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La Mejor Defensa por Charmeine

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Notas del capitulo: Siguiente capìtulo. Lamento que tardara tanto.... Mozilla me complica un poco las cosas. Hiei se meterá en problemaaaaas 

Capítulo 29
(Yo Tengo) Control

    Nada, Harry pensó, mientras dejaba a su cuerpo correr por los ejercicios de aquella mañana de Viernes. Casi una semana completa había pasado desde que Kurama le había enviado ese mensaje a través de Hiei, desde que Hiei había soltado que Kurama estaba enfermo de complacer a los Slytherins que lo observaban, y... nada. El chico Slytherin aún se comportaba exactamente como antes.

   Harry lo HABÍA notado, ahora que prestaba atención. Kurama de algún modo siempre lograba estar hablando con Hiei, o Yuusuke, o Kuwabara - una sonrisa ligeramente entretenida en su rostro cuando les sacaba reacciones - antes de las Pociones y las comidas, y las extrañas ocasiones en las que se encontraba a los Gryffindors fuera de clases. El único estudiante no-Slytherin con quien tenía un contacto regular era Neville, de hecho... y era verdad, la escuela siempre parecía estar observándolo.

   Dolía.

   Ahora ESO es una subestimación de enormes proporciones, Potter, Harry se dijo secamente. El hecho de que estuviese siendo ignorado (¡evitado como la plaga!), traía un gran flujo de ‘dolor'es. Incluso cuando no lo había notado... no, tal vez especialmente porque no lo había notado.

   Resignación: no era como si ser evitado fuese algo nuevo. Dudley en la escuela Muggle, el problema del Heredero de Slytherin en segundo año, el año pasado casi nadie había creído que Harry no había hecho trampa para meterse al Torneo...

   Culpa por lo de Cedric: la asociación con Harry era potencialmente letal. Todo es mi culpa, y Kurama solo esta siendo sensible...

   Enojo por ello: podía ser sensible, pero hubiese sido sensible de parte de Ron y Hermione abandonarlo en el primer año, o en el segundo, o el tercero, y ¡ELLOS no lo hicieron! Kurama solo estaba siendo un pequeño y tramposo cobarde y... y... y no era un Gryffindor. Valor abierto no era su característica de definición - el Sombrero lo dijo.

   Ni siquiera había tenido las agallas de decirle a Harry que lo iba a evitar.

   Pero había enviado el mensaje.

   ...¿por qué?

   Hiei saltó a sus pies, y Harry lo siguió de inmediato, levantándose más lentamente al alejar sus ideas de su mente. Levantó su espada de madera al mismo tiempo que Hiei le echaba un ojo a la clase.

   "Hoy serán probados," anunció. Un coro de quejas lo siguió. Hiei los ignoró. "Voy a decir ‘bloqueo' o ‘ataque', y una serie de números. Tendrán que hacer el movimiento correcto."

   Una pausa, y un suspiro de alivio notable se expandió por toda la clase mientras se daban cuanta de que esas eran todas las instrucciones. Harry no pensaba que sonara tan mal; solo habían aprendido los primeros cuatro movimientos de cada tipo.

   "Armas arriba," Hiei ordenó, y Harry alzó su arma. "Comiencen. Bloqueo - Cuatro. Dos. Tres. Tres. Uno. Cuatro." Los números venían al paso que habían estado usando por semanas, y Harry rápidamente cayó ritmo familiar. ¡Esto era fácil! ¿Por qué era una prueba? "Ataque - Dos. Cuatro. Cuatro. Uno. Tres. Dos. Cuatro. Bloqueo - Dos. Tres. Ataque - Cuatro. Dos. Tres. Uno."

   Cinco minutos de estable y controladas cuantas después, Harry comenzaba a acostumbrarse. Esto no era tan fácil como sonaba. Tenías que concentrarte, pero la monotonía de Hiei era tan interesante como las pláticas del Profesor Binn, y estaba usando solo seis palabras. Seis...

   "Ataque - Uno."

   Aburrido...

