En lugar del payaso de la clase que seguro esperaban sus padres tienen en cambio un niño omega refinado que utiliza los implementos en el orden adecuado, levanta el dedo al tomar de su taza de té, se seca delicadamente la boca con la esquina del pañuelo blanco entregado e incluso responde un par de cosas acertadas que pregunta su madre.
En conclusión, Seto tiene dos sentimientos rivalizando en su cabeza. Orgullo y desesperación.
Puede verlo en los ojos de su padre. La intriga que le causa el rubio, que es un sentimiento mucho mejor que la anterior indiferencia. Su madre a medida que avanza la conversación se ve más emocionada, antes quería ser una tutora para que su yerno no avergonzara a su hijo, pero ese brillo parece indicar que habrá más que solo tutoría.
Ese chico es su esposo, está tan orgulloso porque sabe que debe causar una buena impresión. Si hubiese llegado otro Joey habría sido mas catastrófico, está seguro
Pero también siente desesperación. Necesita abrazar a su cachorro y estar seguro que está bien.
Ser solo el hijo de un duque no le da poder, ni siquiera en su propia casa, para lograr terminar esta fiesta de té.
Aprieta los puños con impotencia y regaño.
Ni siquiera se le debería pasar por la cabeza que sus padres están mejor muertos.
-Entonces, cariño.- Su madre lo saca de sus pensamientos mirando atentamente a Joey con una sonrisa que poco a poco se va volviendo más genuina.- ¿Has tenido tutores? Pensaba que debido a tu condición sería muy difícil encontrar uno.
No le importa que sea su madre, Seto la fulmina con la mirada. Porque eso fue un insulto sobre la situación financiera de la familia Wheeler y tratando a la caída del título como una enfermedad.
Lo entiende, su madre tiene curiosidad, pero al mismo tiempo está probando el tipo de respuesta que dará Joey.
Hace mucho tiempo Joey, cuando aún no eran ni siquiera amigos, insultó a uno de los niños de la nobleza y cuando lo abofetearon Seto cayó encima de esa familia como un destructor de mundos, porque Joey es un Kaiba y nadie se burla o lastima a un Kaiba.
Fue una lección de que el apellido Kaiba es el más fuerte del Imperio Domino viendo que la Familia Imperial no tiene apellido, debe dejarlo voluntariamente para ser los lideres de su pueblo.
Esa noche ambos se vieron en su cena obligatoria semanal y Joey tenía la mirada baja.
-Gracias por ayudarme.- Le susurra y el castaño estaba a punto de desdeñar con la mano cuando la mirada de Joey se levantó y vio ojos firmes.- Pero quiero pelear mis propias batallas, no dejaré que se vuelvan a burlar de un Kaiba.
El puede admirar ese tipo de actitud.- Prometo no interferir si no lo pides
Cuando empezaron a ser mucho más Seto quería protegerlo mucho más, pero recordaba su promesa.
Joey no es el típica omega que espera que un príncipe lo salve. Es un sobreviviente en un lindo empaque.
Joey se limpia ligeramente la comisura de los labios y mira a la duquesa con una sonrisa y un brillo peculiar en los ojos.- En cuanto noté mi pobre capacidad para apoyar a mi futuro esposo decidí buscar la mejor educación posible para alguien de mi condición.- Reafirma un poco la última palabra para denotar que no perdió la falta de respeto que ocurrió antes.
Su madre le da un asentimiento aprobatorio y sonríe aún más fácil que antes
-Eso está muy bien, cariño. Supongo que es todo gracias al apoyo de tu padre.
Seto mira a Lord Wheeler atiborrándose del refrigerio en contraste con la gracia que muestra su hijo. Le hierve que su precioso cachorro haya estado con este tipo desde que volvió.
Joey asiente y mira de soslayo a su padre.- Si, la firma de mi padre fue sin duda un gran apoyo.
La desaprobación de su madre le pasa por la cabeza a Lord Wheeler que sigue comiendo como si no hubiese tenido él mismo la educación de un noble.
Así que Seto es más directo. - Es bueno ver que alguien la anterior prestigiosa familia Wheeler tenga los conceptos básicos de la nobleza.
Esta vez a Lord Wheeler no le pasa por la cabeza pero no dice nada además de fruncir el ceño. No le conviene.
Los ojos de Joey lo miran divertido pero aún se ve sereno.- Fui enseñado por la Marquesa Cecilia Pegasus.
Ahora su padre se ve interesado.
