Pov Simba.
Eleanor nos contó por qué estaba en Heorot, que fue que sus padres y ella habían viajado hasta aquí por trabajo de éstos ya que eran científicos, se quedaron 5 meses haciendo sus investigaciones aquí, pero un día desafortunado varios científicos entre ellos sus padres fueron acorralados por los esqueletos quiénes absorbieron sus almas y ella quedó atrapada aquí sin oportunidad de irse, ya no tenía más familia y había tenido que sobrevivir en las calles hasta que los cazadores al enterarse que era de familia adinerada y además tenía poderes quisieron tenerla de su lado pero ella se negó y prefirió quedarse en las calles en vez de ser parte de algo que ella no aceptaba.
Después de éso nos quedamos los 4 hablando, intentando crear algo más de confianza para que Eleanor se sintiera cómoda y que podía confiar en alguien.
—Bueno creo que es tiempo de que nos empecemos a mover de una vez —habló Drake.
—Drake tiene razón porque hay que aprovechar que el día apenas está empezando para ir a nuestro destino —dijo Peter.
—Eleanor si quieres nos puedes acompañar, ya que como no llevas nada conociéndonos y no nos tienes confianza —hablé mirándola.
—¿Qué quieres decir con todo eso? —dijo confundida.
—Se refiera a que no podemos decirte que vengas con nosotros, eres libre de hacer lo que quieras —explicó Peter.
—Entiendo, bueno no importa, yo iré con ustedes. Tampoco es como que bueno que me quede sola en este bosque —dijo mirando el bosque insegura y la comprendí, a ninguno nos gustaría.
—Está decidido, bueno comencemos a caminar que tenemos un largo camino que recorrer —empezó a caminar Drake.
—Tú lo has dicho, solo espero que todo salga bien —dije nervioso.
En eso nos fuimos los cuatro a recorrer el bosque que está antes de llegar a las montañas, pero cuando pasaron unos 15 minutos comenzamos a sentir que alguien nos estaba siguiendo por lo que Peter se detiene.
—¿Qué pasa? ¿Ocurre algo Peter? —pregunté confundido.
—No lo sé, es que siento que no estamos solos —respondió viendo alrededor.
—¿Cómo que no estamos solos?, ¿acaso esto era una trampa para entregarme a los cazadores? —habló molesta Eleanor.
—Claro que no —negó Drake—, no sabemos nada de ellos desde hace mucho tiempo, con exactitud ¿qué es lo que sientes Peter?
—Es que, siento como si alguien nos estuviera siguiendo y observando desde las sombras pero no sé por qué.
—¿No serán los fantasmas o algo por el estilo? —dije tragando saliva.
—No lo creo, cuando ellos están cerca uno suele sentir como una especie de escalofrió o por lo menos yo siento eso cuando están cerca —me miró Eleanor.
—Bueno lo mejor será apresurar el paso y estar pendientes a cualquier cosa —propuso Drake.
—Si, deben de ser cosas mías, vamos a seguir pero con los ojos bien abiertos —en lo que Peter camina escucha algo moverse—. ¡Maldición! Si hay alguien ahí, ¡sal de una buena vez maldito, ya sabemos que estás ahí!
—No te tenemos miedo, sal de una vez que ya no tiene caso que intentes esconderte —a lo que terminé de hablar al instante respondieron.
—Tal y como pensé, el oído de un ladrón es muy agudo incluso para nuestros pasos —dijo la voz que no reconocí.
De repente salieron 50 cazadores de los árboles, los cuales estaban perfectamente camuflajeados y también estaban bajo las órdenes de los cazadores Kit y Sandra, no podía creer que los volvería a ver.
—Pero miren ésto, son los mismos 3 niños que escaparon de nosotros hace 9 años —rió Kit.
—Simba, creciste mucho, tiempo sin vernos, ¿no sé si te acuerdes de mí? —alzó una ceja sonriendo de medio lado Sandra.
—¿Kit? ¿Sandra? Es increíble que nos reconozcan después de 9 años sin vernos —hablé sorprendido.
—Pues sí, ¿qué hacen ustedes 4 en el medio del bosque y solos? —preguntó Kit cruzado de brazos.
—Maldita sea, en verdad que nos descubrieron, no debí cuestionarlos —negó Eleanor frunciendo el ceño.
—Esperan um momento —hizo una pausa—, ¿ella es una de los humanos que tienen poderes? —la señaló.
—Si lo es, no entiendo, ¿por qué hay personas que piensan que somos malos?, ósea solo queremos que tú misma explotes tus habilidades para ayudar a la humanidad pero no, piensan siempre lo peor —bufó Kit.
—Cuéntenme, ¿qué hacen los 3 grandes ladrones de la ciudad del norte y una mujer con poderes en ésta zona? —dijo curiosa Sandra.
—Éso no podemos decírselo, nos reservaremos el derecho a hablar al respecto —se cruzó de brazos Peter.
—Vamos a las montañas de Helgafell a investigar más sobre el espejo sagrado —habló de repente Drake, a lo que Peter le dió un golpe en la cabeza.
—¡Auch! —se quejó.
—¡Drake! Cállate, ¿Por qué les dijiste eso? —gritó enojado su hermano.
—Tranquilos chicos, que no creo que Kit y Sandra vayan a hacernos algo malo —hablé con seguridad.
—¿Cómo lo sabes si llevas más de 9 años sin saber nada de ellos? —frunció el ceño Peter.
—Porque ellos no parecen ser así, puede que me equivoque o tal vez no —me encogí de hombros.
—Bueno la verdad es que llegaron más lejos que muchos, supongo que al ser ladrones profesionales se entiende que tienen el paso más rápido y discreto que los demás —dijo Kit.
—No podemos dejar que vayan hacia las montañas, ese lugar es muy peligroso, tienen que regresarse por donde vinieron —habló seria Sandra.
—Espera un segundo Sandra, ya ha éste paso no podemos darnos el lujo de regresar por donde vinimos, tardaríamos horas y no podemos avanzar de noche —negó Kit.
—¿Qué propones entonces? ¿Qué los llevemos con nosotros?
—Mira a mí tampoco me gusta la idea pero es lo mejor, además ellos al ser ladrones pueden correr rápido, tienen mucha resistencia, y sus pasos son suaves, la otra chica se puede hacer invisible no perdemos nada.
—La verdad es que tienes razón, no podemos ir y volver —lo pensó unos segundos—. Bien, entonces está decidido, vendrán con nosotros pero solo si nos logran seguir el paso.
—Reto aceptado —asintió Peter.
—No te preocupes por eso cariño —rió Drake guiñando un ojo.
—Creo que ahora si me siento más seguro yendo con ustedes —suspiré aliviado, había sido grato encontrar a Kit y a Sandra.
—Cuando regresemos a la ciudad el capitán Ignacio se encargará personalmente de que haremos con ustedes —habló Kit.
—Me parece bien, sigamos con lo nuestro, sigamos con la marcha —les dijo a los demás cazadores y a nosotros.
Empezamos el viaje por el bosque hacia las montañas de Helgafell con los cazadores, hay mucha distancia considerable para llegar a las montañas, por lo que el viaje apenas comienza para nosotros, lo único que me pregunto es: ¿Qué sorpresas nos encontraremos en el camino?