Capítulo 19.- Espacios en blanco
Seiya despertó en medio de la noche y no se pudo mover, se sentía pesado y le tomó un momento recordar la razón, Hades lo abrazaba por la espalda mientras dormía profundamente, el castaño sonrió y tratando de no mover mucho la cama se levantó, tomó la camisa de Hades que estaba por el suelo y se la puso para caminar a la cocina y servirse un vaso con agua, regresó a la cama y aún no podía creer que Hades en verdad le hubiera hecho el amor la noche anterior y ahora esté dormido en su cama, esto era genial, así que se acostó nuevamente y abrazó a su amante acurrucándose en su pecho para volver a dormirse inmediatamente
A la mañana siguiente, Hades despertó y sonrió al sentir el cálido cuerpo de Seiya hecho bolita a su lado, acarició su espalda por dentro de la camisa que estaba usando y el castaño abrió los ojos perezosamente
- Hey… - dijo el mayor besando la frente del menor que se estiró como gatito en la cama
- Hey… no se vale, no quería que amaneciera
- Es en verdad temprano así que tienes tiempo de volver a dormir, voy por café, tú duerme
- Ok., dos de azúcar…
- Crema y chocolate, sé cómo tomas tu café niño, duerme, enseguida regreso – Hades besó a Seiya en la frente nuevamente y empezó a juntar su ropa…
Shura estaba de pie frente al edificio al que tantas veces había entrado en el pasado, lo había pensado y luego de tantos intentos de hablar con Seiya en la firma, decidió que lo mejor era buscarlo fuera del trabajo, como su obra seguía esta semana en presentación, decidió que temprano en la mañana podrían hablar, así que tomó aire y entró, él tenía llave y por su camino no vio a ninguno de los coloridos vecinos de su novio, al entrar al departamento, vio todo como usualmente estaba, y un bulto en la cama, Seiya aún dormía y era lógico, aún no eran las 6:30 en la mañana, debería prepararle café, si… eso sería lo mejor, en eso pensaba cuando la puerta se abrió nuevamente, y ahí estaba Hades con una bandeja de cartón que tenía dos vasos de café, el pelinegro vestía pantalones de traje, zapatos brillantes y un buso de cuello tortuga que le quedaba espectacular
- ¿No es un poco temprano para asuntos de trabajo? – preguntó Shura y lució por demás molesto
- Shhhhh… - Hades levantó una mano indicando silencio
- ¿Qué diablos haces aquí Hades? – volvió a preguntar Shura
- Traigo café – contestó el mayor poniendo su bandeja en la mesita de la entrada
- ¿Cómo diablos entraste aquí?
- La puerta estaba abierta, ¿tú que haces aquí? – Hades se cruzó de brazos y miró a Shura sin inmutarse
- Vine a ver a mi novio, eso vine a hacer – Shura levantaba la voz con cada frase, ambos se quedaron callados porque Seiya se movió en la cama, se incorporó y abrió los ojos, se llevó una mano al pecho y se sentó de golpe al preguntar:
- ¿Qué haces aquí Shura?
- Vine a hablar contigo pero al parecer no soy el único – Shura sonaba molesto, especialmente porque Seiya al parecer no usaba su usual camiseta de pijama sino que se estaba arreglando una camisa que estaba puesto, ¿de cuándo acá Seiya duerme con su camisa puesta?
- Ohhh… no se preocupen por mí, yo tengo que ir a la oficina en realidad, solo vine a dejar el café ofrecido – Hades tomó uno de los vasos de café, se acercó a la cama y sonrió al susurrar: - Mi camisa te queda espectacular
- ¿Qué estás usando?, eso no es mío
- Lo tenía en el auto, habla tranquilo con él, voy a llamar a James para que venga por mí y tu lleva el auto a la oficina, no puedes ir en tu bicicleta a la obra, ¿harás eso por mí? – preguntó Hades aún en un susurro, Seiya solo asintió y el mayor luego de hacer una seña de despedida a Shura, tomó su vaso de café, dejó un juego de llaves en la mesita y salió del pequeño departamento, Shura lo miró y caminó hasta la puerta para asegurarse de que estuviera cerrada, Seiya se levantó de la cama, en este punto estaba usando boxers y la mentada camisa que le quedaba grande, al menos tres tallas más grande
- ¿Pasó la noche aquí verdad? – preguntó Shura apretando los puños
- Shura…
- ¿Nos peleamos hace unos días y ya lo tienes a él en tu cama?, no te atrevas a negármelo Seiya, que no estoy ciego, esa camisa es de él… de él… - Shura señaló la camisa que el castaño estaba usando y en verdad no había punto en negárselo
- Ok., no voy a insultar tu inteligencia diciendo mentiras ni mucho menos, si pasó Hades la noche aquí, si es esta su camisa, si estamos… involucrados… pero esto, todo esto, pasó ayer Shura, no pasó antes, ayer fue que…
- Por favor ahórrame los detalles – dijo el mayor con dolor
- Lo siento, en verdad lo siento mucho
- No creo que sientas nada si ya estás consolándote en los brazos de Hades, ¿algo significó lo que tuvimos?, no no no, sabes qué, no me respondas eso
- No es lo que tú crees – dijo Seiya en un susurro
- ¿No lo es?, ¿no es Hades tu amante ahora?
