Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Historias Paralelas I por Serenity

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

ESCANDALOS

 

Aquel lunes se le haria tan difícil de olvidar a Leon como aquel sábado a Lucas. Deberia haberse levantado mucho más tarde ya que los lunes entraba a la Universidad a eso de las 9:30 pero por cuestiones de fuerza mayor su madre lo sacudio a las 7 de la mañana para despertarlo.
Leon se revolvio en la cama, su madre lo miraba de nuevo procupada, se dio la vuelta y miro el despertador en la mesita de noche
–Vieja son las 7 recién.
–Lo sé cariño pero tu padre te está esperando abajo. Quiere hablar contigo antes de irse al trabajo.
–Ay no, la puta madre– Leon escondio el rostro en la almohada no sabia porque, pero aquello le olia muy mal.
Se levanto ayudado por su madre y se fue al baño a lavarse le cara. Bajo las escaleras de la casa, tan solo con los calzoncillos puestos. Entro en el gran comedor aun a medio despertar, el desayuno ya estaba servido.Sus padres solian desayunar juntos todas las mañanas.
Su padre se estaba paseando de un lado para el otro como una fiera enjaulada.
Cuando lo vio entrar, se le fue encima pero la madre se puso en el medio.
Furioso su padre cogio el periodico de la mesa y se lo arrojo a la cara.
– ¡A VER COMO CARAJO EXPLICAS ESO!
Si Leon todavía estaba un poco dormido con aquel grito termino de despertarse. Recogio el periodico del suelo, en la primera pagina pero en la parte inferior se encontraba su foto, una que le habian tomado vestido de traje en una comida que se habia dado en la casa presidencial tiempo atras, al lado con letras inmensas se leia el siguiente titulo:
"Escándalo: Leon Mariani, el hijo homosexual del reconocido funcionario arrestado por disturbios públicos en conocido lugar de ambiente"
A continuación le seguia un pequeño resumen de lo que habia sucedido, claramente, exagerado.
Sentia que se habia quedado sin palabras, aquello era un gran problema. Levanto la vista desafiante, no iba a dejar que un simple escandalo lo pasase por encima y mucho menos que su padre se aferrase a ello para hacerle la vida imposible.
–No sé que quieres que te diga, está todo bien clarito en el periodico, ¿no?– no le iba a dar el gusto de hacerlo sentir mal– ¿quieres que te lo explique?
–¡¿Pero que mierda tienes en la cabeza??!– el padre se acerco hacia él para arrancarle el periodico de las manos.– es lo unico que sabes hacer, ¡traer problemas a la familia? ¡Deberias avergonzarte! 
–No tengo porque.
–Pero como puedes estar tan tranquilo. ¿No te das cuenta pedazo de inconsciente que un escándalo como este puede traer graves consecuencias? Pero claro, tú te cagas en todo el mundo, andas por ahí con esos maricas de mierda y te cagas simplemente en tu familia.
–AY PAPÁ, ¡NO ME JODAS! ¿De qué familia hablas? ¿De tu carrera politica? Yo no veo que mamá este traumatizada por la noticia en el periodico.
–BASTA. No quiero hablar más del tema..
–Ah no, Ahora él que quiere hablar soy yo: decime de que familia hablas. Lo unico que haces es escudar tus verdaderos intereses en tu carrera politica. Siempre fue lo más importante para ti, por encima de mamá y por encima mio.
–Leon, por favor– la voz de su madre sonaba despacio.
Leon la miro durante unos instantes.
–Pero si es verdad. ¿O no es asi?– lo miro seriamente–¿No te pusiste a pensar que quizás la culpa de que yo sea gay sea tuya. Posiblemente se deba a la falta de un modelo masculino en la casa.
La mano de su padre cayo pesada sobre su cara, un calor le inundo la mejilla izquierda.
–Oh, eso fue un intento de imponerte como padre. Ya es muy tarde, no hay vuelta atras, soy gay.
Su padre lo miro fijamente a los ojos, se notaba que no estaba escuchando simplemente lo que él le decia, aquello lo sacaba de quicio.
