- Watanuki, ¿Acaso me lo podrías asegurar? – Esas palabras resonaban en la cabeza del ojiazul, una y otra vez - ¡NO¡ - …l la quiere, lo sabe, lo podría jurar...no quiere recordar...no esas temibles palabras...nunca había visto a otra chica que no fuera ella...si...su linda...Himawari-chan.
…l estaba tan distraído que no fue capaz de notar la presencia de su acompañante.
-Si no es ella, entonces ¿Quién? – dijo al unisonó, completamente triste y sin comprender aquella confusión en su corazón.
Su compañero solo se dedicaba a observarlos y oír lo que otro decía, lo comprendió, él hablaba de “ella”, parece que es lo único que sabe hacer...- Kunogi... – le dolía...y le dolía demasiado...el hecho de que él pensara en aquella chica...definitivamente... dolía.
-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-En un lugar en donde se podía apreciar un llamativo atardecer, se encontraba una casa antigua con arquitectura muy detallada, mal cuidada, pero por dentro era un lugar cálido y muy elegante.
-Pasemos listaa~ - decía Yuuko con una hoja en la mano – ¡¡Watanuki, Doumeki, Himawari-chan!! - ¡Sí! – Responden los 3 – ¡¡Ame Warashi, Zashiki Warashi!! – Si – responde la pelirroja con carácter, oyéndose un leve “Si” después de ella.
-Bueno, estamos todos a... ¡beber Sake! – incitando a todos con una botella junto al bollo negro.
¬¬¬suspira el pelinegro ¬– ¿Cómo es que terminamos todos aquí? – se preguntaba el chico.
Un día antes...
Se siente la presencia de un suspiro *~
-Watanuki-kun... ¿Te pasa algo? Has estado muy raro todo el dia en la escuela – mirándolo preocupada
-nm, ¡no te preocupes Himawari-chan! ñ_ñ, estoy bien, solo necesito descansar un poco…- quería que su amiga no tuviera ese rostro preocupado “Himawari-chan se preocupa por mi *o* que felicidaaa~d” – pensó el pelinegro, girando en su propio eje.
-Oi! Deja de poner cara de idiota y camina, que estorbas! – decía a lo lejos el arquero seguido de Kunogi, quienes dejaban aras al soñador…
-¡Tu! Maldito Dou…- sin poder terminar la oración es tirado al suelo, por unas súper patadas combo de su jefa…
-Que te pasa hoy, Watanuki? - dice en tono burlón la pelilargo, con la mano tapando su boca de forma sarcástico- estas mas distraído que de costumbre ¡¡muajajajaja!! – comentan al mismo tiempo yuuko y el bollo negro.
- Y bien? Que haces por aquí, Yuuko-san? Y mas acompañada de tu mascota…- dirigiéndole una mirada llena de malicia a la pequeña mokona negra.
- No soy mascota! Soy Mokona! – Regresándole la mirada-
- Bueno está bien, nos atrapaste Watanuki, y con las manos en la masa*- poniendo una pose dramática, digno de ella – es que yo…quería invitarlos a un lugar – señalando a los tres estudiantes – que les parece?
¬- Suena divertido ^_^ - responde la chica de colitas, mientras que el arquero solo asienta la cabeza.
-Bueno a decir verdad- se rasca la cabeza el ojiazul
- Tu Watanuki, estás obligado a ir – lo señala Yuuko amenazadoramente – Si no, quien cocinaria?
¬- Ya veo tu siniestro plan, Yuuko-san- dice algo decepcionado
-Asi que… los quiero a todos ustedes dentro de 3 hrs en el parque, entendido?¬- viendo como asentaban sus cabezas
*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-* FIN DEL FLASHBACK *-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
“Ah! Si ya recordé como…”- pensaba el pelinegro perdiendo la vista en la ventana, observando que al final del jardín trasero había un hermoso lugar.
Siendo distraído por la molestosa onigiri negra…
-Watanuki, haz algo de cenar, ya tenemos hambre- decía sobre la cabeza de Watanuki.
A él le hubiera encantado discutir con ese intento de mascota pero no tenía ganas... así que solo se dirigió a la cocina a prepararles la cena…
20 minutos después…
Con todos los platos servidos sobre la mesa.
