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Los Guardianes por samyalexg

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Capítulo 3

 

Cuando Sasha logró quitarse toda la viscosidad del cabello se alistó para ir con el resto del grupo. Un guardián le indicó que buscará un pequeño edificio cerca del lago, era el único que estaba ahí así que no tendría problema para encontrarlo.

Cuando entró, Ezra estaba explicando cómo funcionaba el cubo que había usado el día anterior, ella se quedó de pie en la entrada, esperando pedir permiso para entrar, pero no fue necesario que dijera nada porque este le señalo un lugar junto a Robín en la parte de atrás.

“Entonces lo único que deben hacer es ingresar el nombre de la Terra donde están y simplemente les dará su ubicación” Hizo un movimiento acercando sus manos sobre el mapa holográfico, este se acercó mostrando montañas, árboles y los edificios que conformaban el cuartel “Al separar sus manos de esta forma” Explicó mientras hacía el siguiente movimiento con sus manos “El mapa se hace más pequeño y pueden ver que todo se reduce, entonces muestra todo de una forma más amplia y los datos dejas de ser detallados a más generales”

Sasha abrió su equipo y busco el pequeño cubo, en cuanto lo toco pudo ver la forma en que este estaba hecho y a continuación las diferentes formas de usarlo. Cuando apretó un botón este se abrió, ingreso el nombre de Terra 1 y apareció un mapa igual al que Ezra estaba usando. Cerró su puño sobre uno de los caminos al pueblo y luego lo abrió, los detalles de esa sección se hicieron más específicos proyectando medidas y coordenadas “¿Cómo hiciste eso?” Le preguntó Robín que había visto todo lo que Sasha había hecho.

“Es mi don” Plegó la imagen juntando sus palmas y el cubo se cerró.

“Eso es genial. Yo estoy negada para estas cosas” Robín examinó el cubo tratando de encontrar el pequeño botón que Sasha apretó.

“Es ese que está ahí” Lo apretó Sasha, pero no sucedió nada “Ah lo olvidaba, solo funciona si tú lo aprietas”

“Sí, creo que algo dijeron sobre que solo sirven si yo los uso o mi pareja” Robín se sonrojó y trato de disimular poniendo su atención en el pequeño cubo. Sasha la observó, obviamente había notado lo que había sucedido, pero decidió que por el momento se quedaría callada, ya que no quería arruinar su reciente amistad.

Después de la primera media hora Sasha estaba aburrida, no entendía qué necesidad tenía que ella tomará esa clase, si lo único que debía hacer es tocar cualquier cosa de su equipo y dejar que su don actuará. Aunque cuando vio que su compañera tenía problemas para hacer que el mapa se cerrará decidió que le ayudaría en todo lo que pudiera. Tal vez así se pasaría el tiempo más rápido.

“Roberta y Sasha” Canto Adler “Sentadas bajo un árbol, besando sus bocas y agarrándose sus cosas” Una vez que llego a esa parte su hermana empezó a reír, de seguro si tuviera cuerpo estaría revolcándose en el piso por la risa. Pero Sasha comenzó a imaginar todo, estar al lado de Robín, tomar su mano, besarse, todo lo lindo y romántico “¡Ya! Deja de pensar en eso, voy a morir de un coma diabético por tanta miel que hay en tu cabeza” Sasha sonrió porque por fin pudo molestar a Adler, ella le había dicho que podía ver sus sueños, tal vez eso de ‘sueñas despierta’ se aplicaba a ese momento y de ahora en adelante lo usaría para molestar a su hermana.

Robín dejó a un lado su cubo, realmente estaba fastidiada por no poder usarlo “¿Por qué sonríes?”

“Es que me imagine algo”

“¿Qué cosa?” Sus manos se rozaron y el corazón de ambas se detuvo un instante, fue un reflejo el que las dos saltarán cuando sucedió. De inmediato se alejaron, mientras trataban de poner atención a la clase “Lo siento, no era mi intención, de verdad yo…”

“No me molesta que me toques” Le respondió Sasha muy bajito y mirando al frente. Un ligero sonrojo había cubierto el rostro de ambas, muchas cosas estaban pasando, podía sentir la mirada de Robín sobre ella, a su corazón queriendo salir de su pecho, el nerviosismo de ambas. Pero lo único que no podía sentir era la energía que estaba corriendo entre las dos y es que era tan intensa que Ezra las miró fijamente.

