Cuando Joey cumple 16 años el momento que más ha temido desde que pisó el Ducado Kaiba ha llegado.
Es obligación del omega pasar su primer celo desde el matrimonio con su esposo, la mórbida luna de miel obligatoria. Como eran meros niños no se les exigió consumar, pero ahora con su mayoría de edad debe pasar su primer celo desde la ceremonia con Seto Kaiba.
Ya después no es necesario pasar el celo pero es casi como una noche de bodas garantizada.
El Duque es poco más que un compañero de casa que lo protege de los nobles que buscan atacarlo con palabras como armas.
Ha aprendido, se ha roto su columna encorvado leyendo y siguiendo a sus tutores en las clases de modales para devolver sus golpes.
Hacía mucho no se sentía tan fuerte y seguro como antes del matrimonio.
Pero ahora teme que toda esa seguridad que por fin no es fanfarronería se vaya al piso al sentirse utilizado como un muñeco.
Esos calores y calambres, también las ansias de un nudo que pasa por su estado de seminconsciencia han sido dolorosas desde los 13 que los tuvo por primera vez y estar con un alfa en ese estado tan vulnerable donde puede ser usado como un muñeco le aterra.
Pero no puede demostrarlo. Este es parte del famoso deber del que tanto se jacta Seto Kaiba. Lo enfrentará como un hombre.
Cuando el suave olor de flores y mantequilla se abre paso en su habitación anuncia la llegada del pronto celo. Los sirvientes beta corren preparando todo, cambiando sus mullidas sabanas rojas por blancas y azules para agradar al que pronto será su alfa, todos sus colores desaparecen e incluso hacen el nido por él para que se acate a los gustos del duque. El deshará eso, no estará en un nido que le haga levantar los pelos de la nuca.
Las mucamas omega lo llevan a su baño privado y aprovechan su estado debilitado y que cada vez se pone más caliente para bañarlo, depilarlo y ponerle una pijama de seda blanca con abertura fácil. Nunca usaría eso si estuviese al 100% de su capacidad. Ahora solo se siente como una gelatina que siente su final cerca.
Los celos van desde 12 horas hasta 3 días. Afortunadamente el de él solo dura 24 horas y no se convierte en un loco del sexo, sino que maneja una buena dosis de conciencia sin mucha capacidad de negarse a los instintos.
Uno de los sirvientes beta que siempre lo ha mirado como si no fuera gran cosa propone meterle un juguete de silicona para que pueda empezar a prepararse y que el duque solo deba venir y cumplir su deber.
Al menos tiene suficiente instinto de supervivencia para correr cuando su dulce sirviente Serenity le tira un jarrón que se rompe en el piso.
Ella puede ser dulce pero también es un pequeño demonio.
Todos salen, menos ella que toma una de sus manos y besa sus nudillos.- Nada cambiará.- Le susurra con cariño.- Incluso si eres marcado seguirás siendo el mismo chico por la mañana.
No puede expresar lo mucho que valora esas amables palabras.
Seto Kaiba entra a su habitación que ya no se siente suya cuando su celo empieza propiamente. Su olor a lujuria y deseo no nublan su juicio por completo mientras lo ve acercarse.
Pero en lugar de acostarse en la cama y saltar sobre Joey se sienta junto a él y se arremanga su camisa manga larga para exponer su muñeca que pasa insistentemente por la nuca de Joey.
Perplejo inclina la cabeza.- ¿Mi señor?
-Incluso si estás en tu celo y es parte del deber, no te obligaré a tener relaciones cuando no estás en tu plena capacidad mental para aceptar.- Ahora desliza la muñeca perfumada por la sien del omega.- Me he inyectado una serie de supresores para evitar que mi alfa interno desee saltar sobre ti y mis tutores me han hablado sobre el método de los omegas para sentirse protegidos por alfas como una familia durante su celo, pasando la muñeca por puntos de olor para poder estar en tu presencia y que tu omega solo se sienta protegido y no con ganas de copular conmigo.
Joey tiene la boca abierta jadeando caliente mientras mira con asombro al alfa.
Es un poco vergonzoso en algunos puntos de olor como su cadera donde tuvo que bajarse lo cortos pantalones de seda para que el duque lo marcara con su olor. Su espalda baja, un gran punto de placer, no fue pasada de alto sin algunos gemidos propios muy vergonzosos.
