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Los Guardianes por samyalexg

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Notas del capitulo:

Un sabado mas y aqui estamos de nuevo

Capítulo 18

 

 

Diez años atrás, después de la primera noche juntas.

 

Habían pasado toda la noche amándose, pero cuando necesitaron comer, Sasha se ofreció para ir a buscar algo al comedor. A esa hora todos estaban corriendo o entrenando, ellas habían obtenido un permiso especial para no entrenar ese día. Cuando entró al comedor estaba vacío, tomó varias cosas que sabía le gustaban a su nueva esposa, incluso un vaso de la cosa asquerosa que ella acostumbraba a beber.

Tenía mucha prisa por regresar, incluso casi tira a un guardia que estaba haciendo sus rondas. Entró a su nuevo departamento y mientras ponía la comida sobre la mesa llamó a Robín, pero no obtuvo respuesta, tomó un par de chocolates y luego fue hasta su habitación, pero al abrir la puerta se encontró con una sorpresa.

“Hola Sash” Dos palabras en una simple oración fue suficiente para derretir cada molécula de Sasha.

“¡Ay!” Sus piernas se volvieron gelatina, sentía que iba a desmayarse, así que se recargó contra la pared y se dejó caer lentamente “Estoy soñando” Robín estaba vestida con un sexi conjunto de encaje, la había visto desnuda, había recorrido todo su cuerpo durante la noche y aun así cuando la vio con ese hermoso conjunto, le fue imposible mantenerse en pie.

“No, no soy un sueño” Robín camino hasta ella de la forma más sensual que pudo “Te he estado esperando” Se sentó lentamente a horcajadas sobre las piernas de su esposa “No sabes cuánto te extrañe” Le susurró mientras recorría con sus manos el camino hasta acariciar sus pechos, poco a poco comenzó a subir la blusa por el torso de su amada mientras iba besando cada parte que quedaba expuesta.

Sasha estaba embelesada y cuando por fin se dio cuenta de lo que estaba pasando llevo sus manos hasta el trasero de su esposa y la apretó contra ella “Pensé que tenías hambre”

“Es costumbre hacer ejercicio antes del desayuno” Robín llevo un pequeño chocolate a la boca de Sasha “No te lo comas” No había duda de quién estaba a cargo. Cuando el calor de la boca de Sasha comenzó a derretir el chocolate esté escurrió un poco, así que Robín se acercó y lo lamió. Fue la cosa más sexy que Sasha se hubiera imaginado y estaba sucediendo.

No, definitivamente no era un sueño y como buena esposa debía obedecer a Robín “Totalmente de acuerdo, es hora de entrenar” No dudaron más y se besaron con ansia, con pasión, con ganas.

“Espera” Sasha se detuvo sin separarse mucho de los labios de Robín “¿Kika te regalo esto?”

Robín no entendió por qué su esposa estaba preguntando eso, cuando ya deberían de estar de nuevo en la cama “Fue Cam”

Sasha sonrió “Recuérdame darle las gracias” La sujetó de la espalda y la hizo recostarse para poder quedar encima de ella. Al diablo con la cama el suelo también servía. Sasha atacó el cuello de Robín, durante la noche había encontrado un punto sensible debajo de su oreja, sabía que si la besaba en esa parte pronto empezaría a gemir “Eres hermosa”

“Tú eres hermosa” Le desabrochó el pantalón con mucha dificultad “Quítate la ropa, necesito sentirte” Sasha se puso de pie y con una sonrisa traviesa empezó a quitarse el resto de su ropa de una forma muy sensual. Robín no podía creer lo hermosa que era su esposa, tenía un lindo cuerpo fuerte y atlético por todo el entrenamiento que realizaban. Su Sash era simplemente perfecta, incluso con la cicatriz que tenía en la pierna.

Sasha estiró su mano para ayudarla a ponerse de pie y cuando estuvo a su altura la sujeto de la cadera y la pego a su cuerpo mientras volvía a besar su cuello “Hueles a fresas”

Robín se río “Siempre estás pensando en dulces”

“No, ahora no” Empezó a morder el hombro de Robín “Ahora solo pienso en ti” Acarició su espalda lentamente “En tu piel, en tus besos”

Robín gimió y el sonido hizo temblar a Sasha “Me gusta cuando me acaricias así” Sasha sonrió sin dejar lo que estaba haciendo “Vamos a la cama Sash” Le susurró.

Sasha asintió, tomó la mano de Robín y la condujo a la cama y con un pequeño empujón la hizo caer sobre esta “Amo verte desnuda, pero admito que este conjunto me está volviendo loca” Se acomodó encima de ella y empezó a besar los pechos de su hermosa esposa sobre el conjunto de encaje.

Robín jadeaba y arqueaba la espalda, necesitaba más “Sash te necesito” Le dijo antes de gemir, su esposa sabía que tenía que hacer, no necesitaban más explicaciones, ya no. Bajo su mano buscando ese punto sensible, estaba muy caliente y mojado. Con cuidado empezó a acariciarlo mientras ella subía para besar a Robín “Quiero sentirte dentro de mí” Amaba ese conjunto, pero ahora mismo le estorbaba, se apartó un segundo para poder retirar la prenda, Dios era un espectáculo lo que sus ojos veían, no pudo evitar relamer sus labios.

De nuevo se acomodó sobre ella y con cuidado busco la abertura e introdujo solo un dedo, Sasha sabía que Robín le indicaría cuando necesitaba que introdujera el segundo “¿Lento?” Robín no le respondió, en cambio empezó a moverse suavemente, no pasó mucho antes de que ambas aumentaran el ritmo, fue entonces que Sasha supo que era momento de introducir el segundo dedo.

Robín gritó muy bajito y casi hace que Sasha se corra “Más, quiero más” Con cuidado doblo sus dedos encontrando esa zona. Era lo único que recordó de las instrucciones que había leído en el libro que le regaló su amiga y resultó que fue una de las mejores cosas que había aprendido esa noche. La acarició suavemente sabiendo que su esposa no tardaría en correrse después de eso. Apoyó su brazo a un lado de Robín y se levantó para poder verla cuando lo hiciera, pero Robín la jalo contra ella y la abrazo muy fuerte mientras su cuerpo empezaba a temblar “Ya, ya” Sasha detuvo sus caricias, pero no saco sus dedos, le gustaba sentir como el centro de Robín palpitaba.