“¿Todo bien con ustedes?”

“Sí señor” Respondieron.

“Muy bien entonces la siguiente hora iremos al campo de tiro, no saquen su arma hasta que estemos allá” Todos se pusieron de pie y comenzaron a salir.

Sasha hizo un poco más de tiempo porque quería ir junto a Robín. Pero Cam se acercó, puso su brazo sobre los hombros de su amiga y la alejo de ella, y antes de que pudiera hacer algo para impedirlo, Kika estaba frente a ella evitando que siguiera a las otras dos “¿Qué fue lo que pasó?”

“¿Con qué?” Su mirada estaba enfocada en como Robín la observaba mientras era llevada por Cam.

“Sasha ¿No lo sentiste?” Y al escuchar a Kika preguntar con tanto interés fue cuando finalmente se fijó en su amiga “Fue como si el salón se llenará de una sensación muy agradable. No sé ni cómo describirlo, pero entre Robín y tú, saltaban chispas” Sasha se detuvo y miró a su amiga. Si eso era verdad tal vez se meterían en problemas y era lo último que quería.

“¿Crees que alguien más lo noto?”

“No sé, pero Cam y Hugo las miraban y obviamente Ezra ¿Te gusta Robín?” Tardó en responder, pero su cara la delataba “Lo sabía ¿Sabes esa frase de…?”

“Del odio al amor… Sí, sí la sé. Pero no sé si es amor, solo sé que ella me atrae mucho”

“Bueno mi amiga, por algo se empieza” La acercó a ella sujetándola por los hombros y siguieron al resto de sus compañeros “Además creo que el sentimiento es mutuo” Se detuvieron para que los demás no escucharan “Solo recuerda lo que nos dijeron. No sabemos qué tipo de consecuencia hay, por lo que deben de ser muy cuidadosas”

“Pero es que no hay nada”

“Lo hay, créeme que lo hay” Kika le entrego un caramelo y continuaron su caminó.

“Esta chica es una dulcería ambulante” Le sorprendió que su hermana no dijera nada sobre el otro tema, así que lo dejo pasar.

Cuando llegaron al campo de tiro Robín y Cam estaban alejadas del resto de los demás. Su nueva amiga se mostraba molesta y de repente dejo a Cam para ir con sus otros compañeros, cuando pasó junto a ellas solo les sonrió y siguió caminando. Cam en cambio se acercó y miró a Sasha a los ojos “Solo te digo una cosa, aún no es tiempo y si no son más cuidadosas pueden meterse en problemas” Las dejo ahí, con la boca abierta y sin ninguna otra explicación mientras se dirigía hasta donde estaba Paco.

“Pero ¿Qué le pasa?”

“El don de Cam es ver cosas que pueden pasar” Kika respondió tranquilamente mientras se arrodillaba para abrir su equipo y sacar su arma “Obviamente vio algo”

“¿Tú crees que…?” Sasha la imito para sacar su propia arma “¿Robín y yo…?”

“Tal vez, pero tiene razón. Deben tener cuidado, además” La miró fijamente “Apenas tienen dos días de conocerse”

“El problema es que siento que la conozco desde hace años”

Kika cerró su estuche y se puso de pie “Tal vez así sea. En mi mundo eso es muy normal”

“¿Qué quieres decir?” Ya no recibió respuesta porque Ezra ya los estaba llamando.

Todos se acercaron formando un círculo alrededor de su instructor “Muy bien, esta arma al igual que todo lo demás, solo funciona con su dueño, tiene el tamaño perfecto para ocultarse a un costado de nuestro torso o junto a la pierna. Consta de doce tiros de calibre cuarenta y cinco, las balas son paralizantes por lo que créanme hacen mucho daño. Ustedes usarán balas de goma durante todo el entrenamiento, pero aun así tengan cuidado si no quieren terminar en el área de sanación” Todos asintieron “Hoy y el resto de la semana practicaremos tirando a esos blancos” Señaló unas dianas que estaban a unos metros “A partir de la siguiente semana usaremos blancos móviles y haremos tiros a larga y corta distancia ¿Entendido?”

“Sí señor” Cada uno tomó un lugar, Robín quedó en uno de los extremos y Sasha en el opuesto. Por más que quería estar a un lado de ella, debían de hacer caso y mantenerse alejadas por el momento.

