Uno a uno vi Como mis invitados apartaban sus platos de frente a ellos.
Unos (como Mana-sama, Hizaki-sama, Klaha-san, Kamijou-kun y Gackt-san) semi completos o aun con comida.
Otros (como mis parientes) a medias, o con algo de comida.
Y otros (como Naruto y Allen) vacíos y hasta limpios.
“vaya, si los tuviera de esclavos no tendria que pagar por lavar los platos.” empecé a divagar por los confines escondidos de mi mente. Que en ese momento eran muchos.
-Shuichi, a qué hora llegan los amigos tuyos esos...maestros de.. qué? -Pregunté ya desesperada.
-Del todo, Yuki. Y ya deben de venir en camino. -me contestó con una sonrisa.
“Ding dong dong ding, ding dong ding dong” (n/a: pésimo equipo de sonido.)
Me desparecí al estilo Byakuya al escuchar el (que yo supuse que era) timbre de la puerta.
Abrí con mi mas ensayada actitud preocupada y dramática a un rubio de ojos verde-aqua, un peliazul de ojos igual de azules y un pelirrosa de ojos claros (rosas) y un cabello tan largo, que me acomplejó al punto de llegar a perseguirlo con las tijeras podadoras para arbustos.
-buenos dias, senorita, esta usted hermosa. Somos los “maestros del todo”. -Me comentó el rubio tratando de halagarme.
Yo, Como toda mujer que se conoce, me subí en mi nube de orgullo por unos momentos pero sus palabras me devolvieron a la tierra de un golpe.
-recibimos una llamada sobre un robo, nos permite investigar? -Me preguntó el muy mojigato como si yo fuera una retardada mental.
-si claro, solo que les he de pedir que sean muy discretos porque tengo visitas y algunos son muy nerviosos. -Les contesté de forma seca y educada.
-No se preocupe, los “maestros del todo” sabemos complacer a nuestros clientes. Pasen, y no ensucien la alfombra. -Contestó despues de que les abrí paso para entrar en mis dominios.
-Una cosa mas. -Los interrumpí al ver que el pelirrosa y el peliazul cuchicheaban algo en secreto.
-Sunao-kun, ya ordené que enviaran varias prendas de ropa para esta casa, tu y tu pareja se quedaran aquí hasta el domingo. -
-noni?? Y cuándo acepte yo semejante oferta? -Me gritó insultado el insolente pelirrosa.
-desde que viniste con el. -le contesté con una mirada malvada senalando al peliazul.
-Y si me niego? -Me contestó retadoramente.
-Es imposible, una vez que alguien entra en mis dominios psicópatas, no sale hasta que yo lo decida. -Y me eché a reir a carcajadas Como maniática.
Supe que el pelirrosa quería decirme algo pero el rubio lo haló por los hombros y el peliazul por la cintura y desaparecieron detras de una puerta que conducía a mis pasadisos secretos y mi unica forma de espiar a mis invitados (ahi estan todos los monitores de las camaras escondidas.)
-Qué fue eso, yuki? -Me preguntó el pelirrosa saliendo del comedor con los invitados.
-Los “maestros del todo” -dije con el mismo tonito ridículo de el rubio.
Todos me miraron con la ya usual mirada “loca”.
-Que dejen de verme asi!!! -Grité antes de que la puerta fuera golpeada frenética y desesperadamente. -Ya voy, ya voy. -Grité desde adentro a quienquiera que quisiera derrumbar mi puerta de doble ala.
Abrí y frente a mi tenia a la escena dramatica ganadora del oscar por mejor drama:
-Puedo ver a Hizaki y a Kamijou? -Me preguntó un muchacho de unos...si mucho unos veinte o treinta anos de edad.
-Pero...pero... -me shockeé, el muchacho era extremadamente hermoso, con el cabello plateado y mechas negras, un lindo sombrerito negro con plumas naranjas, o eran doradas?, bueno, tenia puesto un traje del siglo xvii pero sin antebrazos, solo los brazos sujetados a los hombros de alguna manera, con un pantalon blanco y unas botas negras hasta las rodillas, y en lugar de camisa, llevaba un tipo top con volantes en el pecho, y unos guantes blancos.