¿Pegasus?
Parece que Seto no es el único que se ha estado moviendo para cambiar las cosas.
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La fiesta de té concluye y los Duques Kaiba le piden que escolte a su prometido por los jardines. Es una táctica para que los adultos hablen pero no le importa.
Aun no puede ser obvio en el afecto, sería muy notorio que cambió demasiado pronto su indiferencia por la situación. Así que no le da el brazo a Joey y simplemente le dice que lo siga.
Su nana y dos sirvientes los siguen mientras caminan por los senderos. Las manos de Seto pican por tomar la otra mano, pero deben estar en privado y viendo a Joey mirando repetidamente hacia todos lados nota que también está ansioso.
Por lo menos deben crear una atmosfera creíble para los sirvientes que sin duda informarán a sus padres luego.
Pone sus manos detrás y camina sin ver a Joey.- Eres más educado de lo que pensé.
-Todo es gracias a las preocupaciones de la Marquesa Cecilia. Y también – Seto mira por el rabillo del ojo a Joey que no ha dejado de mirarlo.- Quería darle una buena impresión a la persona con la que los dioses me bendicen estar toda la vida.
Al castaño se le forma una sonrisa suave.- Creo que estoy impresionado.
-Entonces estoy complacido.
Seto los guía dentro de la mansión y Joey hace una buena impresión de inocencia maravillada que le saca risas al personal. Llegan a la sala de estar y Seto pide que todos se vayan. Aunque su nana dice que es su chaperona Seto le ordena que se vaya, solo quiere estar a solas unos minutos.
Ya pasó la edad en que recibe órdenes de alguien fuera de su familia o el Emperador. Tener 13 años no lo hará cambiar.
La puerta se cierra y apenas hace un pequeño ruido cuando sus brazos están llenos de un Joey con lágrimas.
-Seto.- Murmura Joey agarrándose fuerte de su chaqueta blanca y así mismo Seto sujeta su espalda con fuerza mientras respira el aroma distintivo de Joey.- Gracias por no dejarme solo, mi amor.
-No. Gracias a ti por estar conmigo- Son casi de la misma altura ahora porque son niños, pero aún sigue siendo un poco más alto por lo que lo abraza levantándolo un poco para sentirlo más cerca, más real.
Joey levanta la cara y lo mira con una sonrisa acuosa.- Juntos hasta el final, amor mío. Ni siquiera la muerte puede separarnos.
Ese recuerdo en específico hace que no quiera dejar ir a su omega. Joey parece entenderlo y se deja apretar como si fuera una almohada.
Su sesión de abrazos termina antes de lo que ambos quieren porque saben que tienen el tiempo medido antes que los vengan a buscar.
Se sientan en el sofá y Joey no duda en agarrar su mano con fuerza.
-¿Qué te gustaría hacer? – Joey pregunta a lo que Seto le alza una ceja, el rubio voltea los ojos exasperado. - Te conozco, estás planeando algo. Tienes esa mirada en la cara de que quieres que todos se enteren de lo que pasa al meterse con un Kaiba.
Seto sonríe. Si, necesitaba a su cachorro aquí.- De hecho estoy planeando quitarles lo que tanto quieren.- Sonríe esta vez no suavemente sino con todos los dientes.- La corona.
-¿¡Qu-Hmph! – Joey grita y se tapa la boca casi enseguida mirando furtivamente la puerta. El rubio se muerde el labio nervioso y luego que no entra ningún guardia mira con reproche a su alfa.- ¿Estás loco? – Le susurra en regaño.- Solo pensar que podrías querer eso nos hizo matar. ¿Qué crees que harían ellos ahora, tonto dragón? – Frunce el ceño a lo que Seto acerca su mano libre y pasa su pulgar entre ambas cejas para quitar esa expresión de su rostro.
Joey se suaviza un poco pero sigue apretando su mano en señal que no se retirará y que espera un buen argumento. Seto aun pasa el pulgar hasta que esa zona es suave y luego pone una mano en su mejilla, acariciándola con su pulgar.- Los mataré, mi amor. Te juro que lo haré, pero antes quiero hacerlos sufrir. Tengo un plan para ganar poder, evadir su mirada y humillarlos.- Sus palabras viciosas contrarrestan el trato suave que le da a su cachorro.- Pero por ahora no quiero que me presten atención, eso será en unos años.
