Querido diario
¿Cómo estas?, espero que bien, pues yo estoy bien, aunque me siento confundido. Quizás te preguntes el, ¿Por que me siento de esta manera?, pues ahora te lo voy relatar.
Bueno el día comenzó diferente ya que no escuche, el maldito canto de ese gallo, lo que me pareció algo anormal ya que ese animal siempre canta en las mañanas, pero me siento feliz de no haberlo oído, aunque solo sea por un día.
Después que me desperté, me baje de la cama. Al estar abajo de esta me encamine hacia mi armario donde saque uno de mis uniformes y lo deje sobre la cama y también saque dos toallas, con las cuales me encamine al baño
Luego de eso me entre al baño, al estar a dentro, me acerque al tina o bañera, abrí las llaves del agua, para que esta se climatizara, al estar lista el agua me entre en la tina a bañarme. Cuándo ya estaba listo, salí de la bañera, me cubrí con las dos toallas y me volví a mi habitación, al llegar a esta, comencé a secarme y a vestirme.
Al estar listo, hice mi habitación y salí de ella en dirección a la habitación de mi amo, en el trayecto me tope con Eiji y...
- Hola Eiji
- Hola syu-chan
- ¿Cómo estas?
- Bien y ¿tu?
- Bien
- Oye
- Dime
- ¿A que hora llegaste ayer?
- Pues a las 10 de la noche
- ¿Por qué llegaste tan tarde?
- Por que con mi familia, hablamos de miles de cosas y se me paso el tiempo
- Ya veo y ¿ya te castigaron?
- Si
- Y ¿Qué castigo te dieron?
- Pues 100 nalgadas todos los días por el resto del mes y no puedo salir de la mansión hasta dos mese mas
- Bueno eso te paso por llegar tarde
- Si y a ti, ¿te castigaron?
- Si el castigo que me dieron antes que fueras
- Ok
- Bueno, nos vemos
- Nos vemos
Luego de esa conversación que tuve con Eiji, yo seguí mi camino, hasta la habitación de mi amo, al llegar a ella, me detuve frente a la puerta y esta vez toque ocho veces ya que al octavo golpe el me había dado el permiso para entrar en la habitación. Así que abrí la puerta, entre y cerré la puerta
Al estar ya adentro hice una reverencia y...
- Buenos días, amo - dije inclinado
- Buenos días, Syusuke - me respondió
- ¿Cómo amaneció?- dije mientras iba abrir las cortina y las abrí
- Bien y ¿tu?
- Bien gracias- le respondí
- De nada
- ¿Qué traje se va poner hoy?- me fui al armario de mi amo y lo abrí
- El marrón oscuro
- Se lo he dejado encima de su sofá
- Bien
- Le iré a preparar su baño - le dije
- Ve
- Si, como usted ordene- le dije haciendo una reverencia
Después de eso me encamine hacia su baño, entre en el y comencé a prepárale la tina, tal como a el le gusta, esta ves teniendo el cuidado de cometer el mismo error que había cometido ayer. Cuando termine salí del baño de mi amo y me devolví a su habitación y...
- Su baño esta listo amo-le dije
- Ok
- ¿Desea algo más?- le pregunte
- No, te puedes retirar
- Si, como usted ordene- le dije haciendo otra reverencia
Después de eso, salí de la habitación de mi amo, también del segundo piso, baje las escaleras y comencé a caminar hacia a la cocina. Al llegar esta entre en ella y comencé a preparar el desayuno de mi amo, en un completo silencio ya que Eiji, no estaba, seguramente lo estarían castigando.
Cuando termine de prepararlo, salí de la cocina y me fui al comedor donde serví el desayuno a mi amo, pasaron unos segundo, cuando Eiji apareció, sovandose sus nalgas, yendo hacia a la cocina, transcurrieron unos minutos cuando Eiji salio de la cocina con una bandeja en sus mansos. Luego de eso, el comenzó a servirle el desayuno a su amo y unos minutos más tarde aparecieron mi amo con el señor Oishi, quienes se sentaron a comer sus desayunos en un completo silencio.
Mientras nuestros amos desayunaba, alguien toco la campana de la mansión y...
- Syusuke-me dijo
- Si, amo
- Ve a ver quien esta en la puerta- me ordeno
- Si, como usted ordene- dije haciendo una reverencia
Así que me retire del comedor en dirección a la puerta de la mansión y al llegar a ella....
- Buenos días - me dijo educadamente
- Buenas días
- ¿Se encontrara el señor Tezuka Kunimitsu?- me pregunto de la misma manera
- Si, se encuentra, ¿Quién lo busca?
- No se acuerda de mi
- Ah, usted es el señor que vino ayer
- Si, así es
- Pues si mal no recuerdo mi amo, dijo que viniera el miércoles
- Si, eso dijo, pero es que yo no puedo venir otro día
- Ya, iré a infórmale
- Ok
- Con su permiso
Después de eso me volví a la mansión, entre en ella y me encamine al comedor y...
- Amo, lo buscan
- ¿Quién me busca?
- El señor que vino ayer en la tarde
- ¿No le dijiste, lo que te dije que le dijeras?
- Si, se lo dije
- Entonces, ¿Por qué vino hoy y no pasado mañana?
- Por que el dice que no puede venir, otro día
- Ok, hazlo pasar a la sala
- Como usted ordene, con permiso, me retiro
- Puedes retirarte
Y así salgo del comedor y me devuelvo a la entrada de la mansión y al llegar a esta...
- ¿Qué le dijeron?- me pregunto
- Mi amo, lo va recibir en la sala
- De acuerdo
- Pase, por favor
- Gracias
- De nada, por favor, sígame
- Ok
Después de eso el señor y yo entramos a la mansión, el caminar fue muy silencioso, pero había algo en el que me daba mucha desconfianza y algo de temor.
Después de que comencé a sentir eso, nuestra caminata se volvió pesada e incomoda, hasta que llegamos a la sala y...
- Amo, aquí esta el señor Tezuka Keisuke
- Bien, déjanos a solas
- Como usted ordene con permiso, me retiro
- Te puedes retirar
Luego de eso me fui a hacer mis cosas, yo ya había terminado de hacer el despacho de mi amo y estaba por terminar su habitación, cuando de repente...
- Syusuke
- Si amo
- Ven a la sala, en este instante
- Voy
Así que salgo de la habitación de mi amo en dirección a la sala, al llegar a ella, me acerco donde están mi amo y el señor Keisuke.
- Aquí estoy amo
- Bien, lleva a Keisuke a la habitación de huéspedes
- Como usted ordene
- Ok
- Por favor sígame señor Keisuke
- De acuerdo
Luego de eso yo lleve al señor Keisuke, a la habitación de huéspedes, lo deje allí, sali de la habitación y me encamine al despacho de mi amo, al llegar a este, toque la puerta y...
- Pase
- Con permiso, amo
- Pasa, Syusuke, ¿Qué pasa?
- Hay, algo que le quiero preguntar
- ¿Qué es?
- Cuando usted y yo éramos niños, ¿yo conocí al señor Keisuke?
- No, ¿Por qué?
- Curiosidad
- ¿Solo eso?
- Si, le pido disculpas por mi pregunta
- No importa, no te preocupes, ahora retírate
- Como usted ordene, con su permiso
- Te puedes retirar
Después de eso me volví a terminar la habitación de mi amo, la tarde pase rápida, hasta que llego la noche, lo que me tiene confundido, es que yo siento que conozco al señor Keisuke, pero a la ves siento que no.
Bueno diario ya me voy por que si me pillan me castigaran ya nos vemos
Syusuke