- No… no es mi amante, vendría a ser mi pareja, no lo hemos hablado todavía – Seiya pasó una mano por su cabello y lució confundido un segundo
- ¿Te acuestas primero y averiguas después?
- No no no, tampoco te voy a permitir que me insultes, esta es mi casa, yo no he hecho nada malo, Hades es libre y yo también, lo nuestro terminó la semana pasada, tienes un punto en decir que no ha pasado mucho tiempo pero tampoco soy un cualquiera que salta de cama en cama, así que no, no me vas a venir a insultar en mi propia casa, faltaba más… - Seiya se molestó en este punto, Shura levantó las manos en señal de paz, si era verdad que se pasó de la raya y dijo:
- Está bien, lo siento, no era esto para lo que vine, aunque a decir verdad ya no tiene caso – Shura puso las manos en la cintura y meneó la cabeza
- ¿A qué viniste Shura? – preguntó Seiya
- A hablar contigo, yo quería arreglar las cosas entre nosotros pero… al parecer llegué tarde
- Ohhhh… lo siento… en verdad lo siento, yo estoy con Hades ahora y…
- No se diga más, fue un error venir… nos vemos luego… o algo… - Shura salió del departamento de Seiya dando un portazo, el castaño se arrimó a la columna y suspiró, tomó su café y le dio un sorbo, Hades si le había puesto dos cucharadas de azúcar, crema y chocolate, diablos… y esta que pensó que sería una buena mañana…
Shura fue a la corte, luego fue a ver a un cliente con Kanon antes de finalmente regresar a la oficina, la pasó de un genio de los mil diablos, casi se choca en el camino y en los actuales momentos estaba peleando con una grapadora, al parecer la grapadora le estaba ganando la partida, Hypnos lo miraba desde el marco de la puerta y le dijo:
- Lo que sea que te pase, estoy seguro de que la grapadora no tiene la culpa, ¿o sí?
- ¿Qué?, ahhhh… lo siento… es… no es nada – Shura meneó la cabeza y dejó la grapadora en su escritorio, se frotó la cara con las manos y lució frustrado
- No parecía nada desde donde estaba yo, ¿qué pasa? – el rubio entró a la oficina y se sentó en la silla de visita frente al escritorio del pelinegro
- No creo que no lo sepas, seguramente Hades te lo contó – Shura se recostó en su sillón y tomó el abrecartas de su escritorio, jugaba con él mientras hablaba, Hypnos tenía la impresión de que le hubiera gustado clavárselo en el cuello a Hades
- No, Hades no me ha contado nada
- Vaya… pensé que lo publicaría a estas alturas
- No… él es muy privado con sus cosas, ¿qué pasó con Hades?
- Nada interesante, me robó a Seiya, así que no es nada la verdad – el sarcasmo le salía por los poros a Shura
- Ohhhh… no deberías dejar que celos infundados acaben tu relación con Seiya, ellos no tienen nada hasta donde yo sabía – respondió Hypnos ladeando la cabeza
- Oh no… ellos tienen algo porque no me perdí la actualización de las noticias esta mañana, Hades pasó la noche en casa de Seiya, entonces no… no son celos infundados, las cosas ya están dadas – explicó el pelinegro con rabia
- Ya entiendo, lo siento mucho Shura – Hypnos no sabía qué decir en este punto
- ¿Cómo me pudo hacer esto Seiya?, ¿cómo se fue a involucrar con él?, luego de que tanto me negó que entre ellos había algo, se rieron de mí, eso es lo que hicieron – Shura se levantó de su sillón y empezó a caminar por la oficina
- No lo creo, si ellos empezaron algo, seguramente fue luego de que lo tuyo con Seiya terminara
- ¿Muy seguro eh?
