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Reversión Yoonmin por mochipervertsan

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Notas del capitulo:

aqui esta el cap, lo siento por desparecer

YoonGi después de haberle dado un medicamento para el dolor a Jimin, este ya no temblaba, parecía tranquilamente dormido y eso hizo que se sintiera menos tenso. Le era imposible mantener sus manos fuera del omega y era algo que no le gustaba para nada, se lo repetía constantemente pero cuando se daba cuenta ya le estaba acariciando el cabello o sosteniendo sus manos. Varias fueron las veces que puso su mirada en los labios del rubio, aunque estuvieran pálidos seguían viéndose suaves y hermosos

Fue en ese momento cuando escuchó un estruendo y se volteó encontrándose con Nam, él traía una bolsa, la cual le dio.

-Agust – este hizo un sonido como que lo estaba escuchando – Jin me dijo que el chico era un híbrido

-así es, ¿por? – dijo como si nada

-bueno, que depende a que tipo sea, es que necesita el medicamento

-eso no lo sé, él no me lo ha dicho…pero – YoonGi se detuvo y miró al rubio – me curó de una gran herida

-¿te curó? – Preguntó Namjoon – entonces…puede ser un elfo, ellos tienen poderes curativos

-no lo había pensado, pero pudiera ser

Comenzó a sacar lo que venía dentro, él esperaba que fueran medicamentos como prometió SeokJin pero solo había manzanas, carnes enlatadas y sopas instantáneas. Alzó su vista hacia Namjoon, este parecía apenado

-Nam, ¿me puedes explicar cómo es que no hay medicina? – preguntó pausadamente a la vez que tomaba una roja y brillante manzana y le daba un mordisco

-al p-parecer me equivoqué de bolsa – alzó los hombros mirando hacia el suelo

-¿y ahora cómo voy a curar a Jimin? – su voz se alteró un poco y subió de tono asustando un poco a Nam, él sabía cómo lucía Yoongi enfadado y no quería volver a verlo. Se quedó pensando un momento y luego recordó que Jin le explicó otra manera posible para curar híbridos con poderes

-sangre – lo dijo más para sí mismo, alzó la vista encarando a YoonGi, este lo miraba como si hubiera dicho un disparate – dale de beber tu sangre

-¿estás loco? – YoonGi miró a Jimin y luego a la mirada determinada de Namjoon, ¿realmente era posible curarlo con su sangre?

-Jin me lo comentó una vez hace tiempo – dijo serio – confía en mí, es la única manera hasta que traiga la otra bolsa – el alfa suspiró asimilando la idea, a él no le importaba darle sangre al omega pero ¿y si no funcionaba y le hacía más daño?

-apresúrate entonces – dijo y Namjoon salió corriendo en busca de las medicinas

 

 

(Pov YoonGi)

Namjoon ya se había ido a buscar los verdaderos medicamentos y yo, pues bueno, buscando algo con lo que córtame

Busqué un poco en los estantes hasta que encontré una cuchilla en una de las gavetas inferiores. Me acerqué a Jimin, ya no se veía tan pálido, su color había regresado un poco pero el hematoma seguía en su garganta. Me arrodillé al lado de la cabecera, enterré la punta de la cuchilla en mi antebrazo y luego hice un pequeño corte, del cual comenzó a brotar un poco de sangre. Llevé mi boca a la reciente cortadura y succioné hasta que sentí bastante en mi boca, volví a mirar a Jimin y me pregunté si lo que estaba a punto de hacer estaría bien, si este sería su primer beso, aunque no lo supiera, además esto es solo para salvarle la vida, solo eso

Curvé mi torso sobre la camilla hasta que estuve a pocos centímetros de su cara, pude apreciarlo con detalle, con mi mano tomé su rostro por la mejillas para abrir un poco su boca y así la junté con la mía

No quise pensar en eso pero la suavidad de sus labios era maravillosa, abrí un poco mi boca y el líquido rojo se fue adentrando en su cavidad, cuando no quedó nada me separé, un pequeño hilo de sangre bajaba por la comisura de su boca, con mi pulgar lo limpié y por un momento pude jurar que Suga estaba inquieto en mi interior cuando pasé mi dedo por el labio inferior de Jimin

Hazlo

Suga habló exigente pero lo ignoré, no lo iba a besar…y menos inconsciente

Pasaban los minutos y Nam no llegaba, mi mano comenzó a jugar con los pequeños dedos del rubio omega, eran suavecitos y muy lindos, parecían las manos de un niño. De un momento a otro sentí un ligero apretón en mi mano, me quedé quieto para ver si se repetía y así fue.

