Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Soul Yard: Shinigami Treasure por Fallen_Angel

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

No, no he muerto, ni estoy secuestrado, ni me ganaron en guilty gear (por lo que me quede dos meses encerrado en mi pieza entrenando), La razon de mi ausencia por estos lares fue la simple INCAPACIDAD de escribir NADA. Probablemente estuve el 80% del tiempo libre de estos dos meses y algo sentado frente al computador tratando de pensar en que escribir... las cosas sencillamente no venían... podria llamarse la venganza del bloqueo. Pero fuera de eso, ahora mismo (O mejor dicho el domingo) me sente frente al PC y las palabras comenzaron a fluir por si mismas... un alivio y alegria inmensos!

Lamento mucho estos dos meses y algo que pase sin actualizar nada, pero no es nada contra ustedes, me senti tan mal o peor que ustedes por no poder escribir, creanme...

Ultimo tema, no se si se dieron cuenta, pero parece que el sitio esta callendo en un vortice de autodestruccion por no poder pagar el dominio. La verdad es que yo amo este sitio y no se que haria sin el, por lo que no me queda mas que pedirle que todos los que puedan donen. En caso de que pase lo pero estyaba pensando en hacer un foro e invitar a varios autores... pero de momento solo espero que la pagina sobreviva...

 

Atte

Paulo Olavarria

Yoko caminaba junto a Setsuna, cuando para su sorpresa, su hermano apareció corriendo.

-¡Nee-San! -gritó Yasha, sobresaltado por tanto correr.

-¿Yasha? ¿Que haces aquí? ¿No estabas recuperándote? -preguntó Yoko.

-Yo... haaa haaa... solo estaba... haaa haaa... déjame recuperar el aire... -Yasha aspiró hondo y luego soltó el aire, tras hacer esto un par de veces, volvió a hablar con Yoko- Solo fue un desmayo, ya estoy bien... Setsuna-San, tus hombres dicen que el portal estará abierto para mañana, pero que solo podrán pasar doce personas...

-Gracias por informármelo Yasha-san -Dijo Setsuna, encendiendo su celular, así no tendrían que enviar a alguien la próxima vez que necesitaran ayuda.

-Doce personas... -Dijo Yoko en tono reflexivo- Somos solo cinco discípulos... Creo que eso significa que podremos llevar refuerzos...

-¿Y ustedes que están haciendo Nee-chan?

-Vamos a buscar a un compañero para que no ayude a rescatar a Kirie...

-¿Quieres venir con nosotras Yasha-kun? -le preguntó Setsuna.

-¡Claro!

-¡¿Ah?! -Yoko estaba indignada- ¿¡Quien diablos te dejó invitar a este enano irresponsable!? ¡Vete de aquí niño esto no es asunto tuyo!

Yasha puso cara de niño mimado y luego empezó a hablar para si mismo, pero lógicamente se dirigía a Yoko...

-Veamos... ¿A que vine yo aquí? ¡Ah si! Recuerdo algo sobre una herencia... ¡Que raro! ¿Que le habrá pasado a mi parte?

-¡Está bien! -Dijo Yoko, recordando su deuda- ¡Ven si quieres!

Yoko comenzó a caminar rápido para alejarse de su hermano, el cual hablaba con Setsuna y le preguntaba sobre la persona a la que iban a buscar. "Quien me manda a fumar una herencia..." Piensa Yoko "Apenas tenga dinero voy a pagarle a ese demonio para que deje de molestarme..."

Llegaron a una casa grande que tenía una inscripción en la entrada. Yoko comprobó la dirección y entró, pero un hombre americano alto, peinado hacia atrás y con unos lentes negros redondos las detuvo.

-No se puede entrar aquí...

-¿Se puede saber quien eres tú? -Le preguntó Yoko cruzando los brazos e hinchando el pecho para verse más grande (Como un animal |||¬¬).

-Mi nombre es Vaan y soy el cuidador de la casa de Heshin-San.

