Capítulo 21.- El sendero equivocado
- Señor Stark, sería un gusto que nos acompañara en clases – Peter despertó de un salto y le tomó un segundo darse cuenta que estaba en el aula y que se había quedado dormido en clase de cálculo, Pietro lo había movido para despertarlo
- Lo siento señor Green, no volverá a pasar – se disculpó el muchacho todo avergonzado
- ¿Te sientes bien? – preguntó el maestro a su alumno favorito, este último par de semanas Peter se ha visto desmejorado, estaba pálido, ojeroso, se dormía en clases y todo esto era notorio para sus maestros que habían elevado su preocupación a Charles, él sabía por lo que el muchacho estaba pasando y pensaba que el cambio de vida que estaba atravesando tenía todo que ver con su estado actual
- Si… cansado nada más, estoy bien – contestó Peter más avergonzado aún, eso de que lo expongan frente a toda la clase no era bueno
- ¿Por qué no vas a la enfermería a que te revise nuestro médico?, siempre cabe la posibilidad de que te vaya a dar gripe o algo, ve… - dijo el maestro y señaló la puerta, Peter suspiró y se levantó, no tenía caso discutir con nadie sobre nada y no tenía ánimos de hacerlo, en todo caso en la enfermería podría dormir en la camilla y estaría un poco más cómodo, diablos… en estos precisos momentos odiaba su vida. Peter caminó por el patio y se chocó con Charles, el director lo miró y ladeó a cabeza al preguntar:
- Peter… ¿has hablado con tu papá?
- No… ¿has hablado tú con él?
- No, no contesta mis llamadas, lo fui a buscar el otro día en sus oficinas pero no me recibió, lastimosamente Tony es una de las personas más testarudas que he conocido en la vida, pero hay que darle tiempo a que se le baje el enojo, ¿a dónde vas?
- A la enfermería
- ¿Qué te duele? – Charles puso la mano en la frente de Peter y luego en su cuello para sentir su pulso, todo normal hasta ahí
- Nada, me quedé dormido en clases, lo siento…
- ¿No dormiste anoche?
- No mucho, suena todo en esa casa, el colchón es muy blando, las almohadas son muy duras, no me hagas caso Charles, Steve hace todo lo que puede y es muy dulce conmigo, Bucky también, pero no tienen dinero a manos llenas ni mucho menos, extraño mi casa – dijo Peter bajando la cabeza, pero no eran solo las comodidades de su habitación o de la torre que extrañaba, era a Tony al que más extrañaba y eso lo estaba matando porque su padre ni siquiera había intentado llamarlo, él había llamado a Glenda y le había dejado su número en un intento de que Tony lo llamara pero no… no lo había hecho, y al igual que a Charles, no le contestaba el teléfono
- Ohhh muchacho, ¿quieres cenar con nosotros esta noche y de paso te quedas a dormir?, la habitación de invitados es tuya cuando quieras, tú lo sabes – ofreció Charles y lo hizo de corazón
- Gracias Charles, pero a Steve no le agrada que no duerma en casa, él no pide mucho pero eso si me dijo que por favor no haga, él se preocupa por mí y no quiero abusar
- No abusas, pregúntale en todo caso, si acepta me avisas y yo mando un auto a recogerte, asumo que lo que Steve no quiere es que andes solo por la vida en autobuses y si a eso vamos yo creo que tiene razón, no hay seguridad extra que sobre, ¿cómo está Wade por cierto?, no lo he visto últimamente
- Wade está bien, dijo que la policía no determina aún si el incendio fue causado o no, no me ha contado mucho de eso, está viviendo en el sillón de Logan pero ya consiguió trabajo en una mecánica de un amigo suyo, lastimosamente solo quedó cenizas del taller, Logan no sabe si vender el terreno e irse a Alaska a trabajar en los barcos pesqueros o hacer un préstamo y levantar su taller nuevamente, está hablando con los bancos por el momento, aún no decide
- Eso si lo sé, yo le ofrecí prestar el dinero pero no lo acepta, ya sabes lo orgulloso que es Logan, la verdad no sé cómo Tony lo convenció la primera vez
- Mi papá tiene la capacidad de convencer a cualquiera de lo que sea
- Eso sí, bueno ve ya a la enfermería, y llámame si necesitas algo por favor, Pietro está preocupado por ti
- Nadie tiene que preocuparse por mí, estoy bien
- Estás pálido, ¿estás comiendo bien?
