Seto camina por los jardines que solían ser cuidados por el personal de su madre. Obviamente ha hecho el esfuerzo de mantener el mismo personal pero se siente diferente cuando su madre no es quien tiene la última palabra.
Aun así, caminar por estos jardines le llena de nostalgia y la tan esperada paz que necesita en estos momentos. Se sienta en uno de los bancos que dan a los muy cuidados lirios.
Está caminando por su hogar así que sus guardias no lo siguen, pero aún puede ver a los que están apostados a la entrada de los jardines y también su asistente y mucamas.
No siente el ruido de las espadas desde aquí y realmente necesita concentrarse porque tiene deseos de tomar una de esas espadas y apuñalar a uno de los altos funcionarios del palacio que cree que pueden opinar sobre lo que ocurre en su territorio. Su padre siempre fue respetable y tenía una forma específica de hacer las cosas en lo que respecta al mandato sobre sus tierras.
Ha tratado por muchos años de replicarlo con resultados mixtos, y ahora incluso la familia Imperial desea involucrarse con la excusa de ser parientes de sangre al ver la poca respuesta de la población.
Necesita ser más firme, controlado, sembrar el miedo y seguir apoyando la política que prefería su padre.
-Su alteza, ahora los jardines están ocupados. Si gusta hay más áreas para caminar y refrescarse.
-Creo que puedo entrar a los jardines del consorte del Duque si me place, a menos que opine que ese no sea mi título, por supuesto.
Su asistente farfulla.- Mis disculpas, su alteza.
Seto no tiene que voltearse para saber que su asistente se inclina ante su esposo. Anteriormente Joey solía ser despedido de cualquier sitio que les antojara a los sirvientes, lo humillaban constantemente y muchos adultos deseaban mandarle.
No puede evitar sentirse orgulloso que ahora reconoce su lugar como su consorte.
-Hola, su gracia.- Dice Joey cuando llega a su lado, también dejando a sus doncellas en la entrada del jardín.- ¿Podría acompañarlo?
En estos días solo la presencia del omega ha podido calmar sus emociones, aunque ciertamente no sus enojos explosivos. Inmediatamente ordena que ni él ni Mokuba estén cerca para descargarse de ira en su oficina.
Ha cambiado, Joey se ha vuelto más elegante, conocedor y ha comenzado a responder adecuadamente.
Ya no están obligados a pasar su celo juntos. Pero estar en su compañía y respetar su espacio por una noche entera fue a la vez mortificante y seguro.
Joey ahora lo busca por seguridad que antes odiaba pedir. Dice que es la primera vez que se siente realmente a salvo desde que se casaron. Lo hizo sentir como el peor esposo del mundo, pero también alegró ese instinto alfa que se enorgullece de proteger lo que es suyo
Así que aceptan verse más que en las pocas cenas obligatorias a la semana a las que habían estado sujetos.
Ahora se ven en algunas tardes con Joey entrando a su oficina y ofreciendo un descanso. Viéndolo entrenar con los demás soldados. Teniendo algunos almuerzos juntos.
Es una compañía agradable y un cambio que espera en su rutina cuando siempre se ha sentido con un gran peso en los hombros y las paredes respiran profesionalismo y el deber.
-Puede, su alteza.
Se sienta a una distancia apropiada en el mismo banco.
No desea hablar de sus problemas. A su esposo no le corresponde preocuparse por las dificultades del dueño de la casa.
Como siempre, Joey es un buen compañero de charla.
-¿Cree que debería aprender de jardinería? – Pregunta el rubio de la nada mirando los lirios.- Me gustan las flores pero la jardinería nunca me ha apasionado como todos esperan que lo haga. Solo porque era una actividad que la Duquesa admiraba disfrutar.
Seto alza una ceja curioso por el tema pero no lo discute.- Incluso si es lo que esperan no tiene por qué hacerlo. Es ahora usted el Consorte de esta mansión.