Cuando termina Joey aún se siente deshuesado con ganas de follar, pero no al que ahora sus instintos ven como su protector. Se siente caliente pero ahora mucho más controlado que antes y cree poder pasar su celo sin masturbarse.
… Porque la vergüenza de hacer eso enfrente de su esposo podría matarlo.
Consigue dormir y se despierta unas horas más tarde con ganas de comer chocolate y ve a su esposo sentado en la esquina más lejana de la habitación tratando de meditar mientras sus dientes sacan sangre a sus labios.
Está combatiendo sus instintos, nota Joey. Incluso los supresores no pueden ser tan fuertes para pasar todo un celo con un omega sin afectarlo.
Los instintos de Joey le dicen que el alfa no es un peligro, que lo vigila. Pero esos instintos de protección no se traducen a un alfa a menos que sea de la misma sangre.
Ese mismo deber del que está tan orgulloso lo obliga a encerrarse con un omega en celo sin posibilidad de irse o el honor de ambos se vería perjudicado
Ver a su normalmente estoico esposo que no le importa nada más que establecer su poder con mano de hierro, agarrando su control con todas sus extremidades para evitar profanarlo, aunque sus instintos y el deber le dicen que puede hacerlo, solo porque sabe que Joey no lo desea…
Le hace mirar con otros ojos a Seto Kaiba.
No hay nada que él mismo pueda hacer y así ambos pasan esas 24 horas juntos.
Antes que se vaya Seto, que no ha dormido nada para tratar de controlarse, vuelve a pasar su muñeca por los puntos de olor de un Joey que ha pasado su celo y está simplemente agotado para importarle que, en una forma de acelerarse, su esposo le quita lo desnuda para pasar los puntos.
Ahora olerá a él mientras el post-celo acaba, los sirvientes no comentarán nada extraño y su honor quedará intacto.
A pesar que fueron 24 horas de infierno para el alfa y 24 horas incomodas para el omega, Joey nunca se ha sentido más cuidado que en ese momento.
Así que jala con pocas fuerzas al alfa antes de que se retire para que se acerque, él lo hace por curiosidad y Joey pasa su nariz por su mejilla para que un poco de su olor también vaya al alfa.
Es un gesto de cariño y la cautela del alfa se desvanece en confusión.
Joey besa esa mejilla y le agradece por ser un gran alfa
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A los 15 años Joey se ha convertido en un joven alto, su cabello llega a su nuca y suele tener el sombrero que acompaña el uniforme de la Academia sino usa un broche que le regaló su esposo con pequeños botones de flores.
Ha trabajado duro para mantener la reputación que lo llevó a la Academia en primer lugar y se ha vuelto un omega muy codiciado al participar desde joven en los círculos sociales con el impulso de la Marquesa Pegasus. Los omegas suelen esperar hasta su mayoría de edad para su debut sociales, pero hay chicos que se sabe que será cotizados en el futuro y se desea que entren antes.
Lady Tea Gardner se acercó a él en las primeras reuniones para hacerlo parte de su grupo de conocidos. Fue un favor que le pidió Seto a cambio de presentarle formalmente un alfa del que su familia está interesada para que se case.
Empezó como un favor perodDejaron de ser simples conocidos después de un encuentro particularmente brutal con un joven hijo de un conde llamado Bonz cuando tenían 13 y apenas navegaban por las aguas nebulosas de ser iniciados. El chico expuso a Tea en la reunión programada para un verano sobre movimientos sospechosos de su padre y la creciente fortuna de la familia Gardner cuando hace dos décadas eran una familia menos privilegiada.
En los círculos sociales es básicamente una iniciación atacar a la presa mas débil. El simple hecho que Joey ya estaba casado lo obligó a asistir aun sin su mayoría de edad y claramente se volvió el blanco fácil.
Bonz es un chico que claramente quiere subir su posición en las reuniones de los círculos sociales humillando a una de los dos omegas nuevos
Fue la primera vez que Joey la vio congelada, aunque no sabe si de vergüenza o enojo, así que actuó.
