Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

IneVitable por Midorico

[Reviews - 32]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

Los personajes de Naruto no me pertenecen son de Masashi Kishimoto-sama

 

~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*InEviTAbLe~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

 

°_°_°_°_°_°_°_°_°_°_ Inevitable °_°_°_°_°_°_°_°_°_°_

 

No podían dejar de sonreír, en la ceremonia, en el banquete, dentro de la casa, simplemente no podían. Donde las miradas se dirigieran, ahí estaban ellos, con las manos entrelazadas y sonriéndose tontamente, no... No estaban sonriendo tontamente sonreían con alegría y felicidad, con amor...

 

-parece que mi ototo-baka está sonriendo lo que nunca sonrío de pequeño-hablaba Itachi viendo a la parejita Sasu-Naru bailar en el centro de la pista.

 

-así se ven ustedes Itachi-respondía Sai que se encontraba junto al pelinegro cargando al pequeño Tamaki.

 

-¿en verdad hacemos esa cara?-pregunto Itachi ladeando la cabeza y frunciendo el ceño, el no creía que se viera tan ridículo cuando se encontraba con Deidara.

 

-de esa forma se ven los enamorados-declaro Gaara llegando junto a Deidara-deberías hacer en este momento el anuncio Itachi-propuso el pelirrojo, sentándose junto a Sai, tomando a su bebe en brazos.

 

Itachi miro en dirección a Deidara que bebía un poco de agua. Era cierto, debería anunciar el compromiso con Deidara, hace menos de diez minutos que el rubio había ido al aseo a regresar todo lo que había ingerido, sonrío eso indicaba que el embarazo de Deidara y su bebe iban muy bien con la salud.

 

 

“Algún día nos juramos: ser amigos hasta el fin

Hoy me animo a confesarte lo que yo siento por ti

Día a día me pregunto: ¿Qué le digo al corazón?

Que se siente abandonado derretido por tu amor”

 

 

La voz que conocía muy bien se estaba escuchando por todo el jardín de la mansión, entonces todos dirigieron la mirada hacia el lugar de donde salía la música, ahí estaba su socio, con un micrófono en mano y cantando.

 

Se equivocaba, estaba cantándole solo a Iruka, el cual se encontraba sonrojado y en la mesa principal, junto a Kushina, que miraba con una sonrisa al nuevo miembro de la familia, si Kakashi quería lucirse baya que lo estaba haciendo.

 

 

“Sin rumbo yo estoy perdido no puedo disimular

Yo lo siento amigo mío, yo lo siento te lo tengo que contar

Desde que te vi todo es tan distinto para mí

Porque tu corazón, vivirá siempre en mí”

 

 

El peli-plateado camino entre la pista, pues había interrumpido las canciones y el baile, camino con una sonrisa sin dejar de cantar, ofreciéndole una mano a Iruka, esperando que él la tomara, correspondiendo a sus sentimientos.

 

Iruka no quería aceptar la mano de su ahora esposo era “bochornoso” pero en el fondo lo sorprendió y le gusto. Entonces las palabras de ánimo de su madre le decían que fuera, que aceptara la mano del “joven perdido”, todos comenzaron animarse, sonrío se levantó de la silla y acepto la mano de Kakashi.

 

Sin soltarse de su contacto, Iruka rodeo la mesa que estaba frente a él, caminando hacia Kakashi, luciendo el lindo yukata blanco con bordes dorados que había sido regalo de sus padres.

 

 

“Desde que te vi, supe que eras solo para mí

Que mi vida eres tú y la quiero vivir junto a ti

Desde que te vi...”

 

 

Tomaba con la mano derecha el micrófono, y la izquierda la paso en la cintura de su doncel, cuanto amaba su cintura bien definida, ni ancha ni pequeña, amaba el sonrojo que trato de ocultar su castaño en el momento que le paso los brazos en su cuello escondiendo su rostro en el pecho, cuanto amaba a aquel ser tan maravilloso... en verdad que lo amaba, porque ahí tenían al gran Kakashi Hatake cantando para su bello ser amado.

 

Bailaron lento, solo balanceándose de derecha a izquierda, solo girando en su propio mundo, solo ellos dos, abrazados de una forma cariñosa y protectora, perteneciéndose el uno al otro, solos en su propio mundo... des de que se vieron, desde que fueron amigos, desde que el peli-plateado le robo su primer beso, desde ese momento solo eran ellos dos, nadie más.