Oye una pequeña risa y despega la mirada del jardín para ver a su esposo sonreír detrás de su manga.- Es un buen consejo, mi señor.- Se acerca y pone una mano en su hombro.- Haría muy bien en recordar que así como ahora soy el consorte, usted es el actual Duque.- Luego se acerca a besar su mejilla, algo que ahora hace cuando se despide justo antes de hacer una reverencia e irse.
Seto sonríe mientras mira el mismo tipo de plantas que solía disfrutar su madre. No ha cambiado nada.
Tampoco ha cambiado nada la forma en la que su padre solía hacer las cosas.
Ha pensado mucho en cambiar el orden del entrenamiento, pero no lo ha hecho porque por generaciones ese ha sido el estilo Kaiba. Sin embargo es un maestro de la Espada, no ha utilizado ese título para algo más que duelos de entrenamiento.
Las asambleas con líderes a cargo de los pueblos de su territorio también ha sido otra ocurrencia lejana.
Se levanta del banco.
Joey se ha ido hace un tiempo.
Los lirios siguen en el mismo lugar.
Es hora de hacer cambios en el jardín.
Solo debe averiguar la flor favorita de Joey.
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Joey agita los sobres sellados en su mano como si fuese un abanico. - Han llegado más invitaciones, mi amor.
Seto suspira sentado en su estudio con Joey al frente clasificando dichas invitaciones.
Ahora que es oficial se decidió que Joey viviría con los Kaiba hasta sus 18 cuando se mudaran al Palacio Imperial. Su padre aun es escéptico, queda menos de un año para cumplir esa edad y aún no ha mostrado resultados.
Aun así, está en buen camino. Ahora ambos hacen parte de las comidillas de la sociedad, no hay mejor forma para darse a conocer. Es bien sabido que serán un matrimonio fuerte por sus antecedentes.
Joey hace una mueca. No la camufla porque está en presencia de solo su prometido/esposo, pero aun así dice mucho de su propio desagrado.- ¿Qué pasa?
Joey lo mira después de leer la respectiva carta.- De parte de Lord Gansley. Felicitándonos por nuestro compromiso y pidiendo una visita al Emperador por ser familia directa para mostrar sus respetos.
Seto sostiene su sien izquierda. No es la primera vez que vería al Emperador en esta línea de tiempo. Su padre es el Duque más importante del Imperio, ha ido al palacio para acompañarlo varias veces. Pero primero Lord Johnson y ahora Lord Gansley, el conocido estratega de la Familia Imperial. Un hombre que piensa mas en llenar sus bolsillos que en prodigar a la nación y la familia Imperial le hace la vista gorda.
De hecho, son los tutores de Noah y explica mucho de sus comportamientos.
Prácticamente su alteza caerá por su propio peso, no tiene que echarle suciedad que ya lleva consigo.
Joey muerde su labio inferior.- Este repentino interés en mi me preocupa. No queríamos llamar la atención de tal forma y claramente ya me están observando.
Seto estira su mano y toma la de Joey a través del escritorio.- Ya hemos pasado ese punto. De aquí en adelante seremos figuras públicas más importantes.
Joey le aprieta la mano en respuesta y se recompone.- Tengo muchas preferencias para cambiar a esos 5 que están en el poder.- Cambia Joey de tema.- Cuando sea príncipe consorte veré que sean reemplazados lo más pronto posible. Esa mirada que me daba Lord Johnson simplemente me aterró.
Oh si. Definitivamente los matará.
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Afortunadamente no necesitan llegar a una fecha en acuerdo para la invitación del Palacio. Porque, en un esfuerzo cronometrado, la delegación del Príncipe Atem anuncia su llegada y su interés en desposar a un noble del Imperio como medio para una posible alianza.
Eso descarrila por completo la atención de Seto y Joey hacia el Imperio Zek. Conocido públicamente por su tregua más que endeble.
Los beneficios comerciales y de rutas potenciales, así como el apoyo militar serían fenomenales para el Imperio Domino. Más aún porque nunca se ha podido establecer una alianza escrita con Zek en la historia del Imperio.