-¡Pues yo soy Kirisagi Yoko y soy compañera de Jiyuugo! -Luego lo agarró de la corbata y lo acercó a su rostro- ¡Y a menos que quieras problemas nos dejas pasar!

-P-Pero claro señorita Kirisagi... Discúlpeme... -Dijo el hombre, apartándose para que pasaran...

Una ves adentro de la casa, caminaron por un largo pasillo, Yasha estaba muy curioso y decidió preguntar sobre el sujeto.

-¿Quien es este Jiyuugo?

Setsuna lo miró extrañada.

-¿Yoko no te ha contado? - preguntó.

-Yoko solo me habla para darme excusas sobre mi parte de la herencia...

-Jiyuugo es uno de los cinco exorcistas que Heaven entrenó hace varios años... El era bastante especial, porque su cuerpo era una especie de imán de espíritus... por lo que más que buscar a Heaven por entrenamiento, lo buscaba por ayuda...

-No estamos para hablar... -dijo Yoko, interrumpiendo la conversación- Alguien está aquí...

Setsuna y Yasha la miraron incrédulos, cuando un hombre saltó al pasillo, rompiendo la puerta al estilo japonés... tenía en sus manos una lanza y no vaciló un segundo para blandirla hacia el rostro de Yoko.

Yoko alcanzó a reaccionar y en un movimiento digno de matrix evitó el golpe para luego lanzar un ataque supresor que su atacante no tuvo dificultad para evadir...

-¡¿Pero que Diablos?! -gritó Yasha, aún estupefacto.

-Ese es...

-Así es Setsuna... -confirmó Yoko.

El hombre tenía un Kimono azul y parecía saber lo que estaba haciendo con la lanza, pues la blandía como todo un maestro. Se apartó el cabello negro del rostro y adquirió una posición defensiva.

-¿Quienes son ustedes? -Preguntó.

-¡¿Que quienes somos?! -Le gritó Yoko- ¿¡Quien eres tú!?

-Creo que es Shirotaro... ¿O eres Shin?

-Shin... ¿Que hacen aquí?

Yoko no respondió la pregunta, solo levantó su mano hacia el sujeto y lanzó un rayo.

-¡Ugh! -Fue el único sonido que pudo hacer el individuo antes de caer al suelo...

-¡Porque hiciste eso Nee-san! -preguntó a gritos Yasha- ¡El sujeto ya no nos atacaba!

-Este tipo es un dolor de cabeza...

Para sorpresa de Yasha, el hombre despertó de inmediato. Pero no se levantó. Usando solo un brazo, emprendió la dificultosa tarea de darse vuelta y luego empezó a mover la mano en el aire, como tratando de llamar la atención de alguien.

-¿Hay alguien ahí? -Preguntó el hombre, pero con una voz distinta, bastante más indefensa e inofensiva que la que había mostrado hace un momento- Vienen unas visitas y necesito ayuda para moverme... ¿Vaan? ¿Eres tú?

Yoko se acercó al chico y le dio la mano. Lo ayudó a sentarse.

-¿Estás bien Jiyuugo?

-¿Eh? ¿Jiyuugo? ¿No era Shin?-preguntó Yasha.

-¿¡Yoko!? -gritó el chico, extendiendo la mano hacia Setsuna- ¡¿Eres tú Yoko?! ¡Así que tú eres mi visita!

-Estoy por aquí...

-Y quien es esta... -dijo Jiyuugo, tratando de reconocer desde el suelo a la persona que estaba tocando.

-Hola Jiyuugo-san... Soy yo, Setsuna...

-¡Suna-chan! -Dijo poniéndose rojo- ¡Estas bien! ¡Que alegría!

-¿Que le pasa? -preguntó Yasha.

Setsuna se acercó a él mientras Yoko llevaba a Jiyuugo a la habitación de la que había saltado.

