- Carlos por favor- casi a susurro dice Alex- estamos con tus sobrinas compórtate- le da un leve pellizco y mi tío que es re-exagerado se retuerce, Akiko y yo más reímos- ay ya vámonos- lo toma de la mano y se van.
- Ese Alex me cae muy bien, mira que ya tener tantos años con mi tío y aguantarlo es mucho decir- Akiko no para de reír
- Sí, siempre tan lindo- volteo a verla con una sonrisa – lo bueno es que se llevaron las cosas- la tomo de la mano y siento como su mirada se posa en mi- ¿Qué quieres conocer y comer?- le pregunto con una sonrisa coqueta
- Unas guajolotas- tiene una sonrisa de oreja a oreja, pero sé que me está molestando.
- Akiko a esta hora ya no las venden, eso es desayuno no comida- entrecierro los ojos y ella ríe bajo
- Bueno, bueno, que tal- se queda pensando- ¿Cómo decía mi mamá que se llamaban esos lugares?- realmente está haciendo el esfuerzo por acordarse- ¡ah sí! Vamos a una cocina corrida, seguro es comida típica- su sonrisa ilumina mi día.
- Entonces quieres comida típica- me pongo a pasar la mirada por el lugar- habrá que caminar para encontrar alguna, pero si antes vemos otra cosa y nos llama la atención vamos ahí
- Vale, también podemos mironear lo que nos encontremos en el camino- me tomó más fuerte de la mano en lo que seguíamos caminando.
El lugar al que nos trajo mi tío es muy bonito, tiene casas coloniales y de varios colores, había bastantes museos a los que entramos, la gente era muy amable aunque anduvimos con cuidado y por lo mismo de andar viendo todos lados se nos hizo un poco tarde para comer, vi la hora, ya eran las 4 y nada de comida corrida.
- Akiko debimos parar en algún puesto- me quejo, tengo hambre
- Mira ahí hay un restaurante- señala y nos acercamos – Comida Michoacana
- Dice comida y eso es lo que yo necesito- solo la jale y nos sentamos en una de las mesas, tenían una música que creo que escuche alguna vez.
- Muy buenas tardes señoritas- llega un joven- aquí les dejo las cartas, lo que gusten me dicen- se da la media vuelta y se va
- Michoacana, me suena, creo que mamá me conto algo de ahí- Akiko abrió la carta para empezar a ver el menú
- Ohhhh siiiiiii- Akiko se me quedo viendo- nuestras madres vivieron ahí un tiempo- le dije señalando un platillo del menú, Akiko lo vio y río. El joven se acercó para tomarnos la orden
- Me da una sopa tarasca y una orden te carnitas por favor- pidió Akiko – con agua de horchata
- Yo quiero un pozole, no mejor unas corundas sin crema y un pollo en mole rojo, con agua de limón por favor- el tipo solo sonrío
- ¿Algún postre?- creo que se está burlando por el tono de su voz ¬¬
- ¿tienes nieve de pasta?- pregunto Akiko y el asintió – bien quiero esa
- Yo unos chongos zamoranos.
- ¿Algo más?- nosotras negamos con la cabeza
El mesero recogió los menús, dio media vuelta y fue para dar nuestras órdenes.
- Creo que piensa que no nos acabaremos todo- río Akiko
- Sip- tomé su mano llamando su atención y ella solo volteo a verme con una sonrisa- ¿Qué tal dormiste?- pregunte porque la vi descansando muy bien
- Bien, tenerte cerca me hizo descansar bien- me dijo con una hermosa sonrisa- aunque trate de no abrazarte para no incomodarte- dijo con un ligero sonrojo y sé que mi sonrisa se hizo más grande- ¿y tú? ¿no te incomode?- me pregunta preocupada, ¿Quién diría? Antes eso era lo mejor que podíamos hacernos la una por la otra, incomodarnos y hacernos pasar la peor noche.
- No- sonreí como boba
- Aquí les traigo los pedidos, los postres se los traeré más adelante- dijo el mesero
Ciertamente los platillos eran grandes, pero deliciosos y nosotros con toda el hambre que traíamos aparte que somos de muy buen comer, así que para sorpresa del mesero nos acabamos todo junto con los postres que nos trajo posteriormente.