Claramente el Emperador Gozaburo quiere ser el que tenga su nombre en tal tratado y enfoca toda su atención en atender la llegada de la delegación en pocas semanas.
El príncipe Atem tuvo estos meses para pedir diversos favores a través de cartas a sus funcionarios. Explicando lo mejor que pudo la situación a su padre de que es el único vivo en su primera delegación.
Trae el doble de seguridad y muchos asesores que conocen la superficie de lo que ocurre, a saber, que ya tiene escogido su prometido.
Han estudiado a Yugi y les complace la perspectiva que esté involucrado con personas de gran poder del Imperio Domino y de hecho es mejor amigo del consorte del futuro Duque Kaiba. Así como un estratega experto, ideal para un Imperio con antecedentes belicistas.
Como tal, la Familia Kaiba es invitada al baile en honor a la llegada del Príncipe. Esta vez tiene una invitación propia con el nombre de su prometido.
Es bueno volver a ver sus nombres juntos.
Ya conocen sus atuendos característicos, no los van a cambiar. Su madre no está tan emocionada por la idea.
-Cariño, te verías absolutamente dulce con blanco y azul.- Le dice la Duquesa a Joey que le están tomando las medidas con Seto a su lado en el sillón. Su madre tiene en sus manos las muestras de telas rojas y negras que trajo el sastre.- Son los colores representativos de la Familia Kaiba.
Joey le sonríe indulgente.- Quizás, pero aun no soy un Kaiba por derecho propio. Y he estado escribiendo cartas con la Marquesa Cecilia y ella y él Marques usarán ese mismo tipo de rojo. Desean que aún nos veamos relacionados.
Su madre respira profundamente por la nariz.- Aun así, tu compañía actual será el joven maestro Kaiba. Sería una falta de respeto no asistir con los colores que lo cataloguen como dicha compañía.
Puede ver que incluso Joey está empezando a frustrarse. Claramente no quiere ofender a su suegra así que contiene las palabras venenosas en su lengua.
Bueno, para eso tiene un esposo que puede tomar la batuta en cuanto Joey lo mira de reojo.
-Madre.- La omega mayor de inmediato le da toda su atención.- Joey es conocido en la sociedad por esos colores. Es su distintivo incluso si agrega un poco de blanco o marfil o desea acompañarlo con flores. No le quitaré la identidad a mi prometido cuando aún no es necesario.
Su madre aún no está contenta. Pero trata de llegar a un acuerdo al ver el beneficio no arrebatar el distintivo de Joey tan de repente.- Entonces deseo un compromiso para que las familias más importantes no duden del hecho que son la compañía del otro.
Joey se endereza cuando baja del estrado para sus medidas.- Estaré a su lado toda la noche. Podemos compartir accesorios como broches, gemelos y cadenas de plata.
Tienen un compromiso, su madre aún no está feliz, pero esto es algo a lo que no están dispuestos a negociar.
Esos colores tan diferentes se deben al único acto rebelde que pudo hacer Joey cuando era joven para mostrar que no le gustaba la posición en la que estaba. Fue ridiculizado y humillado por eso, pero aun siguió haciéndolo. Cuando se vuelven pareja de verdad ya es su propio distintivo.
Y a Seto le gusta que se note que su esposo es diferente.
El día del baile llegan juntos y la opulencia del Palacio está en todo su esplendor. Puede sentir a Joey apretando su antebrazo donde Seto lo lleva sin flaquear la sonrisa. Después de todo aquí fue donde se presenciaron muchos de sus últimos momentos. De hecho, no lejos de aquí está la plataforma de ejecución.
Y ver a las personas que contribuyeron a eso hace a ambos estremecerse de ira y miedo en ambas partes.
Los personajes del Imperio Zek así como la Familia Imperial son los últimos en llegar. Así que la atención pasa nuevamente a ellos.