“Haremos una prueba para que todos se acostumbren al golpe que da el arma al ser disparada. Traten de dar en el centro de esas dianas” Señaló de nuevo los blancos que estaban al frente “Son veinte metros, por lo que espero que no tengan problemas en darle al objetivo” Ezra se puso sus gafas obscuras “Adelante”

“No entiendo porque tenemos que aprender a usar un arma” Adler estaba molesta “¿No se supone que solo recolectan cosas?” Sasha estaba tratando de murmurar sin que nadie se diera cuenta para poder platicar con Adler, pero está la detuvo “No creo que sea buena idea hablar cuando sostienes una pistola, pon atención y luego hablamos de esto” Todos prepararon sus armas y dispararon. Varios dieron cerca del blanco, pero la diana de Sasha estaba intacta “Segura que cargaste el arma” Sasha bufó, ella sabía que era despistada, pero estaba segura de que puso las balas como debía.

“Sasha eres muy mala” Se burló Ruy que estaba a su lado. No le respondió porque recibieron la orden de disparar de nuevo, cuando todos obedecieron Sasha se dio cuenta de que una vez más había fallado.

“En verdad eres mala” Sasha solo puso mala cara con el comentario de Adler. De repente cinco tiros se escucharon consecutivamente y todos voltearon a ver a Robín que estaba acompañada de Ezra.

“Todos dieron en el blanco” Dijo Kika asombrada.

“¿Se estará imaginando que es alguien?” Ruy revisó su arma y apuntó al blanco mientras cerraba uno de sus ojos “Mientras no sea la cara de alguno de nosotros”

Paco se acercó a su amigo “Funciona con los dos ojos abiertos” Disparo una vez y le dio a uno de los aros centrales “De seguro es la cara de Sasha... por lo que le hizo en la tarde” Ruy y Paco se rieron. Pero estaba segura de que no era ella a quien se estaba imaginando, fijó su mirada en Cam que estaba muy seria ajustando su arma y trataba de ignorar todo lo que sucedía.

La diana de Robín mostraba siete tiros perfectos. Ezra le dio un par de palmadas en la espalda y caminó hacia los demás blancos, fue dándoles consejos uno a uno. Cuando llegó con Sasha se dio cuenta de que la diana estaba limpia, incluso nada que lo rodeaba mostraba daño. Llamó a Robín con un movimiento de mano y caminaron a donde estaba Sasha.

“Robín por favor ayude a su compañera. Los demás hagan una serie de cuatro tiros”

Robín suspiró “Creo que es inútil mantenernos alejadas” No era un reclamo, ni siquiera un reproche, es más Robín se mostraba divertida “Aunque me gusta que pueda ayudarte en algo”

“Creo que podemos hacer un trato” Sasha levantó una ceja mientras le sonreía.

Su amiga asintió “Creo que tú me ayudas con todos esos cachivaches”

“Y tú con mi puntería”

“Es un trato” Se dieron la mano, era extraño, en verdad se sentía como si ambas se conocieran de toda la vida, todo era tan correcto y sobre todo muy normal “Bien lo primero que debes hacer es…”

La hora pasó muy rápido, Sasha había logrado dar a la diana diez veces de un total de ochenta disparos, Robín le dijo que había hecho un gran trabajo para ser su primera vez. Esa fue la mejor recompensa que Sasha pudo recibir, ser halagada por su compañera.

“Nos vemos en la cena” Le dijo Robín antes de que Sasha se fuera con su tutor.

“Robín ¿No quieres que hable con Mina? Después de todo fue mi culpa que nos castigará”

Robín se dejó caer en su cama y cruzó sus brazos detrás de su cabeza “El castigo es de las dos y no me molesta cumplirlo. Anda vete, nos vemos luego”

“Hasta al rato” Como no sabía que llevar decidió llevar todo su equipo, mejor que sobre y no que falte, como diría su papá.

“Esa chica de verdad te gusta” Adler le está a hablando seriamente.

“¿Tú crees que ella sea la indicada?”