Joey otra vez se muerde el labio, en ese hábito nervioso que no puede esconder del todo.- ¿Y quieres que sea el príncipe consorte del Emperador? Apenas pude hacerlo con el Ducado y quieres que sea el Omega que represente a todo el Imperio.
Seto suelta la mano y abraza al rubio.- No confiaría en nadie más para que esté a mi lado.
Joey apoya la mejilla en su hombro, Seto puede sentir las pestañas tocando su cuello.- Eres tan tonto, ¿Y si hubiese sido el mismo niño de hace de 10 años?
-Te hubiese preparado.
Joey se ríe y el aire caliente golpea su cuello muy cerca de su glándula del olor.- Pervertido.- Le da un beso en su mejilla y vuelve a acomodarse en su asiento.- Entonces, ¿Qué puedo hacer para ayudarte aparte de ser el príncipe de mi Emperador?
-No tienes que hacer nada.
Joey frunce el ceño.- ¿Qué?
Seto asiente.- Lo he estado pensando, no tuviste nada de libertad. Fuiste forzado a una posición que no te gusta y sé que tienes sueños y metas. Me gustaría regalarte este tiempo para ti, que hagas lo que quieras mientras estudias para reinar a mi lado.
Frunce aún más el ceño.- ¿Y qué hay de nuestra boda?
-Podemos tener la boda que queramos, tener la noche de bodas que nos merecemos, las flores que te gusten.- Toma la mano de Joey y besa su dorso sin dejar de verlo a los ojos.- Me encantaría hacerte feliz en esta vida.
El ceño fruncido se relaja con una sonrisa del rubio, que luego se acomoda en su regazo con ambas piernas hacia un lado.- Mi amor, muchas gracias por querer hacerme feliz, es algo que nos lo prometimos en nuestra primera boda.- Pasa su mano por la mejilla de Seto.- Pero creo que olvidas un pequeño detalle.
Seto frunce el ceño aunque sostiene la mano que toca su mejilla, para no dejarlo ir.- ¿Qué cosa?
La sonrisa cálida de Joey se va transformado hasta que su rostro se contorsiona en una mezcla de aflicción e ira.- Esos bastardos mataron a nuestra calabaza.
Un peso cae en el corazón de Seto. Realmente, hasta tener a su Joey de vuelta había evitado pensar en el pasado aparte de lo conveniente para esta vida. Tratando de no pensar en la perdida.
Pero de la desesperación dio paso a una ira que transmite y puede hacer pareja con la cara de Joey.
-Ellos pagarán. - Gruñe con enojo, Joey sabiendo que no es con él se inclina a abrazarlo con fuerza y el castaño le devuelve el abrazo, ambos cobijándose en el otro.
Esta vez Joey se permite llorar.- Mataron a nuestro pequeño ángel que no les había hecho nada.- Toda la ira se va y da paso a un omega afligido.- M-Me dolió Seto. ¿Y… Y si también sufrió? – Pregunta desesperadamente.
Es un hecho que no pueden traerlo de vuelta. Las mismas circunstancias no se repetirán e incluso se vuelven a tener otro hijo no será el mismo que perdieron.
Seto se recuesta en el sofá y tira de Joey para que se apoye en su pecho, ambos consolándose.
Mientras está pasando la mano por la espalda de Joey para aliviar un poco su angustia, este le susurra.- Quiero que ambos seamos felices en esta vida. Por nuestro bebé.- Se levanta un poco mientras recibe el pañuelo que le da Seto para limpiar sus lágrimas.- Hace muchos años tenía metas y sueños muy diferentes a los que tenga ahora.
Seto asiente.- Querías ser caballero.
-No me malentiendas. Aprovecharé esta vida para ser más fuerte, sabes que nunca me ha gustado estar protegido y es un papel que tuve que soportar mucho antes. Es hora de tener mis propias fortalezas.
Eso no le sentó bien. Toma la cara de Joey con ambas manos.- No quiero que vayas a la guerra ni que tus manos se manchen de sangre, para eso estoy yo.
A pesar de su rostro aun un poco hinchado Joey pone los ojos en blanco. - Lo sé, tonto y protector dragón.- Se inclina y besa su nariz.- Pero es hora de que pueda defenderme de verdad, mis puños callejeros y empíricos no pueden hacer mucho ante una verdadera amenaza.
