Cap. 5
(Invitaciones, Sam y Wim)
¿Qué me paso hace rato?
Acaricie la mejilla de un chico y casi le sonrió. Desde que paso aquello nunca le he sonreído a nadie, solo a él.
Basta ya no pienses en eso solo lograre deprimirme.
Veo que esos chicos junto al enano entran al salón, no puedo evitar fijarme en él, el enano lo nota por lo cual se sonroja y desvía la mirada, tuve ganas de sonreír ante esa expresión pero me contuve pues no puedo darme el lujo de ser débil.
—o.oye—dijo el enano ya sentado a mi lado.
—¿Qué quieres? —se sobresaltó ante mi tono severo.
—solo quería…agradecerte por los audí...fonos, son muy importantes para….mi—dijo el muy nervioso.
—no es para tanto—dije desviando la mirada, si lo seguía viendo me iba a sacar una sonrisa y es lo que menos quiero.
—si..si lo es pa..ra mi y quiero hacer algo por ti—parece más calmado.
—no es para tanto ya te lo dije—me recosté en el espaldar de la silla—solo hice lo correcto.
—Por favor déjame invitarte algo después de clase—dijo con algo más de confianza pero duro segundo pues regrese a verlo con una mirada severa lo que lo tenso de nuevo.
—¡porque quieres eso ya te dije que no es necesario!! —dije pretendiendo estar enfadado con la esperanza de que se asuste y se aleje.
—para mi si lo es!! Y por eso te voy a estar esperando en el parque donde los encontraste—me dijo algo alterado, se levantó y me encaro—te estaré el tiempo que sea necesario porque yo ahora hare lo correcto.
Este chico si me sorprende cada día.
Me levante también y lo mire muy cerca frente a frente, pero él no se movió ni un milímetro a pesar de que estar temblando frente a mí.
—ya veremos, no prometo nada.
Me senté nuevamente restándole importancia.
—sé que iras porque es lo correcto.
En cuanto dijo eso lo mire y el me retaba con la mirada, algo dentro de mí se estremeció.
Narra Nathael
-Hora del almuerzo-
Ahora nos encontramos en nuestro pedazo de césped habitual, solo falta Samuel que ha ido a comprar las bebidas, incluso León está dormido en su mesa rota como todos los días.
Uff como se supone que lo enamore si me pone así de nervioso solo con verlo.
Será verdad lo que dicen las gemelas y estaré enamorado?..
No! No es posible.
—Nath!!! Nath!!! —me llama Julith lanzándome un pedazo de la albóndiga que comía en la nariz.
—¿Que quieres Julith?—pregunte comiéndome el pedazo de albóndiga que me lanzo.
—Es que estoy llena y me dio sueño quiero acostarme arriba de ti—me dijo con ojos de cachorro, suspire.
—está bien ven aquí—dije recostándome en el árbol y cruzando mis piernas.
Ella se acostó en mis piernas de espalda a mí, yo la rodee con mis brazos juntando mis manos en su estómago, así ella apoyo su cabeza entre mi hombro y mi brazo. Cualquiera que nos viera diría que somos novios, pero los dos solo nos vemos mutuamente como amigos y si lo hemos hablado así que nos tenemos confianza como para hacer este tipo de cosas sin sentir vergüenza ni compromiso.
—Ho...hola Nathael—me dijo una chica muy bonita y sonrojada.
—Shh Hola que tal?—dije en susurro para no despertar a Julith.
—lo siento s..solo qu..queria preguntarte si ella es t.tu n..ovia?? — pregunto ella muy nerviosa.
—Ehh no no lo es—conteste confuso.
—es que como los veo así abrazados—dijo ella un poco mas calmada pero de pronto se sonroja de nuevo—q.q..queri.a de..cirte que m.me gus..gust..as m..ucho y s..si qu..erias s.s..salir co..nmi...migo—dijo ella.
