Capítulo 7.- Celos
Peter despertó pero deseó no haberlo hecho, se había despertado mucho en la noche porque a su criterio Pietro se movía mucho, eso no había sido un problema antes pero como ahora estaba adolorido todo le molestaba y no pudo dormir todo lo que le había gustado, Tony entró a la habitación con un té caliente en las manos y al ver a Pietro completamente dormido susurró:
- ¿Cómo te sientes hijo?, ¿pudiste dormir algo?
- No… mi enfermero estrella se movió mucho en la noche y no me dejó dormir, ¿puedo no ir a la escuela hoy? – Peter se abrazó a su cobertor y miró a su papá con ojos de borrego a medio morir
- ¿Qué tienes de interesante hoy?
- Tengo que entregar unos trabajos pero Pietro los puede llevar por mí, no tengo exámenes ni nada de eso, en verdad no quiero ir papá – Peter tendió la mano a su papá que la tomó, la besó y le dijo:
- Ok., despierta a tu enfermero estrella que él sí tiene que ir, yo voy a trabajar hoy desde aquí así te hago compañía, ¿qué tal suena?
- Genial… gracias papá
- ¿Panqueques para el desayuno?
- No… mejor solo fruta, algo liviano porque me arde un poco el estómago – mintió Peter, le dolía el trasero y pensó que una dieta blanda esa semana era lo más prudente en su condición actual
- Ok., tu descansa – Tony besó la frente de su hijo y le dejó el té caliente en la mesita de noche, Peter movió a Pietro para despertarlo y luego todo fue bullicio en esa casa
Pietro tomó su desayuno y se fue a la escuela, Peter desayunó también y durmió la mayor parte de la mañana bajo la atenta mirada de Tony que en verdad trabajó en su computador portátil desde la habitación del muchacho, cuando despertó tomó gelatina, se acomodó de mejor manera en muchas almohadas y miró una película mientras su papá fue a su oficina un momento porque una crisis de algún tipo se había desatado, eso aprovechó el muchacho para hablar con su novio y decirle que no iba a ir a la escuela y que tampoco iba a salir de casa así que no podían verse ese día
Stephen estaba de pie junto a la máquina de café del piso de cirugía, su operación había tardado menos de lo esperado así que estaba esperando su café cuando el jefe de Trauma acompañado del jefe de cardiología se acercaron por el pasillo:
- ¿No te fue bien en tu cita ardiente de ayer? – Bruce preguntó todo interesado, Stephen siempre había sido reservado con su vida privada, nunca nadie se supo de una relación hasta ahora
- No…
- ¿No? –preguntó Hypnos mitad preocupado mitad divertido al ver la confusión dibujada en el rostro de su amigo
- No lo sé, ayer Tony me presentó a su hijo, eso fue intenso, no pensé ver a Tony como papá, eso fue nuevo, bastante dulce pero aterrador – Stephen frotó su rostro con las manos antes de tomar el vasito de café que ya estaba listo
- No me digas que ya llegaste a la parte donde tu novio es aterrador – preguntó el rubio cardiólogo
- No, Tony no es aterrador, no sé qué decirte de Peter, su hijo – respondió Stephen apoyándose de mejor manera en la pared
-¿Qué edad tiene? – preguntó Bruce interesado
- 17, creo que está cerca de cumplir 18
- Ohhhh esa es la peor edad, mi sobrino tiene 16 y aunque es muy bien portado, mi cuñado vive preocupado por él, ¿cuál es el problema con ese muchacho?, ¿no le agradas? – preguntó Hypnos dándole un sorbito a su café
- Creo que no, Tony me dijo que no le había presentado a ninguno de sus novios antes entonces, ya te podrás imaginar la situación, no estoy necesariamente preocupado porque a la final estoy saliendo con Tony más o menos cuatro meses entonces todo es nuevo pero… me gustaría que funcionara, Tony es genial – Stephen sonrió cuando dijo esto, Bruce arqueó una ceja al decir:
- El amor te ha pegado duro amigo, nunca te había visto así
- Pues si, quedó en venir a buscarme para ir a almorzar – dijo Stephen meneando la cabeza, usualmente él no hacía citas en su hora de almuerzo, él no solía perseguir a nadie ni acoplar sus horarios por nadie, siempre había sido él el buscado hasta que Tony llegó a su vida, ahora estaba en terreno desconocido pero el ingeniero valía la pena
