que hay una barrera entre nosotras – la miro a los ojos - claro que confió en ti, odio llorar y recordar todo mi pasado, me duele.

Quiero llevarte a casa para que conozcas a mi familia, pero no puedo, el amor de mi madre a papá es más grande que el que me tiene. Hay dos razones por las que no acepte el intercambio; cada vez que juego un partido recuerdo la golpiza y tengo que tomar pastillas para la ansiedad, no puedo respirar, no puedo dormir e imagino que papá va a venir por mí.

Tuve que mentir respeto a las fechas del torneo para que papá no me viera con Yuli. La segunda es que siempre soñé en graduarme en la universidad donde mamá no pudo por falta de dinero, ella prefirió ayudar a su familia que sus sueños.

No quiero irme a hacer algo que no me gusta, quiero quedarme, ejercer mi carrera, estar con mi hermano, amigas y ahora que tú estás en mi vida es obvio que no te quiero dejar.

Perdón si te presione tanto, es solo que…

No sabías. Ojos de gatito te quiero, te amo – besos sus labios – nunca dudes que confió en ti. Yo sé que desde que te enteraste de Dogi has cuidado de él, si un día termínanos sé que me lo regresarías y si algo me pasa no hay mejor lugar para él que a tu lado.

No digas eso – Bárbara esconde su rostro en mi cuello – no quiero que te pase nada.

Nada va a pasarme, es tan solo que donde todos vieron un perro fuiste la única que se dio cuenta de lo que realmente significaba para mí. Busque trabajo para depender lo menos posible de mis padres, pero los turnos de medio tiempo no son lo mejor pagado – me recuesto de lado acurrucándome en Bárbara

Te amo Alex – su mano acariciar mi mejilla para depositar un cálido beso en mis labios

Por ahora solo te puedo ofrecer un perro que rompe tus almohadas y a mí. Te diría que te ofrezco a mi grupo de locas amigas, pero me da miedo que te juntes con ellas.

No, tú lo dijiste, la madrina de nuestro pequeño Tom también está incluida en el paquete.

No puedo creer que aceptaras que se llamara Tom, además yo quiero una niña con tus ojos. – ahora estoy segura de que si algo sale mal entre Bárbara y yo no somos las únicas que van a sufrir.

Podemos tener dos o tres, uno para cada madrina – comenta Bárbara y  sonrió recordando el debate de ¿Quién tiene más derecho a ser madrina de nuestros bebés?

 

Todos reímos ante la cara de indignación de Rox, tomo la mano de Bárbara por debajo de la mesa y ella me da un besito en mi mejilla. Su mamá nos obligó a bajar a cenar, por mí no hubo problema, pero Bárbara quería comer en su cuarto.

Debimos compra pan antes de venir – le digo a Bárbara bebiendo mi té

Sí, en lugar de comprar gasas debieron comprar pan dulce – Rox me apunta con su cuchara – nunca piensas

Lo dice la que compro pastel solo para ella - contraatacó recibiendo el apoyo de todos – solo piensas en ti.

Nos enfrascamos en una guerra de miradas y gestos.

Papá ¿Alex se puede quedar a dormir? – Bárbara aprieta mi pierna a la par que el señor corbata escupe un poco de café – ¡papá!

Le entrego una servilleta para que se limpie su brazo, su papá me mira entrecerrando los ojos ¿Qué le pasa? Yo no dije nada.

Estoy segura de que es idea de tu hija, no de ella –

Es mi idea, prometo que no vamos a hacer nada – el señor corbata pone sus puños en la mesa viéndome fijamente – podemos dormir en la sala o con la puerta abierta no importa, solo…

No quieres que se vaya – su mamá a completa su oración

Sí, estamos de vacaciones y Alex trabaja hasta la tarde ¿podemos?

Sí pero ve por pan, no puedo tomar café a gusto – Bárbara asiente feliz y yo me deslizo por la silla intentando apartar la mirada de señor corbata.

No, no puedes – el señor corbata recibe las famosas miradas “explica”.- bueno, pensé que podíamos tener una noche de padre e hija, ya sabes como antes

Bárbara me voltea a ver con el ceño fruncido buscando una explicación. A mí que me dice, hace un mes que me designaron un lugar en la mesa es más que obvio que no se nada.