- Si… Hades no es del tipo infiel, entonces no sería “el otro” en ninguna relación, cielos Shura, no sé qué decirte, aunque si te advertí que no te metieras con Seiya desde el inicio – el rubio también se puso de pie y al acercarse a Shura le palmoteó el hombro en simpatía
- No… nunca me dijiste eso, me advertiste que no me acercara a Sorrento
- No, nunca te he hablado de Sorrento – Hypnos frunció el ceño al decir esto
- Si, me hablaste de él, me dijiste que no me acercara a él – insistió Shura pero Hypnos meneó la cabeza y respondió:
- No, te dije que no te metieras con el niño, eso fue lo que te dije
- Exacto, con Sorrento – confirmó Shura
- No… el niño es Seiya, Hades le dice niño a Seiya, no a Sorrento, amigo… ellos tienen historia y de la pesada, realmente pensé que si ellos no se habían involucrado hasta ahora ya no lo iban a hacer, aparentemente estaba equivocado, pero no deberías tomarte esto tan mal, tristemente esto se veía venir, Hades y Seiya… son Hades y Seiya, lo siento mucho… en verdad porque te vi ilusionado con el niño, y tenías razón de estarlo, Seiya es genial pero…
- Es de Hades… - Shura dijo esto sintiéndose estúpido, aparentemente todos los sabían, él lo sospechaba, se lo reclamó a Seiya en su tiempo pero no… esto aparentemente tenía que pasar, diablos…
- Si, es de Hades…
Dos días pasaron en los que Shura tuvo un genio de los mil diablos, Julián había hablado con Hades al respecto pero el pelinegro estaba renuente de hablar con él, a la final eran temas privados y no los quería tratar en la oficina, Seiya lo único que le había dicho es que Shura lo estaba ignorando, pero eso era bueno a criterio de Hades, eso cambió una mañana cuando el pelinegro necesitaba estirar las piernas y salir de su oficina, sus argumentos de apertura para su juicio de homicidio al sacerdote ya estaban listos, tenía armado su discurso y lo estaba revisando, este viernes era el gran día y si estaba un poco estresado, no lo podía negar la verdad, así que decidió ir por un café a la cafetería del piso, al entrar se encontró con Shura que estaba a punto de lanzar el filtro de la cafetera porque aparentemente no lo podía colocar correctamente
- La cafetera no tiene la culpa de lo que sea que te pase – dijo Hades en tono sereno
- No me pasa nada, no que a ti te importe claro está – respondió Shura con violencia, se volteó y se arrepintió de lo que dijo al ver que era Hades al que le había contestado de esa manera, pero ya fue tarde porque el mayor le dijo en un tono sumamente seco y bastante autoritario:
- A mi oficina, ahora…
- Hades, lo siento yo…
- No fue una petición, fue una disposición que debe ser acatada inmediatamente, a la final soy uno de los dueños de esta firma – Hades salió de la cafetería y caminó con paso pausado a su oficina, en el camino vio a Seiya que estaba sentado en su silla y algo leía, mordía el lápiz ausentemente, Hades amaba verlo así, le parecía sexy, Shura caminó tras Hades y cuando entraron a su oficina, Hades rodeó su escritorio y se sentó en su sillón al señalar la silla de visita frente a él, Shura respiró profundamente y se sentó, no era prudente seguir provocando a Hades
- Tú dirás – dijo Shura simplemente
- Me han llegado reportes sobre tu comportamiento estos últimos días, hasta Julián está algo preocupado, y esas son palabras mayores porque a Julián le resbala la vida pero… si es preocupante cuando uno de nuestros abogados que tiene algunos de los casos más pesados, falta a reuniones y se muestra displicente con nuestros clientes – el tono de Hades era sereno pero firme, además aplastó el botón llamando a su secretaria, Norma abrió la puerta y miró a su jefe con una libretita en la mano, Hades continuó: - Norma por favor, un café negro
- Enseguida señor – respondió la mujer y salió de la oficina sin preguntar si Shura quería uno o no
- No tenía conocimiento de que alguien se hubiera quejado, lo siento mucho – dijo Shura respirando profundamente, no quería repetir la agria discusión que ya había tenido con Hades en el pasado
- Eres abogado Shura, debes poner tus sentimientos a un lado, estás aquí para cumplir con un trabajo en específico y la mejor forma de servir a nuestros clientes es con la cabeza fría, no debería estar diciéndote esto, asumo que lo sabes – Hades tomó su abrecartas y se recostó en el espaldar de su sillón al mirar a Shura que asintió y simplemente respondió:
- Lo sé, ya me disculpé, ¿puedo regresar a mi trabajo ahora?