- ¿La cita ardiente es ahora al mediodía? – preguntó Bruce con una sonrisa divertida
- Esperemos que si, y hablando de tu sobrino, ¿cómo sigue? – Stephen sabía de la condición cardíaca del sobrino de Hypnos, ese muchacho había tenido una vida complicada
- Está estable, ha estado estable por algún tiempo pero siempre se necesita tener cuidados varios, no va a poder correr maratones en un futuro cercano pero es a final de cuentas un muchacho normal, tiene un nuevo mejor amigo que aún no conozco pero habla mucho de él, ya sabes… cosas de chicos – Hypnos se encogió de hombros al decir esto
- Cosas de chicos… claro… - Stephen sonrió al recordar las circunstancias en las que conoció a Peter, el sobrino de Hypnos era solo un año menor pero su colega hablaba de él como si en verdad fuera un niño más pequeño, igual que Tony, dioses… estos muchachitos hacían todo lo que no debían y sus padres ni enterados, bueno… él no podía intervenir en eso, Tony se enteraría cuando deba enterarse, y hablando de Tony, su teléfono sonó y era el pelinegro el que llamaba…
Al mediodía Tony regresó con una sopa de pollo para su retoño que ávido la tomó, él sí tenía hambre pero no le parecía prudente comer nada muy sólido, el doctor le había dicho que el dolor iba a ir bajando a medida que se aplicara la crema pero eso no le parecía a Peter, nunca se había sentido tan incómodo antes en la vida
- ¿Ya comiste papá? – preguntó el muchacho devolviéndole el pocillo vacío a Tony que meneó la cabeza y dijo:
- Aún no, quedé de almorzar con Stephen pero… cambio de planes – Tony palmoteó la pierna de su hijo al ponerse de pie
- Pues siento mucho el haber arruinado tu cita – respondió Peter con todo el sarcasmo del mundo
- No has arruinado mi cita porque yo quedé de pasar a buscar a Stephen al hospital para ir a comer, ahora él va a venir aquí y me va a traer el almuerzo, de paso puede revisar tu cabeza, ¿será que necesitas una tomografía o algo?
- Si me hicieron una, no es nada papá solo necesitaba dormir, ¿él va a venir a almorzar contigo?
- Si, debe estar por llegar, sería genial que bajaras a saludar y de paso comes helado de postre
- Me niego a dejarme sobornar con un helado – poco le faltó a Peter hacer un puchero, se cruzó de brazos involuntariamente por lo que Tony lo miró por un segundo para luego tomar su mano y preguntar:
- Hijo… ¿tanto te molesta que tenga novio?
- No… si… no sé…
- Mira que me ofreciste ser racional, trátalo un poco y vas a ver que es muy buena persona, ¿lo harás por mí?
- ¿Tengo opción?
- Siempre tienes opción pero me agradaría que seas civilizado, no te estoy pidiendo que ames a Stephen con locura y pasión y lo trates como si fuera el padre que no tienes y siempre quisiste, no…, solo quiero que le des una oportunidad, me lo prometiste no te olvides
- Si papá, no me olvido, pero igual no me vas a sobornar con un helado
- ¿Un pretzel?
- ¿Qué tal un auto?, ya tengo casi todo el dinero ahorrado para el jeep que quiero y ya tengo mi licencia de conducir y si manejo responsablemente y toda la cosa
- ¿Un auto eh?, no presiones tu suerte Peter que yo no estoy necesariamente de acuerdo en que tengas uno en estos momentos, ya quedamos en que íbamos a comprar tu auto cuando vayas a la universidad
- Faltan unos pocos meses papá, no te hagas el estrecho – protestó el muchachito sin mayores esperanzas, le había insistido mucho a su papá para esto y hasta ahora no lo había conseguido, Tony era bastante estricto con el dinero que dejaba que su hijo maneje, eso lo había heredado de Howard, su padre, y a la larga si le había enseñado a valorar el costo de las cosas
- No me hago nada pero sigo sin estar de acuerdo, yo apoyo cumplir los tratos y el nuestro era que vamos a comprar tu auto cuando vayas a la universidad
- ¿No podemos negociar?