Cuando salimos del restaurante vimos la hora, 5:30, ya teníamos que regresar a donde habíamos quedado con mi tío, si queríamos ver más cosas por el camino, así que fuimos a buen paso y sin dejar a entrar a las tiendas y comprar alguna que otra cosa llegamos 6:30 a la placita señalada.
- ¿quieres un helado?- me dijo señalando un Señor con su carrito de helados, yo asentí y fuimos, ella pidió de vainilla y yo de mamey.
Nos fuimos a sentar a una banquita que tenía sombra, su helado se veía rico así que sin permiso le robe un poco con una lambida.
- Tenía razón, está bueno- dije saboreándomelo, voltee a verla y estaba rojísima - ¿quieres?– le acerque el mío y un poco dudosa lo probo – está rico ¿verdad? – ella asintió y comió un poco más del suyo – pero así sabe mejor – comí del mío y rápidamente la bese, haciendo que los sabores se mezclaran en nuestras bocas, al separarnos yo con una enorme sonrisa dije- sí, realmente así saben mejor- jajajaj si la vieran el rojo de hace rato estaba corto al de ahora pero me tomo por sorpresa y me beso ahora ella, creo que los helados se cayeron porque sus dos manos están en mi rostro y mis manos en su cintura, a falta de aire nos separamos
- Perdón creo que tire tu helado- apenas y pudo decir en lo que nos reponíamos de aquel beso.
- Akiko- dije y ella que no separaba mucho su rostro de mi- ya no aguanto más- la jale más hacia mí- sé que no es lo más romántico, pero ¿quieres ser mi novia?- creo que decir que estoy roja es poco decir.
- Si- suspiro y me dio un beso corto- si quiero que seas mi novia- me dio besos cortos por toda la cara y yo encantada
- Mjmjmjmj- escuchamos y del susto dimos un pequeño brinco- perdonen la interrupción a las tórtolas aquí- se notaba que mi tío estaba aguantándose la carcajada- pero ya es hora de irnos jijijiji
- Ay Carlos como eres- Alex le dio un pellizco- ellas en su romance y tu- levanto una ceja- aquí interrumpiéndolas- ahora le dio un leve golpe en el hombro- ¿Qué no ves que se ven bien tiernas?- su tono cambio a uno dulce y meloso
- Ay con razón me encantas- mi tío lo beso, después nos hizo seña para que los siguiéramos.
El camino de regreso fue más rápido, había menos tráfico así que llegamos sin inconvenientes, aunque en el transcurso del viaje Alex estuvo distrayendo a mi tío para darnos espacio, fue lindo estar a su lado, poder besarla y que me besara cuanto quisiera, yo realmente me perdía en ella, tanto que no me di cuenta cuando llegamos.
Al entrar estaban cenando en el patio, nada más hicimos el acto de presencia mi bisabuela se levantó haciendo que todos la miraran y su mirada se clavó en mí, así que ahora todos me miraban a mí y yo con Akiko de la mano.
- ¿Y bien Amy?- a ésta mujer que no deja ni una – ¿algo que quieras comentar a la familia?- sentí seca la garganta, con una dificultad horrible pase saliva por mi garganta, solo sentí un dulce apretaron en mi mano y un empujón brusco en mi espalda de una manota.
- Pues si- sonreí con nervios
- ¿y que es mi princesa?- dijo mi bisabuelo algo divertido por las travesuras de su esposa.
Si alguna mirada no estaba al pendiente de mi anteriormente ahora ya lo estaban, ahí con mis tíos abuelos, mis tíos y primos segundos, eso sin olvidar a mis abuelos, tíos, primos, hermanos y mis madres viendo que pasaba.
- Les quiero presentar a mi novia- mi cara estaba roja de los nervios
- ¿eh?- era mami alzando la voz -¿Qué novia? ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿Qué? ¡Carloooooss!- jejejeje deberían ver su pobre cara
- Tú te sientas y la dejas continuar- la tomo Nana de los hombros para volver a sentarla que ya se había parado mi madre con las intenciones de venir hacia a mí.
