Ryeo frunció los labios, mirando el perfil de SiWon y odiándose a sí mismo por su incapacidad para no notar su línea de la mandíbula sin compromisos y esa pequeña extensión de su cuello visible por encima de la corbata, o la curva de los hombros y bíceps de SiWon bajo su atuendo formal azul oscuro de Ministerio.
Tener una líbido apestaba, Ryeo concluyó con mal humor, reforzando sus escudos mentales.
Fue un alivio cuando finalmente llegaron a las habitaciones de SungMin.
Pero el alivio de Ryeo no duró mucho.
La preocupación que había sentido por su amigo se había disparado de nuevo cuando vio que SungMin todavía estaba sentado en el sofá. ¿Realmente había estado en esa posición por horas?
Para empeorar las cosas, la mirada de SungMin estaba desenfocada y distante, como si no estuviera del todo allí. Era descaradamente obvio que algo estaba muy mal con él, y Ryeo sintió otra oleada de ira hacia SiWon y los padres de SungMin por no darse cuenta de algo tan obvio.
-¡Sólo míralo! -Dijo Ryeo- ¡Ni siquiera parece que se haya movido de ese sofá desde que lo dejé en la mañana! ¿No ves que no es normal?
SiWon lo siguió a la habitación con una expresión de asombro en su rostro, como si todavía pensara que Ryeo estaba perdiendo el tiempo.
-No deberías haberte metido con su mente - dijo Ryeo. - No eres un adepto de la mente profesional. Sin duda lo jodiste. ¡Y ahora es todo raro y enfermizo!
-No “jodí” nada, como lo dijiste con tanta elocuencia - dijo SiWon, pero luego frunció el ceño, mirando a SungMin. - ¿Min?
SungMin lo miró sin pestañear.
-¿Qué?
Dijo después de unos momentos, como si le costara entender que le estaban preguntando algo.
-¿Ves?
Dijo Ryeo.
Los ojos de SiWon se estrecharon. Estudió a SungMin cuidadosamente.
-Borg'gorn, ejecuta una exploración médica completa en Príncipe Min.
Dijo SiWon.
Nada preparó a Ryeo para lo que sucedió después de eso.
Escuchó aturdido los hallazgos de Borg'gorn, apenas contribuyendo a la conversación.
Aunque había pensado que SungMin tenía algo de malo, no tenía ni idea de lo grave que era la situación.
SungMin estaba enfermo. Muy, muy enfermo. Estaba en peligro real de perder su mente, estaba en peligro de morir. Y no había nada que Ryeo pudiera hacer para ayudar. Ni siquiera podía pretender entender por lo que estaba pasando su amigo.
Había olvidado completamente que el cuerpo de SungMin tenía necesidades diferentes a las suyas. Nunca había pensado realmente en la importancia del hecho de que SungMin era un retroceso.
Los retrocesos compartieron rasgos comunes con surl'kh'tu, una subespecie de los antiguos Calluvian que tenían un solo compañero a lo largo de sus vidas. Estar separado de su ser humano era literalmente perjudicial para la salud de SungMin.
Por supuesto, como el imbécil cínico y escéptico, SiWon se mostró reacio a creer los hallazgos de Borg'gorn.
-¿Se supone que debo creer que Min no puede vivir sin ese terrano?
Dijo SiWon, su tono de hielo.
-Como no hay precedentes, solo puedo suponer una hipótesis - dijo Borg'gorn. - Pero las lecturas del príncipe Min son muy preocupantes. Puede que no necesariamente muera, pero creo que su salud física y mental seguirá deteriorándose - una pausa. - ¿Puedo hablar libremente, príncipe SiWon? - SiWon asintió y la IA continuó: - Esta noche iba a informarle que tenía preocupaciones sobre la salud del príncipe Min.
Continúo.
-Me he tomado la libertad de observar al joven príncipe desde su regreso de Sol III. Me he dado cuenta de que su concentración ha ido deteriorándose a un ritmo alarmante. Ayer pasó seis horas y media sin moverse, sin mirar a nada que pudiera ver. Tuve que decir su nombre siete veces para que reaccionara. Si la conciencia del príncipe de su entorno se mantiene deteriorándose a este ritmo, es muy probable que eventualmente caiga en un estado de coma, tal vez con una conciencia muy limitada de su entorno. Recomiendo diariamente inyecciones de los supresores de hormonas surl'kh'tu para hacerlo estar más alerta y concentrado, pero no puede ser una solución a largo plazo. Con el tiempo dejarán de funcionar.