 

 

“Ya no aguanto lo que siento y no puedo fingir más

Sin tu amor me estoy muriendo, valgo con mi soledad

Hice todo por no amarte, me escape de esta pasión

Imposible es olvidarte hoy necesito tu amor”

 

 

Todos sin acepción observaban a la pareja bailar con los ojos serrados y al varón cantándole al oído a Iruka, estaban tan concentrados que no se percataron que se encerraron en su mundo y Kakashi le susurraba a Iruka, sin que la melodía dejara de escucharse.

 

Sasuke tenía a Naruto entre sus brazos, recargaba su mentón en la curvatura del cuello de su rubio, con los brazos enredados en la cintura del menor, entrelazando sus manos en completo silencio disfrutando del amor que los nuevos esposos esparcían cuando giraban en la pequeña pista.

 

Itachi tenía a Deidara en las piernas, mimándolo como solo él podía hacerlos, SU rubito había quedado recargado en su hombro sonriendo viendo a su hermano mayor lucir tan cómodo y bien encajado con su ahora cuñado nombrado oficialmente.

 

 

“Sin rumbo yo estoy perdido no puedo disimular

Yo lo siento amigo mío, yo lo siento te lo tengo que contar

Desde que te vi todo es tan distinto para mí

Porque tu corazón, vivirá siempre en mí”

 

 

Iruka recordaba cómo había conocido a aquel pervertido. Fue gracias al abuelo Jiraiya que conoció al Hatake.

 

Un día como cualquier otro, el entraba leyendo el libro de literatura sin percatarse de la presencia de su abuelo en la sala junto a otra persona. No fue hasta el momento en que su abuelo lo llamo que su vista choco con aquel tipo. Que desde Ese momento se percató que no congeniarían.

 

Su abuelo los presento y él se retiró, no le gustaba estar presente en juntas de su abuelo, no quería intervenir, pero se equivocó si pensaba que esa había sido la única ocasión que había coincidido con el peli-plata. Después de esa reunión le siguieron otras y las agradables “coincidencias” que tenían en su trabajo, centros comerciales, parques, ¡incluso en librerías! Así que un día lo enfrento. Pero algo había cambiado.

 

Con la “convivencia” que mejor dicho eran discusiones, se formó un lazo mayor, una amistad aunque ahora se escuchara raro, se habían hecho amigos. Así que ese día Kakashi le confesó que se había enamorado de él desde que lo vio y había tratado de conquistarlo, para Iruka había sido más acoso que “conquista” pero acepto sus sentimientos, ya que el últimamente se encontraba extraño cuando se encontraba junto al Hatake, supo definirlo después de su primer beso, algo torpe, pero lo sabía... se había enamorado de aquel pervertido, acosador... se había enamorado de Kakashi.

 

Sonrío recordando aquello, dejando escapar una risita que sabía escucharía Kakashi. Después solamente suspiro.

 

Y pensar que después de estar profundamente enamorados y dispuestos a hacer lo que fuera por ese amor, simplemente el destino los volvió a juntar. Iruka estaba comprometido con un tipo que no conocía. Mientras que Kakashi recibía la dichosa noticia de que sus padres lo habían comprometido desde su infancia y ¿adivinen con quién? Si, los padres de Iruka lo habían comprometido con Kakashi desde pequeño, al morir sus padres este se alejó del Hatake y no lo recordaba, mejor escrito, no quería recordar la vida de pequeño.

 

Pero sus caminos se encontraban trazados, se enamoraron como cualquier pareja y se casaron como prometidos que eran. Ahora les quedaba vivir como los amantes locos el uno por el otro por lo que les restara de vida.

 

 

“Desde que te vi, supe que eras solo para mí

Que mi vida eres tú y la quiero vivir junto a ti

Desde que te vi...”

 

 

La melodía a un seguía, bajando poco a poco la intensidad, entonces Kakashi bajo su micrófono y susurro en el oído de Iruka, sin dejar de bailar.

 

-te amo-y lo atrajo más asía su cuerpo-¿Qué recordabas?-pregunto curioso al no recibir respuesta de Iruka.