-Jiyuugo siempre tuvo problemas con posesiones de fantasmas... actualmente tiene cuatro fantasmas habitando dentro de él. Cuando se exalta mucho, uno de ellos suele tomar control de él. El problema es que esos fantasmas le impiden vivir normalmente, pero a la vez lo mantienen vivo. Dos de ellos le impiden usar sus piernas, uno el brazo izquierdo y el otro los ojos... de modo que le resulta muy difícil arreglárselas solo.

Yoko depositó a Jiyuugo en una pequeña cama en el suelo.

-¿Hice algo malo? -le pregunta a Yoko.

-Nos recibió Shin...

-¡Lo siento mucho! Es que apenas sentí que alguien venía me emocioné mucho... ya van cuatro años sin visitas...

-Necesitamos pedirte un favor Jiyuugo-san... -le dice Setsuna.

-¿Que sería? ¡Me sentiré encantado en ayudarlas!

-Heaven acaba de raptar a una aprendiz mía -Dijo Yoko, directo al grano- Estoy reuniendo a los discípulos para ir y rescatarla... necesitamos tu ayuda para vencer a Heaven...

Jiyuugo calló...

-Yoko-san... tu sabes que yo le debo mucho al señor Heaven... gracias a él estoy vivo... el me dio este alberge, donde puedo mantenerme sin molestar a nadie... el mismo paga por todas mis necesidades... no puedo hacerle eso al señor Heaven...

Setsuna se le acercó a Jiyuugo y lo tomó de una mano. Causando el rubor de este.

-Jiyuugo-san... por favor... Esta pequeña significa mucho para Yoko. Entiendo tu deuda con Heaven, pero el ha hecho algo malo... y tenemos que enfrentarlo... Te lo pido de todo corazón...

Jiyuugo guardó silencio por un momento. Luego levantó la cabeza y con su brazo hábil tomó una cuerda que colgaba del techo y la jaló fuertemente, haciendo que retumbara un gong en toda la casa.

-¡Ahhh! -gritó Yoko, tapándose los oídos por el estruendo.

-¿Llamó usted? -preguntó Vaan entrando por la puerta.

-¡Vaan, tráeme mi silla de ruedas! -dijo Jiyuugo sonriendo- ¡Nos vamos de viaje!

El hombre obedeció y el rostro de Yoko se iluminó. Ayudó a Jiyuugo a pararse y lo llevó hasta la puerta de la casa, donde esperaba el americano con una silla de ruedas. Lo montaron en el vehiculo y emprendieron camino. Mientras lo llevaban a la casa de Yoko, esta se acercó a Setsuna para hablar con ella.

-Es algo cruel tu manera de darle ánimos... -le dijo Yoko- Sabes que no sientes nada por él... ¿Porque le das esperanzas?

Setsuna sonrió.

-Porque la esperanza es lo ultimo que se pierde...

-Como tu digas... ¡Oi Jiyuugo! -le gritó Yoko al chico para que Vaan se detuviera y dejara que el joven escuchara a Yoko- Nosotras vamos a ir a ver si Seth ya esta disponible... Tú adelántate y te veremos en mi casa.

-¡Si! ¡Nos vemos Yoko! ¡Nos vemos Suna-chan! -le gritó antes de que Vaan se lo llevara.

Yoko inspiró hondo...

-Muy bien... ¿Lista para ver a Seth otra ves? -le pregunta a Setsuna.

-¡Claro! ¡Ha pasado tanto tiempo! -responde alegre Setsuna.

-Me gustaría poder alegrarme de ver a ese sujeto...

Emprendieron camino a la casa de Toppler, esperando a que Seth ya hubiera llegado.

---------------------------------------------------------

-¿Chocolate o Dulce de Leche?

-Chocolate... -Responde Kirie- Red: ¿Naranjas o Limones?

-Naranjas... -Responde Red Fox- Crusher: ¿Botas o Zapatos?

-Botas... -Dice Crusher- Kirie: ¿Playa o Nieve?

-Nieve... -Dice Kirie- Red: ¿Lluvia o...