- No…
- ¿No?
- No, entiendo que estés molesto por lo que pasó con Seiya, entiendo que toda esta situación sea difícil de aceptar para ti, pero nada justifica tu actitud, no con nuestros clientes, o con la firma, y mucho menos con Seiya
- ¿Se vino a quejar? – Shura se mostró visiblemente molesto, Hades sonrió divertido y dijo:
- Claro que no, solo me contó que no cruzas palabra con él, lo que a mí me parece perfecto, por cierto, pero no es justo con el niño, él es más corazón que cabeza y no le agradan los disgustos, así sea con su ex
- ¿Ex?, ¿estás disfrutando esto verdad?, no me lo niegues, ¿para qué me llamaste aquí? – a Shura le parecía pésima la actitud de superioridad que Hades había demostrado siempre, pero en este día estaba peor que lo usual
- No sé si lo esté disfrutando o no, pero creo que debemos aclarar algunas cosas si queremos que el trabajo fluya con normalidad, hay algunas cosas que no entiendes y por eso estás tan molesto, no te estoy quitando la razón, pero hay cosas que no sabes básicamente porque Seiya ni muerto te hubiera contado – Hades le hizo una seña a su secretaria que entró con un vaso de café grande, lo había comprado en el carrito aparentemente, el mayor le agradeció y bebió un sorbo, cerró los ojos y suspiró, Shura esperó a que Norma saliera y preguntó:
- ¿Tú me vas a contar lo que Seiya no me contó?
- Tienes la historia llena de espacios en blanco Shura, por eso no entiendes las cosas, por eso no lo pudiste entender a él, y ni siquiera es tu culpa porque no lo conoces
- Claro que lo conozco
- No… no lo conoces, Seiya es sumamente complicado y trucoso, pero empecemos desde el principio, y lo bueno es que este punto no tengo que explicarte mucho porque a él si conoces y muy bien
- ¿Aioros?
- Exacto, tú has visto su lado bueno, su lado malo, su faceta profesional y su lado intolerante, tú mismo me contaste como te afectó el hecho de que te diera la espalda cuando se enteró de tu homosexualidad, ahora toma ese sentimiento y multiplícalo por el infinito, eso es lo que sintió Seiya cuando su padre, el hombre al que amaba profundamente y lo idolatraba, su modelo a seguir, su todo… le dijo que prefería tener un hijo muerto a un hijo gay – Hades bebió su café y abrió su cajón para sacar un frasquito de pastillas, al parecer le dolía la cabeza
- Supongo lo duro que eso debió haber sido para él – respondió Shura con dolor en el alma, las historias de salida del closet eran diversas, unas más accidentadas que otras
- No tienes una idea, mira… yo conozco a Aioros por más de 10 años, conocí a Seiya cuando tenía 13 años, pero Aioros no hacía más que hablar de él, Seika era mayor y si la amaba y estaba orgulloso de ella pero… Seiya era su hijo varón, parecido físicamente a él, estaba en el equipo de básquet de la secundaria, buen estudiante, quería ser abogado como su papá, tu nombra la virtud y a los ojos de Aioros, Seiya la tenía, Aioros daba la vida por su hijo, y el sentimiento era mutuo, las pocas veces que vi a Seiya mientras vivió en la casa de sus padres, se notaba el cariño que había en esa familia, eso fue hasta una cena de acción de gracias, Seiya le pidió a sus padres que le dejara invitar a un amigo a la cena, al parecer la familia de ese muchacho fue a esquiar pero él no quiso ir o algo así, la cosa es que estaba sin familia en esa festividad, el muchachito fue a la cena, todo estaba fluyendo bien hasta que los gritos llenaron la estancia
- ¿Tú estuviste ahí?
- Si… ¿recuerdas que te dije que antes que tú fueras el protegido de Aioros, lo fui yo?
