En esa aparente mañana infernal la pareja de demonios unían sus ansiosos labios en un amoroso beso, sus cuerpos impulsados ​​en la necesidad de tenerse cerca se aferraban en un abrazo era una forma hermosa de obtener la calidez en el medio ambiente que se percibía tan frío
—Todavia quieres recibir la mañana con una taza de té? —Con coquetería el mayor le susurraba cuando separaron sus labios después de ese apasionado beso.
—Si el té viene de tus labios ... Si quiero ...
Sebastian lo miró fijamente un poco sorprendido por esas palabras que al parecer salieron sin pensarlo solo por corresponder también coqueto, internamente se debatía entre burlarse por eso tan cursi que habia dicho o disimular para no hacerlo sentir mal a cambio solo sonrío embelesado acariciando sus mejillas.
—Eso fue estúpido... —Murmuró sonrojado el joven para darse cuenta de lo que dijo casi de inmediato solo desviaba apenado la mirada ni el creía lo que se había escapado de sus labios— Y te quieres reír ... Tsk ...
—No... Eso fue tierno... Es lindo tu lado cursi.
El joven solo le dio pequeñas bofetadas al sentir que sus palabras sonaban a burla haciéndolo avergonzar más.
—Ustedes ... —Les llamaba resignado Noah al interrumpir la escena de ellos como discutiendo en el baño.
—Oye Noah no entres sin avisar, que tal si estabamos desnudos... —Le regañaba quien no dejaba de abrazar a su pequeño amo, este con fingida molestia trataba de apartarlo.
—Ya te he visto desnudo papá ... No te hagas el inocente ahora
—Lo digo por Ciel nadie debe verlo desnudo más que yo—En un murmullo celoso le aclaraba a su hijo.
—Bueno ya no lo espiaré cuando se cambie de ropa. —Decía con el afán de molestar mientras se encogía de hombros.
— Ustedes dos no vayan a pelear —Les advertía Ciel con mala cara al notar como los dos parecían desafiarse con la mirada lo que menos quería era ocasionar tonta discordia entre los dos.
—Estamos bromeando.
—Humor demoniaco.
Decían los dos con una sonrisa mientras el ex conde los miraba receloso.
—No quiero que se peleen por mi culpa... —Dijo con aparente tristeza desviando la mirada, los dos demonios quedaban embelesados ante ese adorable gesto.
—Lindo... —Murmuraban al unísono al verlo asi.
—Idiotas.
Sonrojado Ciel le decía sintiendo sus estúpidas miradas sobre el, a los pocos minutos Sebastian se despedía de él con la promesa de pasar más tiempo juntos después.
—¿Ya fuiste a visitar a tu amante ? —Era lo que el esposo de Sebastian le advertía con enojo cuando lo veía entrar sigiloso por la ventana
—Solo fui a estirar las piernas, a hacer ejercicio —Le contestaba con algo de burla ante su sutil reclamo.
—Si estabas tan bien con él ¿Por qué no te quedaste con él en el mundo humano así nunca me hubiera enterado ya que igual no iba a vivir mucho? ¿ No ?
Sebastian solo lo escuchaba refrenando su lengua para no responderle con malicia la respuesta que en su mente pasaba porque no quería empeorar la situación.
—Alguien de tu casta haberse fijado en alguien tan insignificante, es realmente patético... Y lo más ridículo de todo es que lo justificas llamando lo que sientes como amor. Los demonios no sentimos y mucho menos llegaremos a vivir esa estupidez del amor
—No creo que sea más ridículo que nuestra relación basada en egoísmo y posesión.
—Somos demonios ¿Qué esperabas ? Actuamos por impulso no por emoción ¿O vas a negarlo? Creo que no lo negarás, tu que "amas" tanto a ese niño y le quitaste su virginidad a la intemperie del frío infierno cual animales, solo porque no supiste controlarte. ¿Cuanto te durará este "amor"? ¿Hasta que te canses de él como te cansaste de mi?
Este demonio al terminar decirle aquello sonreía con malicia al ver la reacción que provocó en Sebastian que callado no le respondió solo se alejaba a paso firme.
— Yo si lo amo...—Murmuraba Sebastian con tristeza y ¿si eso era cierto? esta calidez en su pecho que provocaba Ciel ¿Era realmente amor? Se negaba a pensar que era solo un impulso carnal, los demonios podían enamorarse y lo probaría.