-¿Vergonzoso y deshonroso? – Dice Joey con una ceja levantada con solo sus ojos expuestos mientras el resto de su rostro se encuentra detrás de su abanico rojo sangre con diamantes incrustados, regalo de su suegra. - Me parece curioso que esos labios pronuncien tal cosa.
Bonz endereza su espalda y levanta la barbilla mirando burlonamente a la callada Tea.- Creo que es mi derecho como un omega del reino poder clasificar...- Mira de reojo a Tea que no se inmuta, volviendo a su apariencia de ataque silencioso.- … Correctamente a las personas.
Joey se burla y cierra su abanico sobre su mano.- Si se trata de clasificar deberíamos separar a las personas con dignidad de las particularmente densas que no entienden una negativa por respuesta.- Se burla mientras mira a Tea.- ¿Has escuchado del caso de Lord Keith y el joven maestro Bonz? Es humillante.- Dice con una mueca burlesca.
Tea sonríe con gracia y aplomo, retomando el pase que le dio Joey y brutalizando a un pálido Bonz mientras lo expone como un desesperado por el afecto de Lord Keith que no desea saber nada de su conquista por una noche.
Es malvada y no teme golpear con sus palabras donde duele. No tiene compasión después de burlarse de su padre que es un noble con cerebro de comerciante y ha encontrado oportunidades y alianzas como la gente busca el oro.
Bonz prácticamente intenta golpearla, pero uno de los guardias de Tea lo obliga a arrodillarse.
Una escena muy retrospectiva de hace toda una vida.
Ella es una bruja que luego le tira vino en su ropa y Bonz termina empapado arrodillado en el suelo de mármol de Lady Weiss.
Tea no tiene compasión.
Joey la adora.
Más tarde Tea agarra su mano con fuerza y le promete que nadie se meterá con él, que los que han murmurado a sus espaldas ella hará su trabajo en las reuniones a las que él no puede asistir a causa de la academia, la cual le permite una sola reunión por estación mientras Tea tiene camino libre todos los días.
Se han tratado de mantener intocables desde entonces. Convirtiéndose en un dúo arrasador en los círculos sociales para los menores de 20
Hasta ahora ha recibido dos cartas para considerar un compromiso con respetables familias que han escuchado de su talento de dominar los círculos sociales y tener buenas influencias allí.
Si, definitivamente Seto no se pudo enterar, podría matarlos.
Joey está tan ansioso de su ceremonia de edad para la revelación de su compromiso, la cara de todos será fabulosa.
Falta muy poco para eso.
Al menos ya perdió la cara de niño inocente.
Y su Seto también ha crecido bien. Sus músculos en la espalda estaban bien formados la última vez que pudo tocarlos en su abrazo.
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-Otra carta de invitación a una fiesta aprovechando tus vacaciones.- Anuncia el Marques Pegasus cuando entra a la sala de estar donde se encuentran su esposa y Joey conversando con delicias dulces en la mesa.- ¿Debería angustiarme que sigan enviando sus invitaciones a nuestra mansión en lugar de tu padre? – Dice poniendo una falsa cara triste.
Cecilia se ríe ligeramente detrás de su servilleta.- Recuerdo a alguien jactándose sin parar de su joven protegido, es normal este tipo de errores, querido.
Pegasus se alza de hombros.- Si se siguen equivocando no planeo corregir la ignorancia.
Joey voltea los ojos internamente exasperado, pero también se siente halagado de ser querido por una familia de la forma en que lo hacen los Pegasus.
Cecilia le da un beso en la mejilla mientras toma la invitación de las manos de su esposo y la deja con otras dos que llegaron cuando Joey aún estaba de viaje para llegar a la mansión.
Decidió dividir su tiempo para pasar vacaciones, estando la primera mitad con los Kaiba y la segunda con los Pegasus. No solo por las increíbles relaciones con los marqueses si no porque viven cerca de un amigo muy particular suyo.
Solo Seto y los Pegasus saben de Yugi.
Los marqueses porque prefieren que Joey se retire de su cuidado a salvo con un guardia que lo vigila de lejos mientras pasa la noche en el pintoresco campo con Yugi y su abuelo.
Y Seto… Porque Yugi es su clave para conseguir la aprobación del parlamento en favor de convertirlo en príncipe y la presión de las influencias que ambos han estado cultivando con familias poderosas hará que el Emperador ceda.