Ella también necesitaba correrse, pero sabía que una vez que su esposa se recuperara, se haría cargo para que tuviera un buen orgasmo “Te amo”

“Yo más” Le dijo Robín obligándola a cambiar posiciones “Mi turno” La besó antes de bajar directamente a dónde Sasha más la necesitaba “Voy a hacer que te corras en mi boca” Sasha casi se corre con esas palabras, sabía que no iba a durar mucho una vez que Robín empezará. Fue directo a su clítoris, lo jalo suavemente con sus labios antes de empezar a chuparlo. No, no iba a durar mucho, sujetó la cabeza de Robín obligándola a qué se pegará más a ella, podía sentir cómo su cuerpo empezaba a hormiguear, sin querer empezó a cerrar sus piernas aplastando un poco la cabeza de Robín, pero ella puso sus brazos sobre ellas obligándola a mantenerse abiertas mientras seguía con su trabajo. Robín metió dos dedos dentro de ella y entonces sucedió, tocó el cielo mientras todo su cuerpo temblaba. Jamás imaginó que hacer el amor con su esposa fuera de esa forma, pero le alegraba que por fin de mucho esperar ambas podían compartir esa experiencia, su hermoso petirrojo se acomodó encima de ella y la abrazo “Me gusta mucho como sabes”

“¿Más que tú jugo de verduras?”

Robín la pellizco juguetonamente en el brazo “Por supuesto, necesito descansar un poco antes de ir a desayunar”

“Yo igual” Sasha se durmió sujetando a Robín entre sus brazos, con la cabeza de su amante sobre su pecho y con sus piernas entrelazadas.

Cuando despertaron se ducharon juntas y fueron en busca de su olvidado desayuno. Afortunadamente tenían un microondas donde podían calentar sus alimentos.

“¿Pasa algo?” Le preguntó Robín.

“Es solo que es muy raro no escuchar a Adler” Nunca imaginó que iba a extrañar que su hermana la molestara.

“¿Ya la llamaste?”

“Sí, pero ayer me dijo que ya no volvería”

Siguieron comiendo sin decir demasiado “¡No puede ser!” Gritó Robín, Sasha de inmediato se asustó “¿Adler?”

Sasha miró los ojos de su esposa en busca de su hermana “¿Es una broma?” Robín negó con la cabeza “¿Cómo pasó eso?”

“No lo sé, pero ahora está dentro de mí”

Sasha sujeto el rostro de su esposa “Adler ¿Qué fue lo que hiciste?”

“Yo no hice nada”

“¿Entonces qué haces ahí dentro?”

Robín y Adler empezaron a reír “¿Me escuchas?”

“Claro que te escucho, ahora deja a Robín”

“Estoy en tu cabeza idiota”

Sasha se dio cuenta de que su hermana le estaba hablando dentro de ella y no a través de Robín “No es gracioso” Pero ellas continuaron riéndose. Volvió a su lugar y siguió comiendo, solo que ahora estaba muy enojada con su hermana y su esposa.

“Lo siento Sasha, solo fue una broma”

“Pues no es gracioso, en verdad me asusté”

Robín se levantó de su silla y fue a sentarse en las piernas de su Sasha “¿Me perdonas?” Le dijo dándole un pequeño beso.

“Necesito algo más que eso”

Robín sonrió “Oh amor, lo tendrás. Pero antes debemos hacer algo”

“¿Qué cosa?” Le preguntó mientras la abrazaba de la cintura.

Robín suspiró mientras le acariciaba el brazo “Adler quiere visitar a Gina, está preocupada por ella”

Sasha se quedó callada, mientras miraba fijamente a su esposa “¿Cuándo te lo dijo?”

“Mientras dormíamos, ella me despertó y me pidió que la dejáramos ir” Sasha se enojó mucho, Adler no podía aparecer, así como si nada y mucho menos cuando ellas estaban desnudas en la cama. Como siempre no hizo falta que dijera nada, su esposa sabía muy bien lo que estaba pensando “Ya hablé con ella y le dije que eso no estaba bien” Robín acarició la nariz de Sasha con la suya “Ella prometió no hacerlo de nuevo”

“¿Por qué no me preguntó a mí?”

Robín la beso “Porque tu hermana sabe quién manda en esta relación”

“¿Ah sí?” Le preguntó mientras mordía su cuello “¿Y se supone que eres tú?”

“¿Lo dudas?”

Sasha le sonrió, claro que no, si alguien podía hacer lo que quisiera con ella, esa era Robín “¿Qué dices tú, está bien que ella vaya a verla?”

Robín lo pensó un momento “Si yo estuviera en su lugar, me haría sentir mejor que tú fueras a visitarme mientras estoy con los sanadores” Sasha se enamoró un poquito más de su esposa “Así que debemos dejar que ella la visite”

“Gracias Roberta” Lo dijo muy seria y evitando la mirada de Robín para que no la descubriera.

Robín saltó de su lugar “¡Adler no hagas eso!”

Pero Sasha no pudo aguantar más la risa, su esposa merecía pagar por su broma que le habían hecho “Lo siento amor, no lo resistí” Robín la tomó de la mano y la levantó de su silla “¿A dónde vamos?”

“Te voy a enseñar que pasa cuando juegas conmigo”

 

Hoy

Hablar: articular sonido o palabra para expresarse o comunicarse, pero ¿Quién debe hablar primero? Porque, aunque quedamos que íbamos a hablar, ninguna de las dos ha dicho nada.

Estábamos sentadas comiendo tranquilamente, podíamos escuchar el viento que golpeaba la casa de campaña y no decíamos nada. A diferencia de los otros días, está vez era menos estresante, ambas estábamos más tranquilas y solo estábamos disfrutando el momento en nuestro pequeño refugio. Una de las cosas que más me gustaba de los Guardianes era todo el equipo que tenían, está casa, por ejemplo, no importaba que afuera estuviera cayendo una tormenta de nieve o que estuviera haciendo un calor insoportable, la temperatura siempre se mantenía agradable.

“Parece que va a hacer frío” Me dijo mientras buscaba su taza.

“¿Quieres algo en especial?” Tomé mi taza, lista para cumplir su pedido “Puedes pedir lo que quieras”

“¿De verdad?” Yo asentí “Me gustaría un té de durazno” Cuando escuché cuál era su pedido casi vomito ¿Por qué de todos los sabores tenía que pedir ese? “No muy caliente, por favor”

Simplemente le sonreí, había sido una perra con ella estos días, así que nada me costaba hacer su bebida, aunque eso significará que me diera mucho asco. La llené con agua y puse mi dedo sobre el botón, el olor me llegó totalmente ¡Diablos, diablos! Traté de no respirar mientras le entregué su bebida. Ella acarició mi mano y me quitó la taza para luego beber. No había puesto mucha atención en lo que acababa de hacer, lo único que quería es que se tomará eso y desapareciera ese horrible olor.