   "Tres."

   Vacío...

   "Cuatro."

   Plano...

   "Ataque - Dos."

   Harry, y la mayoría de los estudiantes, batallaron, casi haciendo el bloqueo - dos. ¡Hey! No era justo -- ¡Hiei había dicho ataque dos veces!

   Harry aló su distraída mente a la rutina. No más quejas sobre lo aburrido que era. Hiei podía arrojar trucos en cualquier momento...

   "Bloqueo - Cuatro. Tres. Dos. Uno. Tres. Uno. Cuatro. Ataque - Cuatro. Cuatro. Cuatro. Cuatro. Uno. Tres. Dos. Uno. Bloqueo - Dos. Tres. Uno. Tres. Uno. Tres. Dos. Ataque - Dos. Uno. Tres. Cuatro. Dos. Tres. Uno. Bloqueo - Tres- Cuatro. Dos."

   Diez minutos más, y la frente de Harry estaba ligeramente cubierta de sudor. Harry trajo una mano a su cabeza, quitando el sudor y empujando los músculos ardientes. Si Hiei hacía esto regularmente, era lógico que usara esa banda en la cabeza todo el tiempo.

   Hiei cruzó los brazos, fulminando a la clase con la mirada. "Eso fue miserable," dijo fríamente. Harry dio un sonidito herido por la pena. "¿Qué han aprendido?"

   "¡Que pones pruebas difíciles!" uno de los Gryffindors mayores rió. Los ojos de Hiei voltearon hacia él, y tragó saliva antes de callarse.

   "Mal," Hiei dijo. "Intenten de nuevo."

   Una Ravenclaw alzó su mano, y Hiei asintió su cabeza a ella cortamente.

   "Que debemos prestar atención."

   Hiei casi sonríe. "No pueden permitirse estar distraídos," él clarificó. "Si entran a ese hábito durante el entrenamiento, perderán concentración durante una pelea." Una mirada fría pasó sobre ellos. "Eso conseguirá que los maten a ustedes y a sus aliados.

   "Rompan el hábito en las próximas semanas. Su siguiente prueba será más rápida." Se detuvo mientras más quejidos pasaron por el cuarto. "Hay tisana de corteza de sauce en la canasta junto a la puerta. Bébanla antes de la sesión de Kuwabara si tienen un dolor de cabeza." Una mirada final, y señaló a las estanterías. "Guarden las armas. Terminó la clase."

   Harry guardó su arma, tomó un frasquito de la canasta, y siguió a Hiei afuera; no estaba en la sesión de Kuwabara.

   "¿Cómo conseguiste que Snape le diera esto a la clase?" preguntó él, tomando un trago y tratando de no probar el líquido. Casi lo logra, e hizo una mueca ante el sabor seco, peludo y agrio que dejó en su boca.

   "No lo hizo," Hiei respondió planamente. Harry casi se ahoga. ¿¡Había Hiei robado en la oficina de Snape--!? "Se lo pedí a Kurama."

   Harry se congeló. "¿KURAMA?"

   "Sí." Hiei lo miró, ojos achicados con confusión. "Él cosecha la cosa, de todas maneras."

   Oh. Sí. Kurama hacía a las plantas crecer... y el sauce era libremente en los estantes de estudiantes, y el agua en cada baño. Harry estaba siendo un idiota. "Yo, um, supongo que me sorprendí," Harry tartamudeó. "Que lo hiciera. Hacer esto, me refiero. Con todo eso de ser observado."

   Hiei se encogió de hombros. "Si alguien pregunta, le pagué más de lo que vale."

   "Correcto."

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  "¡LONGBOTTOM!"

   El rugido de Snape hizo eco en las mazmorras, cargándose sobre el ruido en las orejas de Kurama. El caldero de Neville había explotado en Pociones. De nuevo. Kurama se quitó algo pegajoso y verde de la cara mientras Snape castigaba al desafortunado Gryffindor con furia creciente.