La manito de Jimin me estaba apretando, parecía que estaba sufriendo, mi vista viajó hasta su cuello y suspiré aliviado, el morado comenzaba a desaparecer pero su respiración comenzaba a ser más alterada y constante

Apreté su mano con ambas mías y me senté más cerca de él, al parecer su cuerpo se estaba curando

-eso es Jiminie, tu puedes – lo animé aunque dudaba que me escuchara, habían momentos en los que fruncía su entrecejo con molestia e incluso se le escapaban quejidos dolorosos

Todo pareció calmarse ya que dejó de apretarme y de hacer moverse, ahora respiraba tranquilo y pausado, se había quedado dormido. Su mano aún estaba entre las mías, lo examiné con la mirada y al fin me pude relajar, estaba curado y fuera de peligro

Lo miré nuevamente, me he dado cuenta que es lo que más he hecho desde que lo traje, acaricié sus cabellos y me levanté para comer algo, cuando Jimin despertara le daría algo de comida y luego nos marcharíamos de Whalien

 

 

Namjoon se encontraba saliendo de la base rumbo al coche para tomar la bolsa correcta, entró en el auto y comenzó a rebuscar, cuando la encontró se dispuso a salir y regresar

-oye, tú! – Nam se sobresaltó, lo habían pillado y él solo quería evitar la violencia, el chico se acercó con el arma en la mano hasta él - ¿qué haces por aquí?

-solo tomando provisiones – sonrió tontamente ayudando a su actuación y mostró la bolsa

-uhm, entiendo – el chico miró a los alrededores – si ves a dos chicos tienes que reportarlo, ¿de acuerdo?

-por supuesto

El joven dio media vuelta y se fue alejando, el beta exhaló sonoramente y masajeó su cuello. Una vibración en su bolsillo hizo que llevara su mano al lugar y sacara su móvil, ni siquiera miró el número que le llamaba

-diga – preguntó comenzando a caminar otra vez

-¿ya le diste los medicamentos a YoonGi? – era Jin

-pues verás Jinie… - después de contarle todo lo que pasó Jin estaba al explotar del enojo – cálmate, no es tan grave

-¿QUÉ NO? – Bufó al otro lado de la línea – te dije que la sangre del elfo es la que cura, no que lo curaría a él si la tomaba

-p-pero un poquito no hará nada, ¿o sí? – dijo preocupado a Jin, este se dio un facepalm y luego le contestó con voz totalmente seria

-si no son predestinados, esa sangre le causará la muerte – dijo advirtiendo

-¿solo eso? Pero qué alivio – dijo Nam limpiando sudor imaginario de su frente – es obvio que ese chico es la pareja de Agust, Jinie – el omega miró el móvil como si hubiera escuchado lo más estúpido e incoherente del mundo - ¿Qué? ¿Por qué callas?

-es broma, ¿no? – Jin se cruzó de brazos – es imposible que una criaturita tan amable e inocente como él sea el predestinado de un tipo frío y sin escrúpulos como YoonGi

-hey! Eso no es cierto – dijo cambiando un poco la voz – polos opuestos se atraen – su tono se volvió coqueto – como tú y yo

Después de un “IDIOTA” gritado por parte de Jin, la línea fue cortada y Namjoon no paraba de sonreír. El omega se negaba pero el beta sabía que sus sentimientos eran correspondidos, por eso no se rendiría tan fácil, Kim SeokJin algún día sería suyo, de eso no habían dudas.

Dio un vistazo por los alrededores para ver si aún rondaba alguien, al no ver a nadie regresó a donde se encontraba Agust y el pequeño omega

Por cada paso que daba no podía para de pensar en que Jin estaba equivocado. Jimin, ese omega al seguro era la pareja de Agust, ¿y cómo estaba tan seguro? Pues por cómo se comportaba el alfa al cuidar del chico. Nam de sobra conocía cuando YoonGi se sentía atraído por alguien y esto era mucho más que simple atracción. La manera en que lo miraba y lo tocaba era totalmente suave y preocupada, como si temiera hacerle daño al chico rubio

Por esas razones y además de cómo le brillaban los ojos, el beta moreno estaba cien por cien seguro de que el alfa interno de su amigo había decidido quién sería su alma gemela. Esa era una de las cosas por las que odiaba haber nacido beta: no tener un compañero de alma

Para cuando lo notó ya estaba a unos metros de la camilla y para su sorpresa, el omega estaba despierto, parecía renovado y eso no era todo, su amigo, Agust, el poderoso y temido tigre estaba alimentándolo como si fuera un cachorro. Debido a estas cosas era que su hipótesis se hacía más real cada vez. ¿Cuándo en tu vida lo has visto portarse así, eh, SeokJin? Ojala pudieras ver esto, pensó el beta

-muy bien! Aquí estoy Agust!