Me alegro, llévala por el pan para que tengan una noche de padre e hija – Mamita suegra le pasa una bolsa.

Yo quiero ir – Mia se levanta de su asiento.

Mira si tu otra hija va ya podrías tener una increíble noche – el señor corbata recibe una sonrisa burlona de su esposa - ¿Vas Rox?

No que flojera – se da cuenta de la expresión de su papá – tengo frío papi, otro día con más calma podemos tener un día de padre e hija, y hacer lo que sea que haces con Bárbara

El señor corbata sale con la lista de los panes y sus hijas detrás de él. En cuanto la cochera se cierra la mamá de Bárbara comienza a examinar mi rostro, apretando un poco mis heridas.

Fabián nunca me agrado, es un maldito ¿Cómo se atreve a golpearte? – Rox desliza la pomada por la mesa

Pensé que no te agradaba – hago una mueca sintiendo una punzada en mi pómulo

No me agradas, pero no puede golpear a una mujer ¡está loco!, además soy tu cuñada es mi derecho divino molestarte – sonrió divertida ante su comentario.

Es verdad Rox se la pasa molestándome, pero es una buena cuñada en más de una ocasión nos ha salvado de que nos encuentres haciendo cositas, aunque también nos sigue sobornando con las fotos que nos tomó en la sala.

Alex ¿Qué dice tu mamá de los golpes? – Comienzo a sentir fresco en mi pómulo – ¿Qué opina que te despidieran por culpa de Fabián?

No le he dicho señora y la mayoría de los golpes que he recibido son en mi pancita y piernas. No sabe nada, últimamente ha estado más alegre de lo normal y no pensé que valiera la pena decirle

Tengo una pequeña esperanza de que sea porque papá pasa más tiempo en casa, no quiero ni imaginar que ella está al tanto de los planes de mi padre y el abuelo.

No estoy de acuerdo como estas manejando la situación, es más, no estoy de acuerdo que él venga al cumpleaños de Bárbara – termina de aplicar la pomada y me mira fijamente – Alex estoy preocupada. Rox me contó todo tu plan y es muy lindo de tu parte que hagas esto por Bárbara, pero es tiempo que ella deje ir a Fabián.

No, le prometí al señor corbata que nunca la iba a hacer elegir –

Cariño, el señor corbata es tonto, él piensa que en verdad te asaltaron, cree que ustedes le dan chocolates a Rox porque la quieren - me sorprendo ante lo último – cariño sé lo que ustedes hacen y me sorprende su habilidad para hacerlo con la puerta abierta – el color sube por mi rostro – conozco a cada una de mis hijas y ahora también estoy aprendiendo de ti. Esa sonrisita las traiciona a las dos.

Solo han sido besos – Rox suelta una risa – bueno también unos toqueteos, pero no le hemos faltado el respeto a su casa.

Pues ve a toquetear la cafetera para ver si ya está – detecto su tono de burla recuperando el oxígeno, antes de levantarme ella revuelve mi cabello

Al entrar a la cocina confirmo mis sospechas, mamá sabe o por lo menos sospecha que algo está pasado pero no ha dicho nada. Probablemente ella esté enterada de los movimientos de papá.

Le envió un mensaje diciéndole que me voy a quedar con Fernanda. Ahora que lo pienso he pasado mucho tiempo con Bárbara y mis amigas, no he prestado atención a lo que pasa en mi casa

¿Qué debo hacer? Las cosas se me están saliendo de las manos, intento solucionar algo y me surgen nuevos problemas. Mi estrés disminuye al detectar el aroma inconfundible de Bárbara, recibo su abrazo por atrás.

¡Te adoro! – Bárbara deja un beso en mi cuello y comienza a meter sus manos debajo de mi blusa.

No, ya no podemos hacer eso – saco sus manos quedando de frente a ella – tu mamá sabe qué hacemos cositas.

Lo sé, yo se lo dije, no me gusta ir al ginecólogo sola.

¡¿Qué?!