-mmm…Watanuki!! No cabe duda que eres el mejor!! - decía con los ojos llenos de estrellas e ilusión al ver la cena que su “sirviente” había preparado.
-Es verdad Watanuki-kun, estoy ansiosa de comer los que nos has preparado- terminando de decir esto, la su amiga le sonríe, haciendo que este se animara un poco…
-Mas te vale que esto sepa bien- le amenazaba la chica-lluvia al pobre.
Ya estaba casi todos en la mesa, menos uno…
-Watanuki, no piensas cenar? – le dice su jefa.
-nm, no por hoy paso- respondió dirigiéndose a la puerta para salir.
-Y a dónde vas? - pregunto kunog
- Ah, creo que despejare mi mente un rato, así que iré al jardín – algo le inquietaba y lo sabía, se le notabaSe levanta Zashiki Warashi…
-etto..yo..mm..a mi…- nerviosa a más no poder, la pelirroja tuvo que terminar la oración.
-en pocas palabras, dijo que si te puede acompañar- dijo desviando la mirada
Claramente se podían sentir los latidos de la peliazul, por el miedo a un rechazo…
-Si, gracias no me haría mal un poco de compañía- al decir esto, le sonríe, causando un leve sonrojo a la chica…
-No se demoren mucho, porque tenemos que repartir el orden de los cuartos donde quedaran – decía con pesadez Yuuko
-Si, Si…solo es una vuelta- los dos salieron del comedor, dejando solos a los demás..
-Bien!! A Cenar!! - decía animada la jefa.
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Se puede observar a dos personas caminando sobre el pasto…
-Estás segura de acompañarme? No tienes hambre? - le decía preocupado a su acompañante
-e..es..estoy bien..gr..gracia..s.. - decía en todo bajo, pero se podía oir
- Bueno, y como las amenazo Yuuko-san, para que vinieran? - pregunto, intentando hacer platica.
-a..e…so..lo…nos…pr..pregunto...- dijo la chica nerviosa, no había mucho que pudiera hacer, estando junto a la persona que amaba.
-Ah, ya veo –sonríe...- pensé que habría utilizado una artimaña como solo ella lo hace- se le veía un poco más tranquilo- mira…- señalando un pequeño lugar detrás de unos arbustos, se veía magnifico, una laguna que reflejaba la luna, luciérnagas dándole ambiente pacífico – quieres que vayamos? – pregunto Watanuki, extendiéndole la mano.
Ella solo se sonrojaba más y más, haciendo que su corazón latiera tanto que le llegaba a faltar aire…
Zashiki Warashi, asentó la cabeza, hablar en un momento así haría que se desmayara al instante, arruinando el momento, y no quería eso…
Watanuki, se sentía tranquilo junto a ella, le daba paz, el solo la agarro de la mano, para ayudarla a pasar los arbustos…
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-VAYA! PERO QUE RICO! – Yuuko ya estaba más que satisfecha por la cena preparada por Watanuki- creo que debemos de repartir los cuartos…-se quedo pensando-AHORA!! -se paro – Donde esta Watanuki y Zashi Warashi?
-Se fueron…-dijo el pelinegro, señalando hacia la puerta.
-Ahh, ya recordé, Mokona trae mi cuaderno! –ordena la bruja..
-Si! – responde el bollito negro
-No sería mejor si esperamos a Watanuki-kun? - decía preocupada por la ausencia de su amigo
Se le acerca Yuuko- No te preocupes Himawari-chan, el lugar que le dé le gustara! - tratando de despreocupar a la chica- Bien ahora, el orden será el siguiente- recibiendo el cuaderno que le había pedido a mokona- Ame Warashi y Zashi Warashi en el cuarto de lado Izquierdo, Doumeki y Watanuki en el Derecho, Himawari-chan y yo, dormiremos en el cuarto central, está bien? –pregunta a los demás..