- Por el momento mejor no, ya llegó Stephen y en verdad quiero que revise tu cabeza así que no me hagas caras, es mejor tener un médico que venga a visitas a domicilio que ir a un hospital – la campanilla del elevador había sonado
- No necesito revisiones extras papá – esto sí dijo Peter con toda la molestia del caso
- Te aguantas hijo, compláceme en esto por favor o te llevo al hospital, tú elijes
- Ok., ok., dioses…
Tony salió de la habitación de su hijo y volvió en solo unos momentos con aquel hombre que le sonrió al saludarlo y decir:
- Hola Peter, tienes buen semblante como para estar gravemente enfermo, según tu papá claro está
- Hola Stephen, solo necesitaba dormir un poco, me siento un poco cansado, eso es todo – respondió Peter incorporándose un poco en la cama, el médico sacó una linternita de su bolsillo y se sentó en la cama para poder ver de mejor manera al muchacho
- Ok., a veces nos hace bien tomarnos un día y descansar, mira la luz… eso es… - Tony estaba de pie al otro lado de la cama y miraba con atención a Peter que seguía sin problemas la luz de la linternita
- Me duele un poco la cabeza aunque creo que eso es porque he dormido mucho
- Puede ser, ¿has tenido vómito?
- No…
- ¿Mareo?
- No…
- ¿Desorientación?
- No…
- Ok., creo que vivirás – Stephen apagó la linterna y le sonrió al muchacho antes de ponerse de pie y guardar la linterna en su bolsillo
- ¿Entonces mañana puede ir a la escuela sin problemas? – preguntó Tony y aunque quisiera sonar despreocupado no lo logró
- Claro que sí, lo único que hay que cuidar es que los puntos de su cabeza no se infecten, por lo que veo Pietro hizo un buen trabajo en secarte el cabello anoche así que, si tienes esos mismos cuidados en los próximo días no vas a tener problemas, salvo eso… es un golpe que no presenta sintomatología alguna, así que no te preocupes
- Eso es bueno saber, Peter ya comió pero se nos va a unir para el postre así que… ¿vamos? – Tony señaló la puerta de la habitación a lo que Stephen decía:
- Tengo cirugía a las 4 así que tenemos un poco de tiempo, no hay apuro
- Eso siempre es bueno, ¿de qué es tu cirugía?, ¿del caso que me contaste ayer? – preguntó Tony y sonaba interesado, Peter los miró marcharse y meneó la cabeza, a su papá siempre le habían gustado los programas de médicos y casos de emergencias reales, por eso no le sorprendió mucho a Peter su interés por un médico, rayos…
Tony y Stephen bajaron las escaleras y fueron a la cocina para calentar el almuerzo, pero antes de que llegaran muy lejos el médico tomó del brazo a su novio, lo volteó y lo besó en los labios con pasión, el ingeniero se rindió al beso y sin darse mucha cuenta caminó de retro por la cocina hasta que su espalda se chocó suavemente contra el refrigerador. Stephen besaba como los dioses, era el mejor amante que había tenido el pelinegro en mucho tiempo y eso era decir algo, el médico amaba lo apasionado que era su novio por lo que le sorprendió cuando Tony puso las manos en su pecho y lo empujó rompiendo efectivamente el beso
- ¿Qué pasó?
- Peter puede bajar
- Ok., ¿estás consciente de que tu hijo es casi mayor de edad verdad?
- Si, pero él nunca me ha visto en los romances con nadie, está algo molesto con esta situación y no quiero echar más leña al fuego, lo entiendes, ¿verdad?
