Esa persona era nada mas ni nada menos que Kiba. Que observaba la escena de preguntaba: "¿Shino tendrá novia? o mejor dicho... ¿ella era su novia?, no parecía... ¿o si?”.
Cuando volvió a su casa, no pobró bocado y ni siquiera había podido dormir…pero sobre todo no dejaba de preguntarse: quién diablos era esa chica.
A la mañana siguiente el equipo de Kurenai estaba entrenando en el mismo lugar de ayer. Todavía, Shino y Kiba no se dirigían la palabra cosa que extrañó a la sensei y a Hinata…ellos eran muy buenos amigos, ¿por qué de un día para el otro un se hablaban más?, ¿Qué había pasado entre ellos?
Unos minutos después, entre los árboles apareció una chica pelirroja con dos coletas y una enorme sonrisa en el rostro.
-¡¡Shino!!!-grito la chica acercándose a donde estaba el chico, Kurenai—sensei, Hinata y Kiba.
-¡Akemi! ¡No grites!-se quejó el Aburame ya que la chica estaba al lado suyo y no hacía falta gritar.
- ¡lo siento!-grito nuevamente apropósito. Revolviendo de nuevo el pelo de su primo.
Kiba reconoció a la chica al instante, la había visto ayer.
-¿quien eres?-dijo cortantemente Kiba.
-¡que te importa! –dijo con un poco de enojo ante el tono del chico. Kurenai notó la mirada de Kiba hacia la chica, y para calmar un poco las cosas preguntó amigablemente:
-perdona a Kiba, pero... ¿quien eres?-
-Yo soy la prima de Shino.-la chica volvió a poner la sonrisa que tenía hace unos instantes.
Kiba se quedó sorprendido y molesto con sigo mismo…tanta preocupación para nada, solo era la prima.
-Ho...hola.-dijo hablando por primera vez ante la chica Hinata.
-¡hola! , Ey ahora que lo recuerdo... ¡Shino me hablo de ustedes! ¡Vos debés ser Hinata! un gusto.-dijo estrechando la mano con la de Hinata, como si fueran amigas de toda la vida.
-No quiero sonar mal, pero debemos seguir con el entrenamiento.-recalcó Kurenai.
-ah, claro...lo siento.-dijo poniendo su brazo detrás de su nuca. "se parece bastante a Naruto-kun" pensó Hinata.
La chica se fue a sentar a la sombra de un árbol, más o menos a diez metros de ellos, mientras hablaba con una vaquita de san Antonio.
Justo en ese momento los que estaban practicando eran Hinata y Kiba. Kurenai y Shino descansaban un poco. La sensei aprovechó ese momento para hablar con Shino acerca de Kiba.
-No se parece a nadie de tu clan…
-si, tienes razón…pero te puedo asegurar que es una muy buena persona.-le contestó Shino.
-Shino, quisiera preguntarte algo…- Shino respiró profundo sabiendo la pregunta de Kurenai—sensei.
- ¿qué co…?- Pero fue interrumpido por Kiba que, gracias a sus espectacular oído, pudo saber de que hablaban y decidió interrumpir. No era porque no le tuviera confianza a Kurenai, pero…por ahora, no quería que nadie se enterase.
-Oigan, ya terminamos, ¿hay que hacer algo más?-Kiba.
-No, nada más…pueden irse.- Kurenai.
Shino se acercó a Akemi y le dijo:
-Vámonos Akemi.-
-¡pero yo quiero conocer a tus amigos! -haciendo cara de perro degollado.
- Está bien.-en realidad quería llegar a su casa lo más pronto posible, todavía no se había recuperado de ese horrible dolor de cabeza. Pero no se podía negar a nada que dijera su prima, aparte de quererla mucho…era la única que tenía.
-vamos al ichiruka… ¿quieren venir?-dirigiéndole la palabra a todos los presentes.
-hai.-contestaron Hinata y Kiba, menos Kurenai que contestó:
-lo siento…Pero tengo una cita con azuma- sonrojándose. El equipo ocho le dirigió una mirada cómplice, a la vez que se alegraban, sabían muy bien que Kurenai había esperado esa cita durante años y nunca había tenido la oportunidad. La dejaron irse tranquila mientras se dirigían al puesto de Ichikaru.
Cuando llegaron al puesto de ramen pidieron un plató cada uno.
Akemi estaba la izquierda de Shino y a la derecha de Kiba. Mientras que Hinata estaba al lado de Kiba. La que se veía más hambrienta era la pelirroja que devoraba como si no hubiera comido en años.
-te… ¿te gusta el ramen?- le preguntó la ojiblanca a la pecosa.
-¡claro! Me encanta, como ramen día y noche.-sonrió de oreja a oreja. “definitivamente se parece a Naruto-kun” pensó Hinata hacia sus adentros.