Joey luce hermoso como siempre, tiene un broche en su cabello con elegantes lirios blancos con sus pistilos amarillos. Cubren el lado izquierdo de su cabello despejando su oreja mientras tiene suelto su lado derecho.
Mismo lirio blanco que Seto lleva en el bolsillo de su chaqueta azul haciendo contraste.
Tienen diseños parecidos en sus atuendos, pero aún son los colores equivocados. Los murmullos que puede escuchar son prueba de eso.
Aun así, no se aleja de Joey. E intimida con la mirada a cualquiera que tenga la boca suelta.
Van a jugar con sus propias reglas. Y si Joey quiere lucir absolutamente despampanante en rojo y negro no le negará ese derecho. Además, muy pronto él mismo no podrá elegir sus colores a base de la Familia Kaiba.
Deben llegar a un acuerdo porque ese dorado atroz que llena casi por completo al Emperador cuando lo ve entrar está oficialmente por fuera de sus opciones.
Quizás toques leves y elegantes de dorado.
Dejará a Lady Tea esa elección en particular cuando llegue el momento.
Llega la Familia imperial y Seto no puede evitar abrazar por la cintura a su esposo cuando pueden ver al Príncipe Noah siendo anunciado.
Quiere sacar a Joey de ahí y arroparlo en sabanas de seda en el lecho que aún no comparten.
Ese es el mismo hombre que autorizó matar a un omega embarazado con una sonrisa en el rostro mientras quebraba todas las leyes que fundaron el Imperio al hacerlo.
Aun así se inclinan como todos al ver pasar a la Familia Imperial.
Pero no puede evitar notar a Joey pasando su mano sobre su estómago al menos un par de veces.
Pasa la delegación Zek, todos con un inconfundible bronceado que cubre su piel, así como ropas de gala distintivas de su propio país. Sobresalen y tienen un aspecto exótico que hace emocionar a muchos de los omegas y alfas de la multitud, pero sobre todo omegas al ver llegar al príncipe Atem que sobresale de todos ellos.
Es bien conocido que está buscando pareja y todas las familias trajeron a su sobrinos, primos e hijos omegas para ello.
La fiesta está en su máximo punto y el príncipe Atem aún no sale a bailar, rechazando todas las propuestas que Gozaburo y Noah le ofrecen.
La música y el baile no se detienen, pero aun así hay una conmoción menor cuando el príncipe Atem declara en voz alta.
-Ha sido un verdadero placer estar rodeado de tales hermosas personas, y es un deseo en mi corazón que pueden encontrar a alguien que corresponda su afecto. Pero, de hecho, en los días que llevo aquí he conocido a alguien que ha robado mi corazón.
Joey se ríe levemente a su lado.- Que poeta y dramático.- Se burla en voz baja mientras todos se acercan a las escaleras al trono para escuchar a la realeza hablar.
El Emperador Gozaburo se ve confundido y molesto pero le asiente a Atem.- Es una pena que haya sido robado tan rápido. Sin duda su elección estará a la altura de sus expectativas.
Noah le asiente a su lado con aire superior. - ¿Fue alguna de mis selecciones? Le garantizo la obediencia y lealtad de su parte.
¿Obediencia y lealtad hacia quién? Es la verdadera pregunta.
Claramente desean tener a alguien controlable en el Imperio vecino.
-Lamentablemente me informó que no fue invitado al baile, pero deseo transmitir el permiso de su asistencia en la cena de mañana.
Eso conmociona a más de uno, aun mas con su negativa a bailar el resto de la noche. Ya el príncipe Atem le había pedido un baile a Joey pero solo después de tener su primero con Yugi.
Deciden los dos pasar lejos el resto del baile para que no se les asocie con conocerlo.
Ambos duermen en el palacio esa noche. Ha dejado un torrente de guardias para la habitación de Joey. Sus padres trajeron más de lo necesario pero la corte sabe que su madre se siente incómoda incluso si no lo muestra así que se le atribuye a ese hecho.