–Ya te lo habia dicho una vez, pero no me has hecho caso. Ahora es demasiado tarde. Tienes una semana para irte, igual tendras muchos amiguitos donde quedarte a dormir.
Leon se avalanzo contra él, su madre dejo escapar un grito y se apresuro a sujetarlo, pero Leon lo habia cogido por el cuello de la camisa y lo sostenia fuertemente.
– ¿Sabes que? Tienes suerte de que mamá este aqui porque sino te partiria la cara. Un hijo de puta como túno puede ser mi padre.
Lo solto empujandolo, su padre trastabillo, pero conservo el equilibrio.
–¡Te odio!
Se dio medía vuelta y abandono el salon, subio las escaleras para vestirse, se sentia a punto de estallar, golpeo la pared con fuerza mientras las lagrimas fruto de la rabia que sentia se deslizaban por sus mejillas.Tenía que encontrar la forma de irse antes de la semana, no queria darle el gusto a ese cabron de usar hasta el último día que le habia dado. Queria irse ya, desaparecer. Sintio que el mundo se le venia abajo.
Sabia que su madre generalmente no se metia en las discusiones de ambos pero en aquel momento tanto silencio de su parte le habia molestado. ¿Acaso estaba de su lado? No podía ser, ella no era asi.
Hizo el bolso con un poco de ropa, metio unos cuantos libros y decidio que lo primero que haria seria una breve visita al banco. Ese hijo de puta se va a arrepentir de haberme echado. 
Sentia que la rabia lo consumia, necesitaba descargarla de algun modo, una idea se le vino a la cabeza, iría al gimnasio a descargarse un rato.
Una vez listo bajo las escaleras, en la cocina estaba la chica que se encargaba de las tareas del hogar.
–Carmen, ¿hay un poco de cafe?
La joven morena, se giro y lo miro un tanto avergonzada, era obvio que habia escuchado toda la discusion.
– Te deje el desayuno hecho en la mesa del comedor.
–Gracias.
Le sonrio mientras se dirigia hacia allí, en el salon descubrio a su madre sentada, tenia el rostro cubierto con las manos. Se arrodillo frente a ella mientras le tomaba las manos y se las quitaba del rostro. 
–Vieja no llores. Ya estoy grandecito. No me voy a morir de hambre viviendo solo, te lo prometo, viviré a huevo cocido pero sobreviviré.
Su madre se rio suavemente.
–Entonces te moriras de colesterol.–añadio por lo bajo.
–Está bien, intentare hacerme arroz de vez en cuando para equilibrar. No te pongas triste viejita, vendre a visitarte.
–No es eso Leon, es que las peleas entre ustedes me desvastan, entiendo a las dos partes pero no me puedo dividir, aunque lo haria si pudiera. Intentaré hablar con él esta noche para que te quedes..
–No ma. Ya no quiero vivir aquí. Aunque se lo pidas no me voy a quedar, un día nos vamos a pelear mal y no quiero porque la que siempre termina sufriendo eres tú.
–Yo queria que te independizaras pero no de esta manera, una semana es muy poco tiempo.
–No pasa nada, no recuerdas que tengo amiguitos, como dice papá.
–Leo no me gusta que hables así.
–Mamá, no tengo amiguitos de ese estilo, soy gay pero no taxyboy como piensa el viejo– le beso ambas mejillas– ahora me tengo que ir. Y es mejor, al final de cuentas es mejor que me independice de una vez por todas, ¿no te parece?

Se levanto, y dejando el desayuno de lado salio por la puerta metio el bolso en el asiento trasero del coche y se sento al volante. Allí se quedo unos instantes pensado. La cabeza le daba vueltas, decidio que lo mejor no era hacerse problemas, ya llegarian las soluciónes sino se volveria loco y en aquel preciso instante la imagen de Numa se le vino a la cabeza y se quedo pensando que era la primera vez en la cual sentia la necesidad de hablar de sus cosas con alguien. ¿Por qué Numa parecia ser, de un momento para otro, alguien tan importante en su vida? Inserto la llave allí y arranco el coche un largo día le esperaba por delante y todavía tenia que encontrar un lugar donde pasar la noche porque a su casa no queria volver.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).