Decir que la vida es hermosa y los días bellos es quedarse corto. No me había dado cuenta de lo mucho que me estaba afectando el no poder convertirme. Sabía que mis problemas eran en su mayoría por eso pero no sabía que tan profundo me había envenenado con esos pensamientos. Volver a correr con todos fue… lo mejor.
No todo fue tan bien como esperaba con el primer cambio después de tanto tiempo. La segunda noche, la noche de la luna llena fue más fácil y no estuve perdido, siempre tuve el control de mi cuerpo y mi mente.
— ¿Terminaste?— levanto la vista de la calle al auto que se detuvo frente a mí. Baruch me sonríe desde el asiento.
— sí.
— te llevo— arrojo mis cosas al asiento trasero— tienes libre mañana por la noche— no es una pregunta. Mañana es viernes, Baruch estará libre, Kalila también ¿Rowan y Kevin podrían mover sus horarios? Bah, pueden.
— ¿A dónde quieres ir?
— es un bar nuevo. Rowan tiene el turno por la mañana y tendrá libre el fin de semana. Kevin cubrió algunos turnos extras y Jane no trabaja los fines de semana. Iremos a ese bar.
— nunca dije que iría.
— vamos, será como en los viejos tiempos— resoplo.
— Suenas tan viejo y hablas como si hubieran pasado cincuenta años, eso fue hace solo cuatro años. Aunque si lo estás contando en años de perro entonces…
— idiota— me rio, el viento cálido que entra por la ventana comienza a oler más húmedo. Pronto lloverá otra vez— entonces ¿vendrás?
— no sé porque insistes en ir a lugares que son para embriagarse aunque nosotros no podemos embriagarnos. Pero iré.
— podemos, necesitamos mucho alcohol pero no es imposible.
— ¿Qué sentido tiene si necesitamos más? tampoco dura mucho el efecto— hago un gesto con la mano— invita a todos. Si los dejamos mucho de lado puede ser malo a largo plazo, y Kalila tiene razón, ya no estamos en ese tiempo en que solo estábamos nosotros.
— para eso nos reunimos los fines de semana, comemos juntos todos los domingos. Te lo has estado perdiendo amigo. Los invitare. Por si también te lo perdiste, esos domingos también vienen los amigos humanos de Eddie.
— lo sé, los conozco… más o menos. No creo que les agrade mucho. Estaba sorprendido al notar como es que son parte de la manada pero no saben nada.
— ah, ellos son amables, si tratas bien a Eddie debería bastar para que ellos no sean cautelosos contigo. Son amables y muy leales a Eddie. Por cierto, ahora que hablamos de esas comidas, pronto vendrán los hermanos de Rowan.
— sus hermanos…no puedo creer que ahora se lleven bien— no los conozco aun, solo sé que vienen y hablan seguido.
— Rehan y Rusher posiblemente sean tan malos como nos contó Rowan, mientras no intenten nada malo contra nosotros no podemos impedir que vengan, además, ayudaron mucho con los problemas que teníamos.
— sí, sí, me contaron todo— el auto se detiene en la casa. Como Baruch apaga el motor supongo que va a entrar. Puedo escuchar voces, más de las que viven aquí. Hay una humana que no conozco hablando con Jennifer y Bradley, Murray cocinando con Rita, Killian y Tarik jugando con Nell en la sala. Todos parecen relajados.
— ¿van a quedarse a comer?
— sí, no tengo más clases hasta la tarde.
— yo vivo aquí pero si no quieren compartir comida siempre puedo pedir a domicilio.
— no digas tonterías. Hay suficiente comida para todos— es agradable ver que ahora hay más cooperación para estas cosas. Cuando comenzamos a vivir todos más o menos en el mismo lugar, tener suficiente dinero para comer hizo que juntáramos nuestro dinero y poder comprar más cosas.
— Killian ¿Cómo les fue con la comida?— sueno incómodo y muy forzado, pero sigue siendo mi mejor esfuerzo para convivir.