Cuando escucharon de la Academia la idea les llegó como una inspiración gracias a que Joey seguía mucho ese particular acontecimiento cuando ocurrió en la primera vida pudo recordar muchos detalles importantes.
Lo único que debe hacer Joey es ser amigo del solitario pero feliz chico e ir cultivando la idea de la educación noble.
Es un chico dulce y Joey le gusta pasar tiempo con él. Lo ve incluso menos que Seto pero escucharlo reír y hablar con un lenguaje casual anima a Joey.
Aparte de las cosas obvias como su reencarnación en su cuerpo más joven, los deseos de venganza, su compromiso y el amor que comparte con Seto, trata de hablar todo con Yugi.
Una oreja que lo escucha atento mientras se queja de algunas clases inútiles y cuando no pudo evitar estirar el pie y hacer que Lady Vivian se cayera en el pasillo sin que nadie notara que hubo un culpable.
Yugi será su boleto para entrar por la puerta grande al palacio Imperial, pero Joey también desea que sea feliz.
Es su mejor amigo incluso si solo logran verse durante un par de días cada vacación semestral. Se escriben cartas todo el tiempo y Joey quiere que permanezca ese hábito incluso para lo que depara el futuro.
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Su larga espera de tres años da sus frutos cuando llega correspondencia a Joey en la Academia y entre sus cartas está Yugi que al abrir el sobre nota el tono urgente.
Pero la frase que capta su atención que ha llegado el momento está al final
¿Crees que es muy tarde para que me convierta en un noble adecuado?
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Joey le escribe a Seto para que les informe a sus padres una ausencia porque se siente cansado y un poco melancólico y no quiere que influya en sus estudios.
Pide una ausencia de un par de semanas y todas esas horas estudiando para tener puntajes excelentes para este momento hace que los profesores ni siquiera parpadeen cuando pide un descanso.
Seto les dice que ambos estarán en la ciudad natal de Joey quedándose ambos en un hotel y emprende camino. Al haber pasado él mismo su ceremonia de mayoría de edad le dejaron asistir solo con un guardia al que Seto soborna para que se quede en su habitación de hotel mientras ambos hacen su negocio.
Joey llega a la recepción donde lo hacen pasar a una habitación lujosa con terminaciones en plata con un estilo naturalista. No ha terminado de ordenar su equipaje cuando la puerta suena y su hermoso esposo ingresa cuando le da permiso para entrar.
Oh.
Se ve muy guapo.
Estar en la edad de las hormonas adolescentes no ayuda.
Se acerca y lo abraza con sorpresa dejándose besar con ternura por el tiempo transcurrido.
-Cada vez que te veo estás más hermoso.- Le dice Seto cuando se separan.
Joey pasa una mano por su mejilla acariciándole su pómulo.- No te quedas atrás, mi amor.- Le da un último pequeño beso y luego pone ambas manos en sus hombros.- ¿Listo para el paso más fundamental hasta ahora?
Seto se acerca y junta sus frentes.- Es la hora.
Joey va donde Yugi solo, porque la carta nada más lo nombraba y si llegaba de la nada con su prometido con la situación tan delicada como está podría comprometer todo.
Joey llega al hermoso huerto unas horas después puesto que llegó caminando y con ropas menos finas que a las que ahora está acostumbrado.
Yugi prácticamente se abalanza a él cuando lo ve.- Menos mal viniste, Joey.- Murmura en su pecho.
Joey le abraza de vuelta para darle un poco de comodidad al ansioso chico.- ¿Qué ocurre, Yugi?
Yugi se muerde el labio nervioso y roba varias miradas a la pequeña casa. Luego suspira y agarra su brazo.- Vamos, es mejor que lo veas.
Y Joey, que sabía que esperar, aún tiene un momento surrealista donde ve al príncipe del Imperio Zek Atem tomando el té tranquilamente con el abuelo de Yugi.
Bueno, es un rostro que reconoce por todo lo que se retrató cuando estalló el escándalo.
Sin embargo ahora no se supone que sepa quién es, así que juega la carta inocente.
Toma a Yugi de la mano y lo arrastra de la mano hacia la cocina y susurra con fuerza con un pánico fingido. - ¿Ahora metes alfas a tu casa, Yugi?