Tomé más fuerte la mano de Akiko, agarre todo el aire que pude y trayéndola hacia a mi les dije:
- Hoy le pedí a Akiko que sea mi novia y me dijo que si – hubo un silencio sepultural hasta que mi bisabuela dijo
- Ah que bien, ya se habían tardado- su sonrisa era hermosa, tan viejita y tan viva- bueno ya vengan a sentarse- señalo los lugares vacíos – Carlos ustedes también y después hablamos por llegar tarde- todos reímos bajo y el solo asintió nervioso llevándose a su novio a sentarse para comer algo.
- Mamá – dijo mi abuela -¿Cómo que ya se habían tardado?
- Ay Marian se me hace raro que tu siendo araña se te haya pasado eso- dijo señalándonos
- Son mis nietas- hizo un puchero – ¿Qué querías que viera?
- Que esas dos tienen más química que tú con tu marido- dijo con media sonrisa en la cara
- Jajaja, si en eso tiene razón – dijo Nana muy divertida- y eso que estos explotaron su química a los 15 jajajaja- Nana estaba muerta de la risa y varios la siguieron con el ultimo comentario haciendo que mis abuelos se sonrojaran y la ignoraran por completo
- Yo, tu, ustedes- mi mami no sabía cómo articular- habrá que hablar- dijo al fin
- Calma Meghan, terminando la cena hablamos las 6- dijo tranquilamente tía Alice y casi en susurro le dijo- ¿o quieres que ella te regañe por arruinarle su cena- señalo a lo bajo a mi bisabuela
- Ah no, por eso digo que al rato nos deben una buena platicadita niñas- nos señaló con el cuchillo en mano, todos los demás rieron de nuestra desgracia.- ¡Abuelaaaaaa!!!!!- se paró de repente mi mami- ¿Cómo osas ponerlas juntas a dormir? Mi bebe- toda melodramática ya con una lagrima bajando por su mejilla
- Amor, ¿Qué bebe? Si hasta Milo ya es un adolecente- y la jalo mamá para sentarse
- No seas ridícula Meghan- hablo mi bisabuela y vi como mi abuela reía. – si a esa edad tú ya estabas casada y no dormían espalda con espalda- oh Dios eso no lo quiero saber- y Carlos puede confirmar la vez q queríamos probarte aquel vestido…
- Bis- dijo Mariell interrumpiéndola- te lo suplico- mi bis la vio confundida- ese tipo de información nosotros sus hijos no la queremos saber- sin mas no hubo ni uno solo que no soltara la carcajada, yo solo voltee a ver a Mariell para agradecerle, que no quería reavivar cierta imagen de ellas dos.
La plática con nuestros padres fue extraña, mi tía Alice y mamá ya la veían venir desde hace tiempo :l, mientras que mami y mi tío tardaron en procesarlo, pero al final nos dieron un dulce abrazo y los mejores deseos para nuestra relación. Ahora estamos en nuestro cuarto ya cada una con el pijama.
- Amor- ay Dios creo que de escucharla decirme así ya estoy en el cielo
- ¿sí?- le digo acostándome
- ¿Puedo tener mi beso de buenas noches?- me dice poniéndose encima de mí, yo solo empiezo a sentir todo el rubor en mi cara
- Los que gustes- le digo dándole un besito, pero ella me da otro y otro y otro y otro más, cada vez más dulces, largos, mmmm que rico huele ella, amo su olor, ahora su sabor, el sentir sus labios en los míos, su lengua danzando con la mía y tocan la puerta ¬¬ abriéndola así nada mas
- Lo siento chicas, pero mami aguafiestas me mando a desearles bonita noche y que se porten bien- dice Mariell que se ve está bastante divertida con todo eso
- Jejeje no se te va ni una- le dice Akiko
- Así es cuñadita- le guiña el ojo- pero podemos hacer negocio para que se me vayan varias- su sonrisa de medio lado lo dice todo, está en modo negocios
- Cuñadita- digo lento, muy bajo, suena raro oírlo de mi hermana- Mariell nada de negocios y chantajes, mañana arreglo eso con mamá
- Jajajaja pobre de mami, se la van a traer en jaque, capaz que ahora no las dejan vivir juntas y eso que estaba obstinada en eso jajajajaja- Akiko y yo en silencio total.