“No crees que es muy rápido para pensar en matrimonio” Adler se burló de compañera “Es cierto lo que dicen sobre las lesbianas, pero esto es una broma. Solo han pasado dos días y uno ni siquiera ha terminado ¿No crees que vas muy rápido? Si continúas así romperás la regla antes de que termine está semana”

“Yo no me refería a eso” Sasha no quería hacer sentir mal a Adler con lo que iba a decir, pero debía hacerlo “Nosotras no somos como los demás, si estuviéramos en una relación tendría que…”

Su hermana la interrumpió “¿Soportarte?” Empezó a reír, siempre se reía de sus chistes malos, aunque a Sasha no le hacía nada de gracia “Sé que puedes ser muy molesta Sasha, pero nada fuera de este mundo”

“Yo no me refería a eso”

Adler no contesto de inmediato “Sé a qué te refieres” Vieron a dos personas que se acercaban, así que se alejaron un poco de ellas para poder seguir hablando “Mira Sasha, nunca he pensado en qué pasaría cuando tuvieras novia. Pero como te dijo Kika y Cam, no es momento para que pienses en Roberta de esa forma” Adler suspiro “Cuando llegue el momento hablamos. Mientras es hora de que te apures si no quieres que lleguemos tarde”

El restodel camino ambas guardaron silencio, pero cuando llegara el momento era obvio que tendrían una larga charla sobre lo que harían, mientras era hora de que Sasha conociera a su nuevo instructor.

El edificio de tecnología se encontraba cerca del límite del cuartel, costaba con dos piso y todo estaba cubierto de cristales reflejantes. A diferencia de otros lugares aquí había dos guardias armados custodiando la entrada, tuvo que identificarse para que le permitieran el acceso, una vez que entro fue acompañada por uno de los guardias hasta un cuarto donde solo había una mesa con una extraña máquina, el guardia se retiró cuando una mujer con uniforme azul obscuro y líneas rojas entró y le ordenó que tomara asiento frente a la máquina. Le pidió que estirara su mano y la pusiera sobre la placa de metal que estaba frente a ella. Cuando tocó la máquina, se dio cuenta de que solo era para registrarla como parte del equipo y poder permitirle el acceso al laboratorio. La máquina emito una luz verde “Necesito que pongas tu barbilla sobre el soporte y digas tu nombre, trata de no pestañear” Sasha obedeció, una luz blanca muy intensa apareció, dejando a Sasha viendo una sombra oscura que dificultaba su vista “Ponte esto en el ojo” Le entregó una pequeña esfera de plástico, que al apretarla dejó caer una gota. De inmediato su vista se aclaró “¿Todo bien?”

“Sí”

“Muy bien, te llevaré con tu instructor” Ambas salieron de la sala, fueron tres puertas en donde Sasha tuvo que poner su mano y sus ojos delante de un escáner para que las puertas se abrieran. Sasha solo había visto esto en películas, sentía como si estuviera entrando a un lugar super secreto y eso la emocionaba mucho. Al llegar al laboratorio la extraña le dio instrucciones de entrar y buscar a Julián, a partir de ese momento ya era parte del grupo de tecnología.

“¿Te aprendiste el camino?” Su hermana sabía que ella era tan despistada que de seguro se perdería al siguiente día.

“Ya sabes que no” Adler solo se empezó a reír, tratando de ignorarla entró y siguió el sonido de las voces hasta el fondo del laboratorio.

“Muy bien Carol, trata de despegarlo para que puedas avanzar” Decía un hombre alto con bata blanca y uniforme verde militar Sasha asumió que él era Julián, este miraba a una joven vestida de la misma forma pero que tenía puesto unos guantes y trepaba una pared “¿Cómo lo sientes?” Preguntó sin dejar de ver a su colega.

“Lo siento un poco inestable en la mano derecha”

“Erick anota eso”

“Anotado Julián”

“Se va a caer” Advirtió Adler “Diles” Uno de los guantes empezaba a fallar, pero solo Adler y Sasha se habían dado cuenta.

“Señor creo que…” Pero justo en ese momento se soltó la chica de su agarre. Julián lanzó una extraña esfera plateada y de inmediato una colchoneta amortiguó la caída.

“Animo chicos vamos mejorando, solo nos falta un poco más de trabajo” Julián se giró y miró a Sasha “Oh llegaste. Chicos vengan a conocer a nuestra nueva compañera” Ambos se acercaron “Carol, Erick, ella es Sasha y tiene el mismo don que nosotros”

Carol empezó a quitarse los extraños guantes antes de estrechar la mano de Sasha “Vaya, teníamos tiempo que no teníamos un nuevo integrante”