Y nadie se quejo…
-Bueno entonces, ahora todos suban las cosas a sus respectivos cuartos y…-es interrumpida por la pelirroja
-Y que va a pasar con Zashi Warashi y el chico ese, no confió en él- dice con aura amenazadora…
-Si, ellos, pues esperémoslos mientras acomodamos nuestras cosas, ahora andando! - dijo animada Yuuko, -vamos, mokona…
Todos hicieron lo ordenado por Yuuko, siendo Doumeki quien ayudara a todas ya que eran chicas, y el cómo caballero subió sus maletas…
Ahora todo estaban en sus cuartos, excepto la pareja que había salido con anterioridad…
-Así que ahí están- dijo para sí misma la bruja
-Quienes? - pregunto la pelirroja temperamental
-Pues, Watanuki y Zashiki Warashi-señalando detrás de la ventana Yuuko, hacia un lugar más allá del jardín, donde se podía aprecia claramente a la joven pareja…
-Es verdad, y Zashi Warashi parece muy feliz–decía con melancolía, como si…
-Te duele? - pregunto directamente la bruja- Te duele el hecho de que a ti también te gusta ese humano? - le dirige una mirada seria- y que no puedes hacer nada, por el gran cariño que le tienes a ella…cierto? - puso más grueso su tono de voz.
-ella merece ser feliz…- le dice a Yuuko y retirándose de aquella habitación
-supongo que todos merecen ser felices…no crees mokona? -da un pequeño suspiro…
-Si, pero…esa es la razón por la que los trajiste a todos aquí? - pregunta mokona
-Asi es, todos ellos tienen algo en común, - mira a la pareja cerca del lago…-estan enamorados de la misma persona, cada uno de ellos, mientras que Watanuki, ya no sabe ni lo que siente…-voltea a ver a mokona– se acercan tiempos difíciles, es por eso que Watanuki necesita encontrar a esa persona…para que este a su lado
-Yuuko, tu sabes quien es esa persona? - pregunta con curiosidad la pequeña…
-mmm, quien sabe…-dice de manera sarcástica…
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Cerca del lago…
-Tengamos cuidado, este lugar podría estas resbaloso- anuncio el ojiazu.
Aunque no sirvió de nada, porque la chica se resbalo un poco, dejando su rostro cerca del chico…
-Te encuentras bien? Te lastimaste? -no recibia ninguna respuesta por parte de ella..
Estaba anonadada, no sabía qué hacer, su corazón latía tan fuerte, que tenía miedo de que él pudiera sospechar…pero si, ella se había lastima el tobillo, y él lo noto…
-Vaya, quizas lo mejor será que regresemos a la casa principal, además ya es tarde…-dijo el ojiazul- te cargare…- aviso el muchacho
Ella no puedo hacer nada, solo quedarse callada…cargándola en forma de caballito de manera mas gentil…
–Agarrate fuerte, vale?- estaba preocupado por la pequeña lastimada de su acompañante..
-y…yo…lo..lo siento.. -decia apenada, sacando leves lagrimas de sus ojos…-l..lo..si..sien..to..lo he..aruinado..- se sentía pésima…y ya estaba llorando…
Watanuki, sintió el sollozo de ella…
-No te preocupes..la verdad es que te agradezco que me acompañaras, tuve un rato muy agradable teniéndote a mi lado-dijo para tranquilizarla, aunque en realidad asi era como se sentía..- la verdad es que, estaba un poco deprimido, pero tu estabas junto a mi…muchas gracias…- sonrio para ella- ahora agárrate fuerte, si?
Y eso fue lo que hizo…le abrazo fuertemente del cuello…y se sentía…muy bien…
Se podría decir que el ambiente entre ellos dos, era bastante romantico…quizas en realidad fue un cita indirecta…bueno eso fue lo que se le cruzo por la mente a Watanuki...lo cual le pareció gracioso…en cierto modo.
-Esto no ha terminado…-ella escuchaba atentamente-cuando tu tobillo este bien, me gustaría venir otra vez…y tu me podrías acompañar?- solo escucho el “Si” de la suave voz de la chica, quien se aferraba mas a él…
Pero no sabían que estaban siendo observados desde la casa… habían visto ese momento romantico entre esos dos…y uno de ellos, definitivamente no quería que se repitiera…
-Cual es tu plan?...- entro al cuarto y vio fijamente al pelinegro que observaba a esa pareja…-Doumeki…no creo que te agrade la idea de que un momento como ese se vuelva a repetir entre esos dos…-se dirige a la puerta para retirarse-será mejor que hagas algún movimiento rápido, o perderás tu oportunidad…-su tono de voz, definitivamente daba miedo…mientras que el chico asentó la cabeza…definitivamente él tenía algo en mente…