“Está delicioso” Yo intente sonreír, pero es que de verdad todo esto estaba siendo una tortura. No respires, no respires y cuenta hasta diez, pero solo no respires. Agradecía que Adler no estuviera en ese momento, porque de seguro haría algo para que oliera esa peste “¿Quieres hablar?” Me encogí de hombros, vamos no respires, no respires “¿Sasha estás bien?”

No tenía caso mentirle, aunque no tenga su don sabe cuándo lo hago “No me gusta el durazno” Me tape la boca y la nariz.

“Lo sé” Ella tranquilamente soplo su bebida y el olor llegó a mí de nuevo.

No pude resistir más, intenté abrir la puerta, pero en mi desesperación atasqué el cierre, Robín tuvo que ayudarme para que pudiera salir. Estaba obscuro pero la luz de la Luna me ayudaba a ver, me dirigí hasta un gran cactus y entonces pude vomitar. Era peligroso que lo hiciera en ese lugar, pero es que no tenía muchas opciones, no había nada más que enormes cactus y plantas espinosas. Cuando por fin terminé de sacar todo lo que tenía en mi estómago tuve que buscar apoyo, olvidando de que estaba poniendo mi mano sobre el cactus “¡Carajo!” Mi mano estaba llena de pequeñas y dolorosas espinas rojas. Si eso no fuera suficiente mi Arcub me alertó de la presencia de un animal venenoso, fueron segundos cuando empecé a escuchar el sonido de unos cascabeles.

“No te muevas” Robín estaba detrás de mí “No te vayas a mover Sasha, es una víbora”

“Y yo que pensé que ibas a cantar villancicos” La víbora seguía haciendo ruido y cada vez me ponía más nerviosa.

“¿Desde cuándo tienes el sentido de humor de Adler?” Le iba a responder que mis chistes si causaban gracia, no como los de mi hermana, pero empecé a sentir un peso extraño sobre mi pie, lo único bueno es que no me había quitado mis botas y aún las llevaba puestas “¡No te muevas!” Cuando escuché el disparo mi primer instinto fue saltar y sostenerme de lo primero que encontré, así es, de nuevo puse mis manos sobre el cactus. Mi mano que ya tenía espinas ahora tenía más y la otra no estaba mejor “¿Sasha estás bien?” No podía responder, mis manos picaban y yo trataba de no llorar “Oh cariño, lo siento”

“Me duele” Le dije enseñándole mis manos “Me duele mucho”

Robín con mucho cuidado me llevó hasta nuestra casa de campaña “Creo que es mi turno para curarte” Buscó entre sus cosas y sacó unas pequeñas pinzas. Yo me senté con cuidado sobre mi bolsa de dormir y ella tomó mi mano derecha. Una a una comenzó a retirar las espinas que se negaban a salir fácilmente, incluso podía ver cómo jalaban mi piel.  Trate de no llorar, pero se me salían las lágrimas “Calma Sash, vas a estar bien” No lloraba por eso, bueno tal vez un poco. Lloraba porque después de que yo había sido una maldita con ella, aun cuando la había tratado como si fuera una basura, ella estaba curando mis manos “No debí haber pedido ese té de durazno, pero necesitaba darte un escarmiento por cómo me has tratado”

No le respondí, en realidad estaba de acuerdo. Merecía eso y más, bueno tal vez no las espinas, en verdad me dolía cualquier movimiento que hacía con mis manos “Robín, creo que debemos hablar” Había llegado el momento de aclarar las cosas.

Ella detuvo lo que estaba haciendo y me miró a los ojos. Había olvidado lo lindos que eran “Está bien, te parece si jugamos al juego de las preguntas” Yo no sabía qué juego era ese y creo que ella lo noto “Te haré dos preguntas y una vez que tengas las respuestas tú podrás hacerme una pregunta ¿De acuerdo?”

“¿Por qué yo solo puedo hacer una pregunta?”

Ella me sonrió “Porque es mi juego” Para nada era un juego justo, pero yo tenía un arma secreta, una que usaba muy de vez en cuando y solo funcionaba con ella. Puse una cara triste, no sabía si iba a funcionar después de tanto tiempo, pero ella acarició mi mejilla “Está bien será una y una” ¡Sí! Todavía lo tenía.

Trate de limpiarme una lágrima, pero con la suerte que tenía me iba a espinar la cara. Podría usar al Arcub y sus nanobots para qué me ayudarán, pero entonces Robín ya no me tocaría y después de este juego no sé qué suceda con nosotras. Ella jaló la manga de su blusa y me limpió la cara “Si de verdad tengo a alguien más ¿Por qué no viaja conmigo? ¿O por qué es Cam quien cuida a mi hija?”

No supe qué decir, esas eran dos preguntas, pero no iba a quejarme. Robín buscó de nuevo las pinzas y tranquilamente siguió sacando las espinas esperando a que yo respondiera “Soy una idiota ¿Verdad?” Quería ponerme de rodillas y pedirle perdón ¿Cómo había sido tan idiota?

Ella no se detuvo, solo sonrió y siguió con su tarea “Esa es tu respuesta y tu pregunta ¿De verdad?”

No, claro que no. Era mi forma de empezar a decirle que había sido una horrible persona, que no merecía que ella estuviera curándome y que me ahogaría en una alberca llena de té de durazno si ella lo pidiera “¿No hay nadie, nunca lo hubo?”

Robín se acercó rápidamente y me sujeto del rostro con sus dos manos “Tal vez ahora eres gruñona e insoportable” Entonces me besó, un beso en los labios que no duró lo suficiente pero que me dejó viendo estrellas “Pero solo te quiero a ti y nunca existirá nadie más” Ella seguía sujetando mi rostro “¿Aún sigues enojada conmigo?”

No, por supuesto que ya no estaba enojada con ella. Lo estaba conmigo “No” Fue lo único que pude decir.

“Bien, tal vez lo estés después de esto” De repente me dio una bofetada que me dejó la mejilla ardiendo “Eso es por hablarme tan feo y gritarme” Zas me dio una más, en la otra mejilla “Eso es por asustar a mi hija”

Cerré los ojos esperando una tercera, pero nada sucedió “¿Ya no me vas a golpear?”

“¿Quieres que lo haga?”