Muy lógico, aun así, la idea de ver a su Joey en el campo de entrenamiento… Justo después de verlo morir. No, realmente no le gusta la idea. Quiere encerrarlo en su alcoba hasta que la amenaza del Emperador y el Príncipe heredero haya pasado. Pero un Joey encerrado nunca será feliz, incluso antes tenía felicidad administrando la mansión, los empleados y haciendo obras en su barrio.
Aun así. Se le debe ocurrir algo, no pondrá a sus violentos caballeros a que le pongan las manos encima a su anterior embarazado esposo.
-Seto.- Sale de su ensoñación para ver esa sonrisa cálida que caracteriza a Joey cubre su rostro.- ¿Ahora mismo, mi felicidad? Es estar contigo. Ambos juntos, planeando, estudiando, viviendo. ¿No te parece muy cruel para ambos separar nuestros caminos? Sería imposible para mi encontrar la paz sabiendo que podemos compartir la carga.
Ah.
No le importa que fuese un matrimonio arreglado para doblegarlo en las decisiones políticas.
Joey es sin duda lo mejor que le ha pasado.
Y en esta vida lúgubre llena de venganza y soledad puede ver una hermosa luz.
Tampoco le importa que tenga 13 años, sigue siendo su esposo por lo que lo besa con fuerza para poder transmitir todo lo que no puede decir.
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Joey y su padre se van una hora después, y entonces empieza la parte complicada.
¿Qué hacer con respecto a Joey Wheeler?
Esta vez Seto pidió traer a Mokuba y los cuatro Kaiba tienen una reunión en el invernadero.
-Sir Lucius conoce ese barrio de donde es el joven Joey.- Dice su madre después de tomar un sorbo de su taza de té, refiriéndose a uno de los caballeros del Ducado.- Fue verdaderamente una sorpresa ver a un chico tan bien portado venir de ese tipo de lugar.
Mokuba, quien no estuvo presente en la hora del té asiente tratando de entrar en la discusión de los adultos a la que no se le suele invitar. - ¿Debe ser por su padre? Escuché que anteriormente era un noble.
Su padre, no resopla exactamente porque eso sería indigno para él, pero la mueca que hace con su labio inferior captura ese mismo sentimiento.- Él fue la razón de la caída de la Familia Wheeler, sus hábitos y despilfarros no han cambiado incluso rodeado de plebeyos. Claramente la Marquesa Pegasus tuvo un buen estudiante.
Mokuba casi escupe su te. - ¿M-Marquesa Pegasus? – Pregunta con la boca abierta a lo que madre lo golpea levemente con la punta de su abanico.
Es entendible, en esta época los Pegasus son conocidos por su neutralidad política, o más el hecho que no gustan del Duque Kaiba actual ni el Emperador, las dos más grandes fuerzas del Imperio. Solo cuando Seto Kaiba se vuelve Duque y sus políticas y pensamientos empiezan a diferir de la de su padre es que consigue ese reconocimiento de parte del Marques.
Incluso Cecilia Pegasus cuando participa en los círculos sociales suele ser mucho más reservada que las historias que contó Joey sobre ella.
Su padre se ve complacido.- La Marquesa le ha enseñado muy bien, actualmente es su único aprendiz y tiene toda su atención en él. Algo que absolutamente nadie de la nobleza ha podido lograr con Cecilia Pegasus aparte de su marido.
Su madre tiene una sonrisa fácil solo un poco rígida. - Bueno, ella ciertamente fue muy amable incluso sin saber que era un niño que pronto será un Kaiba. Hay ciertas enseñanzas un poco limitadas para su saber.- Su sonrisa quita su rigidez levemente complacida.- Por supuesto no tengo problemas en enseñarle todo lo que se como Omega del Ducado Kaiba.
Seto sonríe detrás de su taza. Asi que su madre está celosa. Bueno, ella siempre había querido su propio niño omega y había visto a Joey como un proyecto para pulir en el niño perfecto. Ahora arrebatado por un niño educado que canta maravillas de Cecilia Pegasus.
Años de lecciones de etiqueta y clase no quitarían nunca la naturaleza omega de su madre.
Si un omega ve a alguien como su hijo será muy protector de él como una leona a su cachorro. Y también egoísta en su afecto. Más aun de un omega a otro. Porque inconscientemente un padre omega sabe que su hijo alfa puede defenderse muy bien pero un omega necesita más atención.