   La disposición ya desagradable del profesor de Pociones solo se había agriado - aunque fuese difícil de creer - en las dos semanas desde el partido de Quidditch. Los rumore decían que Snape estaba furioso por perder contra los Gryffindors con Potter Y tres Weasley en el equipo, pero Kurama estaba muy consciente de que era su culpa. Y ahora su estudiante sufría por ello, y Kurama no se atrevía a hacer una maldita cosa. Excepto pasarle uno de sus pañuelos extra a Hiei y esperar a que la tormenta pasara.

   Si fuese cualquiera distinto a Neville, Kurama pensó mientras Snape fulminaba con la mirada y regañaba y gritaba al Gryffindor, hubieran merecido esto. Pero él... ¡maldito Snape por ser un ciego, arrogante, idiota y diminuto humano! Kurama tenía control total de sus habilidades, pero Neville no. No podía. De hecho, tenía MENOS control ahora que Kurama había comenzado a ayudarle a desbloquear sus habilidades. ¿Cómo podía Snape no notarlo--?

   "-y como tus padres pudieron engendrar a un cabeza hueca incompetente como tú esta fuera de mi comprensión!" Snape terminó.

   Silencio cayó sobre el salón de clases.

   Shimatta...

   Los Slytherins detrás y junto a Kurama se inclinaron hacia delante, la anticipación ansiosa flotando de ellos en olas para chocar contra la sensación de ira en el lado Gryffindor del cuarto. Kurama esperó, sin expresión, mientras el aire comenzaba a llenarse de poder. El de Yuusuke, el de Neville, el de Kuwabara, el de todos excepto el de Hiei, Kurama, y Snape. Humanos no entrenados y ciegos de mente, ¿siquiera lo sienten? ¿Lo comprenden?

   El caldero junto al de Neville explotó.

   Los estudiantes chillaron y se ocultaron bajo sus escritorios de nuevo, sus poderes alejándose como una luz quebrada. Otro caldero en la fila explotó, y otro. Kurama lanzó su poder, sujetando cada célula de materia de planta en el salón para contrarrestar la pérdida de control de Neville.

   La voz de Snape era como hielo cuando habló de nuevo. "Cien puntos menos a Gryffindor." Una gota gorda de la poción arruinada cayó de la punta de su nariz con un sonido líquido. "Largo. De. Mi. Vista." Su mirada fue alrededor del mundo imparcialmente. "¡Ahora!"

   Neville salió corriendo.

   En el río de estudiantes agarrando bolsas y escapando en la huida de Neville, Kurama logró salir primero. Moho ya estaba creciendo de los muros en el corredor hacia la superficie; Kurama lo adormeció a su sueño de invierno mientras corría, más veloz de lo que un humano podría.

   Alcanzó a Neville a media escalera hacia arriba, y se alentó para tener la misma velocidad que el Gryffindor, quedándose medio paso atrás. No había necesidad de detener a Neville; Kurama podía dejar que el chico corriera hasta el cansancio primero.

   Corrieron por los corredores cambiantes y grandes cuartos góticos de Hogwarts, asustando retratos y estatuas del pasado - Kurama podía jurar que la mirada de una estatua los siguió al pasar.

   Cortamente, en una escalera que daba a una puerta al campo, Neville se tropezó. Kurama atrapó al chico y jaló, contrarrestando su peso y energía fácilmente, previniendo que se cayera de cabeza por las escaleras. Ojos sorprendidos giraron hacia él - Neville no se había dado cuenta de que Kurama estaba ahí.

   "¿Qué...?" Neville comenzó, mirando fijo mientras Kurama le ayudaba a ganar balance. Medio segundo pasó, músculos tensos y temblando bajo las manos calmantes de Kurama, y Neville agitó la cabeza y se alejó.

   Kurama lo soltó, doblando las manos frente a si mientras de daba cuenta de que Neville se había alejado por rabia... no horror. Rápidamente revisó su aproximación.

   "No es saludable suprimir eso," dijo él suavemente. "Ven. Llevemos esto afuera."