Shut s'il vous plaît (Cállense por favor)! ¡Ese estúpido jeu me tiene fatigué! -Les grita Walker- ¡Cuando van a llegar esos inútiles!

Kaseshimaru miró la hora.

-La verdad es que ya se están retrasando... -dice Kaseshimaru- Creo que lo mejor sería ir a buscarlos...

-¡No será necesario mi amor! -La voz interrumpió la discusión mientras su propietaria se movía a la velocidad del rayo en la antigua catedral.

Kirie volteó hacia donde se escuchó la voz femenina. Pero no vio a nadie.

-¿De donde salió ese ruido? -preguntó la pequeña.

-¡Golpe de amor de Kana! -grita la mujer, que aparece de la nada saltando hacia Kaseshimaru.

Kaseshimaru, muy rápido para la chica, solo se mueve un poco y deja que Kana pase de largo. Kana chocó con una pared, pero no sufrió mayor daño. La chica tenía el cabello corto de color rosa, y una mascara con marcas rojas que asimilaban una ""Y" cuyos brazos pasaban por los ojos, los únicos ojos que había visto hasta ahora que parecían humanos. Estaba vestida con unos pantalones estilo kunoichi y una larga capa a la espalda.

-¡Porque eres así conmigo! -le gritó enojada a Kaseshimaru- ¡Yo solo quiero un poco de cariño!

-No es contigo... -dijo Kaseshimaru, indiferente ante las declaraciones de Kana- Si cualquiera de los shinigamis hiciera eso, lo evitaría...

-¡Pero ellos son hombres!

-Es lo mismo...

-Tora-chan... eres un pervertido... jujuju... -le dijo en tono coqueto.

Kaseshimaru no vio bien esto, porque a los pocos segundos había tomado a Kana por el cuello y la amenazaba con una larga cuchilla salida de Dios-sabe-donde.

-Para mis subordinados... Soy Kaseshimaru... ¿Entendido?... Nada de Tora-chan...

-Ufffff... -dijo Kana, no parecía estar tomando en cuenta la amenaza de Kaseshimaru- Si, si... no lo volveré a hacer...

-Esta debe ser la millonésima vez que escucho eso... -le comentó Red a Kirie, haciendo que a esta se le escapara una pequeña risa.

Kaseshimaru se volteó a ver Red y este se encogió en su lugar.

-¡Kirie! ¡No te rías de Kaseshimaru! -le dice Red, en un desesperado intento por vivir.

-¿Que yo que?

-Sígueme el juego o estoy muerto... -le susurra a la chica.

Kirie vio el terror expresado por la mascara de Red y decidió seguirle el juego. Pero antes de que pudiera decir nada, Kana ya estaba arriba de ella observándola fijamente.

-¿Esta es la chica?

-¡Ahhh! -grita Kirie, sorprendida por la cercanía de la mujer.

-Oui -responde Walker- ¿Y donde esta Monsieur Rajhid?

-Ra-chan vendrá en un momento...

-¿Y Sopp? -pregunta Crusher.

Kana se mete la mano en la camisa y le arroja una mascara a los pies...

-Ya veo... -dijo Crusher recogiendo la mascara.

-¿Es todo lo que encontraron? -pregunta Phantom.

-No había nada más... excepto un pedazo de tela... pero no nos dijo nada...

Kirie notó como el ánimo entre los Shinigami tocaba tierra. Excepto por Walker, cuya mascara conservaba su ancha sonrisa, y parecía decirle a Red "Te lo dije"...

-------------------------------------------------

Yoko y Setsuna entraron a la casa de Toppler. A pesar de haber llamado un par de veces a la puerta, nadie abrió. Se asomaron sigilosamente por la puerta, pero no había nadie a la vista, ni se escuchaba ningún sonido.

-Que raro... ¿Donde estarán? -pregunta Yoko.

-No se... A lo mejor aun no llegan...

Yoko empezó a recorrer la casa y se encontró a Amanda en el jardín.