 

-como nos conocimos-se separa un poco y observo el rostro de su amado-jamás pensé estar casado con un pervertido como tú-sonrío ante la ceja alzada de Kakashi-pero te amo, y creo que también fue desde que te vi...

 

Un beso, un simple y sencillo beso fue la llave que serró aquellas palabras, aquel amor simplemente inevitable.

 

La canción termino, pero su vals no, seguían ladeándose y girando delicadamente, perdiéndose el uno al otro en sus ojos, un mundo hecho a la perfección por cada uno para ellos, solo para su cariño y amor.

 

Los invitados veían como a pesar de que la música se había detenido. Los ahora esposos se encontraban sonriendo felizmente y sin darse cuenta del mundo a su alrededor.

 

 

=o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O=

 

 

Ase un momento que Sasuke y Naruto se habían perdido, no podían esperar a que él baile que realizaban Iruka y Kakashi terminara, pues ellos se encontraban igual o más felices que esa parejita de recién casados.

 

-me alegra saber que tú seas mi prometido-hablo Naruto sin mirar a Sasuke.

 

Caminaban por el jardín donde no llegaban todas aquellas luces de la fiesta, tomados de la mano.

 

-a mí me alegra saber que solo yo te tendré entre mis brazos-se detuvo, mirando la luna que era acompañada de las estrellas en el cielo-Naruto…

 

Ambos se miraron con intensidad, no podían describir que tanto se amaban con solo esas miradas, caricias, simplemente era maravilloso contemplar las orbes contrarias que dejaban desbordar tanta felicidad.

 

-sabes, me he dado cuenta que eres un celoso-sonrió abrazando por la espalda al azabache-y aun así, lo que más me atrajo de ti fue la preocupación que me mostraste cuando estaba en el mar.

 

-eres un dobe-Sasuke correspondió el abrazo-¿Qué hubiera hecho si mi ángel hubiera desaparecido?-pregunto serrando los ojos y dejándose llevar por el viento que movía ambas melenas-porque lo que vi en ti, fueron esas alas que te crecen desde la espalda Naruto…

 

-Sasuke…-el rubio suspiro, ¿Qué más podía hacer? Estaba completa y perdidamente enamorado de ese moreno, le agradecería a sus padres haberlo comprometido con ese varón, definitivamente era lo mejor que le había ocurrido hasta ahora.

 

 

-¡MORIRÁS AHORA MISMO, TE QUEDARAS SIN TU… ORGULLO ITACHI UCHIHA!-pero los gritos, quizá provenientes de Minato les llamo la atención.

 

-creo que mi aniki ya le pidió la mano de Deidara a Minato-san-hablo divertido el azabache.

 

-y no solo eso-sonrió Naruto al imaginar la cara de su padre-parece que incluso le dijeron del embarazo de Deidara.

 

Se miraron de nuevo, y sin poder evitarlo sonrieron, esos dos sí que se amaban, enfrentar de esa forma a toda la familia Namikaze. Era realmente sorprendente, ¿Cómo lo pudieron hacer?... simplemente amor. El aroma que últimamente se respiraba en ese lugar.

 

 

=o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O=

 

 

Pues digamos que la familia Namikaze ahora cuentan con dos miembros Uchiha, y muy pronto dos pequeños revoltosos corriendo por todo el lugar. Sin mencionar que uno de aquellos futuros consentidos, se iba a quedar sin padre el mismo día que pido la mano de su oto-chan.

 

El mismo día de la boda de Iruka y Kakashi, el mayor de los Uchiha pidió de una forma… digamos no tan formal la mano de su Deidara.

 

-aun lo recuerdo-hablaba Deidara sentado en el sofá, bebiendo un vaso con leche.

 

-Deidara-niisan, ayer fue cuando pidió tu mano, no ha pasado mucho para que lo olvides-sonrió Naruto que igual estaba sentado en la sala frente a Deidara en el sofá de dos plazas-pero cuénteme ¿Cómo sucedió para que papa se enfadara?

 

-Pues en medio de su nerviosismo, ¡si Uchiha Itachi estaba nervioso!-aclaro el rubio mayor ante el rostro incrédulo de su hermanito-le hablaba tan bajito a oto-san, que cuando hablo en un tono más “audible” lo grito y la música se cortó: “¡Minato-san, Dei-chan y yo debemos casarnos, o su nieto nacerá fuera del matrimonio!”