- Más o menos, mi estómago no está bien un par de semanas
- ¿Desde que te mudaste con Steve?
- Si… pero por favor no se lo digas, yo sé que Eric habla con él y no quiero que se sienta mal, amo las hamburguesas y las papitas fritas, pero cenar todos los días lo mismo te mata – Peter acarició su estómago y sonrió con pena, usualmente él solía cenar stake o pollo o cordero con vegetales, Tony apoyaba la comida chatarra pero no muy seguido porque solía decir que él oliendo la comida engorda, si la come se remata, entonces vegetales en las noches, y la comida que había en casa de Tony era de primera calidad siempre, no se comparaba a lo que Steve podía comprar y abastecer, el cambio fue duro en más de un sentido
- Por eso, ven a cenar esta noche en casa, puedes traer a Steve si quieres, o aún mejor yo lo llamo y los invito a todos, eso es menos sospechoso
- Gracias Charles, en verdad me hace falta una ensalada en mi vida y un stake, ¿podemos cenar stake?
- Claro muchacho, ve a la enfermería, me avisas si necesitas algo
- Claro que sí, nos vemos luego Charles
Peter fue directo a la enfermería en donde el médico lo revisó, tomó una muestra de sangre para hacerle exámenes de rutina y lo dejó dormir en la camilla por un par de horas hasta que Pietro vino a despertarlo
- Hey… hora de irnos – Pietro tenía la mochila de Peter y su saco
- No me quiero ir, odio atender mesas en la cafetería, en serio – Peter se levantó pesadamente y al ponerse de pie se mareó, Pietro tuvo que sostenerlo para que no se cayera
- Siempre puedes fingir enfermedad y quedarte acostado en casa de Steve, ¿no? – Pietro lució preocupado, esta no era la primera vez que Peter se mareaba de la nada
- No… ya hice eso y Wade llegó a acompañarme, Steve no nos encontró en la cama pero… fue incómodo, solo eso voy a decir, luego me sentó en la sala y me habló del respeto que debo tener en casa, que no es su casa sino de Bucky también, me habló de muchas cosas que ni siquiera me quiero acordar, me había llevado sopa de pollo creyendo que en serio estaba enfermo, a ratos es más paranoico que mi papá, me siento atrapado…
- Pero por lo menos no te prohibió ver a Wade, ¿o sí?
- No, eso no, pero sus visitas son supervisadas, te juro que pienso que el universo se ha confabulado en mi contra y todo lo que ha podido salir mal en mi vida y en mi relación con Wade, ha salido mal, me siento frustrado
- Ánimo amigo, por lo menos esta noche vas a cenar en casa, vamos… te llevo a la cafetería
- Odio la cafetería…
Peter, Pietro y Wanda subieron al auto de Pietro y fueron por la autopista en dirección a la cafetería de Bucky, los chicos conversaban de todo un poco principalmente para distraer a Peter que iba acostado en el asiento trasero del jeep, si estaba prestando atención a la conversación pero algo lo distrajo, tras ellos dos autos los seguían a distancia corta, Peter meneó la cabeza pensando que estaba siendo paranoico sin razón, así que sacó su teléfono y tomó algunas fotografías de los autos y se las envió a Wade, siempre cabía la posibilidad de que no estuviera tan loco como pensaba. A los pocos segundos Wade le llamó
- ¿Estás bien Peter?, ¿en dónde estás?
- En la autopista en el auto de Pietro, ¿nos están siguiendo? – el corazón del muchacho empezó a latir con violencia, Wanda se volteó y asustada preguntó:
- ¿Nos están siguiendo?, ¿Quién?
- Ese auto plateado y el otro verde, creo que esos dos, Wade… ¿sabes quiénes son? – Peter le contestó primero a Wanda que miró aprensiva a los dos autos y luego le preguntó a Wade que corrió por el departamento de Logan tomando su chaqueta y las llaves de la camioneta
- Si, son hombres de Beck, no creo que hagan nada pero para estar seguros no salgan de la autopista, ¿a qué altura están?, ¿están cerca de alguna estación de policía? – Wade estaba tratando de conservar la calma, o por lo menos sonaba calmado a Peter que dijo:
- Pietro, Wade dice que no salgamos de la autopista y que vayamos a una estación de policía, ¿estamos cerca de alguna estación de policía?