-¡Oye! ¡Amanda-chan! -le grita, acercándose a la terraza donde se encuentra la chica.

-¿Yoko-san? Llega un poco temprano...

-¿Aún no aparece Toppler? -pregunta.

-Lou aún no llega -dice la joven- Me estoy empezando a preocupar un poco...

-No se preocupe Amanda-san -le dice Setsuna, sentándose al lado de ella a tomar té- Toppler-san siempre a sido un hombre ejemplar...

"Un ejemplo de vejez..." pensó Yoko. Se iba a sentar juntó a las dos mujeres pero escuchó un estruendo proveniente de la entrada... un inconfundible estruendo...

-...And then he said: "Hey you fucking bastard! That´s my wife!" Hahahahaha!

-Funny as always master!

-You'll never change Seth...

Yoko se tapó el rostro con la mano... reconocía esa voz despreocupada y egocéntrica...

En la entrada del jardín aparecieron acompañando a Louise Toppler dos personas. Un hombre alto y rubio, con el cabello largo y tomado en una cola, un bastón en una mano, y de vestimenta elegante: Pantalones negros de vestir, camisa blanca, lentes negros, un sombrero púrpura de ala ancha, chaquetín negro, guantes blancos y una gabardina púrpura que hacía juego con el sombrero. Junto a el una chica de aparentemente 16 años, cabello rubio largo y enrulado, una boina roja sobre la cabeza, unos jeans azules y una chaqueta negra sobre una camisa roja.

-Miss Yoko! -gritó el hombre rubio al entrar al jardín- ¡Que bueno see you again!

-Hi everybody! -grita al mismo volumen una chica que entra con Seth.

-Ya volví cariño... -dice Toppler, el único a volumen normal.

-Seth... -dice Yoko -Veo que no has cambiado...

-¡Of course not! -le grita el hombre, sentándose al lado de ella y pasándole el brazo por la espalda- ¡Quise seguir siendo el mismo para que my japanese beauty me reconociera al volver a vernos!

-¡No soy tu Yapanizu Biuti! -le grita Yoko, tratando de pronunciar lo que el hombre dijo, sin saber que significaba- ¡Terminemos rápido con esto! ¡Necesito que me ayudes con...

-¡Miss Setsuna! -grita Seth, ignorando a Yoko- ¿How is mi hermosa asian puppie?

-Seth-san... -sonríe Setsuna- Que bueno verlo de nuevo...

-Let me present you mi aprendiz -dice el hombre, apuntando a la chica de cabellos rubios- ¡This is mi pequeña Mimi! ¡Mi orgullo! ¡The best aprentice que he tenido!

-¡Hi! ¿C-como se en-encuentra usted Miss Setsuna? -saluda con dificultad la chica.

-¿Le cuesta hablar japonés? -le pregunta Setsuna a Seth.

-Yeah... a little... -le responde este, y luego le dice a Mimi- This two girls over here had a crush on me some years ago, but I had to dump them... I nedded my space...

-I see! -Grita la chica, con el rostro iluminado- You are so selective master!

-¿Que dijo? -le pregunta Yoko a Setsuna, a Toppler y a Amanda, esperando que cualquiera de los tres le respondiera.

-Nada... -responden los tres, pensando en lo que le haría al sujeto si se entera de lo que dijo...

-So, Yoko... - le dice Seth- ¿Para que me quieres? Además de contemplarme, of course...

Yoko, tragándose su ira, le cuenta sobre el secuestro de Kirie y su plan para recuperarla.

-Mhhh I see... -dice el hombre al terminar la historia- Y que gano yo with this?

-¿¡Eh!? ¿¡Como que "Que gano yo con esto"!? -le grita Yoko- ¡Te estoy pidiendo un favor maldito!

-I still deseo ganar algo... -Seth se inclina sobre Yoko y le dice seductoramente- Podríamos llegar a un trato... Could we, my darling?