No puede dormir bien, sabiendo que está en el palacio sin poder estar cerca de Joey para protegerlo.
Todos desean ser parte de la cena que trae al invitado de honor de Atem.
Lady Tea y Joey se esforzaron mucho para pulir los modales de Yugi.
Para la cena asisten 50 personas al pequeño banquete, entre ellos sus padres y la pareja. Mokuba, por su edad, se le pidió asistir a un banquete menor.
Aun asi casi todas las mandíbulas caen al suelo cuando el príncipe Atem llega de la mano con el noble caído Yugi Muto que recientemente ha participado en los círculos sociales y se ha rodeado de fuerzas a tener en cuenta en el Imperio Domino.
Yugi se inclina y saluda a todos en los momentos correctos y pide con una voz clara estar cerca de Joey, porque es su mejor amigo. Así que Atem hace arreglos en la mesa para trasladar sus asientos al frente.
Todo planeado para mostrar el simbolismo.
Los cuatro futuros gobernantes.
Joey y Yugi aún son elegantes y se mantienen con una capa de formalidad en sus palabras, pero actúan amigables entre si y Yugi con cariño pone un cabello detrás de la oreja de Joey.
Esto indudablemente ha establecido a Joey como el contacto más directo con la próximo familia Imperial de Zek.
Seto intercambia palabras de saludo con Atem presentándose a él y su esposo.
-Yugi me ha contado mucho de ellos.- Comenta el Príncipe a la mesa.- El Joven Seto Kaiba ha visto su potencial y le ha enseñado e inculcado estrategias que incluso me han dejado asombrado. Y simplemente presenciar la amistad entre el joven Joey y Yugi me tiene conmovido.
El Príncipe Noah no está contento, pero aun calla su boca mientras le asiente a Lord Gansley quien toma la vocería. - Aun así, su alteza. Es una elección un poco riesgosa si se trata de establecer una alianza, ¿No lo cree?
No se dijo en voz alta, pero da a entender que desaprueba el estatus de noble caído.
Atem lo mira con frialdad que lo hace tragar levemente pero no aparta la mirada.- Tengo entendido que la Familia Kaiba es el apellido más importante de este Imperio, saber que Yugi está relacionado íntima y profesionalmente hace a mi corazón calmarse y mi cabeza racionalizar que es la elección perfecta. Sin duda estoy agradecido por el trato que le han dado.
Joey se inclina a Atem con su cabeza sin levantarse de la silla.- Sus palabras son amables, su alteza. Solo tenía para ofrecer mi amistad y mis palabras de aliento a un chico que tenía potencial en condiciones desafortunadas. Sin duda es nostálgico.
Seto asiente con aprobación en su mente mientras ve a todos los nobles prácticamente ablandarse con el pasado de Joey.
Seto solo inclina levemente la cabeza.- Se me ha sido presentado por un contacto en común por su excelente potencial. Denegar el talento por acciones de generaciones pasadas me parecía miope.
Atem inclina la cabeza a ellos, sacando caras conmocionadas de la multitud así como jadeos.- Estaré eternamente agradecido por su ayuda.
Sabe que no lo dice solo por clases de etiqueta y Seto por explotar el potencial dormido de Yugi. Hay una amistad y una alianza que se traspasan entre sus palabras.
El Príncipe Atem se dirige ahora al Emperador que tiene la cara tallada en piedra mientras ve transcurrir los eventos a su alrededor. Sabe que está maquinando. Este es el momento más peligroso para ellos donde pueden ser considerados una amenaza.
Afortunadamente la presencia de Atem y sus palabras de agradecimiento son un escudo perfecto para evitar que nada les ocurra.
Aun así desea irse cuanto antes a la mansión Kaiba.
-Su majestad. Me gustaría saber si tengo su aprobación para llevar a Yugi a ser presentado a mi padre para convertirlo oficialmente en mi prometido.
A través de todo esto las mejillas de Yugi se sonrojan y trata de mantener su cara seria aun con una sonrisa que desea salir de su rostro.