“No” Robín golpea muy duro y mi pobre cara ya estaba muy lastimada “¿Me perdonas?”

Robín se acercó a mí y de nuevo me sujetó para que la viera fijamente “Me lastimaste y mucho” Yo asentí “Pero te amo Sasha y la vida es muy corta para estar enojada con la persona que amas” Me beso de nuevo, solo que está vez fue uno de esos besos que nos gustaban tanto, uno que nos dejaba con el corazón acelerado y buscando aire desesperadamente “No sabes las veces que soñé con hacer esto de nuevo”

“Yo también” Quería abrazarla, pero mis manos aún estaban llenas de espinas “Siempre me gustó besarte”

“¿Solo besarme?” Acarició mis mejillas, justo donde me había golpeado “Yo extrañe todo de ti ¿Por qué no querías hablar conmigo?”

Trate de cerrar mi mano, pero las espinas me obligaron a abrirla de nuevo, Robín también lo noto y se acomodó para seguir sacándolas “Cuando Kika me dijo que habías vuelto, yo solo quería ir contigo y abrazarte. Necesitaba sentirte de nuevo en mis brazos, pero entonces Mina…”

“Esa perra, no tenía ningún derecho de decirte nada” Ella revisó mi mano para ver si quedaba alguna espina “Una vez que Kika te inyectó, tuvimos que detenerla. Cam y yo creíamos que iba a apuñalar a Mina con la jeringa, nunca la había visto tan enojada. Yo también quería golpearla, pero mi hija estaba ahí y se estaba asustando, fue lo único que me detuvo de no ir tras de esa maldita y darle su merecido”

“Eso debí haber hecho yo” Robín recorrió mi mano con su dedo índice en busca de esas cosas horribles “Auch, ahí queda una” Me queje cuando su dedo tocó la espina. A simple vista parecían que ya no había más, pero algunas eran tan pequeñas que eran difícil verlas a simple vista.

“Sí, ya la vi” Cuando quitó la última espina siguió con mi otra mano, en esa iba a tardar mucho, no había ni un solo lugar libre “Yo también imaginaba que cuando nos volviéramos a ver, ambas correríamos para abrazarnos y luego nos besaríamos hasta incomodar a todos los que nos observarán. Pero en lugar de eso empezaste a gritar, un poco hiriente, como cuando peleabas con Adler, pero jamás creí que llegarás a comportarte de esa manera conmigo”

Me sentí mal porque era cierto, debí haberla abrazado y besado cuando la vi. Decirle que la amaba y que la había extrañado cada día que no estuvimos juntas. No que en lugar de eso me dedique a ser mi peor versión con ella “Lo siento mucho Robín, sé que no debí tratarte de esa forma, pero es que estaba muy enojada”

“¿Por qué pensaste que te había cambiado por otra o por lo de mi hija?”

“Por las dos” Tenía que admitirlo, de nada servía ocultarlo. No cuando teníamos que aclarar muchas cosas.

Ella me señaló con sus pinzas “Quiero que entiendas algo Sash, te quiero mucho, pero si vuelves a actuar de esa manera” Puso las pinzas en medio de mi frente “Te voy a meter una bala justo aquí”

Mi cuerpo tembló, porque sabía que eso era verdad y porque las balas paralizantes me mandaban a dormir por días. No los Guardianes no usaban balas letales, solo de goma o paralizantes “No te preocupes, si lo vuelvo a hacer” Ella me miró enojada “Dije vuelvo, para referirme a que jamás va a suceder” Le tuve que explicar, porque ella de verdad me estaba asustando por la forma en que me estaba viendo “Yo me meteré esa bala aquí” Señale el mismo lugar que ella.

Robín empezó a reír “No me digas que ya mejórate tu puntería”

Yo solo le guiñé un ojo y le sonreí coquetamente “Un poquito” Ella me dio un beso pequeño y siguió sacando espinas. No podía creer que las cosas se estuvieran solucionando tan rápido, si tan solo le hubiera hecho caso a Adler y hubiera hablado con mi hermoso petirrojo antes.

“Todo va a estar bien” Robín no me miró cuando dijo esto “¿Te parece si hacemos una promesa?”

“Lo que tú quieras”

“Por muy enojadas que estemos, siempre vamos a hablar para explicar lo que ocurre ¿Qué opinas?”

En ese momento me di cuenta de que cuando dos personas que realmente se aman y se encuentran de nuevo después de mucho tiempo, pueden continuar como si realmente el tiempo no hubiera pasado, que pueden seguir encontrando cosas de su pareja que las hace enamorarse un poco más. Así como yo, que me enamoré un poquito más de Robín ese día “Te lo prometo” De nuevo dio un pequeño beso y siguió sacando espinas. Creo que odio los cactus, pero agradecía que mi pequeño accidente hubiera sucedido “¿Robín que sucedió cuando se los llevaron?”

Mi petirrojo suspiró “¿Sabes que el líder de los Rebeldes era el superior de Julián?” Claro que lo sabía, cuando nos enteramos, todo quedó claro y entendimos como Carol pudo modificar tan rápido los E1 para hacernos tanto daño “Nos llevaron a este mundo donde no había nada. Era un lugar con climas muy extraños, hacía mucho calor y en la noche podías congelarte y de repente empezaba a llover, nunca sabíamos que iba a pasar, al menos no al principio. No teníamos nuestros dones y tampoco herramientas, la verdad es que, sin Julián, no lo hubiéramos logrado, él era maravilloso y sabía un montón de cosas, se convirtió en nuestro líder. Todos aún éramos inexpertos en muchas cosas y él era la persona con más rango entre todos nosotros, así que fue fácil dejar que él nos guiará. Además, siempre nos cuidaba” Pude imaginar a mi tutor, cuando trabajaba con él siempre tenía esa sensación de que nos estaba cuidando para que nada malo nos pasará en el laboratorio “Aprendimos a hacer herramientas y algunas armas para protegernos de los animales, y los Rebeldes” El tono de voz de Robín cambio, casi escupió las palabras cuando se refirió a ellos “Ellos intentaron que nos uniéramos a su nuevo grupo, pero aunque teníamos hambre o había días que estábamos muy mal, no cedimos.  Julián decía que ellos no podían arriesgarse a que los traicionáramos, así que quien se uniera a ellos tenía que hacerlo porque de verdad iba a cambiar de bando. Por eso no podían obligarnos” Robín suspiró una vez más “Aun así los Rebeldes no dejaron de intentar todo lo que pudieron para que cediéramos y de vez en cuando se llevaban a uno de nosotros, pero siempre nos regresaban. Incluso hacíamos apuestas para ver quién volvía más rápido”