-Yo, lo siento, no era mi intención ser grosero.-se disculpó Kiba.
-¡No importa!-Akemi comió un poco más y siguió hablando pero con mas interés:- ¿debes ser Kiba…no?
-si, ¿por?
- ¡ah!, con que éste es Kiba… ¿no Shino?-y le dedico una sonrisa picara a su primo- a que no sabes que cosas me dijo él…-Akemi no pudo terminar la frase porque su el Aburame le había tapado al boca.
-Yo: nada- dijo éste indiferentemente.
-¡Ey Shino! Déjala que termine…-se enojó el Inuzuka pero con curiosidad, ¿qué le había dicho Shino a Akemi?
-Bueno, en síntesis…-safándose de las “garras” se su primo.- Según lo que me contó eres una persona muy agradable, aunque a veces le haces perder la paciencia.- Aunque lo de “perder la paciencia” no le había caído bien, lo demás era como si se hubiera sacado la lotería…estaba sumamente feliz. Eso solo significaba una cosa: Shino había hablado bien de él.
-¡Otraaa!-dijo la chica al señor que vendía ramen.
-te pareces demasiado a naruto.-agregó Kiba, ya que la chica estaba por el décimo plato de ramen.
-¿hablaban de mi?- dijo un rubio de ojos azules mientras se asomaba.
-¿quien eres?-pregunto la amante de ramen.
-mi nombre es Naruto Uzumaki, ¡y voy a ser el próximo hokage, de veras!-a Kiba y a Shino les cayó una gotita en la cabeza mientras que Akemi miraba con su típica sonrisa a el “próximo” hokage, asegurándose de que ese chico le iba a agradar. La única que no pensaba nada era Hinata, que miraba sonrojada a naruto, por la sencilla razón de que él se había sentado junto a ella.
-oye… ¿quién es ella dattebayo? – Preguntó Naruto abriendo los ojos en forma de curiosidad.
-Soy Akemi, un gusto.-respondió ésta.
- físicamente…te pareces a Shino.-Naruto alzó una ceja, y volvió a preguntar.- ¿es tu hermana Shino?
-Naruto, como amigo…debes conocerme, ¿no es así? Pero diciendo que es mi hermana…solo significa una cosa: que no me conoces.- dijo Shino, mientras que a todos los presentes les salió una gotita en la cabeza (incluidas: Hinata y Akemi).
-¡ay primo! No seas así…cualquiera se puede equivocar, ¿o no chicos?-
-cla…claro, Shi…Shino-Ku…kun.-contestó Hinata con una sonrisa.
-ah, son ¡primos!, pero…no parece dattebayo. Ella está sonriendo mucho, ¿los del clan Aburame sonríen?- dijo Naruto con la boca llena de ramen.
-¡claro baka! ¡Toda persona puede sonreír! –defendió Kiba mientras golpeaba a Naruto.
- Oye, ¿no te duele que te lastimen?- preguntó Akemi.
-no…ya me acostumbré con Sakura-chan.- decía el rubio mientras se acariciaba la parte donde había recibido el golpe.- Kiba…-empezó a llamar le rubio.
-¿qué pasa?
- es que durante estros días has estado defendiendo mucho a Shino, dattebayo…incluso lo miras con ojos de chica enamorada.- Kiba empezó a ponerse de un color rojo intenso que no pasó desapercibido por Akemi y Shino. “matar a Naruto, matar a Naruto” era lo único que se le ocurría pensar a Kiba en esos momentos.
-pe… ¡pero que dices! ¿Estás loco o qué? A…aparte ami, m…me gustan las chicas.-la voz le temblaba al pobre del Inuzuka.
-Bueno, ¡era una broma dattebayo! ¿O te la creíste?-dijo con más ramen en la boca y con mas serenidad que se costumbre.
Akemi empezó a toser para ayudar un poco al chico-perro. Se podría decir que ella tenía un don: saber de quién gustaban las personas. Talvez era un don, tal vez ella era my inteligente y se daba cuenta, las miradas, las palabras…todo eso se tenía en cuenta para saber de que persona gustaba otra.Y así lo descubrió con Kiba, “pe… ¡pero que dices! ¿Estás loco o qué? A…aparte ami, m…me gustan las chicas” Kiba estaba nervioso y rojo como un tomate. Era demasiado obvia la respuesta…estaba enamorado de Shino Aburame, su primo.
-¿Estás bien?-preguntó Naruto al ver como la chica tosía.
-s…si, gracias. Hem, ¿quién es esa tal…Sakura?
- Es una chica que tienen el pelo rosa, es muy bonita, me pega todo el tiempo y…¡allí esta!