“¿Solo somos nosotros?” Sasha recorrió el lugar con la vista, planos y varias cosas que estaban sin armar atiborraban los escritorios y las mesas. Máquinas extrañas estaban en las esquinas y solo había un lugar que se veía libre, un banco frente a una mesa de trabajo. Mientras dejaba su equipo sobre el suelo, sin pedir permiso tomó uno de los guantes y lo examinó, sin pedir permiso quitó la tapa del dorso y tocó los cables “Son muy delgados” Tomó uno de ellos que estaba caliente y lo desprendió, todos menos Julián jadearon cuando hizo eso, lo llevo a su nariz “Está quemado”

Julián estaba contento por la curiosidad que mostraba su nueva aprendiz “Eso es lo que pensé” Tomó el guante y se lo entrego a Erick quien de inmediato examinó la parte afectada “Y si te refieres a personas con el don de la tecnología. No, bueno, los demás están en las otras Terras trabajando en los nuevos dispositivos que se recolectan y solo un grupo muy pequeño estamos aquí trabajando en ideas nuevas” Se acercó a ella mientras se acomodó sus lentes con el dedo índice “¿Quieres un té?”

“Claro”

“Muy bien, sígueme. Chicos vengan” Los cuatro tomaron asiento en una mesa de cristal que estaba en la esquina, Julián les acerco unas tazas y les sirvió agua caliente “Solo tienes que pensar que sabor quieres y apretar ese botón que está en el asa”

“¿Pensar en un sabor?”

“Sí” Carol tomó su propia taza “Mira, quiero té de manzana y canela, así que pienso en él y aprieto el botón” Cuando puso su dedo gordo sobre el asa, este emitió un pitido, de inmediato el agua cambio de color y un olor a manzana con canela llegó a todos.

“Wow, genial” Sasha se imaginó el sabor de la hierbabuena, pero Adler pensó en un gran y jugoso durazno. Así que cuando apretó el botón su bebida olía a duraznos con hierbabuena.

“Qué extraña mezcla” Erick tomó la taza de Sasha para olerla “Pero huele bien”

Sasha sonrió evitando una arcada, Adler sabía cuánto odiaba los duraznos, ni siquiera podía soportar el olor que salía de la nueva infusión. Ya pensaría en un castigo, uno lento y doloroso.

“Muy bien Sasha te explicaremos qué hacemos aquí” Julián se recargó contra su silla y dejo su taza que olía a café sobre la mesa “Bueno, nosotros nos dedicamos a diseñar nuevos dispositivos para los Guardianes y a veces para la gente de los pueblos de las Terras. Algunas veces, modificamos la tecnología que los viajeros recolectan de otros mundos”

“Eso es increíble”

“Verdad que sí, nuestro don es muy raro y el más valorado” Le explicó Carol mientras ponía una hoja de papel sobre la mesa y empezaba a dibujar.

Julián miró a su compañera y negó con la cabeza mientras sonreía “Discúlpala, pero es que cuando tiene una idea, simplemente se mete en ella, no importa el lugar o con quien este” Sasha solo sonrió “Durante las primeras semanas estarás siempre con uno de nosotros, una vez que entiendas como trabajamos podrás estar por tu cuenta” Su tutor saco dos libros sumamente grueso y se los entrego “Es necesario que estudies, nuestro don ayuda pero es necesario que sepas sobre corrientes y voltajes. Cualquiera de nosotros te ayudaremos siempre que lo pidas ¿De acuerdo?”

“Sí señor”

“No, nada de formalismos, mientras estemos solo nosotros, no cumplimos con el protocolo. Todos aquí somos colegas y nos tratamos como tal”

“Somos un equipo, algunos nos llaman; ‘Los tres mosqueteros’, pero ahora creo que seremos cuatro” Le explicó Erick con una sonrisa sincera en su rostro “¿Crees que puedas darme un poco de tu té? Me tiene intrigado”

“Claro” Sasha le paso su taza “Si quieres puedes quedártelo”

Erick lo probó y abrió los ojos “Me encanta, ¿Crees que puedas prepararme uno mañana?”

“Por supuesto” Respondió tratando de que su sonrisa fuera sincera y al mismo tiempo conteniendo las ganas de vomitar. Sin duda pensaría en muchas, muchísimas cosas que fastidiaran a Adler durante toda la semana.

“Perfecto, por cierto, no es necesario que traigas tu equipo, aquí tenemos todo lo que necesitas para trabajar”

“Sí señor” Pero de inmediato se corrigió “Digo Julián”

“Muy bien. Otra cosa, podrás llevarte solo esto” Le entregó un cuaderno y una pluma “Quiero que dibujes y anotes todas las ideas que tengas, ya sea para algo nuevo o para mejorar algo”

“Está bien” Tomó el cuaderno y al tomar la pluma se dio cuenta de que no era como las otras. Julián y Erick sonrieron.