- No tengo idea, Wanda… - Pietro vio a su hermana que ya tenía el teléfono en las manos y estaba chequeando mapas y trazando caminos para la estación más cercana
- Ok., ok lo tengo, la estación más cercana es la Metropolitana, tenemos que seguir tres kilómetros en la autopista y entrar por Melrose, ¿te ubicas? – la chica estaba hablando con su hermano que asintió y preguntó:
- ¿No será mejor llamar al 911?
- ¿Llamamos al 911? – preguntó Peter a Wade que respondió:
- No es mala idea, sigan a la estación ya estoy saliendo yo a la autopista – dijo el mayor y en verdad que Peter podía escuchar el inconfundible ruido del motor de la camioneta de Logan
- No no no Wade, no lo hagas, ya llegamos nosotros a la estación y estaremos bien – dijo Peter asustado, no quería poner en riesgo a su novio
- No me cuelgues el teléfono Peter y sigue diciéndome si los ves – Wade salió a la autopista y condujo como maniático de este a oeste, los muchachos estaban viniendo de oeste a este, entonces no tardaría en encontrarlos, o por lo menos eso esperaba, no podía creer que Beck siguiera con lo mismo, ¿no fue suficiente quemarle el taller a Logan?, maldito Beck…
- Siguen ahí, les tomé otras fotos, ya nos acercamos a la salida de Melrose – dijo Peter mirando hacia atrás en la vía, Pietro era un conductor bastante prudente pero ahora estaba excedido en los límites de velocidad, él también estaba asustado
- Bien, tomen la salida y lleguen a la estación, entren a la estación no solo lleguen allá, rodéense de policías, dudo que ellos los sigan dentro, pero corran por favor – Wade hablaba con desesperación
- Ok., ok., ya entramos por Melrose y… si, esos dos autos entraron también, están cerca de nosotros, Pietro¡¡¡ - Peter se quejó porque se golpeó la cabeza en el asiento, el auto verde los había chocado por detrás
- ¿Qué pasó? – preguntó angustiado Wade, él también ya había tomado la salida por Melrose, estaba cerca de su niño
- Nos chocaron por detrás – dijo Peter y volvió a saltar en su asiento porque los volvieron a chocar
- No se detengan, lleguen a la estación – gritó Wade con urgencia
- Ahí está, ya la veo – dijo Wanda y señaló la estación de policía que estaba en la esquina a dos cuadras de distancia, Pietro aceleró pero eso no evitó que lo chocaran otra vez, Peter se volvió a quejar pero se alistó para correr, Pietro se subió a la vereda con todo y jeep y los tres muchachitos salieron corriendo del auto y entraron atropelladamente a la estación, por los ventanales vieron como los otros dos autos simplemente pasaron a toda velocidad por la calle
- Hey… ¿dónde es el incendio? – un oficial que vestía uniforme azul se acercó a los muchachos y preocupado los miró
- Nos venían siguiendo, dos autos, ya pasaron por la calle, ahí están… - dijo Pietro con voz temblorosa y señalando la calle, ninguno de ellos había estado antes en algo como eso, bueno… salvo Peter esa vez que lo secuestraron y que ni siquiera quería acordarse de ello
- Ya estamos dentro de la estación, un oficial ya está con nosotros – dijo Peter al teléfono, Wade respiró aliviado y dijo:
- Quédense ahí, llamen a Charles, no salgan salvo que un oficial los lleve en un patrullero, no piensen que están a salvo aún, ¿me escuchaste Peter? – el tono de Wade no dejaba lugar a dudas, el muchacho respondió simplemente:
- Si Wade, ya llamamos a Charles y él de seguro viene por nosotros – Peter hizo una seña y Wanda sacó su teléfono para llamar a su padre
- ¿Con quién habla? – el oficial le preguntó a Pietro señalando a Peter que tenía una mano en su vientre y lucía a punto de vomitar
- Con su novio, él fue el que nos dio la idea de venir aquí, esos tipos me chocaron por detrás tres veces, nos quisieron sacar del camino o algo – Pietro estaba recobrando el color del rostro poco a poco mientras explicaba la situación, al inicio no estaba coherente pero ya estaba hilando mejor las ideas