Yugi se sonroja y niega con la cabeza con tanta fuerza que sus mechones de cabello se alborotan. - ¡N-No! Eh, bueno…- Se detiene y piensa. Realmente no apoya su caso.
Joey le alza una ceja.- Ese chico me pareció un alfa y ésta sin duda es tu casa.
Yugi esconde su rostro en sus manos gimiendo con impotencia.
La historia se cuenta entre susurros dramáticos y Joey por fin ve de primera mano sobre la historia susurrada y escrita en diarios que luego explotaron cuando notaron el alcance del desastre que se provocó.
Yugi le cuenta que estaba sentado sobre la cerca de su casa simplemente contemplando su paz cuando vio a lo lejos un chico que caminaba por los caminos solitarios que conducen a su huerto. Yugi estaba aprensivo, pero esperó con el corazón contenido a la persona listo para correr si se veía sospechosa cuando después de unos minutos de caminar se desmaya.
Yugi corre y ayuda al viajero que estaba deshidratado y con una herida en su costado.
Lo lleva a su casa y entre él y su abuelo lo ayudan para que mejore su salud. El alfa despierta y dice que se llama Atem. Yugi se ocupa de cuidar de él por el próximo mes y se acercan mucho mientras Yugi toma su mano para darle fuerzas, lo ayuda con sus comidas, se sienta a hablar con él.
No es de extrañar que ambos se enamoraran como pequeños pichuelos inocentes.
Al recuperar por completo su salud Atem cuenta su estado de realeza mientras ambos tienen las manos entrelazadas.
El Imperio Zek tiene actualmente dos príncipes: Atem y su hermano mayor, Zorc. Al ser los dos hijos legítimos de su padre ambos son elegibles a la corona.
Zek maneja la escogencia del Emperador por medio de un sistema de juegos donde el que obtiene el mayor puntaje después de completar determinadas tareas es coronado.
La ultima tarea que pidió su padre fue conseguir una alianza a través del matrimonio de un noble digno de uno de los países donde se tienen treguas para afianzar la alianza con dicho país.
El Emperador Aknamkanon claramente estaba aprovechando la oportunidad del juego para tener fuertes alianzas, incluso si solo hubiese un ganador habrían dos matrimonios perfectos como conducto de armonía entre Imperios.
Zorc llegó con toda la fanfarria al país que le tocó y Joey sabe, por sus conocimientos futuros, que se desposa rápidamente con una chica omega por medio de un trato comercial que hizo con su padre.
Sabe que ella no fue feliz.
Atem, que siempre ha puesto por delante el deber ante todo, no veía problemas en un matrimonio político y se encaminó a Domino con sus guardias y mucamas para hablar con el Emperador Gozaburo. Pero su hermano, que siempre ha visto a Atem como el predilecto de su padre a la corona, aprovecha la lejanía del palacio para intentar matarlo.
Un poco más allá de la frontera solo Atem sale con vida, pero herido de la cruel matanza, luego siendo encontrado por Yugi.
Atem por primera vez en su vida veía algo fuera del deber y pensó mucho en qué hacer. Al enterarse de la sangre noble de Yugi se emociona y decide que esta es la persona con la que desea casarse.
Pero Yugi no tiene influencias dentro de su Imperio y básicamente están estancados pensando qué hacer.
Anknamkanon solo les dio 1 un año para cumplir la tarea y al menos 4 meses han transcurrido desde el intento de asesinato, la curación y el enamoramiento.
Yugi está tan profundamente enamorado que por primera vez desea alejarse del huerto.
Es dulce
Es peligroso.
En vista que necesitaba una solución Yugi contactó a Joey que es su mejor amigo y también un noble caído como él que ha cultivado una gran influencia por sus propios miedos.
Menos mal estos años de amistad han rendido sus frutos y pidió ayuda sin cometer los errores del pasado.
Pero como es un mejor amigo golpea a Yugi en el brazo.
-¡¿Por qué fue eso?!
-¡Te conseguiste un alfa y no me dijiste!
Con tantos gritos y murmullos en la cocina solo habla de lo educado que es Atem por no venir a fisgonear.
Joey peina su cabello y se sacude el polvo que haya acumulado en su vergonzoso exhibición con su mejor amigo y se dirige con Yugi a saludar al invitado.
