CAPITULO 10
Draco salió del salón con paso apresurado, el fresco de la noche le golpeó el rostro acalorado haciéndolo sentir un poco de frío, pero en vez de dirigirse a su casa, se fue directo a la torre de astronomía; ya ahí cerró la puerta y recargó su espalda en ella con la cabeza inclinada, permaneció así un rato hasta que finalmente caminó despacio hasta la terraza, miró el cielo oscurecido tachonado de estrellas, y dejando escapar un profundo suspiro cubrió su rostro con sus manos mientras pensaba:
-Por Merlín... ¿Qué es lo que acabo de hacer?... -luego caminó hasta la pared y se sentó en el suelo con cuidado- mil rayos me partan... me duele el culo y la cadera otra vez... -luego recargó su cabeza en la pared mirando el cielo nuevamente e intentando mantener la mente en blanco; tal era la cantidad de pensamientos que se agolpaban que sentía que si les daba cabida harían estallar su cabeza.
Lejos de ahí, en cierto salón en desuso, Harry despertaba sintiendo dolor en el cuerpo por lo duro del suelo.
-Mmm... -gimió con los ojos cerrados mientras que con un brazo tanteaba el suelo- ¿eh?...-finalmente abrió los ojos al no sentir nada- Rayos... -exclamó por lo bajo al ver que Malfoy ya no estaba, así que se levantó y se vistió, y al recoger su túnica, se dio cuenta de que otra, de una talla más pequeña y con el escudo de la casa de la serpiente estaba junto a la suya; la tomó y luego de sacudirle el polvo, la acercó a su nariz para aspirar el suave y fresco aroma que despedía mientras pensaba:
-Si alguien me hubiera dicho que yo haría esto, le hubiera dicho que Voldemort le fundió el cerebro. - y sin más, salió del salón y se dirigió a su casa.
Mientras, en la torre de astronomía, Malfoy seguía en la misma posición obligándose finalmente a pensar.
-De acuerdo.... -se dijo- tuve... tuve sexo con... Potter... -esto último lo dijo cerrando los ojos y frunciendo el ceño- ¿y ahora qué?... digo que lo mataré en cuanto lo vea, sin embargo, la cara me arde de vergüenza en cuanto lo tengo en frente y solo quiero salir corriendo... -Malfoy era un chico acostumbrado a tener el control de la situación y los acontecimientos recientes le hacían sentirse perdido y desubicado- si mi padre se enterara... -pensó exhalando un profundo suspiro- primero me arranca la cabeza y luego iría por el pellejo de Potter, pero sobre todo se sentiría tan... tan decepcionado de mi. -y tomando una decisión, comenzó a peinar con los dedos su revuelta cabellera- lo que pasó en los vestidores y en el salón, no debe volver a pasar... un Malfoy... no puede ni debe revolcarse con un traidor a la sangre... así que ese mugroso Griffindor no volverá a sorprenderme. -y caminando con paso firme, se dirigió a su casa.
Al día siguiente, Harry bajó tarde a desayunar, aunque se sentía contento por el simple hecho de haber estado con aquella persona que le gustaba tanto, se sentía un tanto desanimado por la actitud esquiva del rubio Slytherin.
-Cuando dije que me gustaban los retos... -pensó mientras entraba al comedor- no era para recibir una patada en los bajos... pero bueno, me gusta que se haga el difícil... aunque no tanto. -pensó al ver a Malfoy terminando de desayunar y lanzándole una mirada asesina antes de levantar la cara y mirar hacia otro lado.
Entonces Malfoy se levantó seguido por Parkinson, quien le comentó algo que lo hizo reír; Harry lo observaba mientras se llevaba a la boca una tostada con mermelada, en eso, una chica de cabello negro se interpuso en su visión al sentársele enfrente.
-Hola Harry.
-Hola Cho... -respondió Harry empezando a sentir aversión por la inoportuna chica.
-Te estuve esperando ayer y no llegaste.
-¿Ayer?... -repitió Harry arrugando el ceño- ¿y porque?
-¿Cómo que porque, Harry? -exclamó Cho extrañada- pues... porque quedamos de vernos después de la cena.
-¿nosotros?
-eee... si Harry, ¿no te acuerdas? -dijo Cho verdaderamente sorprendida.
-mmm... la verdad no... ¿a qué hora fue?
Cho lo miró con la boca abierta, e iba a responder cuando Ron y Hermione llegaron en ese momento.
-¡Harry!.. ¿Dónde te metiste anoche? -preguntó Ron- no bajaste a cenar, creí que te encontraría en la sala y como tardaste mucho mejor me fui a dormir, ¿Dónde andabas?
Harry no respondió, solo dio otra mordida a su tostada mientras fulminaba a Ron con la mirada, entonces, Hermione, viendo la expresión de Cho y sintiendo cierta tensión en el ambiente, se apresuró a intervenir.
-Puedes contarnos después Harry... ¿vamos a la biblioteca?... quiero enseñarte algo.
-¿A la biblioteca?... -exclamó Ron con desgano- ¿en Domingo, Hermione?
-Si, en domingo. -repitió ella jalándolo del brazo.
-De acuerdo. -dijo Harry tomando otra tostada y poniéndose de pie- nos vemos luego, Cho.
-Si... nos vemos luego, Harry. -respondió Cho.
Ya en el corredor, Ron dijo de mala gana.