   Se volteó, evadiendo los ojos confusos de Neville, sabiendo que debía actuar rápido antes de que el chico retomara sus emociones y se tragara la furia. Pasos en las escaleras detrás de él le trajeron alivio - Neville lo estaba siguiendo, obedeciendo.

   Fuera, Kurama guió a Neville lejos de la escuela, a un área plana entre la torre y el Bosque. Ahí, se arrodilló, presionando una semilla a el piso congelado de otoño. "El nombre para esto se traduce como ‘frostgut'," comenzó, diligentemente llenando la planta de poder. Mientras crecía, lanzando hojas puntiagudas y blanco-azuladas, Kurama añadió, "Es una planta del Reikai, crece salvajemente en las regiones sub-árticas. La savia es útil en anticongelantes, y desaparece la hipotermia cuando se bebe. El néctar, sin embargo, induce fiebre, y es seguido utilizada por chamanes en adivinación de sueños." Se levantó, alejándose mientras el tallo principal pasaba la marca del metro en altura y producía retoños.

   Alzó los ojos para ver los de Neville. "Quítame el control, tómalo, hazlo florecer."

   "¿Qué?"

   "Pelea conmigo para controlar la planta, Neville. La mantendré en este punto; hazla florecer."

   Inciertamente, Neville tocó una hoja, y su poder alcanzó a la planta frostgut. Kurama gentilmente lo alejó. Neville frunció el ceño, e intentó de nuevo.

   Kurama frunció el ceño internamente. Neville ya estaba enterrando su furia bajo su sorpresa - eso no era bueno. El intento moriría aquí.

   "Piensa en Snape," Kurama dijo abruptamente. Los ojos de Neville se alejaron de las hojas para mirar a Kurama. "Recuerda cada insulto a través de los años, cada comentario de ardor, cada insinuación de ser mejor. Y todo eso NO tiene RAZÓN, Neville." La magia de Neville se congeló contra la de Kurama, dentro de la planta, y de pronto aumentó. "No necesitas esa clase. No perteneces a esa clase - no ha hecho nada sino atrasarte. ¿Para que necesitas TÚ Pociones? Puedes obtener los mismos resultados y más sin todas esas mezclas e idiotas que se creen superiores y burlas, solo colocando un poquito de magia en una semilla." El poder de Neville estaba verdaderamente peleando al de Kurama ahora, luchando para hacer a la planta florecer contra el agarre de Kurama. "Cinco años de Snape para NADA-" se contuvo de sisear mientras el poder de Neville rasgaba contra el suyo.

   No dolía, precisamente. No era lo suficientemente fuerte para hacerlo; casi en el nivel de caer de una acera, de regreso al tiempo en que tenía dos años y aún no se había acostumbrado a andar en zapatos humanos. Pero lo sorprendió. ¡Debería ser a duras penas un D, incluso cuando lo invadía la rabia! ¡Pero esto era a medio camino de llegar a C--¡ ¿A menos qué...?^Los ojos de Kurama se agrandaron. Él esta... ¡pero yo no iba a intentar enseñarle eso aún--!

   Neville cayó al suelo en sus manos y rodillas, jadeando.

   Kurama pasó alrededor del frostgut y se arrodilló junto a Neville. "Lo hiciste bien," dijo suavemente. Un bajo, amargo sonido flotó desde el rostro oculto del chico. "Lo hiciste," Kurama presionó.

   "No la hice florecer."

   "Nunca esperé que lo hicieras." Silencio fue la respuesta. "Lo que quería era que descargaras el enojo, antes de que se amargara. Lo que hiciste... no lo estaba esperando en este momento. Neville, tú USASTE tu ira - la hiciste trabajar PARA ti, en lugar de controlarte." Kurama se detuvo, dejando que eso se hundiera en su mente. "No sé si comprendes la magnitud de eso... es una lección que la mayoría de la gente nunca aprende."

   "Aún así no la hice florecer."