“Como ya pudiste ver, esa pluma no es normal, puede trazar cualquier tipo de línea sin necesidad de una regla y se ajustara a la escala que tú pidas, es nuestra herramienta para la creación de planos y diseños” Sasha sentía la necesidad de probarla, de dibujar algo. Tal vez un nuevo diseño para que el cubo de planos fuera más sencillo y así Robín pudiera usarlo “Sasha ¿Tienes alguna duda?”

“Mmmm ¿Podré llevarme cosas para construir?”

“De preferencia queremos que todo lo que hagas sea aquí, pero podrás llevarte cosas pequeñas para que practiques, eso sí, tienes que regresarlas para enseñarnos que has hecho”

“Sí, sí señor”

“Sasha” Le llamo Carol que ya estaba terminado un bosquejo de un nuevo guante “Todos somos colegas, no lo olvides”

“Sí, claro” Miró a Julián y este le sonrió “Sí Julián, lo prometo”

La hora se le pasó muy rápido, Carol y Erick le enseñaron a cómo controlar el don para que solo viera cómo funcionaban las cosas cuando ella quisiera y no solo al tocarlo. Sasha lo intento, pero no pudo hacer lo que le explicaron, le dijeron que era cuestión de práctica y sobre todo tiempo. Cuando llegó la hora de la cena los cuatro se dirigieron al comedor y cada uno fue con su respectivo grupo. Julián caminó justo a donde Emma estaba sentada, cuando ella la miro le sonrió a modo de saludo, Sasha le respondió de la misma manera.

Sus compañeros ya estaban sentados y al parecer estaban compartiendo sus platillos justo como lo hicieron más temprano ese día. Robín estaba junto a Cam y ambas reían de algo que Paco les estaba platicando. La silla junto a Kika estaba libre y esta le hizo una seña para que le llevara uno de los postres que estaba tomando, por lo que puso dos más en su bandeja y caminó a donde sus compañeros.

“Bienvenida”

“Aquí tienes” Le dijo Sasha dándole su postre.

“Gracias, no sé qué haría sin ti”

“Comer menos” Le dijo Ruy y todos en la mesa comenzaron a reír.

“Cállate tonto” Kika le lanzó un golpe al brazo.

“¿Qué fue eso, un mosquito que está molestándome?” Entre risas y bromas la cena siguió y cuando el tiempo terminó la campana sonó para que todos se retiraran.

Mina se acercó a Robín y Sasha que la esperaban en la mesa “Bien ratas peleoneras, confió en que se comporten mientras cumplen su castigo” Señaló una puerta al fondo del salón “Ahí está todo lo que necesitan”

“Sí señora”

“Muy bien, tienen dos horas para dejar todo muy limpio”

Las llevo hasta al fondo, dónde había una puerta, la señalo explicando que ahí se encontraba todo lo que necesitarían para llevar a cabo su castigo “Tienen prohibido entrar a la cocina, por lo que solo limpiarán este salón y recuerden que, si no queda reluciendo, sus compañeros serán castigados”

“Sí señora” Se marchó de ahí dejándolas solas. Empezaron con su tarea, dos horas no serían suficientes si no se apresuraba y lo que menos querían es que sus compañeros fueran castigados por culpa de ella.

“¿Cómo te fue?”

“Muy bien, son muy agradables. Tienen un montón de cosas en las que están trabajando. Deberías de ver el lugar, está lleno de dibujos y artefactos”

“Definitivamente ese es tu ambiente perfecto” Le dijo Robín mientras abría la puerta y Sasha entraba para sacar las cosas de limpieza.

“¿Y tú qué hiciste?” Le entregó una cubeta en la que puso algo de detergente junto con algunos trapos que encontró en un estante.

“Algunos estuvimos practicando lo que la instructora Emma nos enseñó, otros estaban leyendo el libro que nos dio”

Sasha tomó una escoba y un trapeador y salieron del pequeño almacén. Unos Guardianes de uniforme amarillo estaban recogiendo lo que había sobrado de comida y las llevaban a la cocina “Vi que solucionaste las cosas con Cam”

“Sí, la verdad es que no me gusta estar enojada con ella. Es muy amigable y me cae muy bien”

“He notado que se llevan bien” Sasha comenzó a barrer mientras Robín limpiaba las mesas.