Atem detiene la conversación con el abuelo y se levanta cuando lo mira. Joey de inmediato hace una reverencia ligera extendiendo los costados de su chaqueta larga y bajando la mirada.
-Joey Wheeler se presenta a su alteza, el príncipe Atem, que las bendiciones de los dioses acompañen su camino.
Atem iguala sus modales con los propios de su país poniendo su mano derecho sobre su corazón y la izquierda va a su espalda, inclinando solo su cabeza puesto que es un príncipe.
-El Príncipe Atem saluda al joven Joey Wheeler, amigo del joven Yugi Muto.
Bueno, parece que en el Imperio Zek son directos.
Yugi sirve el te, se ve nervioso mientras en contraste su abuelo se ve completamente placido como si solo estuviese visitando un novio normal de su nieto.
Joey expone los mejores modales que puede y por la leve mirada crítica que recibe de Atem sabe que está siendo juzgado si valió la pena haberlo llamado para exponer el secreto de su estadia no anunciada.
Es un hombre inteligente.
Pasan las cortesías y llegan al tema en cuestión con rapidez pero elegancia como si hubiese sido intención desde el principio.
-No deseo que el príncipe Zorc gobierne el Imperio Zek.- Dice Atem una hora después de que Joey hablara de sus experiencias en la Academia y la paz actual del Imperio Zek para ponerlos en ambiente cómodo.- Mi gente valora la tolerancia y el respeto, así que no puedo permitir que un tirano los gobierne. Es mi deber.
Yugi se desinfla a su lado.
-Oh.
El príncipe le sonríe con ternura.- Tengo fe en mi gente. Sé que apreciarán mucho más los valores del corazón en un príncipe consorte que cualquier cazafortunas.- Dice con total seguridad.- Una parte está cumplida que es la sangre noble, solo hay que demostrar tu verdadero valor.
Joey hace lo posible por no hacer una mueca ante eso.
Quien diría que el príncipe del anteriormente Imperio belicista Zek podría ser alguien tan… inocente.
Yugi nerviosamente le asiente pero se ve inseguro.- Aun así me gustaría tener un seguro. Ahora mismo soy nadie y construir una confianza desde esa perspectiva cuando su alteza Zorc traiga a alguien mucho más grandioso no será beneficioso para la escogencia del próximo emperador.
Joey se siente orgulloso de Yugi y palmea su mano en señal de apoyo, luego mira al príncipe.
-Incluso la más hermosa de las flores tiene espinas, su alteza.- Dice Joey recatadamente con la barbilla en alto.- No dudo en usted y en su pueblo, pero en la nobleza de al menos este Imperio, sin influencias para respaldo, ayuda y asesoría prácticamente agota su existencia en la aristocracia.- Pone su mano en su corazón mirando al príncipe que se nota pensativo.- Como un noble de sangre sin nada en su haber tuve que enfrentar muchos retos, palabras con intenciones maliciosas, humillaciones e incluso ser obligado a arrodillarme varias veces. Si es posible deseo evitar que eso le pase a mi mejor amigo.
Yugi se ve conmovido y le da un abrazo rápido.
Atem tiene la espalda recta y su dedo índice toca pensativamente el brazo de la poltrona donde está sentado.
-Es un punto valido. También sería bueno tener un entrenamiento en la aristocracia para evitar esos problemas.
Joey le sonríe aprobatorio.
Yugi agarra la mano de Joey.- Pensé que podrías ayudarme, sé que ya no puedo ingresar a la Academia para al menos hacer amigos influyentes pero quizás podrías pensar en otra cosa.
Joey se muerde el labio, por primera vez de forma consciente. Quiere parecer aprensivo y Yugi parece notar el gesto nervioso porque aprieta su mano.
-¿Pasa algo? – Pregunta el príncipe.
Joey suspira.- El mejor plan que se me ocurre es presentarte a mi amiga Lady Tea, hija del Marques Gardner, entre los dos podemos llevarte en los círculos sociales para que te hagas conocido en la nobleza y ella puede asesorar un entrenamiento para ti mientras estoy en la Academia.
Atem asiente.- Eso no suena mal.
Joey asiente.- Sin embargo mi apellido y el de Lady Tea no significan mucho fuera de esta nobleza y me preocupa que eso repercute en Yugi.- Joey pone una mano pensativa en su barbilla.- Por motivos de rapidez necesitamos un nombre con peso, con influencia, para que no quede duda del valor de Yugi.
