Era una tarde del 20 noviembre, algo fria, pero algo estaba seguro, en esa tarde gris en un segundo todo cambiaria de color, durante la caminata hacia la parada del autobus Milo veia lo lindo que se veia, en verdad era un cuadro enternecedor.
¿Un angel de hielo?Si...eso parecia, con una forma de ser impactante, frivola con los demas, pero en todo caso era una persona completamente diferente si la conocias a fondo, lo cual queria hacer el escorpion.
-¿Cual es el motivo por el que viniste tan arreglado?-pregunto el mayor mientras se dirigian a la parada de autobus.
-¿y tu por que tambien?
-pues yo...¡Oye yo pregunte primero!
- y yo exijo una respuesta a mi pregunta, asi yo podria saber si coinciden nuestras respuestas
-eres un maldito enserio...
Llego el autobus, habia solo un asiento y Milo se lo cedio, parandose enfrente del menor, tomandose fuertemente del tubo, Camus lo miraba de reojo, en verdad que no podia evitar verlo y sonrojarse.
-¡Tu si eres un buen caballero!-decia una anciana que estaba sentada al lado de Camus-Le das el asiento a tu novia.
"Novia" en verdad era gracioso de vez en cuando, siempre confundian al aguador con una mujer, a decir verdad el era casi o mucho mas hermoso que una mujer autentica.
-Je, lo hago por que no quiero que le pase algo malo, me muero si pasa eso.
Definitivamente el mayor queria que Camus perdiera la cabeza, ya estaba muy sonrojado desde el comienzo de la cita, y ahora venia con eso. Para suerte del pequeño el camino fue muy corto, bajaron rapido y entraron al cine, no habia muchas peliculas por cuales optar, habia una que se veia muy interesante, el unico problema era que al aguador no le gustaban mucho las peliculas de terror, Milo se percato de eso y le dijo
-Si te da miedo alguna escena, puedes tomarme la mano...o incluso podria dejarte que me abraces, si tu quieres claro esta.*acepta porfavor*
-em...gracias Milo
Entraron a la gigantesca sala, no habia nadie, era ya tiempo de que mucha gente hubiese visto la pelicula, las luces se apagaron, estaban solos, y nada podia poner aun mas nervioso al menor que el brazo de Milo rodeandole los hombros.
-¿Te molesta que haga eso?
-N...N..no para nada*en cambio si tu lo deseas abrazame completo*- decia un enormemente ruborizado Camus, quien tomaba de su refresco.
La pelicula avanzaba lentamente, y en verdad que las escenas por mas de grotescas daban un enorme pavor, no solo al menor, sino al bicho que estaba a su lado, ya que el pequeño podia sentir como apretaba su hombro, no podia esperarse que Milo retirara el brazero/olvide como se llaman/ donde se coloca el vaso para poder abrazar al menor, quien se moria de miedo, verguenza, nervios y felicidad.
Pero como toda pelicula tiene sus momentos tranquilos, donde la adrenalina de los espectadores esta al 1000% asi estaba Milo, observando como su cita, bebia el refresco, celoso por el contacto de los labios de Camus y la pajilla.Sin darse cuenta, tomo a su pequeño de la barbilla y alzo su rostro para verlo de cerca.
-Camus...me gustas- el mayor se hacercaba a los timidos y rosados labios del dueño de su corazon, los rozo muy debilmente y el pequeño se hizo para atras.
-no es que no me gustes...en cambio...yo...-
Mal momento para declararse, en ese instante salio la horrible cara de un muerto en toda la pantalla, asusntando por mas a Milo y Camus, haciendolos que se abrazaran.En verdad para el escorpion tener al aguador en sus brazos era la sensacion mas hermosa que pudo haber sentido en toda su vida, olvido todo, pero al mismo tiempo penso en lo que hubiera pasado y otras pesonas estuvieran ahi, observabdolos, los gritos discriminantes que hubieran dado, los mas conocidos como "malditos homosexuales salgan de aqui" o "pedofilo".
Termino la pelicula, y fueron a comer algo, se sentaron en las bancas de un parque que se encontraba cerca de ahi, hablaron y hablaron hasta que oscurecio un poco, rapidamente Camus recordo que solo tenia hasta las 6 para llegar a casa, o un enorme castigo le esperaria.
-se me va a hacer algo tarde, deberiamos irnos ya
-no te preocupes, yo lo puedo solucionar, puedo hablar con tu hermano diciendole que el auto fallo durante un tiempo.
-en verdad me has sacado de una muy grande.
-por cierto...me tienes que decir algo
-¿que?
-Camus Balaquer, yo Milo Andreatos quiero pedirte...*¡¡maldicion es tan dificil!!*
-¿si?*ojala y sea lo que estoy pensando*
-si tu....¿quisieras ser mi pareja?-dijo el escorpion con nerviosismo, una gota de sudor frio rodo por su sien.
-¿tengo razones para decirte que no?
-claro que no...
-entonces es un si...
Milo se alegro y sonrio como jamas lo habia hecho, abrazo al pequeño esperando ser correspondido y asi fue, pero con el poco tiempo de ese abrazo, el mayor fue queriendo mas y mas, tomo delicadamente el rostro de su ahora "pareja" y le deposito un beso en esos labios delgados, esperando una respuesta que nunca llego.Cuando se separo un poco del rostro de su pequeño, solo vio la sorpresa que no lo habia dejado corresponder.
-si sigues haciendo eso, voy a creer que en verdad no lo deseabas-decia el escorpion mientras acariciaba las mejillas de Camus.
-no es eso...alguien pudo haberte visto...
-tienes razon, deberia tener mas cuidado cuando te beso..
-si yo¿Milo que mhfp...-el aguador fue interrumpido por otro beso, con el cual recibio todo el peso de su captor encima, recostandolo sobre la banca.
-lo siento...pero no habia nadie..ju ju ju
-tonto...no me asustes de ese modo-
Como se ponia mas oscuro aun, decidieron regresar, Milo le explico a Dohko el supuesto percanse que tuvieron, y que el se habia ofrecido para encaminar a Camus en su casa.Se despidieron con una mirada llena de ternura, y con un pequeño mensaje en ella
"prometeme que no te voy a extrañar"
continuara