 

Los dos hermanos se miraron y después empezaron a reír, claro como ellos no habían pasado la vergüenza. Aun así era gracioso saber que después de esa confesión no se podía hacer nada. Su madre solo sonrió y comento que le hubiese gustado que Deidara llegara puro al altar, almenas uno de sus tres hijos debería hacerlo. Porque por alguna extraña razón sabia del embarazo de Iruka.

 

Claro, después de la gran celebración la mayoría de los invitados habían permanecido en la mansión, sin hacer algún comentario sobre la repentina próxima boda Uchiha-Namikaze, vaya que ese día eran de sorpresas. Mientras los invitados a un dormían plácidamente, esos rubitos conversaban en la sala de estar de la mansión. Nadie los molestaría a las siete de la maña. A pesar de haberse desvelado, la costumbre los había levantado.

 

El primero que se levanto fue Naruto, mirando a su acompañante que lo mantenía preso a su cuerpo en un abrazo. Sonrió pues Sasuke estaba sonriendo mientras dormía, se veía realmente como un hermoso ser divino. Pero algunos deberes lo llamaban. Así que con sumo cuidado y precaución se pudo desasir del agarre de su cintura. Saliendo de la habitación con algunos papeles de la empresa debía leerlos y firmar algunos.

 

Mientras bajaba las escaleras pudo escuchar el ruido de alguien dirigiéndose a la cocina. Era extraño ya que incluso los meseros y sirvientes deberían estar descansando. Así que decidido fue a ver de quien se trataba. Mirando que no era otro más que Deidara sonrió. Parresia que sus antojos eran más notorios ahora que era libre de comer sin molestas preguntas.

 

Y así era como habían acabado en la sala, sentados aun con sus pijamas y charlando como dos viejas chismosas con su café, o leche, riéndose del próximo integrante de la familia.

 

-debes amar mucho a Itachi, niisan-suspiro Naruto sonriéndole-incluso le entregaste tu primera vez antes de casarse-sonrió ante el sonrojo de su hermano mayor.

 

-es acaso ¿Qué tu no entregarías tu primera vez a Sasuke?-pregunto el rubio mayor con burla-¿o acaso ya la perdiste?-pregunto sorprendido.

 

-¡no digas tonterías!-grito avergonzado Naruto-por supuesto que no-susurro para si mismo-amo a Sasuke, es solo que…

 

-no quieres decepcionar a oka-san y a Tsunade-baachan ¿no?-Naruto asintió-pero…-sonrió pícaro Deidara-¿no te gustaría intimar con Sasuke?

 

Naruto se sonrojo y desvió la mirada, encogiéndose en el sillón y haciendo una leve afirmación.

 

-¡lo sabía!-rio Deidara-te diré algo hermanito…-el Namikaze volteo a ambos lados verificando que nadie lo escuchaba, y bajando el tono de voz-Itachi es todo un dios en la cama, así que Sasuke debe ser igual. Al menos el amiguito de Itachi no me ha decepcionado, al contrario disfruto de cada noche en la que el…

 

-¡DEIDARA!-grito Naruto interrumpiéndolo y sonrojado hasta la medula.

 

Rio, el rubio rio con ganas al ver la reacción de su hermanito, le gustaba hacerlo enfadar, le encantaba verlo ponerse rojito con esos comentarios. Pero podía ver que en sus zafiros había ilusión y amor.

 

-lo más importante es que Sasuke cumplirá todo lo que te prometa, ara hasta lo imposible por enamorarte cada día más-acaricio su vientre y sonrió-porque te ama…

 

-yo también lo amo-sonrió mirando la tierna escena que su hermano le brindaba.

 

De pronto los pasos que se escuchaban bajar las escaleras a prisa, los sacaron de su amena chara. Entrando en la sala, pudieron ver a dos azabaches respirando rápidamente. Parecían asustados y un poco alterados.

 

-¡dobe!-Sasuke se acercó a Naruto-¡deberías estar en la cama, a mi lado!-reclamo sentándose junto a Naruto.

 

-ya no podía dormir teme-le contesto Naruto mirándolo con un tierno puchero-y… ¡no me digas dobe!