“¿Te lastimaron?” Ella no me contestó, en cambio se volteó y me enseñó su espalda. Sentí como todo mi cuerpo se tensó, la habían maltratado, eso malditos la llenaron de cicatrices. Me estaba enojando, de verdad quería encontrarlos y golpearlos a todos. Ella se sentó de nuevo con las pinzas en su mano “No cierres la mano, todavía no termino” Respire profundamente y me relaje, una vez que estuve en calma Robín siguió quitando las espinas y con la historia “Carol era la peor, siempre buscaba a Julián y trataba de convencerlo. En un principio lo intentó de una forma amable por así decirlo y luego empezó a amenazarlo, le decía que buscaría la forma de encontrar a Emma y la mataría. Nunca entendí como él podía estar tan calmado, yo me volvería loca si ella me hubiera dicho que te haría daño. Pasó mucho tiempo para que él me explicara por qué. Estábamos los dos intentando pescar algo para comer ese día, me dijo que su esposa era tan fuerte que Carol jamás tendría oportunidad de hacerle daño, incluso quería que lo intentará para que ustedes pudieran encontrarnos”

“Emma no dejó de trabajar después del ataque” Le dije “Yo sabía que estaba destrozada porque se habían llevado a Julián, pero ella siguió curando a los heridos, no se detuvo hasta que volvimos a arreglar las máquinas”

“Creo que ambos confiaban ciegamente en lo que podían hacer su pareja” Robín se puso seria “Al principio contábamos los días para que nos rescataran, pero conforme pasaban los días el ánimo decaía en todos. Después de un año todos habíamos perdido toda esperanza de volver con los Guardianes. Había un chico que había sido explorador, él nos dijo que debíamos reconstruir nuestras vidas en ese nuevo mundo, que lograríamos hacerlo nuestro y si algún día un Guardián aparecía se sentiría orgulloso porque lo habíamos logrado. Después de eso empezamos a construir más cosas; teníamos un sistema de agua potable, regaderas, un área para mantener a salvo nuestros alimentos de los animales. Pero yo aún esperaba a que llegarás por mí y me rescataras, igual que el príncipe de los cuentos”

“Yo te busque, me escapaba para viajar, pero ellos…” Robín puso su dedo sobre mis labios.

“Lo sé, Kika me lo explico” Robín sonrió o lo intento “Un día llegó Jordana”

“¿La exploradora?”

Robín asintió “¿La conoces?”

“Era compañera de Gina, estaban en el mismo grupo de exploradores”

Arcub, le di la orden mentalmente, mandar el ramo más grande de flores y chocolates a Jordana 'Entendido' “¿Qué le pasó a Julián?”

“Teníamos casa, herramientas, comida, pero cuando enfermábamos estábamos indefensos. Hugo era el único sanador, era un genio con las plantas, él nos enseñó mucho, pero cuando este virus llegó no supo qué hacer”

“¿Sabes que era?”

“No, solo que no todos nos enfermamos. Hugo supuso que de alguna forma habíamos recibido una vacuna en nuestros mundos o éramos inmunes y aquellos que enfermaron…”

“Fallecieron” Termine por ella.

“También hubo accidentes, y otras cosas” No me explico que eran esas cosas, pero ella apretó la mandíbula y se notaba muy enojada. No había duda, esa otra cosa eran los Rebeldes “Poco a poco fuimos quedando menos, pero nosotros seguimos” Robín me mostró mi mano “Ya casi termino”

La verdad es que con lo que ella me estaba contando había olvidado que me estaba curando “¿Y los Rebeldes? ¿Qué pasó con ellos?”

“Cuando se dieron cuenta de que ninguno de nosotros se iba a unir a ellos…” Antes de que siguiera tenía una duda.

Toqué a Robín con mi mano libre, me dolía un poco, pero nada insoportable “¿De verdad nadie quiso unirse a ellos?”

Robín me dio un beso rápido, me gustaba mucho, de verdad me gustaba que hiciera eso “Nadie, éramos un grupo, una familia y no íbamos a traicionarnos. Aunque admito que muchas veces estuvimos a punto de ceder, más al final cuando nos quedamos sin comida” Enfermedad, acoso, hambre ¿Qué más tuvieron que soportar? Me controlé, con todas mis fuerzas lo hice. Pero iba a encontrar la forma de que esos estúpidos sufrieran. Y es que conforme avanzaba la historia de Robín también lo hacía mi odio hacia ellos “Fue poco antes de que llegara Jordana. Ya habíamos perdido a varios de nosotros, entre ellos a Julián. Todos estábamos tristes y como si todo se volviera en nuestra contra, perdimos nuestras cosechas. Rara vez encontrábamos un animal, incluso se acabaron los peces y las aves. Todo había desaparecido” No lo dijo, no hacía falta hacerlo, ambas sabíamos que fueron ellos los culpables “Lo poco que teníamos lo dividíamos para que todos tuviéramos algo que comer” Soltó mi mano y se quedó callada “Cuando Hugo murió, pensé que era nuestro fin. Estábamos tan mal que decidimos que lo mejor era ceder, pero ellos no regresaron. Creo que después de todo lo que hicimos ya no nos querían y simplemente nos abandonaron”

“¿Por qué, qué fue lo que pasó? Era la oportunidad perfecta para ellos ¿No?”

“Cuando vieron que habíamos logrado adaptarnos a ese mundo, ellos nos atacaron. Pero nosotros nos defendimos, teníamos la ventaja de conocer toda el área en donde vivíamos y habíamos puesto trampas y acondicionado refugios para protegernos. Pero mientras nosotros teníamos arcos y lanzas ellos tenían armas de fuego”

“Fue lo mismo que pasó cuando atacaron Terra 1” Quería abrazarla, pero mis manos dolían.

“Después de ese último ataque no los volvimos a ver, creo que fue cuando decidieron acabar con nosotros de otra forma” Se quedó quieta, como si estuviera recordando “Nos habíamos recuperado de la enfermedad, habíamos llorado por nuestros amigos y empezamos de nuevo. Cuando nos quedamos sin nada fue como regresar a la pesadilla que había sido mi vida antes de los Guardianes, como si solo me hubieran dado dos años de felicidad para después torturarme”

Y luego cuando regresa yo la trato como basura, ojalá estuviera Adler para que me regañara por haber sido un monstruo con Robín “¿Cómo es que la pequeña resistió?”