Una vez me dio infección por culpa del tampón y me llevo al ginecólogo, obvio ya sebes lo de: eres sexualmente activa, la semana pasada tuve consulta.

¡¿Qué le contaste?! – le digo estresada.

Nada, porque no ha pasado nada, bueno le dije que Rox nos sobornaba con unas fotos y que te acalambrabas mucho, por eso te mando las vitaminas.

¡¿Qué?! ¿Cómo te atreves a contar eso?

Hay por favor, no me digas que lastime tu ego. Mamá dice que es normal; entrenas mucho y no tomas la suficiente agua. Aprovechando ¿Cuándo fue la última vez que fuiste al ginecólogo?

¡¿Cuándo fue la última vez que tú fuiste?! – a Bárbara le divierte mi actitud a la defensiva

Ya te dije, pero contestando a lo que realmente quieres saber, tres semanas antes de conocerte y ¿tú? – hago memoria retornando a… ¡No puede ser!

No quiero hablar de eso – me volteo tomando la leche para el café. Bárbara me mira fijamente analizando cada una de mis acciones.

No lo has hecho desde que terminaste con Yuli ¡Oh por Dios!

¡Cállate! – intento tapar su boca, pero ella me detiene.

Con razón manejas muy bien lo de la abstinencia, yo te veo y te quiero hacer el amor – me pongo roja ante su declaración - regálame tu virginidad en mi cumpleaños

Bárbara estalla en risas y yo salgo de la cocina indignada, como se atreve aunque si podía ser virgen… Ahora que lo pienso desde que me estoy tomando las vitaminas no me acalambro tanto y tengo más energía, ya sabía que eso de marearte al levantarte no es normal

¿Te has masturbado pensando en mí? – me sobresalto al escuchar el susurro de Bárbara en mi oreja.

¡Claro que no! – le grito con mi indignación al tope hasta que noto las miradas de todos – perdón, es que ella me molesta

Tomamos café y platicando de cosas generales; la escuela, trabajo, Bárbara menciona lo de la beca y el tema favorito de todos ¿Por qué el nuevo novio de Rox es mejor que el anterior?, pasamos la noche sin contratiempos hasta llegar al tema del cumpleaños de Bárbara.

Una buena temática – medito por unos segundos mi respuesta – has tu fiesta de las leyes de tránsito – recibo un golpe de Bárbara.

Luego no quieres que te moleste. – intenta picar mi costilla

Hablando de eso llegaron sus multas, Rox tienes cuatro por exceso de velocidad y Bárbara tienes una por saltarte un semáforo.

¡Gracias Alex!. Papá es que fue por una emergencia – Rox le aprieta la mano de su papá haciendo un puchero de culpa.

¿Cuatro veces?

Papi prometo que no va a volver a pasar, yo estoy cambiando solo fue una, no como otras – Bárbara le saca la lengua a Rox

La sala, Alex, tú. – me preocupo dándole unos toques en la pierna de Bárbara para que haga algo.

Que por otro lado cuatro o una son lo mismo, pero prometemos que no va a volver a pasar no nos quites el auto.

Pensé que no te gustaba manejar por el tráfico – Bárbara siempre se agobia cuando con el tráfico, de hecho sus multas bajaron porque soy yo la que conduce en nuestras citas mientras ella toma una siesta.

¡Alex! – Nos miramos fijamente ­– el auto, tú, yo

Pienso que este tema no es de mi incumbencia al sentir la mirada de su mamá. Creo que es mejor solo beber mi té

Bueno está bien, pero tengan cuidado al manejar lo de menos es pagar una multa, me preocupa que algo les pueda pasar recuerden siempre atentas, es mejor salir temprano o llegar tarde a no llegar.

Bueno aclarado eso y volviendo al tema de tu fiesta, cariño – la mamá de Bar llama su atención – lo mejor sería que no invitaras a Fabián a la fiesta

¿Por qué mamá? – noto la tensión de Bárbara al ver su puño apretado debajo de la mesa.

Te has puesto a pensar que pasara al tener a Alex y Fabián juntos y súmale el alcohol.