 

Sasuke sonrió de medio lado, acercándose al rostro de Naruto, el cual serró los ojos pensando que el azabache lo saludaría con un beso en los labios, y no se equivocó, pero no fue exactamente con un beso en los labios. El contacto se dirigió a la frente morenita de Naruto.

 

-no les demos espectáculo a esos chicos-le susurro Sasuke a un sonrojado Naruto-buenos días Naruto-hablo po ultimo con voz normal.

 

Naruto lo miro a los esos ojos electrizantes, tan llamativos como la noche pero tan llenos de ilusión como los suyos. Entonces lo acepto, estaba perdidamente enamorado de ese azabache. Entendía por que cada día Sasuke se esforzaría por enamorarlos. Sabía lo que realmente sus ojos le decían.

 

-¡vaya par de tortolos!-escucho a su cuñado burlándose y sentándose junto a Deidara.

 

-te recuerdo que aun puedo dar mi negativa para tu compromiso Itachi-san-claro malvado Naruto, dejando su taza en la mesita de centro.

 

Sasuke y Deidara se soltaron a reír con el silencio que Itachi dejo como respuesta. En verdad que era divertido ver como se comportaban. Y pensar que aquel chico seria miembro de la prestigiosa familia a la que pertenecían…

 

-¿Qué pasara con estas personas y conmigo?-se preguntó Naruto suspirando…

 

 

=o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O=

 

 

La boda de Deidara e Itachi fue en los cabos, una muy sencilla ceremonia que solo incluía a los familiares más cercanos. Ambos, ahora esposos, querían algo íntimo, nada como lo que ofrecieron Kakashi e Iruka.

 

El pequeño Tamaki y él bebe de los Hatake se encontraban ya presentes en la ceremonia. Todos los invitados los cargaban y mimaban. No se diga Deidara e Itachi, que “entrenaban” muy pronto para ser padres.

 

La relación de Naruto y Sasuke iba viento en popa. Se habían dado cuenta, ambos, que no podían vivir el uno sin el otro. Simplemente Sasuke no dejaba a su Naru-chan, porque ya le había dicho a todos los que conocía y a los amigos de su lindo prometido, que solo el, y nadie más podía tocar al lindo doncel. En cierta ocasión el azabache había ido directo al foro de fotografía de Naruto para “visitarlo” y fue ahí donde las cámaras captaron el fogoso beso que el Uchiha le daba al Namikaze.

 

Sin duda una pareja polémica y envidiada.

 

Naruto simplemente disfrutaba de todo aquello que el azabache le brindaba y hacia vivir, no se podía quejar, ya que el también le espantaba a ciertos donceles resbalosos y personitas indeseables. Al fin y al cabo ambos se pertenecían el uno al otro, no era que ya hubieran experimentado en ocasiones, simplemente lo sabían.

 

-¿en qué piensas ototo?-pregunto Iruka colocándose junto a Naruto en la mesa que daba ala pequeña e improvisada pista de baile.

 

-a Sasuke le gustan los niños, aunque no me lo diga-sonrió mirando a su azabache, que cargaba al hijo de Iruka y Kakashi-Takara es un hermoso bebe.

 

-en realidad es un doncel, al igual que tú y yo-aclaro Iruka sonriéndole.

 

-no inventes Iruka, a un es pequeño para saber si lo es o no-aclaro Naruto viendo en esta ocasión a Iruka.

 

-es una… quito sentido-hablo Iruka con una sonrisa-Kakashi lo protege mucho, incluso es quien más lo carga-anuncio rascándose su cicatriz.

 

-ya veo…-Naruto volvió la vista a Sasuke, que ahora jugaba con Tamaki, y suspiro.

 

-tú y Sasuke aún no…-pero fue interrumpido por Naruto.

