LUCAS
Cuando Manon lo vio salir no era necesario aclararle que se habian peleado pero esta vez tenia que ser algo importante, Lucas estaba bastante enojado, parecia disparar chispas por los ojos, se acerco hasta ella.
–¿Me das las llaves de casa?
–¿Ya te vas?– era obvio pero queria saber lo que habia pasado.
–Si. Y si Numa necesita algo asegurate de llamar a Leon...– agarró las llaves que su hermana le tendía, mientras se alejaba repitiendose que era un idiota.
Más tarde Manon se encargo de llamar a la abuela para comentarle que el chico estaba despierto y que en unas horas ya se podía ir, los doctores estaban de acuerdo en darle el alta.
Lucas abandono el edificio y se dirigio hacia la casa, puso su mejor cara ya que en el camino se cruzaria con su primito y no queria darle motivos para que se burlase de él, porque como se encontraba era capaz de cargarselo. Para su sorpresa no lo vio, o quizás todavía estaba durmiendo pero no le importaba.
Se fue a su cuarto y lo primero que hizo fue recolectar todos los dibujos de Numa los hizo un bollo, y lo tiró en el cesto de la basura. No más Numa, le habia dejado bien en claro como eran las cosas pero lo de Leon lo habia sacado de quicio. ¿No se le ocurria algo mejor que compararlo con aquel imbecil? Hasta hubiese preferido que lo compare con su primo.
Pero, Numa ya se habia acostado con el idiota ese y seguramente no quería saber nada de él. Se sento en las escaleras, evidentemente dolido, se sentia muy triste, no era que esperase que tras rescatarlo se le lanzase al cuello pero si esperaba un acercamiento más intenso.
¿Acaso no le podía gustar asi como era? Todos tenian sus defectos, para él admitir su sexualidad abiertamente era bastante dificil pero claro tampoco Numa la admitia abiertamente, asi que estaban en lo mismo. ¿Por qué tenia que desempeñar un papel que no queria? El era como era, era un crio para ciertas cosas como decia su hermana, sabia dibujar, era sensible y atento, nadie podria darle todo lo que el estaba dispuesto a ofrecerle con respecto al afecto, el siempre estaria allí, nunca le fallaria, para todo y en todo momento. ¿Qué? ¿Aquello no contaba? No solía mirarse casi nunca al espejo, igualmente se creia más lindo que el idiota de Leon. Si no le interesaba como era, pues eso era todo, se habia terminado, no andar detras de él ni buscarlo ni nada. Se habia acabado y si queria un amiguito que para eso se buscase tambien a Leon que podía desempeñar los dos papeles. Por una vez que queria tener una buena relación, parecia que de nuevo todo se le volvia en su contra. ¿Por qué era tan dificil?
NUMA
Desde que habian salido de la habitación y la abuela habia venido a recogerlo Manon no habia dicho nada, solo lo miraba de reojo como quien intenta ignorar a alguien pero no lo consigue del todo. Numa sabia que no estaba enfadada pero tampoco contenta, él tampoco se sentia mejor, se sentia la peor basura del mundo, Lucas le habia dejado casi claro que queria estar con él, no se lo habia dicho directamente pero quizás si él no hubiese metido su patita se lo hubiese preguntado. ¿No era acaso lo que él queria? Claro que si, cuantas veces habia fantaseado con la idea, y el día de su cumpleaños aquel minusculo roce de labios lo habia dejado aceleradisimo.
Sabia era su culpa, lo sabia perfectamente pero no sabia como comportarse, sabia que Lucas sentia algo por él, al principio penso que eran solo imaginaciones suyas: pero él habia dado el primer paso al besarlo aqueldía. Solo que la muerte de Agustín lo habia tomado por sorpresa, y le habia traido viejos recuerdos y sentimientos que creia enterrados.
Sentia el deseo de pelearse con todos como si con ello pudiese pelearse con el destino o quien escribia los guiones de la vida de las personas. ¿Por qué Agustín? Se preguntaba una y otra vez pero nunca parecia haber una respuesta.
Cuando se bajo del coche le fue casi imposible mirar a la cara a Manon, temiendo encontrarse con una mirada de reproche. La saludo por lo bajo y le dio las gracias, arrepintiendose al instante de haberlo hecho.
No tardo en escuchar el tono acido de la joven.
– El único a quien debes agradecer es a Lucas.
"Lucas" se quedo pensando, una vez en su casa seguia con el nombre en la cabeza, cada vez se arrepentia más de lo que le habia dicho, queria confiar en él, quería estar con él, entonces ¿por qué se comportaba asi? No lo sabia.
Lucas habia ido a buscarlo.
Lucas lo habia esperado 5 horas.
Lucas lo habia encontrado.
Lucas lo habia llevado al hospital.
Lucas se habia quedado allí, a su lado.
Era un idiota.
La abuela cocinaba algo pero de solo oler la comida se le revolvio el estomago.
De improviso se levanto miro el reloj, ¿cuánto tiempo llevaba tirado en el cama pensando?
Ya estaba atardeciendo
–Abu.
Eleonora lo miro un tanto sorprendida al verlo en la entrada de la cocina todavía vestido.
–¿No vas a descansar?
–No, Abu tengo que ir a casa de Lucas, a buscar algo. No te preocupes, ya vengo.
– Pero – comenzo la abuela pero se dio cuenta de que el chico no pararia hasta que lo dejase salir, después de todo el medico habia dicho que no era nada grave y que podía asistir a clases normalmente y seguir con las actividades normales. Solo debía estar atento y regresar a la clínica en el caso de que presentase ciertos síntomas– Ok. 2 horas y te quiero aquí de nuevo ¿ok?
–¡Ok! Gracias Abu.