Mientras tanto Ciel recostado en su cama sentía estar más que convencido de que amaba a Sebastian no podía evitar sonreír solo con pensarlo y suspirar melancólico al extrañarlo eran algunas evidencias de este amor que carcomía dulcemente su frío corazón. Y si antes cuando era humano se esforzaba por ser el alma que el quisiera devorar ahora se proponía convertirse en el demonio que lo acompañara por la eternidad, así que ese amor sería su más grande motivación, no quería que el se avergonzara por estar con un remedo de humano-demonio.
—Me alegra que estés decidido a estudiar sobre tu nueva naturaleza, solo conociéndola podrás entenderla y te adaptarás mucho mejor a ella. —Eran las palabras del demonio que figuraba como maestro para los jóvenes.
—Si después de todo me aburriría estar sin hacer algo todo el día.—Hablaba Ciel con una sonrisa.
—Si.. No puedes pasar teniendo sexo toda tu demoníaca existencia.
Se le burlaba Noah sintiendo solo el codazo de su querido amigo.
—Por cierto Ciel... —Con emoción el joven demonio le decía— Ponle un nombre a mi querido demonio tu me diste uno así que el también quiere.
—Yo no quiero —Aclaraba el mayor.
—Si quieres... Ayer me dijiste que si querías.
Ciel los escuchaba discutir sin darse cuenta que también ya lo habían involucrado así que para que no siguieran en ese asunto tan molesto y empezar de una vez a estudiar, se resignó a darle un nombre.
—Te llamarás.. Mathew...
—Suena lindo, aunque más bonito es Noah. —Decía el mayor con una sonrisa— Gracias Ciel...
Así ya más calmados los demonios empezaban sus clases ese día, para el novato demonio todo era tan excitante tenía mucho que aprender y estaba ansioso por adquirir estos conocimientos aunque se le complicaría leer los textos ya que no estaban en su idioma.
—Tienes que aprender el idioma de los textos antiguos para que puedas interpretarlo a tu manera, es un poco complicado al inicio pero sé que lo aprenderás rápido. —Le animaba Mathew con una amable sonrisa al ver como el joven bufaba cansino al no entender nada.
—Si Ciel tu eres listo... Aprenderás pronto y hasta quizás los interpretes mejor que yo estos textos.
—Espero que si... Quiero saber que dicen.
—Debo advertirte que es aburrido. —Le murmuraba Noah al oído.
—Noah no le digas eso... Tu todavia eres sólo un mocoso por eso no te interesa nada de esto pero cuando seas adulto te será muy necesario.
—Ya no me regañes querido Mathew... De todas formas si tú y yo seguimos juntos por la eternidad, me guiarás si no entiendo algo.
—Sabes que es muy poco probable que tú y yo pasemos juntos la eternidad ¿No?
— Lo sé... —Murmuró Noah con un puchero acercándose se sentaba en sus piernas y lo besaba una actitud algo contradictoria que extrañaba al joven demonio.
¿Por qué había dicho aquello? ¿Por qué no tenían probabilidad de estar juntos si parecían amarse? Solo sentía confundirse sobre la relación de los demonios o ¿ Solo eran estos dos jugando entre si?
—Ciel... —Le llamaba Noah con algo de seriedad.
—Dime...
—¿Puedes salir un momento ? Es que tomaré un receso ahora...
—Pues hazlo... —Con inocencia este le respondía no entendiendo su repentina petición.
Ante esa aclaración Ciel apenas comprendia lo que pasaba en ese momento se dio cuenta que el receso para ellos era tener intimidad, sonrojado tomaba unos libros y pretendía salir.
—Lo siento ... No entendí al principio. ¡Noah debes ser más claro en lo que dices! —Le regañaba con molestia.
—Si quieres puedes ver ... Así aprendes nuevas posiciones para papá y lo complaces mejor.
—No, gracias. Iré a leer un poco a mi habitación, ustedes sigan.
Al decir aquello Ciel salía con prisa dejándolos a solas mientras caminaba por el pasillo volvía a pensar en eso que le habia dejado inquieto minutos antes de este malentendido. ¿Qué unía a los demonios en el infierno? ¿Existía el amor para ellos o solo eran impulsados ​​por deseo y placer? Y es que amar de por si ya era confuso no quería comenzar a dudar de este sentimiento... Pensaba con nostalgia y tristeza.
Muchas gracias a NaYTasha93 por su ayuda al transcribir este capitulo, mil gracias 💖 gracias tambien a quien sigue atento esta historia... Besos 💕