El mencionado dio un sobresalto en el lugar derramando un poco de sopa instantánea en el suelo para luego lanzarle dagas por los ojos a Nam, quien sonrió divertido por la reacción del alfa.  

 

 

Todo estaba oscuro, tenía miedo, quería volver a casa. El dolor comenzó a recorrer su cuerpo, era insoportable, cada musculo, cada nervio se sentía caliente, quemaba. En medio de esa bruma de dolor y presión, por un momento encontró una calidez agradable y el dolor fue apaciguando con el leve olor a menta.

Se sintió en paz

No recordaba cuanto tiempo pasó pero un olor agradable se impregnó en su nariz. Sus ojos se fueron abriendo poco a poco, la luz del lugar no era mucha pero le molestaba un poco, tal vez por dormir tanto. Con cuidado intentó sentarse pero no tenía fuerzas en los brazos haciendo que cayera de espaldas contra el metal, fue inevitable retener un quejido por el dolor en su columna.

Al instante unos brazos le rodearon y le invadió otro olor mucho más delicioso. Menta. Enfocó sus ojos hacia arriba encontrándose con unos cabellos castaños y ojos rasgados, los cuales parecían preocupados pero en ellos había algo de alivio y alegría.

-hola de nuevo – sonrió el alfa, Jimin intentó devolvérsela pero solo pudo elevar las comisuras, sus labios se estiraron tiernamente y sus ojos se volvieron pequeñas líneas, esto hizo que el corazón de YoonGi se sintiera más emocionado y tranquilo – debes tener hambre, ¿no? – el omega asintió sonrojándose un poco cuando su estómago hizo un ruido vergonzoso

YoonGi se levantó de su lado y se dirigió en busca de comida para Jimin. Desde que había visto mejora en el menor se apresuró en hacer sopa para cuando despertara. No era ningún chef pero cualquiera puede hacer sopa instantánea sin incendiar algo, excepto Namjoon, él sí que no puede tocar nada de la cocina

Tomó una vasija y la llenó hasta la mitad, si el omega quería más le traería después. A paso lento y con cuidado de no derramar nada volvió con el rubio, quien seguía acostado y sus ojos curiosos por todas las partes de la recámara. YoonGi no pudo evitar sonreir al verlo así, parecía un niño pequeño.

Los ojos del menor se enfocaron en la humeante vasija y luego en el rostro del alfa, Jimin tragó en seco, su cuerpo le pedía comida a gritos y ni hablar de su omega interior.

El alfa dejó la sopa sobre una pequeña mesa y luego fue a por el menor. Sin decir nada lo cargó como princesa, con cuidado y delicadeza, lo cual él no se creía capaz pero lo hizo como si el omega fuera de cristal, el cristal más frágil del universo.

Jimin se sentía avergonzado en los brazos del alfa pero también se sentía protegido, ahora entendía de dónde provenía esa calidez, mejor dicho, de quién venía.

YoonGi depositó a Jimin suavemente en una silla acolchonada y luego se sentó frente a él, el alfa cogió la vasija y una cuchara, volteándose hacia el menor y Jimin al ver lo que pretendía su Hyung se sonrojó fuertemente, esto no pasó desapercibido por YoonGi

-¿qué pasa, bonito? – preguntó mientras llenaba la cuchara con caldo

-e-es que…- el alfa conectó sus miradas y Jimin bajó la vista rojo – no…no tiene que…- YoonGi entendió al instante y sonrió algo cohibido, ni él mismo entendía por qué deseaba tanto proteger y consentir a Jimin, hasta Suga le insistía que se mantuviera cerca del omega rubio

-está bien, quiero hacerlo – acercó la cuchara a la boca del menor y Jimin lo miró apretando los labios sonrojándose un poco más – es decir, estás débil

Jimin asintió cortamente y fue abriendo los labios hasta que la cuchara estuvo en su boca, la sopa se deslizó por su garganta dejándole en el paladar un sabor a carne y condimentos, muy delicioso.