No porque Alex esté golpeada significa que es mala…

No lo digo por ella, es Fabián el que no me da confianza.

Sé que en ocasiones Fabián se altera – noto como Rox rueda sus ojos – pero es mi amigo, no se atrevería a hacer algo en mi cumpleaños y menos a mi novia. Además no puedo invitar a Sofía y a él no

Su mamá se queda callada dejándonos analizar lo último que acaba de decir Bárbara

¿Estás sugiriendo que no invite a ninguno? Ellos son mis amigos y hablé de esto con Alex y me aseguro que no había ningún problema de que ellos estén.

Claro, porque ella te complace en todo, solo quiero que pienses un minuto si es una buena idea. En nuestra opinión – dibuja con su dedo un medio circulo indicando quienes están de acuerdo dejándonos a Bárbara, Mia y a mí fuera de el – es mejor que no los invites.

¡Entonces no quiero nada! - Bárbara se levanta de la mesa con dirección a la parte superior de la casa.

Voy a verla – antes de poder salir su mamá llama mi atención.

No la complazcas en todo, ella debe de entender que la vida no es tener, tener y salirse con la suya todo el tiempo. También deberías decirle la verdad.

Salgo de la cocina subiendo a la habitación de Bárbara. La encuentro acostado abrazando los peluches de gatito. Dogi por su parte se levanta de la cama moviéndome la colita para que lo cargue.

Hola – dejo a Dogi en la cama y me acomodo para abrazar a Bárbara por atrás – no deberías tomarte tan apecho sus sugerencias, solo fue un comentario, es tu cumpleaños y puedes invitar a quien quieras.

Bárbara se gira acomodándose en mi pecho. Pensar que hace unas horas la situación era al revés

A mamá nunca le gusto que yo me juntara con ellos, en el fondo siento que encontró el pretexto perfecto para alejarme de ellos. ¿O te molesta que los invitara? – me mira a los ojos esperando mi respuesta, podría decir la verdad o cumplir su deseo de cumpleaños.

No, tú los conoces mejor que yo y si dices que todo estará bien yo te creo, también pienso que ellos te quieren y no harían nada para arruinar tu cumpleaños – dejo un beso en su frente. No voy a separarla de sus amigos, no quiero ser egoísta, ella merece estar con las personas que ama

Verdad que sí – asiento con la cabeza – desde que les dije que somos novias no han hecho o dicho nada, tal vez no me hablo con Fabián, pero tampoco son malos – no solo son terribles… Bueno, Sofía se ha comportado.

Claro - acaricio su mejilla con mis dedos, sonrió al ver el tono carmesí debajo de sus ojos - Sabías que eres hermosa,  me gusta estar a tu lado. Todas las noches cuando nos despedimos regreso a casa pensando en ti, en verte de nuevo, pienso que sería lindo despertar a tu lado. Todavía no puedo creer que esté pasando.

Te amo – sonrió acortando la distancia besando sus labios, me concentro en el movimiento olvidando todo.

Su mano eriza la piel de mi brazo, paso mi mano por su cintura rozando su espalda, no tengo ninguna otra intención más que trasmitirle mi cariño.

Salgo del baño con el pijama puesto, escucho una vez más la reglas del señor corbata, sonrió recordando la sensación de los labios de Bárbara, su olor dulce que ahora me acompaña por la ropa, el sonido de su voz cuando me dice te amo o cuando dice no puedes prender la cámara papá…

Espera ¿Qué?, Regreso de mi ensañamiento para ver como el señor corbata apunta a la pared y una luz roja aparece.

Mamá dile algo, esto es violar mi privacidad y me queda claro que no confías en mí.

Cariño escucha… - el señor corbata intenta explicarle a Bárbara sus motivos.

¿Por qué hay una cámara? – le pregunto discretamente a su mamá

Este es el cuarto de Bárbara desde que fue bebé, instalamos las cámaras para verla cuando era pequeña y escalaba por su cuna. Nunca preste atención en quitar la cámara, ahora sé porque él no la quito. Duerme tranquila tiene el sueño pesado – asiento con la cabeza ­– debiste verlo con Rox, como es su favorita era más celoso.

