-En mi rostro se formo una sonrisa de añoranza al recordar lo torpe que era en mi infancia, jamás podría olvidar la primera vez que hable con Shaka ni la forma en la que nos conocimos, no evité ruborizarme al recordar cómo mi mirada se quedaba estática recorriendo las facciones de su rostro que desde un principio me dejaron fascinado, pese a ser un niño no evite impresionarme ante las definidas facciones del rostro de Shaka, todo en él me dejaba impresionado, pese a tener la misma edad se veía con mucha mas experiencia y dedicación a su entrenamiento a diferencia de mi que me distraía sin importar los regaños de Shion. Shaka desde un principio fue dueño de mis pensamientos y jamas pude notarlo hasta el último tiempo donde la adolescencia me golpeo de una bofetada directa en la mejilla cuando me descubrí a mi mismo murmurando su nombre ya sea despierto o entre sueños. Volvía a mi mente aquel día después de tropezar accidentalmente con él y de la primera vez en que aquella voz se quedó grabada en mi mente y corazón-
*Narra Shaka de Virgo*
-Me sorprendió saber que aquel sujeto era el discípulo del maestro Shion. Los entrenamientos compartidos eran de gran ayuda para ambos y aunque no tuviera intenciones de conversar, tenía pensado ser más cortez con el aprendiz de Shion. Concentrado en las enseñanzas del maestro, notaba el visible cansancio de Mu, se sobre esforzaba para aprender, esto provocó que aquel tropezara a mí lado, causando la caída de ambos. Algo molesto por aquella situación, le dije que debería tener más cuidado y no sobre exigirse, le ofrecí mi mano para que se levantará después de mi y me presenté con un saludo breve y mi nombre para luego retirarme-
*Narra Mu de Aries*
Yo lo lamento, no fue intencional el haber chocado contigo -mi cabeza ardía y daba vueltas, estaba cansado, este día sobre exigí bastante mi cuerpo en el entrenamiento y me quede estático ante el repentino gesto de Shaka para ayudarme a levantarme a lo cuál yo correspondía tomando su mano con la mía para ponerme de pie. Ya al estar levantados sacudía mis vestimentas arreglando las mismas hasta escuchar su nombre de aquella voz que tanta calma me trajo desde el primer instante en que logre oírla, el nombre de aquel chico ya no desconocido era Shaka, nos presentamos con formalidad y ambos nos dirigíamos a nuestros cuartos designados los cuales consistían en 2 camas separadas lo bastante amplias para una persona y mas de nuestra edad. Al llegar a la habitación no tarde en deshacerme de mis vestimentas para después ponerme una especie de camisón largo para dormir el cuál me cubría hasta los tobillos para después meter mi cuerpo bajo las sábanas y cobijas las cuales me cubrían hasta mis hombros y con mis ojos ligeramente cerrados dirigía mi mirada en dirección a donde Shaka se encontraba y antes de que el sueño terminara por vencerme le dedique las buenas noches y que descansara bien pese a que no conocíamos casi nada del otro mas que nuestros nombres pero deseaba que eso conforme pasarán los días cambiara, Shaka se veía cómo alguien amable y quería conocerle cada vez mas, luego de ello emiti un bostezo suave mientras arrope mi cuerpo y caí rendido en un sueño profundo debido al agotamiento tan fuerte que sentía y el cuál me hizo instantáneamente querer descansar-.
-la noche se hizo eterna y a plena madrugada desperté somnoliento frotando mi ojo derecho con mi mano mientras emitía un bostezo cansado para luego encaminar silencioso mis pasos hacía la puerta de la habitación sin querer despertar a Shaka, dirigiendo mi camino hacía donde se encontraba el lavabo y en donde a oscuras y aún con sueño ingrese para realizar mis necesidades, lave mis manos y nuevamente salí arreglando mi ropa hasta volver a la habitación. Estaba cansado y sin fijarme lleve mi cuerpo a la cama dónde Shaka también descansaba y donde me recosté, hacía frío y sentía extraño la cama más cálida pero entre lo que dormía poco noté hasta que horas después amaneció y mientras hacía el esfuerzo por acostumbrar mis ojos a la luz noté cerca de mi rostro unos cabellos dorados junto con un rostro serenamente dormido a una distancia mas o menos cercana a la mía y por la cuál no pude evitar sonrojarme y por poco caer de la cama ante tal sorpresa ¿que había pasado? ¿Porqué estaba en la misma cama con Shaka? ¿Que hacía allí? ¿Camine tan dormido para venir aquí? ¿Se enfadará?-