- Pues fue una buena idea la de venir aquí, vengan… no es conveniente que estén afuera, ¿llamaron a sus padres? – el oficial los condujo tras unas puertas de cristal a una sala más privada donde estaban muchos más policías
- Si, ya los estamos llamando – Pietro señaló a Wanda que obviamente estaba hablando con Charles y trataba de tranquilizarlo, le aseguró que estaban bien y le dio la dirección de la estación de policía en la que estaban
- Han tenido muy buen sentido de autoprotección al venir aquí directamente, vengan… sería bueno que hablen con uno de los detectives, esperen aquí – el oficial los llevó a un ambiente que tenía varias sillas, los muchachos se sentaron y esperaron, a los pocos minutos un oficial salió y les hizo una seña, ellos entraron a una sala más privada que tenía un espejo en toda la pared, eso Peter ya lo había visto en su visita anterior a una estación de policía, los chicos se sentaron y esperaron, a los pocos minutos llegó Charles todo preocupado, al verlo los tres muchachos se lanzaron a sus brazos, el mayor besó sus frentes por turnos y aún no podía organizarlos para que le cuenten lo que había pasado que un detective entró en la sala, lucía cansado y mal dormido por lo que tenía un café en las manos y cara de pocos amigos
- Buenas tardes, soy el detective Shaw, me gustaría saber lo que ha pasado aquí – preguntó el mayor y escuchó durante veinte minutos las explicaciones de los muchachos, miró las fotografías, luego salió de la estación y analizó el abollado jeep y al regresar miró sus notas y suspiró al decir: - Muy bien, ¿van a levantar cargos?
- ¿Podemos levantar cargos? – preguntó Charles intuyendo la respuesta, el susto que pasaron los chicos fue muy real pero los detalles importantes no los tenían, en las fotos de Peter no se alcanzaban a distinguir las placas completas de los autos que los perseguían, no sabían los nombres de los perseguidores, solo sabían que eran hombres de Beck pero tampoco tenían forma de atarlo a los cargos, su denuncia de nada serviría
- Pueden hacerlo si gustan pero… no tenemos mucho con lo que continuar, yo recomendaría iniciar todo con una orden de restricción, seguridad extra a sus hijos, no los deje volver de la escuela solos, hay medidas que pueden adoptar ustedes y nos pueden mantener informados, estaremos contentos de ayudar en lo que podamos – contestó el detective asumiendo correctamente la posición económica de las familias de los chicos guiándose por sus apellidos, sus uniformes del colegio y básicamente por la presencia de Charles Xavier
- Si, ya algo así nos dijeron en la otra estación, muchas gracias por su tiempo detective, vámonos muchachos
Charles se molestó con toda esta situación pero lo disimuló bastante bien, los chicos ya no dijeron nada más y siguieron a Charles por la estación hasta la salida, afuera estaba el auto del mayor y los tres chicos subieron, el chofer arrancó y Charles manejó el jeep de Pietro, sin mayores demoras llegaron a casa de Charles desde donde llamaron a Steve y le contaron lo que pasó, el pintor llegó todo angustiado y el alma le volvió al cuerpo al ver a Peter sano y salvo, todo se iba complicando cada vez más
Peter había llamado a Wade que le dejó de contestar el teléfono luego de que siguió a aquellos que los persiguieron en la autopista, el muchacho estaba preocupado pero no había nada que podía hacer si no sabía en dónde estaba su novio, le hubiera gustado poder salir a buscarlo pero sabía que esa batalla estaba perdida, él no podría salir de esa casa probablemente hasta el día siguiente, luego de un frugal almuerzo, Steve estaba hablando de seguridad con Eric y Charles en el estudio, los chicos habían estado escuchando pero esa conversación estaba de terror
- ¿Estás bien Peter?, solo fue puré de papas con pollo a la plancha, dioses… estás pálido – dijo Pietro que estaba sosteniendo a Peter que salía del baño y se tambaleaba, había vomitado todo el almuerzo y se sentía débil