-¿Y estás absolutamente seguro de que la causa es el gen de retroceso?
Dijo SiWon.
-Siempre hay un margen para el error, pero tengo noventa y nueve puntos punto dos por ciento de certeza - respondió Borg'gorn. - Además de la anterior hormona en su sistema, hay cambios significativos en herovixu del joven príncipe, el área del cerebro que es específica para los retrocesos.
Los labios de SiWon se doblaron en una línea delgada antes de que su mirada se fijara en SungMin.
-Háblame, niño. ¿Es realmente tan malo?
SungMin humedeció sus labios, sus ojos violetas eran el único color en su cara pálida.
-Yo... no lo sé. Ni siquiera he notado que estaba fuera de zona por horas. Pero siento... - Parecía que luchaba por reunir sus pensamientos. - Siento que hay un agujero en mí que me está chupando desde adentro hacia afuera.
La cara de SiWon era como la piedra.
-¿Y eso es por él? ¿El terrano?
SungMin se estremeció, acurrucándose en sí mismo, como si incluso la mención de su humano lo lastimara.
-¿Importa?
Dijo, apenas moviendo los labios.
SiWon clavó sus ojos en la cabeza inclinada de su hermano, y Ryeo se estremeció. Aunque no estaba dirigido a él, podía sentir la fuerza de la telepatía de SiWon mientras SiWon examinaba la mente de SungMin.
En ese momento, Ryeo supo sin lugar a duda que SiWon era peligroso. Se suponía que era imposible leer la mente sin contacto visual.
¿SiWon era clase 5? ¿Clase 6? ¿Clase 7?
Un escalofrío recorrió la espalda de Ryeo. Se acercó a SungMin, envolviendo un brazo alrededor de él.
Por fin, SiWon apartó la mirada de su hermano, apretó la mandíbula y su expresión vagamente enferma.
-Tu mente es un desastre - dijo lacónicamente. - Algunas partes no reaccionan a los estímulos en absoluto. Borg'gorn tiene razón. Tu mente se está muriendo, Min.
SungMin miró a su hermano mayor sin comprender.
Con el corazón en la garganta, Ryeo lo acercó más, tratando de proyectar comodidad y probablemente fallando. ¿Cómo podía proyectar consuelo cuando se sentía enfermo de preocupación?
-Vas a hacer algo para ayudarlo, ¿Verdad?
Dijo con voz ronca, mirando a SiWon.
SiWon lo miró y no dijo nada.
SungMin negó con la cabeza, viéndose abatido.
-No te preocupes por mí - dijo en voz baja. - No voy a deshonrar a nuestra familia.
SiWon cerró los ojos por un momento.
-Min...
-Lo sé.
Dijo SungMin, mordiéndose el tembloroso labio inferior.
Ryeo miró de SungMin a SiWon, odiando lo inútil y desvalido que se sentía.
-Pero ¿No podemos simplemente llevarlo de contrabando a la Tierra? ¿Como yo lo hice?
-¿Y luego qué? - Dijo SiWon. - Es imposible borrar el historial del teletransportador. Tarde o temprano, se encontraría a Min y las consecuencias serían mucho peores. E incluso si no lo encontraran, nunca sería capaz de poner un pie en su planeta natal y ver a su familia. ¿Es ese el tipo de vida que quieres para él? ¿Crees que estaría feliz de vivir así, sin todos sus vínculos familiares? Los telépatas no están destinados a vivir sin comunicación telepática durante largos períodos de tiempo. Él sería miserable.
La barbilla de Ryeo se levantó.
-Al menos estaría vivo y cuerdo. ¡Debemos hacer algo!
SiWon se quedó muy quieto.
-Nosotros no haremos nada - dijo irritado. - Tú irás a casa y mantendrás la boca cerrada sobre todo lo que has escuchado.
-¿Cómo puedes ser tan despiadado? - Dijo Ryeo, poniéndose de pie. - ¡Es tu hermano!
-Sí - dijo SiWon. - Es mi hermano, y este es un problema familiar. Tú no eres familia. Vete. Has sobrepasado tu bienvenida a hace mucho tiempo.
Ryeo se sonrojó con furia y humillación y salió de la habitación.
Cielos, no podía esperar para liberarse de ese imbécil. Nunca había odiado más a nadie.