Claro que no, a todas las quiero por igual – el señor corbata le da una sonrisa a Bárbara, ella lo ignora y se acuesta en su cama – bebé

Su esposa lo detiene y me da un empujón para que vaya con Bárbara, ellos salen de la habitación dejando la puerta abierta. Dejo mi celular en el buró metiéndome entre las cobijas sin estirar mis pies por Dogi.

Tú eres mi consentida – abrazo a Bar por atrás dejando un beso en su cabello

No es gracioso, él no confía en mí, no puedo creer que prendiera la cámara y a Rox la deje hacer lo que quiera.

Eres su bebé y tu hermana lo traumo, no seas tan dura con él, sabes que ellos te aman mucho – tomo su mano.

No íbamos a hacer nada, me da coraje que piense que vamos a hacer algo cuando se lo prometí.

¿Qué puedo hacer para que no estés enojada? – medito la situación esperando su respuesta.

-

-

-

Una vez soñé contigo – Bar se gira tan rápido logrando que Dogi y yo nos sobresaltemos.

¿Fueron cositas sucias? - y luego se enoja que prendan la cámara

Claro que no, eres una pequeña pervertida

¿Entonces que soñaste?

No me acuerdo – recibo un puchero. Estoy segura que debo estar roja.

Ahora dime, no puedes decir que sueñas conmigo y luego decir que no te acuerdas. ¡Por favor! ¡Dime! Prometo que no se lo voy a decir a nadie – me muestra su dedo meñique, suspiro uniendo mi dedo meñique

Soñé que teníamos un bebé

¡Ahh! – le tapó la boca antes de que sus papás la escuchen ¿la cámara tiene micrófono? – si era un sueño sucio.

¿Qué tiene de pervertido tener un bebé?

Amor como crees que lo hicimos ¿por osmosis? – está claro que su enojo y tristeza son historia.

Yo creo que por inseminación ¿No? – Bárbara aprieta mis mejillas

Piensas que tuvimos un bebé si hacer cositas – la luz que entra por la puerta me permite ver su rostro alegre y pervertido. Su guiño del final me enamora

Está bien, era un sueño pervertido –

Bárbara sonríe complacida abrazándome por la cintura dejándola mitad de su cuerpo encima de mí, veo como se mece feliz. Dogi un poco harto de que no lo deje dormir se cambió a mi lado de la cama a la altura de mi cintura.

Regreso mi vista a Bárbara y noto su mirada en mí, nos quedamos calladas por unos segundos hasta que aparece esa sonrisita traviesa, la conozco tan bien, siempre que quiere hacer cositas la pone.

Quiero que seas mi primera vez –

¡Aquí la virgen soy yo! Necesitas más de seis meses para que se te regenere tu tapita – reímos ante mi pésimo chiste

Nunca he estado con una mujer y quiero que tú seas mi primera vez.

Me quedo impresionada ante su confesión, se supone que ella es la de la experiencia, ella es la que puede desabrochar los pantalones y sostén con una mano.

Por eso lo de las vitaminas, debo hacer una cita con mi ginecóloga – nos besamos cubriéndonos con la cobija hasta la cabeza – podemos planearlo, está claro que no podemos hacerlo aquí con Dogi y una cámara.

¿Y si lo hacemos en mi cumpleaños? – comienzo a reír ante sus ocurrencias.

Sí, hay que hacerlo en el inflable que van a contratar para Mia – Bárbara golpe mi brazo riendo

Boba, mi fiesta es este sábado, pero mi cumpleaños es el miércoles.

Podríamos buscar lugares, incluso solicitar un paquete – noto su mirada de confusión - ¿Nunca lo has hecho en un hotel – motel? – Al obtener su negativo continuo – rentas una habitación y pides que te adornen con pétalos, velas. Hay lugares que incluso tiene temáticas en su habitación, Fernanda me dijo que hay uno con tobogán y piscina.

Rentemos uno sadomasoquista –

¡¿Qué?! Yo pensando en algo romántico, cursi y tú queriendo hacer algo súper pervertido, al rato vas a querer usar juguetes.