- Me quiero morir, te lo juro… - contestó el aludido acurrucándose en la cama de Pietro y tapándose con una manta
- Peter… ¿te has hecho una prueba de embarazo? – preguntó Wanda como quien no quiere la cosa
- Claro que no, no estoy en estado, mi papá me llevó al hospital, me hicieron un eco y toda la cosa, tú estás igual de paranoica que él – contestó Peter todo molesto
- Ok., ¿hace cuánto te hiciste todos esos exámenes?, no te enojes conmigo, solo piensa y contéstame, porque la debacle con tu papá fue en la mascarada y de eso es más de un mes, casi dos la verdad entonces bien podrías estar en estado ahora – Wanda se encogió de hombros al decir esto, su teoría era válida, Peter abrió la boca para responder pero la cerró, la volvió a abrir pero la volvió a cerrar, aparentemente se había quedado sin palabras, Pietro se llevó una mano a la frente y meneó la cabeza
- Me hice una prueba de sangre en el colegio hoy, pero no me darán los resultados hasta mañana, no sé si entre los exámenes consta uno de embarazo, por todos los dioses, soy un estúpido – Peter se dejó caer en la cama y se tapó el rostro con una almohada
- No, no eres estúpido, los accidentes pasan – dijo Wanda con profunda pena
- Claro que los accidentes pasan, yo mismo soy el ejemplo más patético de eso, yo fui un accidente y no puedo creer que lo mismo que le pasó a mi papá me esté pasando a mí, no puede ser… es que no puede ser… - Peter se levantó y empezó a caminar por la habitación, se frotaba las manos y sintió su corazón latir con violencia
- Espera aquí, alguien en esta casa debe tener una prueba de embarazo, si no encuentro una mando a comprar una, no te estreses sin necesidad, pronto lo sabremos con certeza o por lo menos lo intentaremos saber hasta que te den los resultados mañana en la escuela, ¿está bien? – prepuso Pietro a un muy angustiado Peter que asintió y se llevó ambas manos a la cabeza
- Si por favor, necesito saber, ¿por qué soy tan estúpido? – Peter se dejó caer en la cama y Wanda le acarició los cabellos con una mano mientras que con la otra le hizo una seña a Pietro para que vaya a conseguir la prueba de embarazo
Casi una media hora se tardó Pietro en volver y en sus manos tenía una cajita, Peter la tomó y fue inmediatamente al baño, los nervios lo estaban matando pero la incertidumbre era peor, afuera Pietro caminaba de un lado a otro esperando a que Peter saliera y cuando lo hizo su expresión era bastante confusa
- ¿Y? – preguntó Pietro
- Es positiva, si estoy en estado, mi papá va a matarme… - Peter estaba en shock y aún tenía la prueba en las manos, Wanda se acercó y miró, efectivamente se habían pintado dos rayitas, era un resultado positivo, sin embargo la muchacha dijo:
- Estas cosas no son seguras, especialmente en hombres fértiles, su grado de seguridad es más alto en mujeres, yo creo que tu mejor opción es esperar a los resultados de tus exámenes de sangre, y ni siquiera los exámenes de sangre son seguros si estás de pocas semanas, deberíamos ir mañana al hospital nuevamente para que te hagan un eco, eso sí es seguro – dijo Wanda en un intento de tranquilizar a Peter
- No no no, no quiero llamar a Stephen o a mi papá – Peter lucía genuinamente asustado
- No los llames, en la enfermería de la escuela no hay un ecógrafo, ¿o sí? – preguntó Wanda a Pietro que se encogió de hombros al decir:
- No lo creo, hay aparatos varios pero son para el tratamiento de lesiones deportivas, aunque pensándolo bien pueda que si haya un ecógrafo, podemos ir allá primero y si no hay podemos ir al centro de salud que está cerca, no sé si sea estatal o no, pero si no lo es no te preocupes amigo, yo te cubro – aseguró Pietro mirando la cara de pánico de su mejor amigo, él estaba consciente de que Peter no tenía dinero como para hacerse un examen que ellos suponían era costoso
- Gracias Pietro… no puedo creer que esto esté pasando
- Salimos de dudas mañana, respira Peter, solo respira, ¿se lo vas a decir a Wade?