“El primer día que nos conocimos me tomó de la mano y me dijo que seriamos grandes amigas” Robín enjuago su trapo en la cubeta y siguió con la mesa de al lado “En mi mundo no tenía amigos, pero cuando Cam me lo dijo… fue raro, es como si nos conociéramos desde hace mucho, algo así como…” Robín se quedó callada.

“¿Cómo qué?”

“Como contigo” Sasha detuvo su tarea y se giró a verla “Siento que te conozco” Le explico Robín, pero sin mirarla “¿Crees que tal vez en otros mundos seamos amigas?”

“Sí, sí lo creo, yo también tengo esa sensación. Me explicaron que hay algo que se llaman repeticiones, son cosas que suceden en varios mundos y por eso sentimos que algo que está pasando ya sucedió” Sasha después de decir esto continuó barriendo.

“Eso no me lo dijeron. Pero Cam dijo… Diablos”

Pensó que su compañera se había lastimado, pero cuando la miró noto que ella estaba bien “¿Qué?” Una vez más dejó de barrer y se acercó a Robín “¿Qué te dijo Cam?” Pero ella no contestó “Por favor dime, sé que ella ve cosas que pueden pasar. Tú misma me lo acabas de decir” La mirada de Robín era tan tierna, que pensó que su corazón iba a salir volando. Pero, aunque ella trataba, las palabras no salían “Es algo que se supone que me vas a explicar después ¿Verdad?” Robín solo asintió, dejando escapar un suspiro, se resignó sabía que cuando llegará el momento Robín le diría “Muy bien, entonces será mejor que cambiemos de tema y nos apuremos”

“Sasha yo…” La tomó de la mano, pero no le decía nada.

“Algún día me lo dirás ¿De acuerdo?”

“Sí” Le sonrió y aunque Sasha moría de ganas por saber qué era lo que Cam le había dicho, iba a esperar “Oye ¿Entonces somos amigas?”

“Claro que sí, en eso quedamos cuando hablamos en las duchas”

“Muy bien, entonces amiga hay que apurarnos” Ambas sonrieron y siguieron con su tarea.

Mina entró cuando las dos horas habían pasado, estaban guardando los utensilios cuando vieron que su instructora se aseguraba mesa por mesa que se pudiera ver su reflejo. Sasha estaba segura de que si hubiera tenido una lupa estaría a gatas en el piso revisando centímetro por centímetro.

“Muy bien ratitas peleoneras, pueden ir a descansar. Mañana quiero este lugar de la misma forma”

“Sí señora”

Al salir Sasha pudo ver como Robín se estremecía al sentir el aire frío de la noche.

“Voy a abrazarte, pero quiero que sepas que es solo para darnos un poco de calor” Le explico, mientras pasaba su brazo sobre los hombros de su amiga

“Está bien Sasha, la verdad es que te iba a proponer lo mismo” Robín paso su brazo alrededor de la cintura y la acercó a ella. Agradable y natural, así es como se sentía en ese momento. Fue Robín la que se tomó su tiempo para examinar el cielo “Me gustan las estrellas”

“A mí también, siempre me recuerdan que hay una pequeña luz en la oscuridad”

“Eso es muy lindo, cuando estaba en mi mundo, era muy raro poder verlas. Pero cuando lograba hacerlo, pasaba toda la noche observándolas”

“Pero en el campo se ven ¿No?”

“No se nos está permitido ir a los campos, son zonas protegidas” Quería saber todo, absolutamente todo sobre su amiga, estaba muy interesada en como había sido su vida, cómo eran sus papás, si estudiaba o a qué se dedicaba, pero Robín no dijo más sobre su mundo “¿Y tú mundo cómo es?”

“En mi mundo hay ciudades, por lo que también es difícil ver las estrellas, pero podemos ir al campo o a las playas”

“De seguro lo extrañas”

“No, en realidad me gusta estar aquí… empezar de nuevo y tener amigos. Aceptar venir fue lo mejor que pude hacer” Robín la miró, pero, aunque se notaba que ella también quería saber más sobre la vida de Sasha, no dijo nada.