¿Tú has usado juguetes? – Asiento con la cabeza - ¿Cuáles? ¿Qué siente? ¿Podemos usarlos? – Comienzo a reír besando sus mejillas, frente, labios - ¡Dime!

Los normales – siento mi cara caliente – el arnés, vibrador y uno anal

¿Esposas has usado?

¡¿Qué?! – Noto sus mejillas rojas, ella también tiene pena, pero aún mejor confía en mí para hacerme todas sus preguntas - ¿Quieres que las usemos?

Bárbara esconde su cara en mi pecho logrando que apenas escuchando su sí. Me hace muy feliz poder conversar de todo con ella, el hablar de mi familia, amigos, sueños y deseos. Sin duda la confianza que tienes con tu novia es la más mágica de la vida

Podríamos ir a una sex shop para comprar las cosas que quieras experimentar – Bar se levanta sonriendo.

No esperas que yo sea la pasiva ¿verdad?, Ya hablamos que nuestra relación se trata de dar y recibir – cuando tuvimos esa platica era referente a dividir la cuenta, algo me decía que tenía un doble sentido, no debí dudar de mis instintos - ¡Alex! ¡Por favor!

Por favor déjame usar un juguete en ti – imito el tono de su voz – así sonó en mi cabeza – no me molesta eso de dar y recibir, más si se trata de ella ¿Quién no va a querer recibir algo de ella?

Con sus ojitos amielados, su carita finita junto a sus labios rojos y ni hablar de su cuerpo (el tenis también rindió frutos en ella) Amo su cabello castaño y me encanta que se lo dejara crecer. ¿Por mí que me dé hasta para llevar?... bueno todo menos

Sí, pero nada anal

¡Así que chiste! – Comenzamos a reír ante sus ocurrencias, algo me decía que había trampa en esta bonita aventura – podemos ver que hay, no hay que descartar tan rápido

Vemos, vemos – cierro mis ojos fingiendo dormir hasta que recibo un ataque de cosquillas provocando que Dogi se levante indignado.

 

Regreso a casa dando brinquitos de felicidad, fue increíble platicar con Bárbara por la noche, dormir juntas, abrazadas y despertar con ella a mi lado es una de las mejores sensaciones de la vida.

Si no fuera por los moretones y la golpiza, ayer hubiera sido el día más perfecto de mi vida. Reviso mi celular al momento que abro la puerta, noto las fotos de diferentes juguetes ¡AMO A ESA PERVERTIDA!

Hasta que por fin llegas, báñate tu abuelo va a venir – recibo la orden de papá como bienvenida – date prisa… ¿Qué eres? ¿Una vagabunda? – examina mi cara

Quito su mano pasando a su lado, subiendo a mi habitación que está invadida por mamá y…

Ni lo pienses – pongo mis cosas encima de los vestidos.

¡Alex! ¿Qué te paso? ¿Cómo se te ocurre justo hoy que viene tu abue? – Observa las marcas de mi rostro - ¿Qué va a decir?

Él no es mi abue y si quieres le podemos decir ¿Qué opina que su nieto me golpeara?

No, cariño hoy no, no queremos arruinar este magnífico día, báñate y pruébate alguno –

Entro al baño enojada, pero más decepcionada en cuanto el agua haga contacto el olor de Bárbara va a desaparecer de mi cuerpo. Al terminar me pongo mi ropa normal, como sea tengo que ir a trabajar y no voy a jugar a sus estupideces.

Para mi sorpresa entra mi hermano con un traje intentando amarrar su moño

Hola, joven empresario – acomodado su moño

¿Por qué tú no usas ropa de fiesta?

Esta es ropa de fiesta, esa es ropa de godinez - despeino un poco el cabello hasta que mamá entra a mi habitación.

Vamos niños ya llego su abue, Alex ¿es en serio?

Tengo que ir a trabajar y antes de que me digas algo, si te molesta puedo salir por la ventana si tanto te avergüenzo –

¿Qué hacen? Mi padre está abajo esperando… No importa, te lo voy a pasar solo porque es un día muy importante, escuchaste Alexandra, solo por eso.