- Claro que si
- Eso incluía festividades, y en esa cena que nunca llegamos a comer, Aioros entró a la habitación de Seiya y lo encontró besándose con aquel muchacho, por mi vida no me acuerdo su nombre – Hades tomó su analgésico y cerró los ojos en concentración
- Ohhhh… denso…
- Si, esa noche despidió a sus invitados y no volví a escuchar del tema hasta después de año nuevo, Aioros se mostró taciturno en la oficina, no hablaba de nada de su familia, se lanzó de lleno al trabajo y no me sorprendió la verdad, pero cuando pregunté por Seiya y él me dijo que su hijo había muerto para él, ahí me preocupé, le insistí y le insistí hasta que me dijera lo que hizo con él, la verdad pensé que lo mandó a un internado en el extranjero o algo así, pero no… lo mandó a una especie de campamento religioso en donde trataron de sacarle la homosexualidad a golpes y torturas, Seiya se había escapado a las dos semanas de haber ingresado y volvió a casa, Aioros trató de llevarlo nuevamente allá pero Seiya aterrado se negó, así que Aioros lo echó de la casa
- ¿Aioros fue capaz de hacer eso?
- Si… Seiya me dijo que Aioros le había dicho que era la vergüenza de su familia, que nadie quería volverlo a ver y mucho menos a tener tratos con él, al sacarlo de su escuela cortó sus vínculos sociales porque se encargó de hacer correr el rumor de que Seiya era gay y no tengo que decirte lo crueles que pueden ser los muchachitos, en especial los niños ricos, Aioros le cortó todos los caminos a Seiya, prácticamente dejó a su hijo en la calle y al tiempo que hablamos, hacía más de tres semanas que no sabía de él, la verdad esperaba que hubiera muerto, cuando me dijo eso le dije que me avergonzaba de él y que si así trataba a su propio hijo, ¿qué podía esperar yo?
- ¿Le dijiste que eres bisexual?
- Si, y me echó de la fiscalía como te echó a ti, luego de decirme que lo había decepcionado como nadie en la vida, además de Seiya claro está, yo vine a esta firma y el resto es historia – Hades bebió más de su café y cerró los ojos al hacerlo
- ¿Pero y Seiya?
- Seiya… me dediqué a buscarlo, contraté un investigador privado y di con él, lo recogí de las calles en donde dormía con los demás mendigos, limpiaba parabrisas de los autos para ganar unas monedas y tener algo que comer, a veces comía, a veces no, así que cuando lo encontré me lo llevé conmigo, lo llevé al hospital porque tenía una herida en el brazo que estaba infectada por una pelea que había tenido días antes, el médico me dijo que si no lo llevaba cuando lo llevé, hubiera muerto por sepsis, esa es la razón por la cual soy su contacto de emergencia
- Oh por dios…
- Cuando salió del hospital lo llevé a mi casa, él estaba en extremo deprimido y no quería quedarse conmigo, se sentía indigno de quedarse conmigo, a su criterio no merecía nada de la vida porque decepcionó a su padre, Aioros caló hondo en él y me costó mucho tiempo y terapia hacerle entender que no había nada de malo en él
- No puedo creerlo…
- Lo puse en la escuela pública, ofrecí volverlo a su propia escuela para que vaya con sus amigos pero… Aioros amenazó al director que iba a demandar a la escuela entera si recibía de vuelta a Seiya, en ese tiempo ya se enteró que estaba bajo mi cuidado y me amenazó con encarcelarme a mí también, en cambio yo hice el trámite para que Seiya fuera declarado como menor emancipado, de esa forma Aioros no podría intervenir más en su vida, no podía permitir que me alejara a mí también si era el único que velaba por Seiya, y así lo hicimos… - Hades suspiró al decir esto
- ¿Cuántos años tenía Seiya?
- 16, entonces podrás entender las razones que tuvo para no decirte que Aioros es su padre, Seiya tiene sentimientos encontrados con respecto a su familia, los odia pero no los odia, no quiere verlos pero le encantaría sentirse aceptado, le gustaría que lo busquen, que lo llamen, pero no… nadie nunca lo buscó a pesar de que yo asumo que sabían en donde estaba
- Eso no es de dios
- Eso es lo que yo pienso también, Seiya vivió conmigo por dos años, en esos dos años que fue a la escuela, igual estaba en el equipo de básquet, entrenó karate, trató de ser un adolescente normal, o por lo menos eso es lo que yo quería para él, bueno… - Hades se encogió de hombros y Shura lo tomó de la peor manera al decir:
- ¿Te aprovechaste de él cuando estaba tan vulnerable?, ¿le obligaste a tener sexo contigo todo ese tiempo? – Shura se puso de pie y lució horrorizado ante la posibilidad
- Claro que no, ¿por quién me tomas?