— todo salió bien. No estuve cerca de las personas pero todos se veían satisfechos y fue un evento pequeño… ya hay otro evento, más grande esta vez. Murray tiene amigos.
— no lo digas como si fuera algo raro— escuchamos desde la cocina. Killian mira hacia él, apenas una expresión de que no entiende que está mal. Claro que lo normal para todos es tener amigos, al menos uno o dos… lo que sí es raro es mantenerlos después de convertirse. La conversación se desvía hacia los trabajos de los demás, lo que harán el fin de semana y la invitación de Baruch.
Esta atardeciendo cuando una camioneta que no reconozco llega. Me pongo alerta hasta que veo que Lon es quien baja del auto.
—no sabía que tenían auto nuevo— Baruch habla por todos al ver el auto. Lon parece tan orgulloso de eso que casi me rio.
— fuimos por el ayer— Killian responde.
— incluso tiene una silla para bebés— interviene Lon y comienza a enumerar todas las cualidades de seguridad para niños que tiene el auto. Recojo los platos de la mesa, hay un gran montón de cosas sucias para lavar después de comer. A nadie le gustan las tareas después de pasar toda la tarde comiendo y como aún me siento un poco culpable por tratarlos mal acepto la tarea de lavar.
— lavar platos no es un castigo. Tu cara dice que estas cumpliendo un castigo— Tarik se ríe pero estira la mano para que le pase el vaso que acabo de lavar.
—alguien tiene que hacerlo.
— qué lindo de tu parte ofrecerte— resoplo y le paso otro vaso para que lo seque y lo guarde.
— quería hablar contigo— él solo alza las cejas, curioso— ahora que puedo pensar mejor, sobre ti… eh, más bien sobre tu pelaje— añado cuando me doy cuenta de lo que dije, y mi cuerpo traidor comienza a subir sangre a mi cara. La sonrisa de Tarik se estira, no dice nada— me refiero a que si alguien te ve nos meterás en problemas— eso hace que deje de sonreír y otra vez me doy cuenta de que no son las palabras que quería usar.
— no me estoy exponiendo a que me vean. Puedo alejarme de los humanos si están en el bosque.
— no, no es lo que yo… es… no quise decir que lo hicieras a propósito. Si alguien llega a verte habrá escándalo por ver a una especie ártica muy al sur. Si llegan investigadores será problemático, puestos de vigilancia, cámaras ocultas en el bosque.
— Yo no había pensado eso— su ceño se frunce, y no toma el plato que le paso por estar mirando fijamente a la nada.
— bueno, eso es lo que hago, pensar en situaciones malas para tener una solución— un resoplido divertido.
— eso se llama ansiedad— me rio y le doy un codazo— bien, entonces ¿Qué debería hacer?
— ocultarnos un tiempo, ponernos en contacto para saber dónde están las cámaras y te dejarías ver lejos de aquí para hacerlos creer que te alejas.
— interesante.
— también quisiera ver a Leyre— lo he estado pensando, no la he visto desde… vaya, desde antes de desaparecer. Aunque sé que ella no tuvo la culpa y ahora se mantiene más o menos al margen, aun quiero preguntarle por esa persona.
— no tienes que hacerlo si no quieres. Rowan puede llamarla, llevarte hasta su territorio si quisieras ver o habla con Leyre o… esa mujer— lo dice con cuidado, midiendo sus palabras.
— aun no estoy seguro de verla. Pienso que no tiene caso, pero a la vez preguntarle…— me encojo d hombros— me dijeron porque lo hizo, ir podría hacerme sentir mal si ella me dijera que me uso cada vez. No quiero eso.
— Umm, yo tampoco lo querría.
— ¿vendrás mañana al bar?— pregunto, cambiando de tema. No tengo ninguna prisa por averiguar lo otro.
— no, ya tengo planes… saldré con mis amigos del hospital.
— eres muy cercano al personal.
— paso mucho tiempo trabajando con ellos y no tengo problemas con ellos.