- Claro que sí, no tengo hijos pero siempre puedo entender a los adolescentes hormonales que celen a su papá con su nuevo novio
- No eres mi nuevo novio, eres el único y es lógico que Peter te vea como amenaza, así que gracias por tu paciencia y buena vibra, hay que darle tiempo
- Ok., ok., traje la pasta que tanto te gusta
- Ohhh te amo… - Tony volvió a besar a Stephen y no pudieron evitar dejarse llevar nuevamente, las frías manos del médico recorrían suavemente la espalda del ingeniero por dentro de su buso, las manos frías era algo que usualmente molestaba a Tony pero ahora ya no lo veía así, amaba las manos de su novio y lo hábiles que eran en los momentos cruciales de intimidad, y en eso estaban tan entretenidos que no se dieron cuenta que desde lo alto de las escaleras Peter los observaba con rabia en los ojos…
Esa semana fue infernal para Peter, su cabeza no necesariamente le molestaba pero su trasero lo estaba matando, nunca en la vida había sentido tanta incomodidad, a su criterio esa maldita crema no estaba funcionando como debería a tal punto que estaba considerando ir al hospital nuevamente pero de la pura vergüenza no se había animado a ir y mucho menos iba a ir a la enfermería de su escuela, no no no, primero muerto antes de que alguien le vaya con el chisme a Charles que se lo contaría a Tony al que le explotaría la cabeza, no… todo menos eso…
El principal problema era que como supuestamente estaba herido no podía entrenar futbol, Tony había sido comunicado de este particular por el entrenador de Peter así que esa semana envió su auto a recogerlo todos los días, eso hubiera sido genial en cualquier punto de la vida pero ahora no le hizo mucha gracia a Peter porque le coartaba sus escapadas para poder verse con Wade, ellos no se habían visto desde el día en el que Peter fue al hospital y de eso había sido una semana
Así que una de esas tardes Peter le dijo a Tony que iba a ver la práctica de futbol porque extrañaba a sus compañeros de equipo y luego de clases le pidió a Pietro que lo acercara al taller de Logan, al entrar vio a su novio concentrado en la reparación de una motocicleta, Wade se veía extremadamente sexy, era alto, musculoso, tenía los cabellos castaños claros y facciones varoniles definidas, muy muy atractivo, tenía 24 años y estaba estudiando la secundaria por correspondencia porque por sus malos roces con la justicia no lo había podido hacer en su tiempo normal
- Hey baby boy, por todos los dioses no sabes cuánto te he extrañado, ¿estás bien?, he estado tan preocupado por ti – Wade corrió a Peter y lo abrazó levantándolo del piso y haciéndole dar vueltas en el aire, a Peter le encantaba la facilidad que tenía su novio de cargarlo como si no pesara nada
- Estoy bien amor, estoy bien, yo también te he extrañado mucho – Peter buscó los labios de su novio y se unieron en un muy necesitado beso, Logan estaba también por el taller y sonrió al ver a la joven pareja en los arrumacos, él si estaba preocupado por las heridas del muchacho, no quería ni pensar en las consecuencias si Tony levantaba cargos o algo de eso, al parecer nada había pasado para suerte de Wade
- ¿Seguro que estás bien?, me tienes preocupado por lo que me contaste – susurró Wade haciendo sonrojar a Peter, eso de hablar de asuntos tan privados delante de Logan y del resto de operarios del taller lo mortificaba más que cualquier otra cosa
- ¿Podemos ir arriba a hablar un ratito? – preguntó Peter todo avergonzado
- ¿Puedes?… tú sabes – preguntó Wade poniendo una mano en las caderas del muchacho que dio un paso hacia atrás meneando la cabeza pero dijo:
- Es privado lo que quiero contarte, quiero hablar contigo solamente…
- Vayan tranquilos – dijo Logan caminando por el taller cigarro en mano y un aire despreocupado, Peter se sonrojó furiosamente porque los otros operarios silbaron, uno de ellos hasta le palmoteó la espalda a Wade al pasar a su lado, pero Wade lo ignoró todo y tomó de la mano a su niño y lo llevó a la planta alta, al llegar se besaron con pasión y abrazados fueron caminando hasta la cama en donde cayeron y continuaron besándose y acariciándose hasta que Peter sintió la cálida mano de su novio acariciarle el estómago dentro de su camiseta
- No Wade… aún me duele… no creo que pueda hacerlo – Peter se incorporó en la cama sosteniendo la mano de su novio para que no siga avanzando a su pecho
- ¿En serio te duele?, ¿si has usado la crema?