El alfa vio como los gruesos labios del omega se cerraban alrededor de la cuchara para luego retirarse y una pequeña lengua rosa limpiaba los restos en los mismos. Esta acción fue repetida varias veces, cada vez con más confianza aunque se podía apreciar el rojo claro en las mejillas del omega. YoonGi estaba muy centrado en los rasgos faciales del menor, debía admitir que era muy adorable  

-muy bien! Aquí estoy Agust! – el alfa dio un salto en el lugar derramando sopa, se volteó hacia dónde provenía la voz encontrándose con Namjoon, este tenía una sonrisa de oreja a oreja, eso le molestó un poco pero al menos traía la bolsa. Jimin también había volteado pero al ver la expresión del desconocido se avergonzó demasiado

-eso ya lo veo, Nam – YoonGi inhaló pausadamente a la vez que le tendía otra cucharada a Jimin, el omega lo miró abochornado y el alfa comprendió que en presencia de Namjoon no aceptaría seguir recibiendo la comida. El mayor le brindó una mirada reconfortante, dejó la sopa sobre la mesita y con su mano acarició un poco la mejilla de Jimin - ¿puedes comer solo? – El menor asintió dejándose hacer, el toque frío pero amable del alfa era hipnotizante para su omega y por ende para él – buen chico – despeinó un poco los cabellos del menor y luego se levantó – si me necesitas grita mi nombre, estaré en la otra habitación ideando un plan de escape con éste – apuntó al desconocido y Jimin asintió

Cuando los dos mayores se fueron comenzó a comer, antes de irse su Hyung le había dejado unos palillos para los fideos y unos medicamentos, que según el alfa debía tomarlos cuando se terminara la sopa. Debía comer para reponer algo de fuerzas y salir de allí

 

 

-¿y bien?¿cómo te fue? – las cejas del beta subieron y bajaron con gracia y YoonGi le pegó

-idiota, nada pasó – la expresión de decepción en el moreno fue notable - ¿qué se supone que esperabas? – preguntó fastidiado a la vez que Nam se llevaba una mano al mentón en pose pensativa y enarcaba una ceja

-¿más interacción, amor, besos? – Dejó de hablar con expresión de tristeza mal fingida – no lo sé – eso le costó otro golpe en el hombro

-no seas tonto – el alfa peinó su cabello hacia atrás para que después volviera a su mismo lugar – Jimin es mi protegido, solo eso – su tigre interior rugió molesto por ese comentario, lo cual era extraño, Suga era bastante tranquilo, más bien vago, además de que en cualquier pensamiento o situación coincidían, él era muy cercano a su animal interior, no entendía por qué últimamente el tigre blanco se enojaba o estaba en desacuerdo con él

-sí, si y Jin es mi pareja destinada – dijo con sarcasmo y YoonGi rodó los ojos – tú no seas tonto – lo acusó con el dedo índice – estoy tan seguro como que soy beta que tú y ese niño so-…..

Las palabras se vieron interrumpidas por la voz de Jimin

-YoonGi-Hyung!! – el mencionado reaccionó al instante girando la cabeza en dirección a la voz del omega

-¿ves lo que te digo, Agust? – dijo negando con su cabeza y sonriendo cuando el alfa salió disparado hacia la habitación del pequeño omega rubio

 

 

YoonGi entró con rapidez al cuarto donde estaba Jimin, su cabeza llena de pensamientos nada agradables, le puede estar doliendo algo, se hizo daño, etcétera.

-¡¿Jimin, estás bien?! – exclamó al estar frente con frente al omega, sus ojitos color miel estaban algo húmedos como si fuera a llorar, sus cejas un poco fruncidas y sus labios, oh sus labios, estaban formando un hermoso puchero, se veían tan esponjosos y rosados, que a YoonGi le fue imposible no mirarlos y recordar lo suave que eran, ese pensamiento lo dejó ido y no escuchó lo que Jimin le decía.

Solo cuando unos brazos se enroscaron en su cuello reaccionó. ¡¡Jimin le estaba abrazando!! Su tigre ronroneó gustoso de sentir el calor ajeno, eso le dio una sensación de paz increíble a YoonGi, nunca esperó que un abrazo le hiciera sentir así de bien

-…iedo, Hyung! – la voz temblorosa del omega lo sacó de su parálisis, porque sí, sus brazos habían estado estáticos a cada lado de la cadera del menor, sus ojos muy abiertos y su boca en una línea recta, totalmente impactado

-¿e-eh? – fue lo que atinó a decir, aunque no pudiera percibir el olor de Jimin, con solo tenerlo cerca él y Suga se sentían atraídos al pequeño híbrido.

-a-ahí… - el omega se separó un poco de YoonGi dejando ver su expresión asustada, esto alarmó al alfa de increíble manera, con el pequeño dedo índice Jimin apuntó a una esquina con varias cajas y bolsas negras, el mayor lo siguió con la vista – hay algo ahí

Notas finales:

gracias por el apoyo


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