Se siente complacido que su madre piense en Joey como propio, y también divertido porque ya se enfrascó en una unilateral pelea con la inconsciente Marquesa
Su padre asiente con un gesto exasperado, claramente también entendiendo las palabras de su esposa.- Si bien la ubicación no es lo ideal, ya pudimos comprobar que su educación no se ha visto afectada. ¿Clases de etiqueta y protocolo tres veces a la semana? Es muy cerca de la cantidad requerida para los niños omegas de su edad.
-Pero querido, el será un Kaiba. ¿Cómo podemos, en buena fe, hacerlo vivir en ese sitio? Y peor, trabajando. - Dice lo último con horror.
El Duque asiente. - En eso tienes toda la razón, pero no puede vivir en nuestra mansión. No se vería bien.
Es verdad, y la razón por la que Seto no ha propuesto que vivan juntos. Están comprometidos en papel, un alfa y un omega no pueden empezar a vivir juntos hasta el matrimonio. El honor del alfa y la dignidad del Omega se perderían. Visitas por motivos de vacaciones o un par de noches no hay problema, pero vivir es otro asunto.
Su madre aprieta la mano en su regazo viéndose frustrada.- Aun así, después de ser recogido por un carruaje tan elegante y caballeros me preocupa su seguridad. ¿Y si sus vecinos lo lastiman para tratar de sacar provecho?
-¿Quizás podría vivir en una de nuestras propiedades cercanas? – Sugiere Seto, su padre se ve contemplativo un momento, pero después niega.
-La más cercana y cómoda está a un día en carruaje, obligarlo a estar todo el día en carruaje para una clase de pocas horas con tu madre seria cruel con él, y la Marquesa Pegasus también estaría indispuesta por la distancia. No, no podemos afectar su educación.
- ¿Qué tal la Academia Imperial?
Los tres mayores voltean a ver a Mokuba que se acobarda un poco con la atención
- ¿Qué hay de ella?
Mokuba mira a la mesa nervioso y luego mira a su hermano mayor quien le asiente, haciéndolo asentir también y enderezándose un poco. - Joey Wheeler sigue siendo de sangre noble, puede ingresar a la Academia y prepararse con los mejores maestros. Es muy aplicado y si se prepara para el examen puede entrar con sus propios méritos. Además, las conexiones de ese lugar servirán para toda la vida.
La Academia Imperial solo pueden ingresar los niños de la nobleza. Muchos herederos estudian en la Academia por su gran calidad de maestros para prepararlos para sus títulos, además los alfas tiene un programa para aprender lo que se necesita para ser caballeros. Los omegas también asisten a las clases ricas en conocimientos que los tutores a veces ignoran por tratarse de omegas.
Las clases están divididas entre alfas, betas y omegas, así mismo los dormitorios y la seguridad es muy buena, evitando escándalos de deshonra.
El requisito principal es aprobar el examen de ingreso que tiene las 3 categorías, porque a cada clase se le enseña según su participación en el mundo social. Los alfas, betas y omegas tienen funciones diferentes, después de todo.
Nunca pudo participar de la Academia, a esta edad tenía planes de aprender de su padre sobre ser un verdadero de Kaiba y luego estaba muy ocupado siendo un Duque
Seto cree haber escuchado que los omegas pueden aprender el elegante arte del tiro con arco para competencias de puntería.
Es perfecto para Joey.
Además, su conocimiento en los círculos sociales no es tan vasto como el de Joey, pero sabe que sin duda personajes importantes deben ser parte de la Academia. El propio Príncipe Noah es un recién graduado de la Academia. Puesto que antes de la mayoría de edad, a los 16 años cuando se debuta en sociedad, la Academia finaliza los estudios.
Afortunadamente para el Príncipe ya se graduó, si no está seguro que Joey podría enterrarle una pluma de tinta en el ojo.
-Me gusta.- Aprueba asintiendo.- Aunque me gustaría que viniera en las vacaciones a la mansión, no creo que se vea mal si es solo un descanso.
Su madre asiente luciendo complacida. - La compensación por llevarnos al joven Joey del lado de su padre seria toda su educación pagada por el Ducado Kaiba.- Se ríe ligeramente en su mano.- No podrá negarse.
Seto se ríe internamente. Su madre es más cruel de lo que recordaba. Eso significa que Lord Wheeler no puede pedir compensación monetaria y ya no puede depender del trabajo de su hijo.
-Aun así el niño debe prepararse para el examen de ingreso. Consultaré la fecha.- El duque mira a su esposa en advertencia.- Veremos si merece entrar a la Academia por sus propios medios y conexiones, así que quiero que se prepare por su cuenta.