- Voy en el segundo tubo, en las indicaciones dice que depende de la irritación si puede durar varios días, busqué en internet también, aparentemente es cuestión de tiempo, es incómodo pero estoy mucho mejor que hace unos días, no te preocupes – Peter sonrió y acarició la mejilla de su novio que le sonrió de vuelta y se acomodaron de mejor manera en la cama, se sacaron los zapatos y se acurrucaron juntos, esto también estaba muy bien, a Peter le gustaba mucho estar así entre los brazos de Wade, se sentía amado y protegido
- ¿Qué me querías contar? – susurró el mayor acariciando suavemente los cabellos del muchacho que suspiró y lo abrazó con un poco más de fuerza, así que continuó preguntando: - ¿Problemas en casa?, ¿se enteró tu papá de… tu herida?
- No, eso no pero si tengo un problema con mi papá – Peter escondió el rostro en el pecho de su novio que le acarició la nuca y le preguntó:
- ¿Sigues molesto por lo que me contaste?
- ¿Es que cómo se le va a ocurrir a mi papá estar de novio con ese idiota? – Peter se sentó en la cama de golpe y se abrazó a una almohada, Wade se acostó de mejor manera y le acarició la espalda al preguntar:
- Es lógico que no te agraden los novios de tu papá
- No, no es lógico porque mi papá no ha tenido novios antes, ha tenido revuelques antes, creo… ni siquiera estoy seguro – Peter sonó frustrado
- He leído artículos en revistas acerca de tu papá y entre los adjetivos que usan para describirlo es playboy
- ¿Playboy?, ¿mi papá?
- También dicen que es millonario, genio, filántropo, padre abnegado pero si… playboy
- No es ningún playboy, no tiene tiempo para ser playboy si siempre está en la oficina o en su laboratorio, yo solía hacer mis tareas en su laboratorio con él pero me distraía mucho en lo que sea que estuviera trabajando y por eso mejor lo esperaba en su oficina, por eso construyó en pent-house en la misma torre para poder estar cerca de mí y estar cómodos los dos, ¿playboy?, por todos los dioses – el muchacho se levantó de la cama y empezó a caminar de lado a lado en la pequeña estancia
- Ok., no es playboy porque las publicaciones siempre exageran, te voy a creer en eso pero… ¿qué es lo que te molesta del doctor ese?, ¿es grosero contigo o algo?
- No… es muy amable, demasiado amable, yo creo que está tras el dinero de mi papá
- Eso no lo creo
- ¿Por qué estás tan seguro?
- Porque si es el jefe del área de neurocirugía de ese hospital tan grande debe ganar muchísimo dinero, cuando me hablaste de él y me diste su nombre lo busqué en internet y conseguir una cita con él es dificilísimo, es uno de los neurocirujanos más cotizados en el país, sus cirugías son de vanguardia, hace procedimientos experimentales con un índice de supervivencia sumamente alto, vienen a consultas con él desde todas partes del mundo, hasta trabajó en un proyecto con la Casa Blanca hace un par de años, entonces no… no creo que lo que le atraiga de tu papá sea su dinero
- ¿Le estás formando un club de fans a ese imbécil mano suelta?
- ¿Imbécil mano suelta?, ¿se ha atrevido a golpearte a ti o a tu papá?
- Claro que no
- Ohhhh… ese tipo de mano suelta, ¿los encontraste en la cama o algo?