“Cuando sucedió lo del virus, la apartamos de todos, teníamos miedo de que ella enfermara. De todos modos, le dio temperatura, pensamos que no lo iba a lograr, pero mi pequeña siempre ha sido una guerrera. Luego cuando nos quedamos sin comida, Cam, Beca y yo le dábamos parte de nuestras raciones para que ella no pasará hambre”

Una parte de mí quería preguntarle más sobre su hija, sobre todo quería saber cómo fue su embarazo. Pero tenía miedo de esa respuesta, porque una de las posibilidades es que los Rebeldes… que ellos. Diablos ni siquiera podía decirlo, porque entonces nadie podría detenerme de encontrar a Carol y llevarla con los superiores para que le dieran su merecido. Estaba perdiendo el control, no me considero una persona agresiva, pero es que escuchar todo lo que había ocurrido con Robín estaba sacando una parte de mí que no conocía. Decidí cambiar el tema, aunque mi siguiente pregunta fue una muy tonta porque obviamente ya sabía la respuesta “¿Por qué te persigue Carol?” Robín me miró con cara de ‘¿Enserio no sabes?’ Yo me encogí de hombros y le sonreí “Bueno, aparte de eso. No creo que me odie tanto como para perseguirte por todas las Terras”

“Pues si te odia, la prueba es que me puso el mismo bloqueador que a Julián” Fue entonces que entendí que el dispositivo con el que había estado trabajando era el de mi tutor “Pero estoy segura de que ahora me odia más a mí”

“¿Por qué?”

Ella sonrió “¿Ya se terminó el juego ¿Verdad?” Yo asentí “Este juego siempre funciona” Agarro su mochila y me enseñó unas esferas. Eran como las que yo usaba, solo que estás eran negras “Con eso he ayudado a capturar a los Rebeldes y uno de ellos fue su líder. Lo que me contaron fue que él intentaba escapar de ellos y llegó a una de las Terras donde había una esfera, entonces se quedó atrapado”

“¿Cómo sabe Carol que fuiste tú?”

“En uno de mis viajes estaba por instalar una de las esferas cuando de repente llegaron, fue todo muy rápido Sash, apenas y tuve tiempo de escapar, pero Carol se quedó con mi equipo. Creo que encontró las esferas y ahora me culpa de lo ocurrido con su líder”

Sabía que ella era valiente, pero eso que estaba haciendo era una locura, era obvio que Carol creía que era su culpa y ahora quiere vengarse. Robín debería cuidarse, más ahora que es madre “¿Cómo se te ocurre exponerte de esa manera? Tienes una hija” Robín me miró enojada y supe que tenía problemas. Me alejé un poco de ella, pero aún sostenía mi mano. Solo cerré los ojos y me preparé mentalmente para recibir otro golpe. Cuando nada sucedió, abrí mis ojos lentamente y la mire de nuevo “Lo siento Robín, pero es que es muy peligroso”

Ella negó con la cabeza y continuó revisando mi mano “No te voy a golpear Sash, aunque lo merezcas no soy ese tipo de persona que golpea a su mujer”

Sí, sí, soy su mujer, claro que sí. Me acerque a ella y la bese “Te quiero y me preocupas que te expongas de esa manera”

“Yo también te quiero” Me beso de nuevo “Y ahora estás conmigo para protegerme” Solo asentí con la cabeza mientras sonreía como una tonta. Claro que la iba a proteger, Robín me dio un besito en la nariz antes de continuar con su tarea “No es que haya planeado dedicarme a ser una cazadora. Cuando me preguntaron que, si quería ayudar, lo pensé mucho y ellos me aseguraron que solo debía activar esas esferas en la Terras que visitaba” Ella empezó a acariciar mi mano para ver si había más espinas “¿Te duele?”

“No, ya no” Revise mis manos y por fin estaban limpias, jamás quiero volver a ver un cactus de nuevo o cualquier cosa que tenga esas horribles espinas “¿Solo tienes que hacer eso?”

Ella asintió mientras guardaba las esferas y sus pinzas en su mochila “Uno de los Guardianes de tecnología las invento. Después de que las instaló, ellas rastrean cualquier actividad que no esté autorizada por los Guardianes, eso indica que hay una posibilidad muy alta de que algún Rebelde esté en esa Terra. Entonces estas esferas impedirán que ellos o las personas que no están autorizadas puedan usar un portal y salir de ahí. Quedan atrapados, así que los Guardianes van y los capturan” 

“¿Solo lo haces tú?”

Ella suspiró “No, hay exploradores que están haciendo lo mismo, pero ellos tienen sus dones y están protegidos. Creemos que Carol no sabe de los otros y piensa que solo yo pongo las esferas, además ella sabe que estoy indefensa por culpa de la Araña” Era increíble que mi odio por Carol siguiera creciendo conforme Robín seguía hablando. Pero de algo estaba segura, tarde o temprano me pagaría todo lo que nos hizo. Robín sacó un bote con una extraña pomada de color gris “Esto te ayudará a qué no te duelan”

Ella estaba poniendo una gran cantidad de esa cosa sobre mis manos, de inmediato mi piel se sintió fresca y aunque se veía asquerosa no olía feo. Fue mi turno para sorprenderla, así que le di un beso en la punta de la nariz, igual que como ella lo había hecho conmigo “Gracias, me salvaste”

“Cuando quieras” Ella se sonrojó, me gustaba que las cosas entre nosotras poco a poco volvieran a la normalidad. Mi bello petirrojo empezó a masajear mis manos.

“¿Robín, sabes cuantos Rebeldes faltan por capturar?”

“No, Erick dice que es clasificado. Creo que son de las cosas que nunca vamos a obtener respuesta. Pero no importa, me gusta sentir que puedo ayudar a la orden, así que yo solo sigo poniendo los rastreadores en cada Terra que visito. Si tan solo hubiera puesto una en la Terra donde nos atacó Carol, ahora ya la hubieran capturado”

“¿Por qué no la pusiste?” Hasta ese momento me di cuenta de que Robín no había activado la esfera.

“Debí ponerla cuando llegamos, pero… estaba distraída” Se quedó callada y desvió su mirada al suelo “Quería hablar contigo y solucionar las cosas. Luego te peleaste con Adler y te fuiste, yo quería acompañarte, pero sabía que necesitabas estar sola. Cuando me di cuenta de que no había activado la esfera, creí que podría hacerlo mientras recogía leña y entonces ellos llegaron y ya no me dio tiempo”

Me acerque junto a ella y la empuje con mi hombro “¿Así que aún te distraigo?”