Seto protesta de inmediato. - Eso es orgullo hablando, es un niño que puede ser comido vivo en una academia si no tiene la mejor preparación que podamos darle.
Su madre asiente. - La preparación de ese examen necesita de tutores especializados, no de la caridad de una noble.
El Duque Kaiba, como siempre, no se ve complacido cuando su palabra es cuestionada.- Es una prueba veraz para ver si es digno del linaje Kaiba ¿Desde cuándo te importa este niño? – Le espeta a Seto.- Solo lo veías como un contrato obligatorio.
-Porque será mi esposo.
Es la primera vez, al menos para su familia en esta vida, que afirma tal cosa. Con total convicción en lugar de pensar formas de salirse del trato.
Su padre alza la ceja nada impresionado. - Aun así, tu madre vino del linaje de la realeza y su antecesora del Duque Herinch. Tiene que trabajar más duro que los demás. La caída de la familia Wheeler pesa sobre los hombros de su padre, pero es su sangre quien hereda las consecuencias. - Se levanta de su asiento en la punta de la mesa. - Mi decisión es final, entrará por sus propios méritos si quiere impresionarme
Seto aprieta los puños con ira y también se levanta de la mesa para decir su palabra. - No necesita impresionarte padre. Ni siquiera tenías expectativas para él.
Su padre detiene su andar pero no lo mira.- Ahora si las tengo.- Y se retira.
Realmente Seto debe dejar de pensar que es un maestro de la espada cuando tiene ira, o todo su esfuerzo para mantener vivos a su padre será en vano.
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Hace mucho tiempo era un hijo obediente. Quería el reconocimiento de su padre y demostrar ser un alfa tan grande como él.
Incluso después de su muerte y cambios en su liderazgo siempre ha respetado la palabra de su padre.
Pero ha pasado mucho tiempo desde que alguien más que el Emperador le ha ordenado, e incluso él necesitaba argumentos muy persuasivos.
¿Joey haciendo el examen Imperial sin preparación más allá de lo que la Marquesa Pegasus le enseña unas pocas horas? Su padre es un sádico, ni siquiera ellos se atreverían a hacerlo sin un tutor preparado.
Seto confía en su cachorro, su conocimiento de 10 años en el futuro es una ventaja suprema y todas las lecciones que fueron empujadas en su cerebro no preparado desde los 12 años siguen presentes. Aun así, hay fechas exactas, conocimientos precisos y nombres completos que serán sin duda preguntados, cosas que requiere un conocimiento más teórico que se pudo haber ido dejando con el tiempo.
No sabe qué espera su padre de un niño que nunca ha vivido en la nobleza y que debería sorprenderle que sepa leer y escribir ¿Un prodigio? Está loco.
Hace mucho tiempo era un hijo obediente.
Ahora tiene una familia que proteger, incluso si es de su propio padre.
Joey no será humillado.
Por lo que manda dos cartas al día siguiente. La primera es para Joey, permaneciendo en constante contacto y le cuenta la situación que sabe que encenderá las llamas de la determinación en Joey, porque él siempre ha querido probarse a sí mismo.
La segunda será entregada por un caballero de su confianza al director de la biblioteca Noble del Oeste, que queda en la zona aristocrática de la ciudad donde reside actualmente Joey.
Conoce a su esposo, le ha puesto una meta y confía en los conocimientos de los tutores que él mismo eligió en su pasado, si todo lo que necesita son libros para estudiar conocimientos que pudo haber olvidado ¿Qué clase de alfa sería si no le regala un pase libre a una biblioteca?
Porque la carta tiene su insignia como heredero Kaiba que patrocina al hijo del noble caído Wheeler a pedir todos los libros que necesita por medio de correspondencia para que lleguen lo más pronto posible a su casa el tiempo que se necesite. Todo de forma discreta y sumándole una pequeña compensación monetaria por su silencio.
Además la Marquesa Pegasus sin duda ayudará a su estudiante. Ella nunca pudo tener hijos por su enfermedad y siempre tenía demasiado tiempo en sus manos porque su esposo no quería abrumarla con responsabilidades.
Su madre tiene un largo camino por delante para ganar un afecto sincero, ahora que se le ha denegado la oportunidad de prepararlo para un examen que cuando lo apruebe estará todo el tiempo fuera.
Joey puede hacerlo.
Y tiene a su alfa para apoyarlo.
Es hora de demostrarle a esta nueva vida de qué está hecho el futuro matrimonio Kaiba