   Oh, por el amor de... "Neville, he estado entrenando con mi magia interna desde que antes de gatear." ¡Y eso fue unos miles de años atrás cuando yo era un cachorro! "Haz estado entrenando por dos meses enteros. No esperes milagros; lo hiciste mejor de lo que hubiese esperado de cualquiera."

   Silencio de nuevo, y Kurama se levantó. "Venga," dijo, jalando a Neville para que se levantara. "Te llevaré de regreso a la Torre de Gryffindor. Descansa por esta tarde, y comenzaremos con las monocot del Ningenkai la siguiente semana."

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   El sol se había puesto durante la cena, y el viento había llegado del lago. Los últimos días de Noviembre en Halloween eran malditamente fríos, llevando a todos a juntarse en sus salas comunes y la biblioteca cuando tenían la opción, y esta noche no era distinta.

   Harry había logrado rogar otro juego con Ron, y ahora observaba perezosamente mientras el pelirrojo jugaba contra Keiko. Era mejor que hacer - por Merlín que sí - su tarea.

   Las piezas de ajedrez de Ron estaban comenzando a asustar a Harry. No estaba enteramente seguro del porqué; tal vez era el pequeño delantal en la reina.

   ...¿Delantal? ¿Desde cuando usaba la reina de ajedrez de Ron un delantal?"

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   Nieve, Cayendo ligeramente, suave y gentil, invisible más allá de el cálido brillo de la luz que llegaba de las ventanas de Hogwarts. En la oscuridad nublada de una noche de invierno, uno pensaría que no había más al castillo por si mismo, excepto las pequeñas, suaves chispas.

   A menos que uno tuviese ojos de demonio para ver la capa de blanco espesándose en el piso, o que simplemente no se diera a vuelos de fantasía. Esperanza, sí. Ilusión, desilusión - posible. Imaginaciones deliberadas de el resto del mundo - y sus peligros, sus tesoros - no.

   Hiei hizo un sonido de despreció suave, y cerró la ventana firmemente. Casualmente tiró otro leño al fuego mientras cruzaba el cuarto, y tomó su asiento usual en la baja mesa frente al sillón, levantando una pierna para descansar su pie en la madera pulida.

   Las gemelas Patil, acostumbradas a su comportamiento, simplemente esperaron, lado-a-lado en el sillón.

   "Estado listo."

   Bajo sus ojos, sus poderes ardieron, cruzando desde sus pieles hasta sus manos, y se recolocaron. Para la visión humana normal, sus respiraciones se habían alentado a la mitad, y sus ojos parecieron vaciarse.

   "Bien," Hiei dijo. "Regresen." Esperó el segundo requerido para que sus miradas se enfocaran en él, y se empujó más lejos en la mesa y cruzó las piernas. Semanas antes, antes de siquiera comenzar a trabajar con las chicas, había dibujado sellos en las orillas. Las oportunidades de que atraparan un vistazo de Hiei en sus globos eran mínimas, mientras permaneciese completamente en la mesa.

   "Van a comenzar a tratar de controlar sus observaciones hoy," dijo él. "Tú-" apuntó a Padma "-la tienes fácil. Empezaremos con Dean Thomas. Concéntrate en su nombre e identidad, e intenta empujar ese conocimiento en tu globo."

   Su dedo se movió a Parvati. "Para ti es más difícil. Tú vas a cero en un tiempo específico, pero la visualización que trabaja mejor es diferente para todos. Algunas personas pueden trabajar con matemáticas - una fracción o porcentaje de el punto en que se concentran naturalmente, o un múltiplo del mismo - mientras que otras personas encuentran más fácil el pensar en términos de mirar a o oír algo a cierta distancia. Tu rango base - el punto del tiempo al que miras naturalmente - parece ser casi diez años al pasado. Quiero que intentes la mitad de eso: cinco años, también con Thomas."

   "Si señor," las chicas dijeron nerviosamente.