“Siempre Sash” Las dos reímos, mientras Robín se recargaba en mi hombro “Las veces que ellos me han atacado es porque se me han terminado las esferas o no me ha dado tiempo de activarlas. No sé cómo es que Carol sabe cuando eso sucede”

“¿Puedes enseñarme la esfera de nuevo?” Robín busco en su mochila y me entregó una de las esferas, al tocarla vi que emitía una frecuencia muy baja. Gracias a mi don entendí que al activarla está frecuencia aumentaba, lo increíble era que todos los compuestos eran mecánicos, muy parecidos al de un reloj de manecillas. La persona que la había hecho se aseguró que ningún bloqueador la desactivara, por lo que podría hacer su trabajo sin ningún problema “Creo que ella tiene un rastreador, no son difíciles de hacer. Una vez que lo tienes solo debes ajustarlo para que te indique si hay una de estas activada. Así que mientras Carol no cierre el portal puede escapar” Se la regrese y ella la guardó en su mochila “¿Sabes que le hicieron a los Rebeldes”

“No, nadie lo sabe. Cam escuchó que les habían borrado la memoria y que les dieron una nueva vida, pero no estamos seguras”

Pensé un momento, la idea no era tan descabellada. Muchos de nosotros queríamos que ellos pagaran por lo que hicieron, así que es posible que por eso nadie sabe a dónde los habían llevado los superiores “Cuando Ezra me reclutó, me dijo que se encargaría de mis padres y que ellos no recordarían nada” Entonces sí podría ser una opción “¿Pero y sus dones?”

Robín empezó a trazar círculos con su dedo en mi pierna “Erick me dijo que todos los bloqueadores que habían recuperado de nosotros, fueron enviados a los superiores. No llevamos mucho tiempo instalando esferas, por lo que sospechamos que los superiores usaron los mismos bloqueadores con los Rebeldes”

Era increíble todo lo que había sucedido por un dispositivo que había fabricado para que no descubrieran que Robín y yo teníamos una relación “Si no hubiera diseñado el E1, esto jamás hubiera pasado. No he podido inventar nada porque tengo mucho miedo de hacer daño de nuevo” Era la primera vez que se lo decía a alguien más que no fuera mi hermana.

Robín se sentó en mis piernas, fue extraño sentirla tan cerca de nuevo, pero me gustaba que ella hiciera este tipo de cosas “Ambas sabemos por qué lo hiciste y si vas a buscar culpables, te recuerdo que yo lo perdí” Me abrazó y yo también lo intente mientras cuidaba de no mancharla con la pomada que tenía en mis manos “Sasha las cosas pasan por algo y aunque aún no lo entendemos algún día lo haremos. Ahora estamos juntas de nuevo y eso es lo único que cuenta”

Bese su cuello mientras ella se recargó más en mí “¿Entonces sigues siendo mi esposa?”

Ella se separó de mí, se aseguró de que la viera a los ojos y me sonrió “¿Tú eres la mía, aunque tenga una hija que no es tuya?”

¿Importaba que tuviera una hija? Por supuesto que no, como había dicho mi hermana; lo que realmente importaba es que ella había vuelto y que de nuevo estábamos juntas “Siempre” Le dije antes de besarnos.

Cuando vuelves con una persona después de que pasaron muchos años ¿Es incómodo? Porque para mí esposa creo que no, porque me estaba quitando la ropa como si estuviera en llamas “¿Robín?” La llame “No crees que vamos muy rápido”

Ella se detuvo y buscó mi mirada “¿Estás bromeando?”

“Solo quería estar segura”

“Creo que vamos muy lento” Ambas sonreímos “Necesito hacerte el amor Sasha” Casi me derrito por la forma en que su voz se volvió ronca y muy sexy.

No era el momento, pero debía revisar que el área estuviera segura. No podía arriesgarme a escapar mientras ninguna de las dos tenía su ropa puesta o peor aún, cuando estuviéramos a punto de tocar el cielo “Arcub, estatus del área”

Fueron los cinco segundos más largos de mi vida “Asegurada, sin novedad de intrusos”

“Perfecto, es mi turno. Hemos estado hablando de ellas y aún no la activo en esta Terra” Me guiñó un ojo mientras tomaba la esfera.

“¿Cuánto tarda?”

“Unos cinco minutos”

“¿Tanto?” Me queje, era mucho.

Robín se levantó y salió de la casa de campaña, la seguí para ver qué era lo que hacía. Escarbo un hoyo como de unos veinte centímetros de profundidad. Lo bueno que el suelo al ser arena no tardó mucho, al terminar introdujo la esfera. Se puso de pie y se paró junto a mí “Mira esto” Una luz blanca como una centella se dirigió hasta el cielo “Solo sucede cuando se activa y se ve así de noche, de día es imposible verla” Robín me sujeto de la muñeca mientras yo seguía viendo como se activaba la esfera “Va a hacer un escaneo, a toda la Terra. Una vez que la asegure ningún bloqueador podrá desactivarla, es lo mejor que tienen los Guardianes en cuanto a seguridad”

“¿Pero se pueden desactivar?”

“Sí, solo quienes estamos autorizados para ponerlas podemos quitarlas, es el único dispositivo que no funciona con las parejas. Eso significa que tú no puedes instalarla y tampoco quitarla”

“¿Por qué las quitarían? Después de todo sirve para proteger las Terras de intrusos”

Robín se encogió de hombros “Los Guardianes no son dueños de las Terras” Era cierto, había mundos donde la tecnología era muy avanzada y los habitantes podrían molestarse que algo extraño estuviera ahí “¿No tienes frío?”

“No ¿Por qué?” Ella miró mi pecho, entonces me di cuenta de que estaba desnuda de la cintura para arriba. De inmediato me cubrí con mis brazos, algo estúpido de mi parte.

Robín solo negó con la cabeza mientras me abrazaba “Son más lindos ahora” Entonces empezó a besar mi cuello.

