Capítulo 17
Quidditch y el Tú Interior
"¿Hiei, puedo hablarte?"
Hiei se levantó e inclinó su cabeza hacia Keiko, invitándola a seguirlo, y dejó el Gran Comedor (y los restos de su almuerzo) con la chica humana apurándose tras él. Cuando encontró un lugar aceptable, fuera de el camino y sin ninguna oportunidad de ser espiados por personas ocultas, giró para mirarla.
"Tuvimos Defensa esta mañana." Keiko le dijo planamente. "Genkai quiere que escribamos un ensayo sobre nosotros mismos, para ayudarnos a saber con más certeza cual podría ser nuestra magia interna." Se detuvo, visiblemente preparándose, y miró a Hiei a los ojos antes de decir, "¿Hiei, cual es mi magia interna?"
Él levantó una ceja. "No lo se," contestó.
"Pero pasaste un verano trabajando en ella," Keiko presionó. "Debes tener alguna idea."
Hiei estuvo silencioso por un largo rato, considerando si debía considerar eso. Se alejó un paso y comenzó a caminar, caminando alrededor de la chica. Keiko volteó la cabeza para mantener un ojo sobre él,
"Tal vez," admitió, decidiendo optar por la verdad.
"¿Bien?" Preguntó ella.
"¿Haz estado oyendo voces? ¿Viendo cosas?" Ella agitó la cabeza en confusión. Él terminó el circulo y golpeó la frente de la chica con un nudillo. "¿Eso duele?"
"No..."
"¿Tinte verde a tu complexión? ¿Puntos adoloridos donde sea?"
"No."
Su expresión no cambió. "¿Sientes algún deseo de atacar gente y hacer zombies de Keiko?"
"¡Claro que no!"
"Eso elimina cualquier parecido con mi Ojo, o la Espada," Hiei murmuró
"¿Qué espada?"
Hiei le lanzó una mirada fulminante. "No es de tu incumbencia," le soltó.
Keiko dio un sonidito de enojo. "Bien, Es mí magia interna, pero si no quieres decirme, le puedo preguntar a Genkai. O a Yuusuke.
Hiei se puso tieso de la sorpresa. Sus ojos se achicaron. Intencional o no, la chica humana había encontrado el único control que tenía sobre él. Yuusuke le diría, y luego se pondría triste de haber confiado en Hiei desde un principio. Yuusuke podría... no. No reconsideraría esa confianza, no después del Torneo. Probablemente, incluso no después de la Puerta de la Traición, cuando le dijo a Hiei directamente que confiaba en él (lo suficiente para saber que Hiei no querría matarlo si no era en una batalla justa).
¡Y Hiei estaba siendo un torpe por pensar que el momento en la Puerta era algo que Keiko pudiese dañar! Era importante para él, no para Yuusuke.
"Es lo que te dio magia que me permitió algo para trabajar en primer lugar," dijo ceñidamente. "Y más allá de eso, tú no necesitas saber. El poder se ha adaptado a ti." Se detuvo. "Tendrás que hacer el ensayo como todos los demás."
"Oh.... de acuerdo." Keiko dio una cortés reverencia. "Gracias, Hiei." Se volteó para irse, y se detuvo. "¿No hay absolutamente nada más que creas que pueda ser importante?"
Hiei pensó por un momento. Si fuese él el que preguntaba, le gustaría saber que el Jagan había estado unido a la Espada en aquel momento... pero eso invitaba demasiadas preguntas sobre el lío entero. Aún así... se encogió de hombros. "La mayor parte vino de el Ojo. Tal vez aún refleje eso."
"¿'Tal vez'?"
"Era una mezcla extraña de magia." Eso debería ser suficiente.
"Una mezcla extraña..." Keiko murmuró. "Ya... ya veo. Gracias, Hiei."
"Hn."
Un silbato cortó la oscuridad que se cernía sobre el campo de Quidditch, cortesía de Angelina Johnson. La Cazadora de séptimo grado (y, este año, Capitán) espero hasta que el último estudiante hubiese aterrizado, y sonrió a la pequeña audiencia.