-Podrías dejarme verlos, se que estan aqui. -Me repitió al no recibir respuesta y notar que me salía algo de sangre de la nariz.
-Claro, pasa. -Le dije al mirar sus bellos ojos azules enrojecidos por el llanto. Y aun le quedaba más!!
Entramos en la habitación donde se encontraban todos los invitados, al divisar a Hizaki-sama y a Kamijou-kun los hice venir tratando de que fuera un momento “familiar” se podria decir, y lo hice que se acercara a ellos para que hablaran un rato.
-Teru-chan que te pasa? -Le preguntó asustado Kamijou-kun al verlo tan deshecho en lagrimas.
-Ay chicos, ha pasado algo terrible. Jazmine ha...ha...muerto. -Soltó antes de volver a soltar el llanto en el pecho de Kamijou-kun.
-Noni???!! -Soltaron ambos shockeados. -Y cuándo?? -
-Anoche, fui a buscarlo para ir a una reunion en casa de Miyavi y de paso conocer a Lovelie, y lo encontré en el sofá...tiezo y pálido... y frío. -Soltó de nuevo antes de que Gackt-san lo abrazara para tratar de ahogar su llanto.
-Una gran pérdida. -Fue lo único que dijo Mana-sama abrazado por Klaha-san.
Los seis lloraron la trágica perdida y yo no fui la excepción. Parecia becerro recien parido cuando lloraba en serio.
-Yuki, tu no eras muy fan de Jazmine. -Me suzurró Ike desde atras.
-No lloro por eso!!! -Le dije sin volverme.
-Entonces? -Me preguntó con voz mas alta.
-Porque esto es muy kawai y no tengo mi camara de fotos y video!!!!!! -Berreé mas.
Entonces sentí algo malvado que me daba de lleno en la cabeza y me arrojaba al suelo.
-Sé mas considerada y respetuosa!!!!! -Me gritó mi salvaje hermana de cabello rojo mientras Ike me golpeaba la cabeza con el puno.
Me quedé en el suelo esperando que por kami-sama nadie me hubiera escuchado, pero el azote fue tan fuerte que cuando me levante tenia las miradas de todos puestas sobre mi pequena personita lastimada fisica y emocionalmente.
Y de nuez la mirada de “loca” la de “tarada” la de “inconciente” (por primera vez) y la de “estupida”, de nuevo, cortesia de Ike y Byakuya.
-Que dejen de mirarme asi temes bastardos!!!! -Les grité levantandome del suelo con presteza.
-Yuki-chan, estuvimos hablando y quisieramos preguntarte si... -no los deje terminar.
-Si!! Lo que sea que sea, yo les permito todo. -Le dije a Kamijou esperando asi reparar la mala primera impresión que le habia dejado a Teru-chan.
-Lo ves? Te dije que aceptaría, parece una niña loca pero es muy linda y amable. -dijo Kamijou a Teru obviamente hablando de mi.
“Al fin, Kamijou-san reconoce mi amabilidad, y dice que soy linda.” me subí en mi nube de nuevo pero esta vez no deje que me bajaran. Yo sola me avente desde arriba.
-Porque tenias esa cara de estupida Yu-chan? -me dijo Ki-chan sin ninguna consideración.
-Por nada, lleven sus cosas a la habitación... -no pude terminar ya que Gackt me interrumpió.
-Yuki, si no te importa, mi cuarto es para dos personas, si me permites que se quede en mi cuarto? -
Mi alerta yaoi se activo.
-Claro, además tu duermes solito, y esa habitación es muy grande para ti, lleven las cosas de Teru-san a la recámara de Gackt-san. –ordené a mis criadas que ya habían sacado las maletas de Teru de su auto.
-Hai, yuki-sama. -me apareció una venita en la sien que estaba a punto de estallar.
Las chicas se desaparecieron en un parpadeo mientras Gackt llevaba a Teru a conocer su cuarto.
-muy bien, todos escuchen, los detectives me indicaron que todos deben estar en sus habitaciones mientras dure la investigacion asi que vayan a sus recamaras y yo les avisaré cuando puedan salir. -
-hai yuki-chan. -se despidieron mis invitados y todos subieron al piso donde estaban sus habitaciones.
Bien, a mis actividades.