- No por todos los dioses Wade, ni toda la terapia del mundo podría ayudarme con los severos daños psicológicos que me causaría ver a mi papá teniendo sexo con alguien, mi papá no debe tener sexo, no puede tener sexo, debería ser asexual como mínimo, está muy viejo como para andar desnudo por la vida acostándose con alguien – Peter sonaba completamente frustrado, la verdad como nunca había visto a su papá en una relación con nadie todo esto le había pegado durísimo, y le daba una rabia tremenda ver a ese médico de cuarta abrazar, besar o simplemente tocar a su papá, es que eso debería ser ilegal
- No estás siendo racional Peter – dijo Wade arqueando una ceja, este lado a su novio no le conocía, Peter lo miró con ojos asesinos y simplemente respondió:
- No me importa
- Ok., ok., ¿entonces mano suelta por qué? – preguntó interesado el mayor
- El otro día los encontré besándose en la cocina y ese… tipo… le estaba acariciando la espalda a mi papá, pero luego su mano bajó y le acarició el trasero, no te rías Wade – todo esto Peter explicó con una incomodidad bárbara y haciendo expresiones con su rostro, como si fuera completamente impensable que alguien le tocara el trasero a su papá, esto le pareció sumamente gracioso a Wade que se estaba empezando a reír lo que causó que el muchacho se llenara de rabia
- Me encantan tus crisis existenciales
- No te atrevas a burlarte de mí Wade – casi gritó Peter y le lanzó a su novio el cojín de una sillita que estaba al pie de la cama, Wade lo esquivó y lo abrazó al decir:
- Ya ya ya, no te enojes, ven acá… eso es…
- Suéltame Wade
- No te puedes ir así todo molesto, dame un beso… así… - le costó al mayor tranquilizar en algo a su muy iracundo novio pero lo llenó de besos y atenciones, logró calmarlo y lo recostó de nuevo en la cama acomodándose entre sus piernas
- No… Wade… Wade… no puedo… me duele…
- Esto no te va a doler, relájate… eso es… - el mayor le abrió los pantalones al más joven y sin demora introdujo su mano entre sus ropa y comenzó a masturbarlo, Peter se retorció en la cama y gimió, Wade era sumamente hábil en lo que hacía y logró relajar a su niño, especialmente cuando lo jaló de los talones ubicándolo al filo de la cama, le bajó apropiadamente los pantalones, se arrodilló en el suelo y lo atendió con la boca
- Dioses Wade… - Peter se mordía los labios, esto lo habían hecho algunas veces pero el muchacho asumió que como no había tenido sexo en esa semana estaba necesitado y sensible, ahora lo estaba sintiendo como nunca, se sentía en el cielo y Wade era el puto dios
- Vente para mi… vente para mi… - Wade llenó de besos y mordidas el estómago de Peter mientras lo seguía atendiendo con las manos, el muchacho estaba por venirse y cuando lo hizo un hondo gemido de satisfacción llenó la habitación entera, Wade escaló por su cuerpo y lo besó con pasión en los labios, Peter no sabía ni cuál era su nombre en estos momentos y no le importaba
Wade acarició el rostro del muchacho que tenía los ojos cerrados y la respiración agitada antes de estirarse hasta su mesa de noche y tomar un paquete de pañitos húmedos para limpiar el vientre de Peter
- ¿Más tranquilo? – preguntó el mayor cuando Peter se acurrucó en su pecho y se cubrió con el cobertor de la cama, no le apetecía vestirse aún
- Tú tienes esa habilidad de calmarme, te amo Wade
- Yo te amo a ti
- Yo los amo a los dos, que dulces se ven – una voz habló desde las escaleras, Peter saltó asustado en la cama y se abrazó al cobertor al decir:
- ¿Qué diablos haces aquí Pietro?
- Vengo a llevarte a casa
- No quedamos en nada, ¿o si?
- No, pero Wanda me llamó a decir que papá Charles invitó a tu papá a cenar en casa, y como se supone que vas a llegar conmigo pues… aquí me tienes de chofer, es mejor irnos porque la práctica acabó hace rato
- Ok., enseguida bajo – dijo Peter sin moverse de donde estaba, Pietro le hizo una seña a Wade y bajó las escaleras, el joven castaño se levantó, se vistió, fue al cuarto de baño y ya refrescado salió, besó a su novio y bajó las escaleras en donde al final le esperaba Pietro que estaba charlando con Logan
- Vámonos, no queremos llegar tarde – dijo Pietro cargando su mochila
- Adiós Logan – dijo todo cortado Peter, el mayor le sonrió y le hizo una seña de despedida, los muchachos salieron y fueron directo al auto
El viaje a casa fue muy divertido, Pietro le estaba contando a Peter sobre su última conquista y la cita que habían planificado para el fin de semana, Peter sería su coartada para no ir a dormir a su casa y de esa manera estaban haciendo planes, entraron a la casa de Pietro riendo y charlando pero la sonrisa se le borró del rostro a Peter al ver en el salón a Eric y Charles conversando tranquilamente con su papá, acompañado del médico aquel… diablos…