- ¿Entonces?
- Entonces… Seiya se convirtió en mi familia, yo me convertí en la suya, con el tiempo empezó a sentirse cómodo en casa, me contaba sus cosas, sus compañeros de clases iban a casa por trabajos y cosas, yo iba a sus programas de la escuela, a veces Julián o Hypnos iban conmigo, Hypnos tiene una niña menor a Seiya y estaban en la misma escuela, ella se graduará de la secundaria este año, compartimos muchas cosas, él me contaba de sus clases, de sus compañeros, de las películas que le gustan y me hacía verlas con él, yo le hablaba de mis casos, usualmente mientras yo trabajaba en mis argumentos y demás preparación para los juicios, Seiya hacía sus tareas, nos hacíamos compañía mientras trabajábamos o Seiya estudiaba, por eso somos tan familiares el uno con el otro, por eso Seiya me conoce tan bien, por eso yo lo conozco tan bien a él, ¿entiendes ahora?
- Todo eso está muy bien, pero me hablas de una relación de hermanos, pero eso no es lo que yo siempre creí que ustedes fueran
- Es que no lo somos, nunca lo fuimos, en ese tiempo, no sé cuándo la verdad, Seiya se enamoró de mí, yo me enamoré de él, pero no necesariamente actuamos sobre ello básicamente porque Seiya era menor de edad, porque estaba en la secundaria, y porque yo no quería poner en riesgo la única relación saludable que él tenía en la vida, y que yo tenía en la vida, pero… inevitablemente pasó lo que tenía que pasar
- ¿Si te acostaste con él?
- Si… una vez… luego de su graduación del colegio, y eso… lo estropeó todo
- ¿Ah sí?
- Si… las cosas se pusieron tensas porque yo no quise continuar la relación, Seiya era muy joven, ni siquiera había tenido un novio antes, yo… fui el primero en todo sentido, él estaba entusiasmado pero yo tenía mis reservas, Seiya suele decir que me entró una crisis de consciencia, la verdad tiene razón, él tenía 18, yo 33, casi le doblaba la edad y ya vivíamos juntos, así que decidí cortarlo todo y le conseguí un sitio en los dormitorios de NYU y lo mandé a vivir al campus apenas empezó la universidad, Seiya me resintió con el alma por eso, y nuestra relación se fue al diablo por un año más o menos, no ayudó el que yo al poco tiempo y de la nada me casara con Pandora – Hades sonrió de medio lado y bebió su café
- ¿Cuánto tiempo estuviste casado con ella?
- Dos años, pero realmente fue uno, nos separamos pronto porque no éramos compatibles por ninguna parte y cuando logré arreglar en algo mi relación con Seiya, ella lo resintió con todas sus fuerzas porque ella al igual que tú, intuyó bastante bien el hecho de que Seiya y yo no somos familia, nunca lo fuimos y nunca lo seremos, por eso… cuando las cosas regresaron a su cauce normal, acordamos Seiya y yo, dejar lo que pasó de lado, volver a tener la relación que antes teníamos, nos prometimos que no nos íbamos a perder mutuamente ni a dejar que un romance sin consecuencia se interpusiera entre nosotros, y por eso entró a trabajar aquí al ver que yo me estaba volviendo loco sin asistente, él solía venir cuando tenía hora hueca y me ayudaba con mis expedientes, naturalmente le propuse que trabajara conmigo y lo hizo, y así fue que no perdimos la relación
- ¿Nunca tuve oportunidad, verdad?
- No… Seiya me ama a mí, siempre ha estado enamorado de mí, yo lo sabía, él sabía que yo lo amaba, pero el tiempo nunca fue el correcto, por eso él ha tenido otras relaciones al igual que yo, nunca estuvimos en la misma página por decirlo de alguna manera
- ¿Hasta ahora?