— ¿ellos no sospechan de ti? Que hay algo raro…
—Umm, no realmente. Yo no he escuchado nada, pido permisos pero también cubro cuando alguien falta y cosas así. Estoy tan acostumbrado a los olores del hospital que casi puedo ignorarlos. Solo odio las maquinas, hacen mucho ruido.
— ¿Por qué elegiste trabajar en un hospital? El olor de la sangre y tantas heridas es abrumador, y eso que yo solo entro y salgo.
— solo me gusta ayudar a los demás— hay un tono distante, apenas notorio, en su voz. Los demás se ríen, parece que Lon les está mostrando como usar la silla para bebés del auto. Le paso varios platos más, en silencio.
— nunca conocí a un hombre lobo que fuera doctor— principalmente porque no necesitamos doctores— mi manada era nómada, vivíamos viajando y haciendo pequeños campamentos temporales cuando era necesario, así que no teníamos trabajos específicos. Cuando nos quedábamos con otras manadas sí que había otros trabajando pero nunca nos quedamos mucho tiempo.
— debió ser divertido.
— lo fue hasta que crecimos y comenzaron las disputas por quien sería el alfa.
— ¡¿Tú estabas compitiendo?!
— si… mientras estábamos en eso me di cuenta de que no quería seguir con eso ¿Qué sentido tenía? Me quede atrás deseando que se olvidaran de mí, y eso paso— sonrió, recordando haber salido del sanitario más lejano de la parada y no encontrar ninguno de los camiones que usábamos. Tarik se ríe— lo sé, algo muy tonto ¿Cómo pueden olvidarte en un baño público siendo un adulto?
— ¿Qué paso después?
— me di cuenta que mi plan no era un plan, solo pensé en quedarme solo pero no tenía nada y no tenía ni idea de que hacer. Así fue como Rowan y Baruch me encontraron. No pararon de burlarse de mí pero dijeron que me ayudarían. Viajamos haciendo muchas tonterías, fueron solo unos meses y me sentí más unido a ellos que a mi propia manada. Tanto así que cuando encontramos a mi manada, yo ya tenía otra.
— te quedaste con Rowan.
— era más divertido. Todos queríamos establecernos y tener un territorio. Todos estábamos buscando algo.
— que linda historia de origen. Ahora entiendo porque Kalila te defendió tan ferozmente cuando volviste. Pensé que iba a tener que pelear con ella— arruga la nariz— no quería pelear con ella.
— estuvimos solo nosotros cuatro mucho tiempo… ¿Qué hay de ti?— El día que fui a su casa pude notar que tenía muy pocas cosas, lo más básico y lo único que resaltaba es una fotografía en la sala donde se veía una familia, todos con rasgos físicos muy similares— ¿También huiste de tu manada?— el golpe de un vaso de plástico al caer me distrae. La mano de Tarik golpea el bote de jabón y luego intenta sujetarlo con movimientos muy torpes.
— eso… no… lo siento casi lo tiro. Ten cuidado con esa taza, es la favorita de Rita y se molestara si la rompemos— le miro, él no me mira pero ¡Es terrible mintiendo!
— dios, no te estoy preguntando si mataste a alguien y ocultaste el cadáver.
— ¿Qué? Ah, es solo que no hablo de eso— pero si tienes una fotografía en tu sala ¿hizo algo tan malo para que su propia manada lo expulsara? Porque lo único que sé de él es que estaba solo cuando vino con Eddie. Los demás regresan, el auto de Lon alejándose.
— pff. Cualquiera puede ocultar un cadáver. Me gusta desenterrar cadáveres— Tarik me mira, con los ojos muy abiertos y un poco resplandecientes.
— ok, eso no sonó macabro en absoluto. Creo que mejor me voy— los dos nos reímos. Noto las miradas de los demás. Tarik también los nota, incluso les saluda con la mano— no hay cadáveres ocultos, no que yo sepa en todo caso. No le mentí a Eddie cuando le dije que estaba solo— aja, y solo de pronto le dieron ganas de dejar todo y seguir a un desconocido a una manada que podría no recibirlo— sé que sería problemático si yo tuviera problemas con alguien más y viniera aquí.