"¡Bien! ¡Buen trabajo, a todos!" Su voz, a pesar de ser más aguda que la de sus compañeros y no mágicamente aumentada, llegó a oídos de todos. "Hemos visto un gran vuelo esta noche, y yo, al menos, creo que esta será una difícil decisión. Anunciaremos los resultados más tarde hoy. ¡Gracias por venir!"
Harry siguió a Angelina y al resto del equipo a los vestuarios mientras el gentío se disipaba. Los ojos de la chica eran brillantes mientras giraba hacia ellos. "Este será un gran año para el equipo," dijo simplemente.
"Oh no," Fred gruñó.
"¡Es un discurso!" George gimió.
"¡Estamos perdidos!" ellos corearon.
Angelina golpeó a la pareja en la cabeza inteligentemente con su tabla, obteniendo respingos iguales. "No soy Oliver, muchas gracias." Le dieron expresiones sobre-actuadamente heridas miradas, no obteniendo nada que no fuese un sonido de diversión antes de que la chica se pusiera comoda de nuevo.
Una hora después, habían acortado la lista a cuatro.
"Okay, así que su hermano es la única persona en que contamos que sea el Guardián, aunque la gente va a preguntarse si es porque es realmente bueno o si es porque los tiene a ustedes y a Harry en el equipo-"
"Como si," George gruñó.
Angelina le lanzó una mirada dura. "-así que tendremos que echarle un ojo al asunto," terminó. "Harry, me gustaría que trabajases con él un poco más después de las practicas. Él realmente es la mejor opción que tenemos para Guardián."
Eso dejaba a tres.
"Andrew Kirke, Patricia Stimpson, y Yuusuke Urameshi," Angelina pensó en voz alta, como si no hubiese visto los nombre varias veces en la última hora.
"Todos son muy buenos," Harry ofreció.
"Yo estoy seguro de que Kirke debería estar," dijo Fred. "Voló bien, mantuvo las apariencias, buen brazo..."
"Yo igual," George dijo. "Pero no puedo decidir entre Stimpson y Urameshi. Los dos estaban iguales."
Angelina alejó ambas hojas de notas del resto. "La escoba de Urameshi era algo floja, particularmente en las vueltas, y su agarre pudo haber estado mejor. Su mano derecha seguía soltando la escoba cuando las Bludgers se le acercaban,"
"Me parecía más que estaba intentando golpearlas," Fred mencionó. "La cosa más torpe que he visto, si lo estaba intentando."
"Pero," Angelina continuó, "el lanzamiento de Stimpson es mucho más débil que la de él, no es tan rápida, y esta en nuestro año. Se graduará con nosotros." Que dejaría a Harry con cuatro espacios que llenar, y relativamente pocos buenos jugadores, el siguiente año. "Si el vuelo de Urameshi fuese mejor, diría que deberíamos aceptarlo.
Harry se talló los ojos cansadamente. "Denle un respiro. El chico ha estado volando solo por dos semanas."
"Es cierto... no estabas viendo sus pruebas de vuelo," Fred dijo a la chica. "Minamino y Jaganshi no fueron los únicos dos con, er, explosivos inicios."
"Todos pusieron a sus escobas a echar chispas, la primera vez," George explicó. "Una de las Hufflepuff conjuró algo más sobre que volar, pero definitivamente no fue una escoba."
Angelina los miro agudamente. "¿Están seguros que será mejor?"
Fred se encogió de hombros. "O ha estado volando algo distinto toda su vida, o nunca había volado antes. De cualquier modo, creo que mejorará."
Silencio.
"Okay," Angelina dijo decisivamente. "Lo tomaremos. Hagamos el anuncio."
Harry se sentó junto a la ventana abierta hacia el aire de otoño, juntando ideas para su ensayo de Defensa. Era extrañamente similar a sus preparaciones para la Primera Prueba, pensó. Por supuesto, el año pasado no había escrito la lista de talentos que él y Hermione habían hecho. El año pasado, Ron no les había hablado, y ciertamente no hubiese estado haciendo su tarea con ellos como ahora.
El año pasado, Cedric no estaba muerto...
"Ron," la voz de Hermione lo sacó de el tren de ideas, "no puedes decir que eres casi el más joven de los Weasley."
"Pero lo soy."
"Pero no puedes ponerlo. La Profesora Genkai dijo "nada sobre su familia"."