Cuando llegue a mi sala de monitoreo ya estaban todos mis invitados en sus cuartos, y algunos habian decidido “jugar” un rato mientras esperaban.
Me enfoqué especialmente en la habitación de Gackt y Teru:
-te gusta? -le preguntó Gackt al bello peliplateado que miraba la habitacion asombrado.
-es muy hermosa, Yuki-san tiene un muy buen gusto para la decoración. -respondió el menor dandole la espalda a mi adorado hércules.
Gackt se acercó a Teru por la espalda y lo acaricio en los antebrazos, el pequeno se zafó y se alejó un poco de Gackt con el semblante triste. Gackt pudo notar el mensaje y se encaminó a la cama; se sentó y le indicó a Teru que se acercara a su lado; el pequeño obedeció temerosamente y se sento al lado de Gackt con timidez.
-porqué tan seco conmigo, Teru-chan? -preguntó el mayor acercandose al pequeno sigilosamente y acariciando su rostro.
-gomen ne Gackt-san, demo, lo de Jazmine me tiene muy triste, no es que quiera ser seco contigo. -
-lo se, pero me duele que te alejes como lo hiciste. -le contestó el mayor al menor ronrroneandole al oido.
-gomen. -respondio Teru antes de que Gackt lo recostara en la cama mientras lo besaba tiernamente en los labios.
Luego entrelazó las manos de ambos mientras bajaba al cuello depositando mordidas leves en el.
-Gackt-sama. -suzurró el pequeno debajo de Gackt mientras el lo besaba.
-Yuki-sama!!!! -entró el rubio lider de los “maestros del todo” haciendo un escándalo y provocando que yo, en mi susto, apagara los monitores de las habitaciones y encendiera los de el derredor de la casa.
-si? -le contesté reprimiendo mi furia por el “-sama”
-debe convocar a todos sus invitados, ya descubrimos al ladron de sus pasteles. -me dijó con decisión en la mirada.
-enseguida, y gracias. -le dije tan emocionada que había olvidado mi furia en ese preciso instante.
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en la sala:
-queridos invitados, los he convocado porque los detectives han encontrado al ladrón de los deliciosos pasteles que les tenia reservados para la hora del té. -les dije categoricamente a mis invitados fingiendo diplomacia.
-y bien? -oí preguntar a Ike, y Sephiroth en tono de seria desesperación.
-bien, los “maestros del todo” -mirada de “raro” de parte de todos -hemos descubierto quién ha sido el ladrón y donde tenia escondidos los pasteles. -dijo el rubio con seriedad.
-y que descubrieron? -comentó algo desesperado Naruto.
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AVANCES DEL PROXIMO CAPITULO:
al escuchar quien habia tocado la puerta me quede tieza:
-quién dijiste que era??? -pregunté con la voz temblorosa.
-un tal Sebastian, de ojos rojos muy parecidos a los tuyos. -me dijo Ike algo turbado.
-Sebastian. -suzurré para mis adentros.
-tenia una energia espiritual muy elevada, del nivel de un capitán de los trece escuadrones. -dijo Ike sacandonme de mis cavilaciones.
-lo se, es un shinigami del nivel de el coronel Yamamoto. -le conteste con seria amargura mezclada con felicidad.
-lo sabes? -me contestó Byakuya por primera ves en toda la tarde.
-si, es mi prometido. Lo deje hace unos anos al venir y hacer mi fortuna en la tierra, pero le dije que no me buscara, que si de verdad me queria cerca, me dejara vivir la vida en la tierra antes de encerrarme para siempre en un mundo de oscuridad y abismos. -le contesté con tristeza.
-prometido? -pregunto Yoruichi sorprendida. -yo he estado contigo desde que naciste, y jamás me entere de semejante cosa. -me recriminó seria.
-Fue cosa de papá, la comprometió desde antes de nacer. -concluyó Aura seria. -estableció que todas las mujeres de la familia se casaran con shinigamis asi de fuertes, pero he aqui una chica que no siguió las reglas y ahora hay un shinigami asesino buscóndola. -
-asesino? -preguntó Ike.
-Grell, el shinigami rojo, la quiere separar de Sebastian y la busca para matarla. -dijo seria Dalia.
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