Bajamos a la sala, antes de entrar un sujeto sale con una charola ¿Un mesero? Mamá me jala de la mano. En la sala están el abuelo y…

Miren papá, mamá aquí están sus nietos – la señora nos examina en especial a mí – Alex tuvo un accidente – papá aprieta mi hombro provocándome dolor.

Sí, eso explica su vestimenta, es claro que no tiene educación en etiqueta – me extiende su mano – y de modales, cuando alguien mayor te extiende la mano debes de besarla

¡No voy a hacer eso! – Papá hace aún más presión en mi hombro – dislócalo si quieres

Por lo menos conseguiste un verdadero Hotman, esta no es una miedosa inútil – el abuelo se levanta del sillón y me toma por el mentón, papá quita su mano de mi hombro – debe estar desesperado para atacarte de frente, de todos Fabián siempre fue el más estúpido

¿Vamos a comer?, o la falta de educación es por parte de todos – quito la mano del abuelo; a tiempo que mamá atiende las palabras de la abuela y se dirige a la cocina – eso pasa cuando naciste para servir y no a ordenar

Papá mira seriamente a mamá sonando una campana, el abuelo se sienta en la cabeza de la mesa, a la izquierda lo hace su esposa, a la derecha lo hace papá, seguido de mamá

No, tú siéntate en la cabeza – la abuela me señala la otra silla, ¡ese no es mi lugar! – Ahí es tu lugar – me dice más desesperada, cuando muevo la silla de mi lugar mamá me pellizca la pierna, jalando la silla de nuevo.

¡Como sea! – me siento quedando de frente con el abuelo y mi hermano queda a mi lado izquierdo.

Tranquila, ellos nos están acostumbrados a esto, ya tendrás tiempo para educarlos – el abuelo toma su mano.

Domesticarlos diría yo, nunca supiste elegir tus mujeres – la abuela reprende a papá recibiendo su plato de comida.

Ese y un sinfín de comentarios ambientan la comida, mi hermano me hace una cara de asco por la comida, lo entiendo esto sabe raro, hasta los tacos de cinco por veinte saben mejor que esto.

Coloco una servilleta debajo de la mesa y él pone su comida ¡mi pantalón va a apestar horrible!, meto mi la servilleta a mi pantalón. El abuelo indica que ha terminado y el mesero, mozo ¿Quién es él?... El punto es que se lleva los platos sin importar que los demás terminaron o no

¿Lo saben? – el abuelo mira a papá

No, queríamos que estuvieran todos presentes para celebrar juntos.

Celebrar el divorcio y que una mujer tan ordinaria se convierta en la señora de la casa ¿No te da vergüenza?– la abuela ataca a papá, me queda claro que ella no aprueba esta situación.  

Madre, por favor.

Ella tiene razón, lo único bueno es que al fin vas a llegar al poder y que la verdadera primogénita se va a hacer cargo de todo – el abuelo me sonríe.

No es genial, niños su papá se divorció para estar con su mamá – Teo me mira confundido

¿Por qué papá se divorció si él está casado con mamá? – Todos volteamos a ver a Teo – ¿Alex?

Todos los varones te salen estúpidos – como se atreve este señor a decir eso de mi hermano.

Alex, siéntate – papá me amenaza al ver mi intensión – padre te aseguro que Teo es muy inteligente, superior al otro por mucho

Lo dudo mucho, espero que tu falta de presencia no provocara otra desgracia, otra aberración – ¿Se refiere a Sofía?, sin duda la abuela quiere o por lo menos le agrandan Fabián y Sofía

Te aseguro que la actitud de Alex es intachable. Ellos son los correctos, inteligentes, educados, atentos y sin ninguna enfermedad – el abuelo sonríe satisfecho.

La homosexualidad no es una enfermedad –

¡Alexandra! – la voz de papá logra cortarme la respiración, el recuerdo de aquella noche aparece en mi mente, intento colmarme apretando mi pierna

Está bien, esa clase de comentarios les gusta a los votantes, una agenda tan actual – el abuelo me mira atentamente – me recuerdas tanto a mi madre, sin duda va a ser un placer verte manejar las empresas familiares.