Ron parecía perdido. Hermione se acercó un poco, mirando al pergamino. "Aquí... Te gustan los Chudley Cannons, ¿verdad?"
"Correcto."
"¿Pero por qué?" preguntó ella. "Siempre pierden."
"¡No te rindes por el equipo solo porque van perdiendo!" Ron soltó. "¡Mejorarán!"
"Muchas personas lo harían, Ron." Hermione se sentó. "Tú no. Eso muestra un rasgo de tu personalidad... muchos, de hecho. Solo escribe eso, y encuentra algo más que te guste."
Ron miró al pergamino de nuevo, y luego, lentamente, sus ojos brillaron. "Vencí a el juego de ajedrez de McGonagall."
"¡Eso es!" Hermione sonaba contenta.
Harry se mordió el labio inferior, recordando esa noche, y Quirell. Entonces, bajo ‘lanzar un excelente Accio', directamente escribió:
Elijo excelentes amigos.
Draco se deslizó silenciosamente a su cuarto, su usualmente arrogante caminata algo extraña. Era la única pista externa de que estaba escabulléndose y tratando de verse normal. Cerró la puerta tras de su y la cerró con llave por si acaso.
Minamino era un estudiante tan dedicado. Había terminado su ensayo de Defensa en la noche del Martes, como un buen niño, y planamente se negó a ayudar a nadie más. Draco lo sabía. Hizo a Crabbe intentar, pero Minamino se lo había quitado de encima con excusas. Una oferta de dinero había obtenido un críptico "conocerse a si mismo es una riqueza incomparable", y luego un "yo no puedo ayudarte" más frío cuando Crabbe había presionado el punto.
Obviamente, la oferta había sido muy baja. Minamino era extraño, un minuto aceptando un favor muy pequeño por su silencio, y al siguiente rechazando la carnada más tentadora que podrían ofrecerle por un maldito ensayo.
Así que Draco había observado, y esperado, y descubierto que Minamino estaba casi siempre afuera durante el día... y que su ensayo de Defensa estaba guardado bajo su colchón, cuidado por la Trampa del Diablo. Eso hubiese sido suficiente cuidado, si un hubiesen repasado los Encantamientos de Convocación en la clase de Flitwick. Draco movió si varita hacia la cama de Minamino.
"¡Accio ensayo de Defensa!"
El pergamino se salió de la cama, llegando a la mano de Draco con un sonido complaciente. Las lianas ocultas no hicieron más que temblar. Probablemente no tenían instrucciones sobre cosas que ya estaban en la cama de Minamino.... interesante. ¿Qué tan complejas podían llegar a ser las protecciones de Minamino?
No importaba. No habían sido lo bastante complejas para compensar el hechizo de Draco, y ahora tenía la tarea del otro chico. Draco sonrió socarronamente mientras metía un dedo en la orilla del pergamino - ni siquiera estaba sellado - y lo desenrolló.
"Por todos los... ¿Qué ES esto?" siseó él, mirando a las filas limpias de escritura completamente ilegible.
"Japonés, Señor Malfoy," una familiar voz le contestó.
Draco dio un respingo y giró, soltando el pergamino. Minamino estaba parado calmadamente en el centro del cuarto, tan tranquilo como si hubiese estado ahí todo el tiempo. Mientras Minamino silenciosamente se adelantaba a recoger su ensayo del piso, Draco soltó, "¡Pero cerré con llave!"
"Si lo hizo," Minamino respondió.
"¿Y cómo...?" No estaba viendo cosas. Los Malfoy no veían cosas. Excepto el Tátara-tío Cassius Malfoy, pero todos sabían que era el LeFey del lado de su madre.
Los ojos de Minamino brillaron. "Magia," respondió, casi en tono juguetón. Tenía el pergamino abierto una vez más. "Realmente no veo porque algunos de ustedes piensan que mí ensayo podría ayudar con los suyos."
"Nos mostraría lo que la profesora espera," Draco contestó fácilmente. Podía inventarse excusas tan buenas como las de Minamino. Así era.
