Pov Jin
Cuando los dos pequeños del grupo se fueron, uno indignado y el otro ... Dios, soy un auténtico gilipollas, jamás podré personarme la expresión que le hice hacer a Kook. Me habí pasado muchísimo, la verdad era que, desde hace n tiempo, me sentía bastante inquieto por la amistad que el blancucho y mi mejor amigo tenian, estaban la mayor parte del tiempo juntos y me dejaba acercarme a mi peqeño.
-Tio ¿que coño hiciste ahora? -Preguntó Jimin sentándose a lado mia- Como Yoongi no me hable pienso cobrármelas.
-Soy un gilipollas -Hablé escondiendo la cabeza entre mis rodillas.
-Eso ya lo sabía amigo -Reí y golpeé su hombro- Tu Yoongi ha estado más cariño de lo debido con mi galleta, ¡ni si quiera me hace tanto caso como antes! El caso fue que, ellos comenzaron a jugar y a dejarme en segundo plano y yo ...yo les dije que me daban asco.
-De verdad que a veces no piensas ¿no? -Suspiró mirando a la nada- ¿Sabes lo dolido que debe estar en estos momento? -Asentí sientiendo una punzada en mi pecho- ¿También sabes que va a distanciarse de ti, no? -Mordí mi labio intentando no soltar ninguna lágrima- Vete a buscarlo, yo me encargo de Yoongi.
Levanté mi cabeza dedicándole na enorme sonrisa.
Cuando llegamos a la habitación del hotel nos encontramos de cara con Yoongi.
-Oh, Jiminnie y el estúpido -Habló sonriendo amenazadoramente- Toma -Dijo entregándome un trozo de papel- Se me había olvidado que una amiga quiere conocerte. Es muy linda, seguro que os llevaís muy bien.
Me quedé mirando para el papel con curiosdad ¿que clase de chica sería?
-Por cierto -Gitó antes de girar la esquina- Kook está en mi habitación, por si te interesa.
-Ve con él, yo me voy con Min, a ver si le sacó información sobr la chica misteriosa -Sonreí y palmeé su hombro antes de que desapareciera de mi campo de visión.
Paré en seco cuando llegué a la puerta ¿y si me echaba sin escucharme? Cogí aire, me preparé mentalmente y toqué.
-¿Si? -Respondió con la voz rota- ¿Si? -Volvió a repetir ante mi silencio.
-¿Ko-kook? -Dije arrastrando las palabras.
-Dime.
-¿Puedo pasar? -Hablé esta vez con más decisón-
-Haz lo que quieras.
Con un poco de temor pasé la tarjeta que el blancucho me había dado y abrí la puerta. La oscuridad de la habitación me desconcertó por un momento hasta que mis ojos se adapataron al ambiente. Kook se encontraba encima de la cama, debajo de las sábanas de esta y mirando a la dirección contraria a la que yo estaba.
Caminé lentamente hasta sentarme a un lado de su cuerpo, pasé mi mano por su espalda y sentí su cuerpo extremecerse.
-¿Podemos hablar? -Pregunté.
-Habla.
-Mírame Kook, así no podemos hablar adecuadamente -No hizo caso de mi petición y siguió de espaldas a mi.- Bien, vamos hacer las cosas a tu manera. Sé que fui un gilipollas y que no tenía ue haber dicho "eso". Últimamente pasas mucho tiempo con Min Yoongi y eso me hace sentir en segundo plano, noto como que ya no te importo y tengo miedo que sustituyas nuestra amistad.
-Yoongi me comprende y no me insulta -Habló haciéndome sentir horrible.
-¿Él te comprende? -Pregunté frustrado- ¡Recuerda que, el que más tiempo lleva contigo soy yo!
-¿¡A caso eso te da el derecho a saberlo todo sobre mi!? -Gritó enfrentándome- Eres mi mejor amigo y al que más quiero, pero, sinceramente Jin, no creo que me comprendas en absoluto.
-¡No te entiendo, háblame más claro joder! -Hablé levantándonme y dando vueltas por la habitación.
-¡Odio que te rias de las personas que son diferentes, que, por gustarles otro hombre u otra mujer ya sean espeluznantes, tanto tu como Jimin no teneís ni puta idea de lo que pasa a vuestro alrededor , solo sosi nos malditos gilipollas sin principios morales! -Cuando terminó de desahogarse vi como su pecho subia y bajaba rapidamente.
-¿Eso es lo que te molesta de mi? Es mi manera de pensar Kook, no puedes obligarme a cambiar.
-¿Y si te digo que yo soy igual que esas personas que odias?
Me quedé sin aire por unos segundos ¿estaba hablando en serio?
-Y-Yo ...
-Lo suponia. -Rio amargamente mientras comenzaba a llorar.
-Y-Yo no te o-odio -Dije para tranquilizarlo.
-Mentira.
Sin darme tiempo a decir más Kook se fue corriendo de la habitación, toda una vida de amistad se había ido por la borda por mi culpa, por no haberle dicho que lo quería tal y como era, que si se trataba de él me daba igual todo.