- Claro, si me contestara el teléfono se lo diría, él siempre me ha dicho que le gustaría formar una familia algún día, ser el padre que no tuvo, él quiere tener hijos, yo también pero eso era solo en teoría, yo no puedo estar en estado ahora, eso lo arruinaría todo – dijo Peter con desesperación
- ¿No lo vas a tener? – preguntó Wanda en un susurro
- Eso no es lo que dije, yo apoyo el aborto pero… nunca me vi a mí mismo practicándome uno, no… eso tampoco – Peter se abrazó a sí mismo y meneó la cabeza
- Ok., no entremos en pánico antes de hora, mañana lo confirmamos y llamas a Wade, no estás solo amigo, si Steve te bota de la casa puedes venir a vivir aquí, mis papás te recibirán con los brazos abiertos, mi papá Charles te quiere más a ti que a mí – dijo Pietro con una débil sonrisa
- Eres un exagerado Pietro – sonrió de mejor manera Wanda, pero todos quedaron callados cuando el teléfono de Peter timbró, era Wade el que llamaba
- Wade, por todos los dioses me tienes aquí muriéndome y me ignoras, ¿estás bien?, ¿dónde diablos estás? – Peter se levantó y caminó hasta la ventana, escuchó un suspiro y luego su novio respondió:
- Estoy bien, ya alcancé a los que te perseguían y no te van a molestar nunca más – Wade estaba de pie en medio de un terreno baldío, tenía las manos y la ropa manchadas de sangre, habían cuatro personas que apenas respiraban y casi no se podían mover, Wade había estado entretenido rompiéndoles los huesos para averiguar el paradero de Beck
- ¿Qué pasó?
- Solo digamos que los ablandé un poquito, ya llamé a una ambulancia pero hasta que sus piernas sanen no podrán perseguir a nadie un par de meses
- Por todos los dioses Wade, esa no es la manera – Peter se hundió en la desesperación, le mataba el tono impersonal con el que Wade hablaba, como si del clima se tratara, él sabía por labios de su propio novio a lo que se dedicaba antes, sabía de lo que fue capaz en el pasado pero Peter estaba convencido ahora de que Wade no heriría ni a una mosca, al escucharlo hablar ahora se dio cuenta de lo equivocado que estaba
- Es la única manera que conozco, Peter… quiero que estés tranquilo, quiero que sepas que te amo y que por ti lo haría todo y eso es lo que voy a hacer
- No no no Wade, ¿qué es lo que estás pensando?
- Debo hacer lo que debía haber hecho antes de que todo esto escalara de la forma en la que lo ha hecho, quiero que estés tranquilo amor, todo estará bien, te amo Peter
- No no no, Wade no!!!! – Peter le gritó al teléfono pero ya fue tarde, Wade ya había colgado y se dirigió a su auto, se subió y condujo por las estrechas calles de uno de los barrios industriales de Manhattan, siguió las indicaciones que esos hombres le habían dado y llegó a una nave industrial, tomó un bate de béisbol de tras del asiento, se bajó y caminó tranquilamente hasta entrar, varios sonidos de armas rastrillándose llenaron el ambiente pero Wade no se inmutó y siguió caminando directamente hasta Beck que estaba al fondo de la amplia estancia y tenía un revólver en las manos
- ¿Cómo nos encontraste? – preguntó Beck apuntando su arma directamente al pecho del intruso
- Pedí direcciones, no te preocupes que como bien tu dijiste no soy un asesino, pero si los ablandé un poquito pero respiraban, las ambulancias ya estaban en camino – respondió Wade con una tranquilidad pasmosa
- ¿Y tienes las bolas de venir a decirme que golpeaste a mis hombres? – en cambio Beck si se iba molestando por la situación
- Si… realmente sí, pero no es todo lo que vine a decirte
- ¿A qué más has venido entonces?
- Bueno… me quieres pues me tienes, estoy harto de este tira y afloja, no puedo seguir exponiendo a Peter a esto, entonces… estoy de vuelta, tú ganas… - Wade lanzó el bate de béisbol a los pies de Beck que lo miró confundido por unos momentos pero luego sonrió ampliamente, cubrió las distancias que lo separaban de Wade y lo abrazó al decir:
- Bienvenido a casa…