    "Estado listo. Comiencen." Cayeron en su estado de trance, y sus globos se formaron en el aire. Hiei miró, silencioso, mientras el de Padma cambiaba imágenes de un par de Gryffindors en el cuarto de arriba - un par de niños de primer año que habían logrado reclamar el sillón, la imagen concentrándose inciertamente en uno, luego el otro, mientras luchaban por posesión de una almohada - y una imagen de Dean, dibujando cerca de una ventana en el extremo del cuarto.

    La esfera de Parvati se mantuvo en blanco, brillando con nebuloso blanco.

    Un leño se rompió y cayó al fuego, lloviendo chispas arriba hacia la chimenea. El volar como una chispa... Tuvo que contener una sonrisa burlona. Tomar la escoba de Yuusuke y entrenar con las Bludgers... tal vez el humano le lanzaría un disparo del Reigun. No había tenido una cantidad decente de entrenamiento - una riña de práctica, o incluso peleas - desde que lo habían metido en esta visión. ¿Cómo se mantendría en forma si estaba atrapado... siendo niñera?

    La imagen parpadeó - cambiando de canal, en una traducción extraña metida en su arete. Dean, los de primer año, uno de tercer año tomando una almohada, Dean, un brillo lleno de estática, Dean... Padma comenzaba a sudar, cejas bajando, pero la imagen se mantuvo en el chico Thomas, aunque fallaba la visión y había estática como la vieja televisión de Kurama.

    La neblina en el globo de Parvati empezó a aclararse, mostrando a un pequeño niño de primer año, reconociblemente Dean. El Sombrero Seleccionador estaba en su cabeza.

    "Recuerden este sentimiento," Hiei dijo, voz entonada para no romper su concentración. "Lo que sea que estén haciendo para hacer esto funcionar, recuerden como se siente para la próxima vez. Ahora déjenlo ir."

    Dejaron estallar sus globos con suspiros idénticos de alivio. Hiei frunció el ceño ante la expresión exhausta en esos suspiros. "Vayan."

    "¡Si señor!" chillaron, saliendo corriendo.

    Hiei giró los ojos. Fácilmente intimidadas, débiles, lentas, humanas bebés... necesitaba una distracción. O algo.

    Definitivamente voy a tomar su escoba.

 **Continuará**

 Notas de la Autora:

"-Ya sabía yo que la gente preguntaría, así que... Porqué Snape No Acusó a Harry De El Robo. Debido a los movimientos de Snape, Dumbledore fácilmente puede localizar el tiempo del robo a "durante el juego". Por eso, por deducción lógica, las únicas personas que pudieron HABER robado eran los que no estuvieron en el juego el tiempo entero. (Claro, Kurama no operó con lógica, pero ellos no saben eso.) Por eso, Dumbledore ordenó a Snape mantener la investigación tan callada como fuese posible, lo que significa No Acusar a Harry y Dejarle Saber Lo Que Pasó. 

-De nuevo, Jo = sin pista sobre cualquier cosa atlética de cualquier tipo. 

-La prueba de Hiei es una concentración distinta que, oh, digamos, revisar el aire por la Snitch. Es por eso que le dio a Harry un dolor de cabeza. No puedo pensar en un ejemplo de cómo funciona que todos identifiquen.

-Tisana = una infusión, como las hiervas médicas, en forma de bebida (que no se confunda con tinte, que es una infusión de hiervas medicinales en alcohol). Piensen en té herbal. La corteza de sauce contiene aspirina natural, así que la tisana de corteza de sauce es solo una aspirina en un líquido en lugar de una píldora. 

-Shimatta: una maldición japonesa de media intensidad. La he visto traducida como todo desde "oh mierda" a "uh oh" a "oops".

-Monocot = una semilla con un lóbulo. Un ejemplo es el maíz; tiene una planta embrión y una fuente de alimento. Los otros tipos de plantas son dicots, que tienen semillas de dos lóbulos: una planta embrión y dos mitades de una fuente de alimento, como frijoles y maníes. Los dos tipos tienen algunas diferencias en las hojas y la estructura de las flores, y también en las semillas. No se preocupen mucho al respecto.

-No pregunten por el delantal. Ya sabrán."

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