Aquí Atem se inclina y lo mira fijamente y con apariencia de negocios, que hace a Joey sentirse reivindicado. - ¿Tienes una persona en mente con quien pueda conversar?
Joey muerde su labio nuevamente y arregla un poco su traje.- Solo si pueden hacer ambos un juramento que lo que estoy apunto de comentar no sale de esta casa.
Habiendo conjurado un juramento a los dioses pone al alfa y omega rectos de inmediato.
-¿Es así de grave? – Pregunta Yugi nervioso.- No querría que te metieras en problemas.
Joey le sonríe tranquilizador. - El emperador ordenó a mi padre una cláusula de silencio y he mantenido este secreto desde que tengo conocimiento de él.
Los ojos de Yugi están tan abiertos como platos.- ¡¿El Emperador?!
Atem se ve mortalmente serio, viéndose cada centímetro como el Emperador que aspira a ser.
-¿Esperas obtener algún beneficio traicionando un contrato emitido por el Emperador Gozaburo?
Joey se endereza y levanta la barbilla sin un cabello fuera de lugar.- Por supuesto que estaría encantado de ayudar a Yugi a obtener su felicidad.- Asiente en dirección de su callado amigo.- Pero también tengo fe en su corazón y con la preparación adecuada creo que ahora mismo podría estar frente a la futura familia Imperial de Zek. Es una encantadora alianza, ¿No le parece, su alteza? – Termina con una sonrisa dulce.
Atem lo determina un tiempo y luego se relaja en su poltrona con la sonrisa más genuina que ha tenido hasta ahora.
-De hecho, es una encantadora alianza. Gracias por su honestidad, joven Joey.
-Gracias a usted por escucharme, su alteza Atem.
-Por favor, puede llamarme Yami con confianza.- Le sonríe a lo que Joey acepta.
Joey procede a contarles el matrimonio político al que ha estado sujeto desde que su padre cayó en desgracia como una forma de controlar a la familia Kaiba.
Cuando termina de contar su historia ve una reacción que no esperaba, de hecho, es la primera vez en dos vidas que ha presenciado tal visión.
Yugi estaba indignado por él.
-¿Cómo puede hacer algo asi, y con un inocente bebé que no tenia nada que ver en esa rivalidad? ¡Fuiste su sacrificio!
Esta vez las emociones de Joey traicionan su rostro mientras mira a Yugi con sorpresa abierta.
Siempre le han hablado sobre lo afortunado de ser parte del contrato de entre miles de nobles caídos, que Seto fue quien se llevó la peor parte del trato, que sus emociones no deberían afectar su lógica al tener una vida mejor.
Como si su soledad, humillación, ser puesto en un papel que no deseaba, alejarse de la única vida donde sabia que podía sobrevivir, sentirse como volver a aprender a caminar, enfrentarse a engreídos nobles todo el tiempo y no poder defenderse, fuese algo no importante.
Joey agarra la mano de Yugi deteniendo su diatriba y articula un gracias con sus labios para demostrar los conmovido que está por su apoyo.
No suelta la mano mientras continua su historia de saber que no había nada que pudiese hacer pero aun asi querer hacerlo por sus propios medios. Conocer a los Pegasus y finalmente la prueba de los Kaiba para ingresar a la Academia entrando con honores.
-Fue un poco duro al principio porque ambos estábamos siendo obligados pero Seto, quien es mucho más cálido que su exterior sin emociones, se convirtió en alguien especial en mi vida.- Sonríe con sinceridad, sintiéndose feliz de por fin compartir los sentimientos en su corazón en esta vida.- Aun no estamos obligados a vernos hasta que se decida el compromiso, pero aun voy a verlo todas las vacaciones y paso con su familia la mitad de esta.
Yugi se tapa la boca con su mano.- Con que allí es a donde ibas todos esos veranos e inviernos.
Joey asiente.- El amor que construimos fue lento pero sé que es fuerte, quiero apoyarlo, no ser solo un omega trofeo o que solo atiende la mansión. Quiero tener un buen nombre para que no la pase mal.
Mira intencionalmente a Yami que por fin entiende todo lo que ha tratado de transmitir.