—lo siento pero ahora no estoy interesado en una relación perdona—dije lo más sutil que pude.
—lo entiendo pero me siento mejor porque te pude decir mis sentimientos y eres muy amable y sincero, gracias—dijo muy relajada pero con un algo de desilusión en sus ojos.
—tranquila podemos ser amigos y cuando me necesites me puedes decir cuando quieras—dije sonriéndole.
—gracias lo tendré en mente y por cierto mi nombre es Ellena, adiós—dijo ella yéndose con sus amigas.
—¿No la rechazaste por la apuesta o sí?—me pregunto Richard con los ojos cerrados quien tenía a Iri encima suyo al igual que yo tenía a Julith.
—Sí y no—dije cerrando mis ojos dispuesto a dormir algo—si por la apuesta y no porque aunque es muy bonita no me atrajo como novia—dije casi dormido solo escuche un "umm" de su parte y después solo oí suaves ronquidos, Mine estaba tirado a lo largo del césped dormido y Samuel brilla por su ausencia ¿dónde estará?.
-en otro lugar minutos antes-
Narra Samuel
Estoy en frente de una máquina expendedora buscando el dinero para comprar una bebida y llevarles algunas a los chicos cuando siento que alguien se acerca.
—hoo tú no eres el cuatro ojos que siempre esta con ese idiota griego? —hablo un chico detrás mío.
Su voz es grave pero melodiosa, volteo mi cabeza y veo a Wim que está sonriendo, me volteo completamente de la impresión y quedo con la espalda pegada a la máquina expendedora, él se acerca sonriéndome de lado queriendo intimidarme.
—¿que quieres Wim? —dije frunciendo el ceño este tipo es peligroso.
—¿umm así que me conoces?—me dijo más cerca.
—como no conocer al idiota líder de los bravucones Wim—dije sonriendo burlón, el inmediatamente frunció el ceño.
—te crees gracioso niño—dijo pegándole fuerte a la maquina a un lado de mi cabeza ya estaba bastante cerca, pude sentir su aroma masculino.
—si me creo gracioso idiota ahora quítate quiero comprar unas bebidas—le dedique una sonrisa desafiante.
Él se impresiono y quién no?
hace unos segundos parecía asustado y al siguiente le sonreía sin miedo y desafiante, siempre se sorprenden que a pesar de mi apariencia "nerd" no soy nada débil, ni indefenso. Ellos creen que porque uso lentes y soy el más bajo de mi grupo, soy débil o que tengo baja autoestima jeje. Pero les digo algo soy fuerte, astuto, y tengo un lado tenebroso que nadie quisiera despertar jijiji (risa malvada).
*NOTA: la apariencia de Samuel no es para nada de un nerd cuando viste el uniforme se deja un botón del cuello suelto, la corbata un poco suelta y las mangas de la camisa desarregladas además de su cabello rubio rebelde y sus lentes son los que están de moda. Y cuando viste casual siempre viste a la moda y muy varonil además siempre lleva anillos y pulseras de hierro para darle un toque rebelde a su apariencia, fácilmente podría ser todo un Donjuán si le interesara serlo.*
—Valla eres valiente a pesar de ser un enano cuatro ojos—me agarro del cuello de la camisa.
—Para tu información—aparte su mano—me llamo Samuel me puedes decir Sam si quieres y mejor apártate—lo aparte sin miedo.
Me gire sin prestarle atención ya que aún se encontraba a mi lado en la misma posición, me miraba de pies a cabeza en silencio, metí el dinero en la maquina pero cuando iba a oprimir el botón él se me adelanto y oprimió otro, saco la bebida y se la empezó a tomar.
—oye!! eso era mío—dije molesto.
—tú lo has dicho lo era —dio otro sorbo—hasta la próxima—me sonrío de lado y se fue con mi bebida.
—Idiota—susurre buscando más dinero para otra bebida. Aun podía sentir su fuerte aroma a pino y frutos cítricos.
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