— eso es lo único que importa ¿Por qué venir aquí de pronto? Es muy lejos de donde vivías.
— No tenía nada que perder— responde con simpleza— estás haciendo muchas preguntas— no suena acusador, pero si curioso. Me mira, como si intentara adivinar qué es lo que estoy pensando— estaba un poco asustado cuando nos cambiaron a Donelly, pero parece que esta versión es mejor.
—que gracioso. Te dije que es lo que hago. Soy… bueno leyendo personas y situaciones.
— y yo te dije que eso es ansiedad y necesita tratamiento— le arrojo espuma con la mano— entonces ¿Qué es lo que no adivinas de mí? si estas preguntando es porque algo no sabes.
— ¿te expulsaron de tu manada? No creo que tengas los problemas que tuvieron Rowan, o Lon. Tampoco como Kalila.
—ahora tengo curiosidad de que problemas tuvieron Lon y Kalila. Pero no, no me expulsaron de mi manada— le miro, esperando. El solo estira la mano para que le de otro plato, sonriendo.
— Oh, vamos.
— parece que no eres tan bueno adivinando. Y tampoco me perdí como tú, si es lo siguiente que vas a preguntar.
— lo voy a averiguar. Entonces ¿Cómo es que sabias de los efectos del té y el tiempo que podía durar sin convertirme? en esos momentos no le puse mucha atención al hecho de que sabias eso.
— adivina— me dice, mirándome. Hay diversión en su expresión. Intento recordar lo que paso esos días, si dijo algo especial. Lo único que recuerdo es que menciono a una abuela.
— tú lo probaste— la comprensión llega. La única forma de saberlo tan bien es haberlo probado primero.
— ¡Bien! Si, lo probé yo— no añade más— aunque no lo había dado a nadie más. Bien, iré a dar una vuelta a la clínica para ver a Eddie. Nos vemos— la despedida me sorprende. Tarik se seca las manos y se despide con entusiasmo de los demás. Ya no queda nada que lavar.
Esperaba encontrar el bar lleno y con mucho escándalo. El lugar es discreto y no esta tan lleno, aunque si hay muchas personas no al punto de una aglomeración insoportable. Al final solo estamos viniendo Kalila, Rowan, Baruch, Kevin y yo. Jane dijo que estaba cansada, y los demás dieron un montón de excusas que me hicieron pensar que solo querían darnos tiempo a nosotros.
— se ve bien.
— es nuevo— Baruch se encoje de hombros. El olor a alcohol es intenso, pero no apesta a cigarros ni a orina, lo cual siempre es bienvenido. Hay un olor a pintura fresca todavía y la música no suena con la mala calidad de algunos sonidos.
— ¡No puede ser! ¡Es un karaoke!— Kalila casi me arrastra, como si tuviera miedo de que saliera corriendo al notar el escenario— Jane se morirá de envidia. Necesito decirle— sin soltarme comienza a teclear furiosamente en su teléfono.
— ¿se supone que vamos a cantar?— Rowan no se escucha impresionado— dijiste que veníamos a beber.
— no sabía que también es un karaoke.
— Jane viene de camino.
— dios— murmuro. No pienso cantar, y por las expresiones de Baruch y Rowan, ellos tampoco. La única opción será pedir mucho alcohol para que ella no se dé cuenta de que no estamos dispuestos. Baruch me mira, no podemos leernos la mente pero sé que piensa lo mismo, luego mira a Rowan, quien solo asiente con la cabeza. Si Jane viene tal vez…— oh, podrías invitar a Jennifer también.
— voy a llamarla— me suelta. Baruch me da unas palmadas de felicitación en la espalda.