“¿Cuánto falta?” Mi cuerpo empezaba a temblar por la emoción de lo que iba a suceder “Te necesito Robín”

“Yo también Sash” Saco un dispositivo, era como un pequeño control remoto con un único botón y una bocina “Estatus”

“Ochenta por ciento”

“Ya no falta mucho”

Los cinco segundos que tuve que esperar para que mi esfera me indicará que estábamos a salvo, era nada, comparado con el tiempo que tuvimos que esperar para que la esfera de Robín se terminará de instalar. Pero cuando por fin terminó, el dispositivo de Robín le avisó que esa Terra ahora estaba resguardada y que podía continuar con su misión. De inmediato mi esposa me tomó de la mano y me metió a la casa de campaña “Ahora sí mi gruñona esposa prepárate” Fue lo último que dijo mi cachondo petirrojo antes de atacar mi boca. Hizo que me recostara sobre las bolsas de dormir para quitarme todo lo que llevaba de la cintura para abajo. Robín me estaba devorando con la mirada y en un punto me sentí incómoda. Habían pasado diez años desde la última vez que me había visto así y mi cuerpo ya no era como antes. Fue extraño porque de alguna forma sentía que está iba a ser de nuevo nuestra primera vez. Cuando terminó su intensa exploración sonrió “Estás hermosa” Esas dos palabras me llenaron un poco más de confianza, se sentó sobre mi estómago y puso mis manos sobre mi cabeza “No las muevas, aún tienes pomada y no quiero que te la quites” Mi respiración estaba agitada y cada vez estaba más excitada. Mi esposa empezó a desnudarse lentamente, torturándome por no hacerlo más rápido.

“Me estás matando” Mi voz fallo, me sentí muy tonta, pero es que estaba muy nerviosa.

“Espero que no, te necesito viva” Robín se quitó su última prenda y fue mi turno de admirar su hermoso cuerpo. Era perfecta, tan hermosa como la recordaba, si no es que más. Incluso con la herida que había curado Adler, pero se notaba que estaba bien, así que podría decirse que ya la había revisado y podíamos seguir.

Robín se recostó encima de mí, dejando caer su peso sobre mi cuerpo. Casi me corro cuando sus pechos rozaron los míos, estoy segura de que un gemido se me escapó o tal vez fue ella, aún no estoy segura cuál de las dos fue la culpable, pero ese fue el primero de muchos más. Uso su pierna para abrir las mías y cuando encontró la posición correcta comenzó a moverse “Wow” Fue lo único que pude decir, todo estaba siendo perfecto y mi cerebro estaba totalmente frito como para decir algo más romántico.

“Y eso que apenas empezamos” Ella tenía razón, nada podía compararse a cuando comenzó a besarme.

Esos recuerdos que tenía de nuestra primera vez, de esas pocas horas que alcanzamos a robar para poder amarnos quedaron opacadas con esta ocasión. Aunque no pude tocarla como hubiera querido, ambas nos demostramos lo mucho que nos habíamos extrañado. Amé cuando se puso sobre mi boca y me dejó probarla de nuevo “Eres mi dulce favorito” Le dije cuando estábamos descansando en nuestra posición favorita, ella con su cabeza en mi pecho y yo con mi brazo sobre ella tratando de no tocarla porque aún tenía un poco de la pomada en mis manos, aunque ya se había secado y parecía más como si tuviera tierra seca.

Beso mi cuello, mientras yo suspiraba “Eres una golosa Sasha” Siguió besándome hasta que llegó a mi oreja “Pero tú también sabes rico” Robín siempre supo cómo acelerar mi corazón con ese tipo de comentarios y me gustaba que fuera así, que me volviera loca y que todo perdiera sentido mientras estábamos juntas.

Lamentablemente no podíamos dormir desnudas, sintiendo piel con piel. Ambas debíamos estar preparadas para cualquier situación. Pero si desvestirme fue excitante, vestirme fue una maravilla, cada vez que me ponía una prenda me daba un beso. Me hubiera gustado hacer lo mismo, pero no podía. Cuando estuvimos completamente vestidas, nos acostamos juntas, ella estaba con su cabeza sobre mi hombro y esa noche, aunque me doliera todo el brazo no la iba a alejar.

“¿Crees que ella me quiera?”

Mi esposa volteo a verme y suspiró “Sí, ella te amará al igual que yo lo hago” Una sonrisa apareció en mi rostro “¿Eso significa que...?”

“Que será mi hija también” Acaricie su cabeza con mi mejilla “Sería extraño que las tres vivamos juntas y la pequeña no me llame mamá ¿Qué van a decir los demás?” Robín se incorporó y me dio la espalda mientras llevaba sus rodillas al pecho y las abrazaba “¿Qué pasa, dije algo mal?” Ella no me contestó.

Me acerque a su espalda y recargue mi cabeza sobre ella. Tardo mucho antes de volver hablar “Si lo haces solo por el que dirán, prefiero que no sigas” Entonces me di cuenta de algo; Jamás hagas bromas de mal gusto después del sexo maravilloso y alucinante “Tengo sueño” Me dijo alejándose de mí, se metió a su bolsa de dormir y me dio la espalda.

“Robín, yo estaba jugando. Te juro que solo fue una broma, por favor perdóname” Nada, no dijo nada “Lo prometimos”

Ella se levantó de nuevo y se sentó enfrente de mí, tomó mi mano y con un paño que mojo con el agua de su termo la limpió. Era increíble, mi mano ya no dolía, la apreté un par de veces antes de que mi bello petirrojo la tomara para ponerla sobre su pecho. Pude sentir como latía su corazón, después ella puso su mano sobre mi pecho. Era lo que las personas que tenían su don hacían algunas veces cuando iban a interrogar a alguien “¿De verdad quieres ser su madre?”

“Sí, te juro que solo estaba jugando”

Ella suspiró “Sasha no quiero que mi hija sufra, ya ha pasado por muchas cosas”

De verdad había arruinado todo por una estúpida broma. Así que tenía que dejarle en claro que mis intenciones con ella y la pequeña eran serías “Robín, siempre quise tener una familia contigo y ahora la tengo. Lamento mucho haber dicho eso, pensé que era gracioso” Ella se relajó y aprovechando que mi mano estaba en su pecho, jale su blusa para acercarla a mí “Soy una idiota, pero te prometo que haré todo lo que pueda para que ustedes dos sean felices. Además, lo tuyo es mío y lo mío es tuyo”

“¿Estás segura?”

 “Por supuesto”

 “¿Entonces no te interesa saber cómo me convertí en madre?”

La verdad era que, si tenía curiosidad por saber qué había sucedido, pero tampoco era algo con lo que no pudiera vivir “No, no me interesa” La bese para que supiera que hablaba en serio “Es hora de dormir ¿Quieres que te abrace mientras duermes? Yo haré la primera ronda”

“Está bien”

Uff, no quiero saber que me va a decir Adler cuando le cuente qué pasó.

 

Notas finales:

nos leemos en ocho dias


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