Lluvia
Hay cosas que muy pocos saben de mi, como que me gusta el clima fro y que me encanta el chocolate. Por la primera razn ahora estoy viviendo en Inglaterra, mi padre falleci hace un par de aos y mi madre, tratando de compensar lo que no tuve de chico, me dio a escoger donde estudiar. Y mientras yo estudio en Oxford, ella es quien se hace cargo de la empresa. Por la segunda razn ahora me encuentro en uno de los caminos del campus, cubrindome con un grueso suter y una gabardina, y tomando cocoa caliente, mientras me refugio de la copiosa lluvia que poco a poco, va creando riachuelos en las calles. Me gusta el clima fro, pero la lluvia es punto y aparte. Estoy en una caseta de autobs esperando un taxi que llame hace menos de cinco minutos, me felicito internamente, muy buen da para que se me ocurriera llevar mi auto a revisin, pero no tiene caso lamentarse, seguro en un par de minutos mas llegara mi taxi.
Me compadezco de aquellos que van bajo la lluvia, aunque ya saben como cambia el clima, al primer atisbo de sol se les ocurre usar ropa ligera, hasta cierto punto provoca una gracia cruel ver a las chicas en falta o en camisa escotada, (por no decir que algunas traen ambas) huir despavoridas de la lluvia, no las comprendo, es agua, no acido.
Noto como alguien se acerca corriendo hacia donde yo me encuentro, noto su largo y empapado cabello, seguro otra chica que se confi del clima, aunque mas de cerca me doy cuenta que usa unos jeans y un suter algo grueso, que legos de ayudarle, como se encuentra empapado, seguro le traer un resfriado seguro.
-Hola, tambin te refugias de la lluvia?- que pregunta mas estupida- Esta helando, creo que ser mejor que me quite esto, lejos de ayudarme me provocara un resfriado- me da curiosidad lo que dijo, es exactamente lo que pens, por fin le presto atencin viendo como se encuentra atorada en el suter que por el agua no quiere salir
-Espera, te ayudo- le dije mientras jalaba del suter, por fin logre quitrselo
-gracias- me sonri de una manera que se me hizo familiar, espera, puse atencin en sus facciones, su boca pequea temblaba por el fri, sus labios estaban plidos al igual que su piel, su nariz levemente enrojecida, sus largas pestaas tenan atrapadas gotitas de agua y sus ojos violeta brillantes…espera, violeta? Ya haba visto unos ojos as no? Quiso dar otro vistazo pero la chica se volteo, dndole la espalda mientras intentaba, en vano, exprimir un poco el suter, observo su cuerpo, traa una camisa blanca completamente pegada a su espalda por la humedad, unos jeans ajustados a sus caderas, y su largo cabello semi trenzado. Se giro y noto algo, no era una mujer!!!!! La camisa se transparentaba completamente, marcando su pecho plano y dejando vislumbrar suavemente sus pezones, que se encontraban endurecidos por el fro. Se sonrojo levemente, por que demonios vea los pezones de un hombre!!!
-Soy Duo Maxwell, y tu…?- dijo tendindole la mano.
-Heero Yuy- correspondi al saludo, perdindose unos segundos en la mirada violeta tan familiar
-No nos habamos visto antes?- cuestiono despus de observarle unos segundos,- te me haces familiar-
-No lo creo- reprimi el impulso de decirle que a el le pasaba lo mismo, desde cuando senta tanta empata por alguien
-Estas esperando a alguien Heero?-
-Transporte-
-Estamos en las mismas jeje, tengo una moto, pero la deje estacionada del otro lado del campus, adems, no es muy segura cuando llueve tanto jeje- una corriente de aire paso, logrando que el cuerpo del trenzado se sacudiera violentamente- jeje, hace fro- el ojicobalto lo miro, intentaba darse calor y solo consegua pegar mas la delgada camisa a su cuerpo, marcando mas cada curva, cada pequeo botn, trago grueso.
-Ten- le dio lo que quedaba de su vaso de cocoa, mas o menos la mitad.
-Gracias- noto como empezaba a tomarla y se despojo de su gabardina, tendindosela al trenzado, que lo miro sin entender-pero t…
-no estoy mojado, y este suter es lo suficientemente calido- el ojivioleta le sonri y tirando el vaso vaco en el bote cercano, tomo la gabardina y se la coloco, aspirando el exquisito aroma de su dueo impregnado en ella. El taxi por fin llego y Heero le hizo una sea a Duo para que subiera, este obedeci sin chistar –Donde vives?-
-En la 5 y hamlinton, pero no te preocupes, puedo caminar, o esperare otro taxi-
-No, vivo mas lejos, primero vamos a tu casa, llvenos por favor a la 5 y hamlinton- dijo esto ultimo al taxista, y se recargo en el asiento, el camino era algo largo.
-Heero, gracias-murmuro el trenzado viendo por la ventana, viendo la lluvia caer, Heero tambin observaba la lluvia, por primera vez no le pareci tan mala.