Querido diario
¿Cómo estas?, espero que bien, pues yo estoy bien, además estoy muy agradecido con mi amo ya que, no solo echo al señor Keisuke de la casa, si no también que le pego y para terminar mi amo me pidió perdón el castigo que no merecía. Bueno quizás, ¿quieres saber como paso todo esto?, pues te lo voy a contar.
Bueno el día comenzó para mí antes que cantara ese maldito gallo, ya que me había despertado mas temprano de lo común, por que sentía que debía enfrentarme al señor Keisuke de una vez por todas y así poder liberarme de las acusaciones falsas en las que me habían acusado.
Con esta decisión tomada, me baje de la cama, al estar abajo de esta me encamine a mi armario donde saque uno de mis uniformes y lo deje sobre la cama y también saque dos toallas, con estas en las manos, me encamine al baño.
Luego de eso me entre al baño, al estar a dentro, me acerque a la bañera, abrí las llaves del agua, para que esta se climatizara, al estar lista el agua me entre en la tina a bañarme. Cuándo ya estaba listo, salí de la bañera, me cubrí con las dos toallas y me volví a mi habitación, al llegar a esta, comencé a secarme y a vestirme.
Al estar listo, hice mi habitación y salí de ella en dirección a la habitación del señor Keisuke, lo primero que quería hacer era encararlo de una buena vez, al llegar a esta, me detuve frente a la puerta y toque dos veces ya que al segundo golpe el me había dado el permiso para entrar en la habitación.
Así que abrí la puerta, entre y cerré la puerta, al estar ya adentro me quede parado en la puerta, viendo como el señor Keisuke me sonría con cinismo
- Hola Syusuke - me dijo sonriendo con cinismo
- Hola
- ¿Qué trae por aquí?- me pregunta con algo de curiosidad en su tono de vos
- Pues deseo hablar con usted
- Bien, te escucho - me dice nuevamente sonriendo
Mientras tanto Syusuke empezaba hablar con Keisuke, yo me encontraba recién despertándome, preguntándome, ¿Dónde estaba Syusuke? Y ¿Por qué no me había venido a despertar? Con esas preguntas en mi cabeza, tomo mis lentes, me paro de la cama, salgo de mi habitación algo molesto para ir a buscar a Syusuke y darle un buen tiron de orejas.
Pero en mi caminar me detuve ya que la puerta de la habitación de huéspedes, estaba abierta, así que me acerque a ella con algo de curiosidad y veo que estaban allí Syusuke junto con Kiesuke y lo que me llamo mas la atención, fue que Syusuke estaba demasiado serio, cosa que no es común en el. Quise entrar pero mejor me quede afuera a escuchar lo que estos dos iban hablar.
- Me podría decir, el ¿por que tiro mis cosas por la ventana cuando éramos niños?- le pregunte abriendo mis ojos con seriedad
- Por que me caías mal y me aun me caes mal
- Por ese motivo, ¿ensucio lo que yo ya había limpiado?- le volví a preguntar con seriedad
- A ¿Qué te refieres?
- Ayer después que yo hice el aseo de la habitación y del despacho de mi amo, usted fue a ensuciarlos para que a mi me castigaran injustamente, ¿Por qué lo hizo?
- Por que quiero lograr un objetivo - me dijo sonriendo
- ¿Cuál?
- Que te peguen con el látigo - me dijo viéndome con una mirada llena de sadismo
- ¿Qué?, ¿Por qué?
- Por que desde que llegaste a esta casa, toda la atención de Kunimitsu fue para ti y aun lo es y por eso quiero que te vallas y nunca mas regreses
- Usted quiere lograr eso, ¿Por qué esta celoso de mí?- le pregunte sorprendido por lo que me había dicho
- Si por eso y por que odió a los niños que sonríen por todo
- Bueno si no le agrado vallase usted, pero yo no me voy de aquí- le dije muy seguro de lo que le iba decirle
- ¿Por qué no?
- Por que yo le debo mucho a mi amo y el día en que me valla de aquí será el día en que yo muera
- No sabes cuanto te odio - me dijo seriamente con una mirada llena de odio
- Me da lo mismo si usted me odia o no, sabe usted es un rico caprichoso que cree que todo gira a su alrededor pero la vida no es así, uno puede hacer que los demás hagan lo que usted quiera que hagan por que usted no es mas que un don nadie
- ...........................- furioso, sacando un cinturón de nos se donde
- ¿Me va a pegar?, pues hágalo, yo no le tengo miedo
- ...........................
- No lo hagas Keisuke - de la nada aprecio mi amo
- Amo
- Kunimitsu
- Escuche todo lo que conversaron, Syusuke - nos dijo a los dos y luego volteo hacia a mi
- Si amo
- Vete a tu habitación y espérame hay
- Si amo, con su permiso
- En cuanto a ti Keisuke- se acerca y le da un combo en la nariz, de tal manera que se la quiebra
- ...................................
- Toma tus cosas y vete de esta casa y no vuelvas
- Esta bien - dijo aceptando lo que le había dicho mi amo
Después de eso mi amo echo al señor Keisuke de la mansión y luego fue a mi cuarto, al entrar en este yo pensé que me castigaría, pero como dicen por hay nunca creas en lo que vez, hasta que seguro de ello o algo así. En ese momento los dos estábamos en silencio, hasta que mi amo lo rompió...
- Sysuke - me dijo mirando el piso
- Si amo
- Pues yo........................ - me dijo con una mirada llena de culpa
- Si
- Te quiero pedir perdón, por el castigo que te de injustamente
- No se preocupe amo y le agradezco su pedida de disculpa - le dije sofriéndole como siempre
- No tienes nada que agradecer
- n_n- sonríe
- Bueno ahora ve hacer tus deberes
- Si amo
- A casi lo olvido- me dijo girándose hacia mi
- ¿Qué cosa?
- La cara seria no te sienta bien - me dijo sonriéndome
- Amo
- Jajaja, es broma, nos vemos
- Si - le dije también sonriendo
Después de eso yo me fui hacer mis deberes, la verdad es que hace mucho que no había visto ver a reír a mi amo, eso me alegro mucho y gracias eso hice mis cosas con mas animo y mas alegre.
Bueno diario eso era lo que tenia que contar ya hora me voy a dormir, antes de que me pillen y me castiguen jejeje, ya nos vemos
Syusuke