- Si, hasta ahora, tú eres menor a mí con un par de años nada más, Seiya está por acabar su carrera, ya no es el muchachito asustado que llegó a mi casa, o el muchachito de 18 años que se entregó a mí con los ojos cerrados, Seiya es un hombre hecho y derecho, que sabe que es lo que quiere, a quién quiere y es capaz de tomar sus propias decisiones y manejar su vida, si quieres saber cuál es la ironía de ello, es el hecho de que si tú no hubieras llegado a nuestras vidas yo hubiera seguido ciego ante esta realidad, así que indirectamente… gracias…
- Por favor no me agradezcas esto, ha sido doloroso y humillante
- Tienes que entender algo sobre Seiya, lastimosamente Aioros lo marcó de muchas formas y ni toda la terapia del mundo va a poder arreglar lo que su padre destruyó en él, Seiya no confía en nadie, no cree en nadie, no le cuenta nada a nadie, Seiya es una isla a la que nadie tiene acceso
- Salvo tú aparentemente
- Si, salvo yo, por eso tu relación estaba destinada al fracaso, lo siento pero no te desquites con el niño, no es su culpa el tener un padre estúpido, Aioros ni siquiera buscó a Seiya cuando murió su madre, con eso te digo todo
- ¿En serio?
- Seiya se enteró de ello por el periódico, hasta cierto punto puedo entender a su padre y su intolerancia, a la que nunca he podido entender es a Seika, o a su madre, o a su abuelo, Seiya amaba a su abuelo y le ha hecho falta siempre en su vida, la falta de todos ellos ha sido muy duro de sobrellevar para él, por eso no le duran los novios, su sentido de abandono es abrumante y sabotea todas sus relaciones, con el que más ha durado es contigo, yo creo que él si estaba poniendo de parte y haciendo esfuerzos varios para que la relación no se vaya al diablo, pero él nunca iba a contarte la historia completa, le avergüenza el hecho de que su padre lo repudiara de la forma tan cruel en la que lo hizo, tú mismo fuiste testigo de la reacción visceral que tuvo Aioros al verlo aquí, por eso Seiya suele decir que va a terminar solo en la vida, que no tiene a nadie, es complicado hacerle ver que no es así, especialmente porque Aioros sigue presente por ahí, Seiya se entera de noticias suyas y se deprime, él dice que no, pero si
- Lo que me estás diciendo es que ninguna relación de Seiya hubiera funcionado, salvo contigo
- Así es, salvo conmigo, lo siento Shura pero yo… soy yo… y él es él, y es mío, así que por favor, cambia de actitud que lo único que vas a conseguir es dañar la cafetera o que te despida y la verdad no quiero hacerlo, supéralo y no lo resientas que mi niño es sentimental
- Ok., trataré
- Muy bien, gracias por venir y por favor no le comentes que te conté todo esto, pero pensé que deberías saberlo
- Así lo haré
Shura salió de la oficina de Hades y aún no podía creer todo lo que el mayor le había contado, caminó por el pasillo y prácticamente se chocó con Seiya que salía del archivo, el castaño perdió el equilibrio pero Shura lo sujetó de los brazos para que no se cayera
- Lo siento, venía distraído – dijo Shura a Seiya que se abrazó de sus expedientes, le había tomado más de una hora organizar los papeles, si se le caían al suelo le hubiera tomado mucho más el volver a organizarlos
- No te preocupes, ¿cómo estás?
- En franca necesidad de un café, ¿se te antoja uno? – preguntó Shura en un tono por demás fresco, iba a hacer caso a las recomendaciones de Hades, el guardar resentimientos no es bueno para el alma
- ¿De la cafetería?
- Si… mis motivos son ocultos, no puedo hacer funcionar esa cafetera infernal, ¿me ayudas con eso?, hace un rato hice el ridículo al querer poner el filtro
- Claro… - Seiya sonrió aliviado, Shura estaba siendo amable, eso era bueno
- Y cuéntame, ¿listo para el cierre de tu obra?, ¿cuándo es el gran final?
- Mañana, esperamos casa llena
- Asumo que Hades va a ir a verte
- Dijo que si, aunque mañana en la tarde tiene los argumentos de apertura de su caso de homicidio, me dijo que va a hacer todo lo posible por llegar a tiempo, en todo caso va a llegar atrasado, pero de que llega, llega
- Eso es bueno… - Seiya y Shura caminaron por el pasillo y fueron a la cafetería, Hades los miró desde la puerta de su oficina y bebió su café, el que el mequetrefe ese deponga hostilidades haría feliz a su niño, no que a él le importara, pero siempre era bueno complacer en estas cosas a Seiya, a la final él no podía hacer nada usualmente, bueno… ya hizo lo que tenía que hacer, ahora era tiempo de concentrarse en su argumento de apertura, Ikky contaba con él, no lo podía defraudar…