"Mmhm," Minamino no parecía convencido. "Mira, si yo pensara que les ayudaría - y los sacaría a todos de mi cabello - estaría perfectamente feliz de vender mi ayuda. Lo haría bajo la mayoría de las circunstancias, de todos modos, y dejaría a todos colgando cuando el tiempo viniese para de hecho trabajar en su magia interna. En este momento, sin embargo, no hay muchos sospechosos si una Casa entera - o un año - falla espectacularmente la clase de Genkai."
¡Ah ha! ¡Minamino estaba asustado de la Profesora Genkai!
"Oh, por supuesto," dijo Draco, forzando la felicidad del descubrimiento ante el descubrimiento a aplacarse. "Yo... bien. Supongo que tendré que entregar lo que tengo. Hasta luego, Minamino."
"Hasta luego, Malfoy."
Draco se fue, deliberadamente no apresurándose con el conocimiento de el punto débil de Minamino en su posesión
Cuando Kurama ya no podía oír los pasos de Malfoy, regresó el pergamino a su lugar bajo su cama, aunque no era necesario esconderlo. Incluso si un alumno sabía el encantamiento para traducir lenguaje escrito, no había hecho la tarea. Ya sabía sobre su magia interna, después de todo, así que había escrito una leyenda kitsune que no muchos humanos conocían. Era, mayormente, una advertencia bajo un velo. Genkai simplemente no podía ser dejada a pensar que tenía más control a modo de autoridad sobre Kurama.
Una vez hecho eso, Kurama cruzó a la ventana. Una telaraña de lianas se salió de sus mangas, enredándose en sus manos. Lianas similares se colocaron sobre sus zapatos. Ahora vestido con los el equipo improvisado para agarrar la piedra, trepó fuera de la ventana y hacia arriba.
Una explosión despertó a Harry de su sueño. De nuevo. Logró no caer de la cama esta vez, pero definitivamente no podría dormir otra vez, mientras los silbidos peculiares de las Bombas de Humo para Interiores Weasley (disponibles en aromas de fuego, accidente de encantamientos, y tres variedades de pociones accidentales; garantizadas a volar el cabello de sus profesores) empezaban a sisear.
Después de un largo momento lleno de solo los sonidos de ropa moviéndose y los ronquidos de Kuwabara, Ron preguntó, "¿Resultó?"
"No, Señor Weasley," Genkai respondió. "Pero supongo que debo agradecer por despertar a Urameshi en mi lugar." Ella rió. "Los Elfos Domésticos estarán complacidos. No tuve que romper su cama esta vez."
Harry se presionó los lentes hacia la nariz, moviendo la cabeza alrededor de las cortinas. Genkai estaba parada en la puerta, calma y completamente intacta, su cabello normal como siempre. Urameshi era la fuente del sonido de movimiento; ya había acabado de cambiarse. Atrapó sus zapatos con una mano, poniéndose las calcetas con la otra.
"Oi, ¿qué haremos hoy, anciana?" preguntó mientras salía por la puerta. El movimiento atrajo la atención de Harry a la marca de ceniza delineando un perfecto circulo justo dentro del cuarto, alrededor de donde Genkai se había parado.
"Pensé que podríamos correr unas cuantas millas por el Bosque, y luego puedes nadar a..." La voz de Genkai se desvaneció mientras el par caminaba amigablemente por las escaleras y fuera de alcance del oído.
Harry continuó mirando el circulo. ¿Había el humo de la trampa siquiera logrado tocarla? "Ron..."
"¿Si?"
"¿Alguna idea para trampas silenciosas?"
Ron no contestó por un buen rato. "Talvez solo deberíamos atrancar la puerta la semana que viene."
**Continuará**
Notas de la autora:
"-No, Keiko no recuerda a Hiei secuestrándola en el episodio 8. No recordaba pequeños detalles como "el mundo sobrenatural existe" hasta que Botán llegó y le dijo que Yuusuke estaba en el Torneo... punto en el cual Keiko se desmayó.
-Oh, vamos. Sabían que iba a poner al menos a uno de los tantei en los juegos de Quidditch.
-Bombas de Humo para Interiores Weasley. ¡Sal de la clase gratis! (Y elimina esa mata grasosa que tu profesor llama cabello mientras lo haces. Garantizado a no causar daño a la gente, a menos que él te atrape, momento en el cual deberás de tener refuerzos para salir de detención. Prueba los Chicles de Fiebre Weasley)"