-¿Crees que el joven Seto Kaiba podría ayudar a Yugi?
Joey asiente.- El apellido Kaiba es de renombre. Si podemos explicarle apropiadamente podría tomar a Yugi bajo su protección. Lady Tea me fue presentada por él, ella podría ser nuestro contacto en común. Asi Yugi haría parte y sería visto con la nobleza importante.
Yugi se estremece un poco al pensar en eso y Joey lo mira con seriedad.
-Sé que dijiste no querer tener nada que ver con la aristocracia, pero yo puedo entender, más que cualquier otra persona, el desear ser de apoyo para un amor. Te estoy confiando mis relaciones más personales porque creo en tu voluntad para prepararte en unos meses para el resto de tu vida. ¿Lo aceptarías, Yugi?
Yugi traga pero aprieta la mandíbula y asiente.- Quiero ser mucho más de lo que incluso yo pensaba de mí mismo.
-¿Cómo podremos contactarnos con el joven Kaiba? – Pregunta Atem, aparentemente calculando todos los movimientos que ahora se han extendido en el tablero.
Joey se ríe detrás de su mano.- De hecho cuando Yugi me envió esa nota urgente le pedí a Seto que le avisara a su padre para aprobar mi ausencia por unos días a mi ciudad natal por nostalgia y él fue enviado a acompañarme. Se queda conmigo en un hotel en la parte alta la ciudad.
Atem asiente con decisión.
Pide por favor encontrarse con él en la pequeña casa, por motivos de privacidad.
Joey está de acuerdo y pactan la cita.
El cambio más grande hasta ahora ha sido hecho.
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En una vida diferente a la actual, el joven príncipe aún se enamoró del chico del huerto que lo salvó y curó en su momento de mayor necesidad en una tierra desconocida.
Creyendo en su gente y su voluntad para reconocer la joya que es su nuevo amante emprendió camino con él y su abuelo los despidió con el corazón contenido.
Su hermano mayor había hecho un trato comercial increíble junto a la mano de una joven omega incluso menor que su propia pareja.
Su amante fue mirado con desprecio por su padre y toda la corte. Incluso sus súbditos leales tenían cosas que decir contra su pareja.
Su padre estaba decepcionado de él y pidió una prueba más para demostrar su valor solo a él. Pero todo fue una estratagema para alejarse de su lado.
Cuando volvió victorioso su hermoso amante se había suicidado. Con el corazón roto por haber roto una gema hermosa se sumó a la depresión aun cuando su orgulloso padre decidió nombrarlo Emperador.
Unos días después descubrió por medio de testigos que no fue un suicidio sino un asesinato por parte de su gente que fue orquestado por uno de sus propios leales súbditos para ayudarlo a buscar mejores relaciones beneficiosas para el Imperio.
Estaba tan molesto que el día de la coronación no se presentó, simplemente desapareció en el aire.
Su propia gente le había fallado.
Una guerra civil empezó cuando las facciones lucharon en el momento en que el hermano mayor es coronado.
En una época sangrienta donde el pueblo estaba descontento todo empeoró cuando enviados del Imperio Domino se enteraron del suicidio de uno de los suyos en el palacio Imperial.
Se podría decir que fue una excusa para conquistar un gran Imperio en su peor momento, realmente no importaba el niño que murió.
En esa guerra Seto Kaiba tuvo que participar por haber obtenido el título de maestro de la espada como una obligación, dejando el ducado a manos de su esposo y hermano. Allí se convirtió en el Comandante del Ejército Imperial con el sobrenombre de Dragón del Sur.
Aun con toda fuerza que aún conservaba el Imperio Zek no pudo hacer frente al Imperio Domino y fue acabado en el primer año de reinado del Emperador Zek.
El príncipe Atem no volvió a sus tierras a pesar de ser él mismo un maestro de la espada. Los ruegos de gente no fueron suficiente para hacerlo volver después de la traición que enfrentó.
Nunca se supo en qué lugar vive actualmente. Algunos especulan que está con el abuelo de Yugi, quien negó la compensación que la Familia Imperial le dio por la muerte de su nieto e igualmente desapareció.
La historia de Atem y Yugi es conocida como el amor trágico que acabó con la vida de un omega y todo un Imperio.