Yo estudio Relaciones internacionales, no ingeniera o administración – mamá sonríe – no me interesa sus negocios, tengo mis propios sueños.

¿Ser mesera? ¿Ese es tu sueño? Eres una Hotman, deja esas cosas para tu madre –busco el apoyo de mamá, pero ella agacha la cabeza dándole satisfacción a la abuela.

No importa, vas a ser la jefa no una empleada, con preparación te aseguro que vas a poder manejar todo sin ningún problema. Fabián estudia y es un inútil – los abuelos comienzan a reír junto con papá. Lo que colma mi paciencia es ver a mamá reír.

¿Es en serio mamá? ¿No te das cuenta de lo que está pasando? Ellos están aquí hablando pestes de la otra familia de papá, no crees que es junto lo que hacían con nosotros – niego con la cabeza ­– por culpa de Fabián perdí mi empleo en el bar y tengo moretones en todo el cuerpo, pero al verte reír de él hace que entendía su coraje

Ellos han llamado a su madre asquerosa, inútil, estúpida y dicen que no vale como mujer ¿Cómo piensas que te dicen a ti? Es más que obvio porque ella – señalo a la abuela - te ha estado humillando al decirte corriente, ordinaria.

¿Cómo puedes disfrutar que tratante a si a una mujer? Su único crimen fue decir no a ser tratada como objeto, moneda de cambio. Sí, ya sé toda tu historia – miro a papá que está furioso -  sabía que eras malo, cruel y golpeador, pero nunca pensé que prostituyeras a tu esposa por un puesto político

No sabes cuánto soñé que volvieras a casa, deseaba que fuéramos una familia, estar los cuatro juntos. No me importaba lo que decía la gente o lo que paso en la carrera de caballo, yo quería que volvieras, ¡Eras mi superhéroe! – Papá se intenta parar, pero el abuelo lo detiene entretenido – desde que volviste eres el villano de nuestras vidas

¡Reacciona mamá! Ellos – señalo al abuelo y papá – están sedientos de poder, son capaces de ofrecer a sus esposas a cambio de él. Papá le pido a su esposa que se acotara con un fundador de su partido para obtener el apoyo, como ella se negó papá perdió la contienda.

Mamá me mira asiéndome una seña de que me tranquilice ¡Ella lo sabía! ¡Lo sabía!
El abuelo sonríe negando con la cabeza

Bebé siéntate, eso tiene una explicación ¿verdad cariño? – mamá observa a papá en busca de apoyo.

Tu madre tiene razón Alexandra, ¡Siéntate! – Lo último suena más a una orden y el abuelo señala la silla – odio que se comporten como unos malcriados. Esto es tu culpa, te dije que los mantuvieras alejados como se te ocurre juntar a tus hijos. Te imaginas es escándalo que se puede hacer

¡Lo ves! solo les importa su reputación. Mamá reacciona aún podemos estar felices los tres…

¡DIJE QUE TE SENTARAS Y TE CALLARAS! – el abuelo se pone de pie

Cariño, por favor no digas tonterías y siéntate – mamá intenta tranquilizar la situación.

No puedo, yo no puedo sentarme a la mesa fingiendo que somos la familia perfecta, feliz e ideal ¿Qué clase de persona quieres se sea para complacerlo? No puedo y no quiero

Salgo de la casa tomando mis cosas para ir a trabajar. Fabián tenía razón, los dos sabemos la respuesta a su pregunta; su madre prefirió destruir la carrera de papá, pero la mía esta tan segada que es capaz de…

Limpio mis lágrimas subiendo al autobús, debo controlarme ¿Qué se supone que haga? ¿Ahora que él vive en casa todo va a empeorar? ¿Qué va a pasar con mamá? ¿Qué va a pasar con Ojos de gatito?

 

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Notas finales:

Hola.

Perdón por tardar, quería hacer un especial ya que es 10 de abril, pero tengo exámenes y no me da tiempo de hacer las dos actividades.

A partir del lunes espero volver a las actualizaciones constantes.

Gracias por apoyar la historia, espero que disfrutaran el capítulo.

 

 


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