Acorralado con las miradas expectantes por una historia de un niño dulce, el apoyo de una alianza legendaria, y el nombre de la Familia Kaiba sobre la mesa es simplemente una formalidad aceptar en este caso.
El Emperador Gozaburo no sonríe, porque no es algo que lo vean hacer al menos que se esté burlando, pero aun así levanta su copa para brindar.
-Que esto sea el comienzo de un próspero futuro.
Que así sea, piensa Seto mientras brinda con su esposo.
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Yugi se va con la delegación del príncipe Atem. Está nervioso, porque ahora debe ayudar a competir a Atem en el juego para conseguir la corona.
Aun con toda la formalidad que le han inculcado en su sistema abraza a Joey con fuerza en la entrada de la Mansión Kaiba.
Joey por su parte también lo aprieta y le susurra consejos al oído.
Sus padres se despiden cortésmente del príncipe Atem que vino a pasar un par de días para que Yugi se despidiera.
Y para declarar el hecho que se conocen y son amigos de la familia. Eso en sí mismo es una protección, así como una advertencia.
Su padre ya no lo mira escéptico, sino contemplativo.
El carruaje se marcha y ambos se quedan viendo, esperando el reclamo de un nuevo Emperador en Zek.
Joey suspira y engancha su brazo en el suyo.- ¿Podría pedirte algo, mi amor?
-Lo que desees.
-¿Podrías ayudarme a buscar a Serenity? Necesito una cara conocida que sepa que no se irá. Fue mi mucama más confiable después que pude despedir a esa horrible institutriz que me impusiste.
A pesar de ser parte de su plan, claramente Joey se encariñó de verdad de Yugi. Puede que no sea la misma persona que cuando acogieron a Serenity la primera vez cuando Joey tenia 15 años pero sin duda a Joey le hace falta una cara amiga.
-Por supuesto, la conseguiré para ti.
Joey sonríe y se inclina a besar su mejilla en agradecimiento.
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Logra conseguir a Serenity que trabajaba en una panadería a las afueras de su ciudad. Ella y su madre se sorprenden cuando escuchan que está recomendada para trabajar en el Ducado Kaiba.
Primero como mucama y luego verán si tiene la capacidad de ser doncella de Joey.
Ella acepta de inmediato incluso si solo le comentan la parte de la mucama. Debe ganarse el puesto.
Pasan los meses y hay una nueva expectativa en el Ducado y la alta sociedad. Hay muchos tabloides que han impreso el suceso.
Seto y Joey decidieron tener su matrimonio lo más pronto posible.
Idealmente antes que acabe la batalla por la corona de Zek. Ese será su momento donde deberá soltar su apellido para hacer parte de la Familia Imperial.
Por tecnicismo significa que al no ser Kaiba no puede casarse después con Joey si deja ir su apellido. Así que se casarán cuanto antes.
Es prácticamente el evento del siglo. Pero han notado que en el Palacio Imperial han tratado de mitigar un poco la popularidad del evento.
No ha sido obvio, pero ha habido hechos que pueden demostrarlo.
En primera la excusa formal de inasistencia de la Familia Imperial al matrimonio del sobrino directo del Emperador. Enunciando causas diplomáticas con otros países.
Lord Leichter les ha pedido por medio de misivas y una reunión formal mantener el asunto lo más privado posible para evitar desviar la atención de la posible alianza con el Imperio Zek mientras los espías apostados informan aun sobre el juego para la corona.
Un festival de cosecha fue anunciado para solo 2 días después de la fecha establecida al norte y es de gran interés para la población sobre todo para los nobles para abrir fronteras de sus territorios. Es un viaje muy largo desde su mansión hasta ese lugar, más de dos días. No todos pueden asistir.
-Desean restarle importancia al evento. Que la atención no esté en nosotros.- Le explica a Joey cuando se ve desconcertado por su comportamiento.
-¿Y que logran con esto?