“Sí, tener una nueva vida, un nuevo comienzo” Robín se escuchaba triste, pero ambas sabían que no era el momento de explicar sus razones de porque se encontraban ahí, decidió cambiar el tema, la noche y la compañía estaba siendo muy agradable como para ponerse melancólicas “Esta noche voy a caer muerta”

“Yo también, ayer me costó mucho trabajo dormir”

“Lo note, por eso intente calmarte” Sasha se detuvo de repente y se quedó mirando a una tímida Robín “Yo use mi don, te sentía muy inquieta. Perdón no debí hacerlo” Robín se empezó a soltar, pero Sasha la mantuvo cerca.

“Gracias” La abrazó y le dio un beso en la mejilla “De verdad muchas gracias” Se quedaron así un momento, hasta que el viento sopló de nuevo “Será mejor que sigamos, mañana hay que entrenar”

“Creo que lo mejor será que nos soltemos. Va a ser extraño si nos ven así”

“Eso creo” Pero ninguna de las dos hacía algo por separarse, sus corazones latían rápidamente “Espera, algo falta” Sasha tomó valor y se arriesgó. Se acercó aún más a Robín, la sujeto de la cintura y le dio un beso en la comisura de los labios “Buenas noches”

Espero una bofetada, un reclamo, algo, pero en cambio su compañera le devolvió el beso “Buenas noches” Robín estaba muy contenta, su sonrisa lo confirmaba “Te veo adentro” Dejó a Sasha en la entrada de la barraca.

Nunca ha sido una chica osada, ella era más una chica tímida o al menos eso creía. Pero todo era tan hermoso que algo dentro de ella la impulsó a hacerlo.

“Pero si te tiene babeando” Se burló Adler “Mejor cierra la boca, no quiero que se te meta algún bicho y te lo tragues”

“¡Cállate!”

“Si te pones así por un pequeño roce de labios, no quiero saber que va a pasar cuando en verdad se besen”

Sasha no respondió, aún podía sentir a Robín cerca de ella, tenía que calmarse antes de entrar “¿Te gustaría practicar ahora?”

“Por supuesto, no hay nadie cerca así que es seguro” La emoción en la voz de su hermana la hizo reír, pocas veces se portaba de esa manera.

“Ok creo que solo es cuestión de concentrarnos y pensar en el cambio y ...”

El cambio sucedió de inmediato, Adler estaba fascinada, Sasha le había permitido tomar el control y en ese momento se hizo cargo “Wow, eso fue tan intenso”

“Ni que lo digas, es raro estar dentro, aunque cada vez es más fácil hacer el cambio”

“Gracias” Adler realmente estaba muy emocionada “Estos minutos que me das es lo mejor”

“Tengo una duda”

“Dispara” Adler comenzó a reír “Mejor no, capaz y jamás sé cuál es tu duda”

“¡Cállate!”

“¿Cuál es tu duda?” Preguntó Adler.

“¿A dónde vas cuando no te escucho?”

“Simplemente voy a otra parte”

“¿Pero a dónde?”

“No sabría decirte cómo llegar ahí, creo que eso debes descubrirlo tú sola” Le respondió mientras saltaba.

“Adler ¿Qué estás haciendo? Oh por Dios no, no, noooo” Pero ya era muy tarde, ese intento de pirueta no había sido la mejor idea.

“Aush”

“¿Pero qué rayos pen… sabes lo que…?”

Adler solo se quedó quieta mirando el cielo “Siempre había querido saber qué se siente recostarse en el pasto”

“Adler...” Pero no la dejo continuar.

Adler se puso de pie y se dirigió a la entrada de la barraca, sus pasos ya eran firmes y no necesitaba sujetarse a nada, había avanzado mucho para ser su segundo intento “Será mejor que entremos o Roberta se va a preocupar” Adler cerros los ojos y Sasha de nuevo tomó el control.

“¿Por qué la llamas así? Ella es nuestra amiga y todos le dicen Robín”

“Porque tiene un nombre bonito y fuerte. Además, me gusta cómo suena” Sasha se puso celosa “Calma, calma tigre. Que sé que ella es tuya”

“No somos nada”

“Aún no, vamos que ya tenemos que dormir” Cuando entró, todos ya estaban dormidos, su compañera estaba acostada, esperando por ella. Se apresuró tratando de no hacer ruido para no despertar a los demás, se cambió de ropa, se metió a su cama y se acomodó hasta quedar frente a su amiga que en ningún momento dejo de observarla, ambas se sonrieron mientras se miraban a los ojos. Poco a poco se fueron quedando dormidas mientras afuera había un cielo repleto de estrellas.

 


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