— entremos y busquemos un lugar— el local es amplio y discreto. Me gusta. Hay dos chicas cantando una canción de las spice girls si no mal recuerdo. Nos sentamos en la mesa más lejana del aparato. El último en sentarse es Baruch. Aún estamos asimilando todo cuando llega la primera ronda de cervezas. Bradley y Jennifer llegan juntos, Kalila les hace una seña y ellos se apresuran a cruzar el lugar. Otra ronda de cervezas, seguida por una de tequila y Jane llega. Al fin podemos relajarnos con ellas dos aquí porque Kalila olvidara que los demás no estamos dispuestos a cantar. Una botella de vodka aparece mágicamente en la mesa y sé que nadie va a moderarse esta noche. Tampoco quiero hacerlo.
— ¿Qué haremos si todos terminamos ebrios?— pregunto, a nadie en particular.
— tengo eso cubierto— Rowan solo mueve su teléfono. Me basta. Jane es la primera de nosotros que sube a cantar, una versión muy apasionada de I will always love you a la que Kalila y Jennifer vitorean como si ya estuvieran ebrias.
Las personas entran y salen, cambiando el ambiente cada poco tiempo, nosotros estamos cada vez más alegres y haciendo más ruido cada que Jane, Kalila y Jennifer suben a cantar. Como hay más personas, cada vez son menos las veces que cantan. Incluso Kevin sube a cantar un par de veces. Y tal vez sea el alcohol pero me siento muy alegre. Hay gritos, que no vienen de nuestra mesa. Hay un par de chicas cantando canciones pop aunque por la forma en que hablan parece que están más ebrias que sobrias. Un movimiento llama mi atención, un color de cabello casi blanco y familiar.
— es Tarik— nadie me escucha, tampoco estaba diciéndolo a alguien. Él tampoco nos ha visto o finge muy bien que no nos conoce. Estaba seguro de que había mentido cuando dijo que ya tenía otros planes. Vuelvo a mirar a mi mesa, no es mi asunto lo que hagan los demás ¿Quién vendrá por nosotros cuando salgamos? Ninguno de nosotros debería conducir. El lado bueno es que ninguno de nosotros sufrirá por esto en la mañana. Me levanto al baño después de un rato aprovechando que todavía no hay bebidas y cuando salgo hay bebidas de colores en la mesa. Mis ojos vagan por las otras mesas: un grupo de amigas festejando una despedida de soltera, un grupo de ¿son estudiantes?, los amigos de Tarik empujándole para que suba a cantar…
Tarik está riendo, pero camina al escenario. Le toma un momento elegir la canción, las notas lentas de una guitarra eléctrica que espero sean más rápidas… su voz llega primero. Debo estar más borracho de lo que pensé porque no suena mal, de hecho, es afinado, relajante, suave. Tarik canta con los ojos cerrados, sin ver la letra que por cierto, también es hermosa ¿es el alcohol?
— But I still haven't found what I'm looking for…— sí, eso es. Regresar sin recordar haberme ido, con todo tan diferente, estar buscando algo que ni siquiera sé que es ¿un lugar? ¿Tiempo? ¿Amigos? Y sigo aquí, buscando y herido, pero aun aquí. El miedo de no saber qué iba a pasarme ¿me iba a volver un lobo sin control? ¿Solo tenía unos días para ver a todos? ¿Me iría sin despedirme? Aun me duele pensar que pude haberme perdido sin despedirme de mis amigos, pensar en qué habría pasado con ellos después de perderme otra vez. La voz de Tarik sigue sonando, suave y armoniosa. Las luces del bar se mueven por el escenario haciendo que toda mi atención este en como Tarik sonríe, en la serenidad de su cara mientras canta, las miradas que dirige a la mesa donde están sus amigos...alguien camina pasando entre nuestra mesa y la otra, y es cuando me doy cuenta que en algún momento comencé a llorar. Me limpio la cara con la mano, ignorando a los demás. En el escenario, la canción termina y Tarik saluda a su mesa donde le están silbado y aplaudiendo. Mi mirada se ha quedado atrapada en él, y por eso noto su expresión: el momento en que deja caer su máscara alegre y deja ver la nostalgia, tristeza… me hace estar seguro de que no eligió la canción al azar. Aun no encuentro lo que estoy buscando, pero he encontrado algo…
No soy el único que aún está buscando.