-¿Qué vamos ha hacer en la biblioteca en un día tan bonito como hoy?
-¿Dónde te metiste anoche, Harry? -preguntó Hermione a Harry ignorando a Ron.
-¡Ah!... -dijo Ron comprendiendo al fin- entonces no vamos a ir a la biblioteca, ¿verdad?
-No, no vamos a ir, -respondió Hermione con exasperación- pero Harry, ¿Qué pasó allá?... Cho tenía una cara que, bueno...
-Pues... dice que quedé de verme con ella anoche, después de la cena. -dijo Harry dando cuenta de su tostada.
-¿Y así fue?
-Claro que... espera... -dijo Harry deteniéndose de pronto- creo que... mmm... rayos... creo que si.
-¿Crees? -exclamó Hermione deteniéndose también- ¿Cómo es eso?
-mmm creo que fue algo rápido, la verdad solo respondí por inercia, necesitaba salir rápido del comedor y ella me estaba quitando el tiempo.
-¡Harry!
-¿Qué? -respondió Harry a la defensiva- ella insistió, yo no quedé con ella... ahora que se me haya olvidado pues...
-¿Y dónde estabas? -preguntó Ron con una sonrisa.
-Pues...
-Estabas con ella, ¿verdad? -dijo Ron dándole un codazo.
-Yo... eee....
-¿Es cierto eso, Harry? -preguntó Hermione suspicaz.
-Pues... pues si... -respondió Harry rascándose la cabeza y sintiéndose avergonzado ante sus amigos sin poderlo evitar.
-Entonces ya te aceptó. -dijo Hermione.
-Pues...mmm.... aun no... al menos no por completo.
-¿Cómo es eso?
-¡Ay Hermione, no voy a contarte todo!
-O sea que estuvieron besuqueándose, ¿no? -dijo Ron divertido.
-A lo mejor, así como tú te besuqueas con Hermione. -respondió Harry a la defensiva.
-¡Oye! -exclamó Hermione molesta y sonrojada a la vez.
-Pues entonces dejen de meterse en donde no les llaman. -dijo Harry comenzando a caminar.
-No es por molestarte, -dijo Hermione- es solo que nos interesa lo que te pasa.
-Si, hermano...- dijo Ron caminando a la par de su amigo- si esa Slytherin al fin te aceptó, pues bien por ti.
-Y si no, pues... también nos interesa que estés feliz.
-Pues gracias por su preocupación, -dijo Harry, pero esta batalla la libraré yo solo.
-No te molestes Harry, -dijo Hermione compungida- de verdad no pretendíamos molestarte.
-
-Si, no hay problema, -respondió Harry un tanto arrepentido de su actitud- es solo que esto es muy nuevo para mi... nunca me sentí así ni con... bueno, ni con Ginny... -dijo mirando a Ron, quien solo asintió comprensivo- ni con Cho... esto es totalmente... diferente.
-Quien lo diría... -dijo Hermione sonriendo- Harry Potter esta enamorado.
-¡Yo no estoy enamorado!.. -exclamó Harry mirándola.
-Todavía... -dijo Hermione sin dejar de sonreír.
-Quita esa sonrisa de tu cara. -exclamó Harry molesto.
-¿Por qué te enojas? -dijo Hermione- si ahora solo te gusta mucho y reaccionas como fiera, no falta mucho para que ya no puedas vivir sin ella.
-No digas tonterías... -dijo Harry.
-Bueno, y a todo esto, -dijo Hermione retomando el tema- ¿Cómo vas?... ¿algún avance significativo?
-¿Avance significativo? -repitió Harry.
-Si, -dijo Hermione- si anoche regresaste muy tarde y estabas con ella, pues... imagino que a algo han de haber llegado, ¿no?.... ¿ya son novios o algo así?
-¿Novios?... -repitió Harry; nunca había pensado en el termino "novios" al estar con Malfoy, simplemente había asumido y aceptado que la serpiente rubia le encantaba y que iba a hacer todo lo posible por poder estar con él, pero nunca lo había imaginado como "novio".
-Harry... -llamó Ron.
-¿Eh?...
-¿Por qué sonríes como bobo?
-No lo sé... -respondió Harry- tal vez por el mismo motivo por el cual tú ponías cara de idiota al ver a Hermione.
-¡Oye!
-Cálmense los dos, -dijo Hermione- en serio Harry... te veo como nunca te vi antes con una chica y si necesitas ayuda para conquistarla, cuenta conmigo, no me interesa que sea de Slytherin.
.-Si Harry, -dijo Ron- también cuenta conmigo.
-Gracias chicos, lo pensaré. -dijo Harry ya para que dejaran de insistir.
No muy lejos de ahí, Draco conversaba con Pansy.
-¿Un hechizo repelente?... -exclamó Pansy extrañada- ¿y a quien quieres repeler?
-A Potter... -respondió Draco mientras sacaba unos galeones de oro de su armario y se los guardaba en el bolsillo.
-¿A Potter?.. espera, ya me perdí... ¿tú quieres repeler a Potter?...
-Si, ¿Qué parte no entiendes?... ¿acaso te estoy hablando en sirenio o qué?
-No, es que, bueno... desde que quien tu sabes fue derrotado, tú ya no lo molestas, y él, pues nunca te molestaba, solo respondía a tus insultos, así que el que ahora seas tú quien quiera repelerlo es raro, sobretodo porque yo no he visto que te moleste... ¿o sí, Draco?