- ¿No me digas que si lo sugirió?- ahora entra Declan con Milo a la habitación, sin permiso se sientan en la cama
- Jejeje si- contesta Akiko- hubieran visto a la pobre, tía Lyli y mami casi la golpean- se ríe un poco más fuerte- a mi papá solo le quedó guardar silencio y darnos todo el apoyo
- Jajajaja no tiene remedio- Mariell estaba muy divertida
- Bueno ya hay que dejarlas- dijo Milo bostezando- mañana las molestamos más- tomó las manos de mis hermanos, para así salier del cuarto deseando una buena noche.
- Bueno mi amor- se acomodó Akiko a mi lado- linda noche- y me robo otro beso para después abrazarme- estoy agotada, caminamos mucho.
Me acomode a su lado dejando que me abrazara y con su olor, sus besos y estando en sus brazos pase una deliciosa noche.
La navidad fue sensacional el bisabuelo dio regalos a todos, hubo comida a diestra y siniestra, aun así todo se acabó ^///^ bueno nos acabamos, el baile estuvo bien puesto y yo pude bailar con mi novia todo el tiempo, es extraño, aun no me acostumbro, pero incluso el verla bailar con alguno de mis primos no es algo que me agrade mucho y eso que cada año es lo mismo.
- Amy- me llama mami, yo volteo a verla- no seas tan posesiva- me señala a mi novia bailando con su hermano- ese es un defecto muy feo de tu mamá que no debes aprender- la miro sorprendida, en eso veo como le dan un fuerte golpe en la cabeza
- ¿De qué hablas ca ri ño?- mamá le pregunta molesta, mami se pone muy roja
- Le decía que tiene buenos gustos y que tú eres el amor de mi vida- dice mami rápidamente y le roba un beso de pico, yo me divierto
- Claro y tú no lloraste anoche- jajajaja me estoy aguantando la risa
- Yo no sé de qué hablas mi vida- mami la abraza y alza la cabeza- ah, mira me habla el abuelo- la suelta dirigiéndose a ese lugar
- Si como no- dice para si mi mamá, voltea a verme dando un suspiro- pero tiene razón- yo la miro confundida- no seas posesiva ni celosa- hace una mueca chistosa- fue lo que nos trajo muchos problemas a nosotras y el 90% por mi culpa- mira hacia otro lugar, estoy sorprendida- mmm digamos que no es que dude de mami, solo del resto de la población- suspira, se ríe, esto es una gran revelación para mí- solo que vas entendiendo que a pesar de que el resto del mundo este tras de ella- se pone roja- ella solo tiene ojos para mí- voltea a verla y ahí está esa mirada, donde se derrite por mi madre
- Jijiji, ¿Quién lo diría?- mamá voltea a verme fingiendo molestia- pero entiendo, solo no sabía que tenía esta faceta- suspiro para ver a Akiko
- Jajajaja ni que lo digas, todo esto te traerá más facetas de las que piensas- toma mi hombro- unas que sacan lo mejor de ti - suspira pesadamente- otras que si no controlas sacaran lo peor de ti- ahora pone una cara juguetona- ah, otras que sacaran CADA cosa de ti y de ella- Dios no quiero hablar ese tema ahora, yo solo me pongo roja
- Apenas empezamos no empiecen- hago puchero- y ni le den ideas a la bisabuela, capaz que quiere le dé tataranietos ahora- nos reímos
- No mi niña- la voz me hace dar un brinco del susto- primero se casan, luego ya vemos lo demás- se ataca de la risa mi bisabuela junto con mi abuela que venía con ella, yo que siento mi corazón latir a mil- pero no te preocupes, primero vean si son tal para cual, al fin- mira a mamá- a ustedes no las casaremos para que se conozcan- y le guiña el ojo, mamá esta super roja- bueno ya ya, vayan a bailar, ser de mi familia y no estar en la pista es como negarme- y nos empuja para para la pista.- te dije que esa familia terminaría en la mía- dijo susurrando pero alcance a escuchar
- Sí, pero no era Akiko- Marian ni Alice-Meghan, si no Akiko- Amy, solo tuviste que esperar más tiempo- le susurro mi abuela a mi bis, le dio un beso en la mejilla para después jalarla a la pista.