-¡Bastardo! -Yoko le propina un puntapié en la ingle al inglés, causando que este se retuerza en el suelo, para luego saltarle encima y empezar a estrangularlo- ¡Te estoy pidiendo un favor y tu vienes con tus perversiones! ¡Te voy a enseñar lo que es la generosidad!

-¡God help me! ¡Holy Shit! ¡Anybody!

Setsuna y Toppler saltaron sobre Yoko y forcejeando la alejaron del inglés que estaba temblando en el suelo.

-¡Ok! ¡I'll help! -le grita Seth- ¡Just don't kill me!

Yoko, respirando hondo, se calma lo suficiente como para darle las gracias. Luego se sienta, toma la tetera con té que esta en la mesilla de la terraza y se la bebe toda de una.

-Solo falta una... -dice, tratando de calmarse.

-----------------------------------------------------------

Heaven estaba desesperándose, no podía creer que le hubiera tomado tanto enseñarles a esos niños... llevaban ya un año juntos y ninguno de ellos podía siquiera acercarse a las capacidades de un Shinigami... Necesitaba apresurarse.

-¡Vamos Setsuna! -grita Yoko afuera de la habitación de Heaven- ¡Si no te apresuras te quedaras sola!

Heaven se asomó por la ventana. Afuera, Yoko jugaba con Setsuna y Selene, Seth las observaba a todas con su walkman encendido. Yoko se había adaptado a la perfección al grupo después de un tiempo. piensa. Se dirige nuevamente a su escritorio a continuar escribiendo las lecciones del día siguiente. Cuando nota algo. Le faltaba un chico. Se paró para ir a buscar al joven Jiyuugo.

No tuvo que moverse mucho, porque lo encontró sentado en su habitación. Estaba sentado en su silla de ruedas, como siempre, pero se veía más preocupado que de costumbre. Heaven entró en la habitación y le tocó el hombro.

-¡Ah! -Jiyuugo se volteó rápidamente, asustado por el repentino gesto- ¡Señor Heaven! Me asustó...

-¿Pasa algo Jiyuugo? -le preguntó Heaven, preocupado por la falta de alegría en el chico, que a pesar de su condición solía sonreír mucho.

-No señor, nada...

-¿Porque no estas afuera con los demás?

-No es nada, señor, de verdad...

Jiyuugo usó sus manos para mover su silla de ruedas hasta un velador, del cual tomó un libro y comenzó a leer.

-¿Que lees? -preguntó Heaven, evitando irse- Se ve viejo...

-¡Si! -le dice el joven- Es un libro sobre espíritus... pensé que quizás me ayude a liberar mis piernas...

La habitación del chico era una biblioteca, estaba llena de volúmenes de toda clase y de todo tema, desparramados sobre el piso, encima de la cama, formaban pilas que alcanzaban el techo.

-Te gusta mucho leer... -le dijo Heaven- ¿Que harías si perdieras la vista?

Jiyuugo se quedó quieto.

-La... ¿La vista, señor?

-Si...

-Yo... yo creo que moriría... señor...

Heaven lo observó largamente, esperando que hiciera un movimiento, pero no pasó nada.

-No digas eso -dijo Heaven finalmente- Tienes que buscar algo que te mantenga unido a este mundo, algo más allá de tus libros. Nunca disfrutaras de una vida plena unido a esos manuscritos tuyos...

Jiyuugo siguió callado, pero se movilizó hasta la ventana, observó al patio y vio a los demás jugando.

-Creo que si tengo algo, señor...

Heaven lo observó y sonrió para si mismo.

-Me alegro...

Fin del capitulo 5
Notas finales:

No se si notaron que este capitulo es enorme, mas grande que el 3 y supera en tamaño en Kb y palabras con Aulladores, el capitulo 4 de UnderLove y el mas grande hasta ahora... espero que les haya gustado , pronto actualizare los demas fics...

Atte

Paulo Olavarria

 

PD: (Sorry denuevo por la demora)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).