-La gente ya habla de nosotros, querido.- Le dice Seto tomando de su taza de te.- El Emperador no desea que se hable más de nosotros que él sobre increíbles e imposibles hazañas. Nuestra boda desea hacerla pasar como algo simple.
Joey resopla levemente y luego lo cubre poniendo una galleta entre sus labios.- Yo al contrario estoy preocupado que no podamos albergar a todos.
Es un alivio al fin casarse, poder volver a dormir juntos y compartir un espacio seguro para ambos. No necesita una fiesta excesiva. Ya tuvieron eso y no lo disfrutaron para nada.
Esta vez tanto su madre como la Marquesa Cecilia están involucradas. Aun con todo lo que la Duquesa Kaiba quiere obviamente echarla.
-Te verías tan angelical con una corona de flores blancas.- Dice la Marquesa a Joey cuando se sientan a hablar de los trajes.
La duquesa sonríe con burla en sus ojos.- ¿Corona de flores? No hay nada más elegante que la simplicidad y simetría de un buen sombrero blanco que realce su perfecta cabellera rubia
La sonrisa de Cecilia no flaquea.- Quizás, pero no deseo que su hermosa cara esté cubierta.
-Que bueno que sus deseos no sea la prioridad aquí, marquesa.
Es satisfactorio verlos discutir mientras halagan a su esposo.
Joey oculta su risa en su abanico rojo rubí mirando a Seto.- No quiero que mis palabras suenen ofensivas. Pero deseo usar lo que mi futuro esposo considere que me hace ver bello.
Seto casi resopla cuando la atención de ambas omegas mayores recae en él. Puede ver la mirada burlona de Joey al zafarse de la situación de elegir.
Antes que digan cualquier cosa toma la palabra.- Joey se ve hermoso en cualquier atuendo que luzca.- La mirada de Joey se suaviza con sus palabras y nota que las omega mayores quieren interrumpir su inútil observación.- Pero deseo que luzca sus atributos de la forma más natural posible sin adornos excesivos.- Joey le sonríe, agradecido, pues nunca le han gustado las cosas ostentosas a pesar de estar obligado a hacerlo la mayor parte del tiempo.- Un tocado de perlas traídas del norte será perfecto para él.
Las dos omegas mayores sonríen con aprobación mientras su esposo lo mira con traición. Esas perlas son las más costosas de todo el Imperio.
Bueno, ¿Qué esperaba? Sigue siendo Seto Kaiba y no se casará con elementos plebeyos.
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La boda no significa nada para él. Nada para ninguno de los dos. Ambos ya están casados. Solo es un documento más para legalizar poder compartir un lecho y poder morder el cuello de su omega.
La ceremonia no es nada. Ya tuvieron una.
Sin embargo cuando camina del brazo de su madre por la alfombra roja ve a Joey junto a su padre caminando por el camino opuesto.
Se ve hermoso.
No es común ver a Joey usando blanco y posiblemente para el omega no sea la gran cosa verlo a si mismo de blanco que usa cualquier día. Pero Joey parece un ángel.
Las perlas en su cabello solo son un pequeño camino que enmarcan su cabeza como un halo. Hoy lleva una capa blanca que arrastra todo el camino. Todas sus decoraciones son en plata y lleva la sonrisa más perfecta del mundo.
Cuando están a solo unos pasos entre sí puede sentir esas ansias que no había sentido en todo el proceso de planear la boda.
Este es el chico con quien desea casarse, que todos se enteren que es suyo.
Juntos.
Y juntos derribarán a todos los que trataron de derribarlos.
Toma la mano de Joey cuando están al alcance.
-Te ves hermoso, mi amor.
Joey sonríe y se acomodan delante del papa.
- Es lo mínimo con este tocado que cuesta mucho más que el mismo traje. ¿Qué estabas pensando, mi amor? – Susurra entre dientes con una sonrisa tensa mirando al frente.
Si, aun con todo sigue siendo el mismo Joey.
¿Con quién más debería reinar si no es con él?