Miércoles, 19 de octubre 2016
Estaba nervioso oh maldición que estaba más que nervioso, sentía que por dentro se desarmaba pieza por pieza.
Hoy era el día, no había vuelta atrás, la había citado y Sanji como su gran amigo había preparado todo para que fuera perfecto.
-Kaya- Le llamo al verla entrar.
-Usopp, esto…- Estaba sin palabras, todo estaba maravillosamente bien- ¿Qué es todo esto Usopp?- Comenzaba a sentirse nerviosa, esperaba no estar malinterpretando la situación pero si era lo que ella creía nunca nada podría superarlo o tal vez solo había una cosa pero era muy pronto para pensar en campanas.
-Kaya yo…- Sentía que su boca no le respondía, que su corazón martillaba en sus oídos, que sus manos estaban heladas y temblaban, había enfrentado tantas cosas y hoy no se sentía más vulnerable que nunca- Tu sabes que yo…- Respiro profundo- Que yo estoy enamorado de ti, desde hace mucho años eres la única persona a la que mi corazón a mirado y elegido, sé que no vengo de una familia acomodada, pero ahora si puedo ofrecerte algo más que no sean historias, hoy puedo decirte lo que siento sin miedo a que el día de mañana no pueda cumplir las cosas que llegue a prometerte, hoy puedo decirte que puedo crear un futuro para nosotros, puedo decirte que te amo.
-Usopp- No lo había malinterpretado, en verdad estaba pasando, ella siempre lo supo así como él siempre supo que ella estaba igual o más enamorada, pero nunca había querido presionarlo, porque Usopp era orgulloso porque no importaba nada él se iba a esforzar por cumplir lo que quería, y ella siempre estaría apoyándolo no importaba cual fuera la situación- Yo también te amo. Y lo hare cada día de mi vida, sabes que nunca me importo el dinero pero yo también quiero decirte que me esforcé por cumplir mi propia meta y como doctora siempre estaré para ti para curar no solo tu cuerpo, sino también las heridas de tu alma.
-Tú eres mi luz Kaya, siempre has sabido tratar mis heridas, tú junto a mis amigos son los responsables que el día de hoy puedo estar orgulloso de ser quien soy. Gracias por aceptarme aun siendo únicamente yo.
-Por ser tú es que te acepto, no hay nadie como tú.
Otra vez texto inesesario u.u
Miércoles, 19 de octubre 2016
Estaba nervioso oh maldición que estaba más que nervioso, sentía que por dentro se desarmaba pieza por pieza.
Hoy era el día, no había vuelta atrás, la había citado y Sanji como su gran amigo había preparado todo para que fuera perfecto.
-Kaya- Le llamo al verla entrar.
-Usopp, esto…- Estaba sin palabras, todo estaba maravillosamente bien- ¿Qué es todo esto Usopp?- Comenzaba a sentirse nerviosa, esperaba no estar malinterpretando la situación pero si era lo que ella creía nunca nada podría superarlo o tal vez solo había una cosa pero era muy pronto para pensar en campanas.
-Kaya yo…- Sentía que su boca no le respondía, que su corazón martillaba en sus oídos, que sus manos estaban heladas y temblaban, había enfrentado tantas cosas y hoy no se sentía más vulnerable que nunca- Tu sabes que yo…- Respiro profundo- Que yo estoy enamorado de ti, desde hace mucho años eres la única persona a la que mi corazón a mirado y elegido, sé que no vengo de una familia acomodada, pero ahora si puedo ofrecerte algo más que no sean historias, hoy puedo decirte lo que siento sin miedo a que el día de mañana no pueda cumplir las cosas que llegue a prometerte, hoy puedo decirte que puedo crear un futuro para nosotros, puedo decirte que te amo.
-Usopp- No lo había malinterpretado, en verdad estaba pasando, ella siempre lo supo así como él siempre supo que ella estaba igual o más enamorada, pero nunca había querido presionarlo, porque Usopp era orgulloso porque no importaba nada él se iba a esforzar por cumplir lo que quería, y ella siempre estaría apoyándolo no importaba cual fuera la situación- Yo también te amo. Y lo hare cada día de mi vida, sabes que nunca me importo el dinero pero yo también quiero decirte que me esforcé por cumplir mi propia meta y como doctora siempre estaré para ti para curar no solo tu cuerpo, sino también las heridas de tu alma.
-Tú eres mi luz Kaya, siempre has sabido tratar mis heridas, tú junto a mis amigos son los responsables que el día de hoy puedo estar orgulloso de ser quien soy. Gracias por aceptarme aun siendo únicamente yo.
-Por ser tú es que te acepto, no hay nadie como tú.