 

-¡Iruka!-hablo sonrojado y viéndolo con enfado al mayor que solo ríe divertido- bueno, lo que pasa es que…

 

-admiro a Sasuke-vio la cara desconcertada de Naruto y prosiguió-sé que se ha quedado a dormir en tu habitación, que en algunos viajes comparten incluso la cama-se sonrojo ante lo que seguiría-debo admitir que Kakashi jamás se mantenía quieto cuando compartíamos habitación, siempre estaba metiendo mano-Naruto se sonrojo-pero entendía que era difícil controlarse, pero Sasuke…

 

-me respeta, lo sé-Naruto sonrió y miro que Sasuke se acercaba con una sonrisa-también lo entiendo…

 

-vamos dobe, es hora de irnos-hablo Sasuke tomándolo de la mano para besársela-miro a Iruka y sonrió-nos retiramos Iruka-san.

 

El castaño asintió y les sonrió, baya que Naruto se llevaría una sorpresa hoy. Esa miraba que portaba el azabache era la misma que le ofrecía Kakashi cuando por fin se decidió a…

 

-¡Iru-chan! ¡Iru-chan!-grito felizmente Kakashi-Takara ha dicho oto-san, ven a verlo.

 

-no exageres Kakashi-hablo con una sonrisa Iruka y camino en dirección de su familia.

 

 

=o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O= =o°O=

 

 

Bajaron del auto tomados de la mano, como siempre el primero en salir fue Sasuke para ayudarle a bajar del auto. Después Naruto, quien era abrazado por Sasuke y después tomado de la mano para entrar a la habitación del hotel. Ese día antes de ir a la boda, Sasuke le había pedido que regresaran temprano, se sentía un poco cansado y quería descansar junto a él. No se negó a él también le hacía falta un buen sueñito.

 

-vamos Naruto-lo animaba Sasuke de vez en cuando para apresurar el paso.

 

-que pasa Sasuke, ya llegamos solo…

 

Y se quedó asombrado, justo cuando el azabache abría la puerta, pudo ver cientos de velas, de todos tamaños iluminando la habitación donde se hospedaban, pétalos de rosa decorando un cierto camino y arreglos tan detallados que le hacían dudar si fueran en verdad reales.

 

-lo siento tanto…-susurro Sasuke cerrando la puerta, dejando a ambos en ese ambiente romántico y acogedor.

 

-¿pero… porque te disculpas?-Naruto se sentía tan emocionado y a la vez triste, él no podía responder a los sentimientos de Sasuke como él lo deseaba.

 

-porque por mi llevas un disfraz, y no te puedo culpar-Sasuke se acercó para abrazar a Naruto de la cintura y atraerlo así ale- los ángeles en la tierra sus alas deben ocultar.

 

-Sasuke…-susurro Naruto, correspondiendo el abrazo, cruzando sus brazos detrás de la cabeza del varón.

 

-los humanos como yo somos imprudentes y descuidados-volvió a hablar, recargando en esta ocasión su frente contra la de Naruto-y tú eres tan pequeño y amable ¿cómo podría permitir que te hicieran daño por mi culpa?

 

-¿de qué hablas Sasuke, no me has hecho daño?-hablo Naruto, acariciando las mejillas de su prometido con ambas manos y viéndolo con esa mirada tan enamorada que solo le brindaba a él cuándo estaban a solas.

 

-tus pequeñas manos transmiten tanta calidez-hablo Sasuke serrando sus ojos y tomando ambas manos besándolas con devoción-en mis noches intranquilas siempre me consigues calmar-abrió los ojos y beso delicadamente los labios de Naruto-a través de tu ojos me atrevo a soñar y solo podrían realizarse si conmigo tu estas.

 

-eres tan romántico teme-sonrió Naruto volviendo a besar los labios de su fotógrafo.

 

-Naruto… realiza conmigo todos nuestros sueños-Sasuke dejo libres las manos del doncel rubito, para arrodillarse frente a el-cásate conmigo-saco de entre los pétalos escondidos una hermoso anillo con un diamante blanco y brillante.

 

-Sasuke…-Naruto no pudo más y sus lágrimas salieron de la sorpresa, pensaba que esperarían más pero Sasuke, su Sasuke no podía…

 

-puedo esperar todo lo que quieras en una cita, impuntual dobe, puedo ver que tu deseo es llegar puro al altar, y lo respeto usuratonkachi, pero no puedo esperar a que seas mi esposo Naruto-hablo con un tono un poco desconfiado-así que… ¡tienes que aceptar casarte conmigo dobe!

 

Pero Naruto solo se arrojó a los brazos de su amante, lo lleno de besos y le susurraba los “te amo” que el llanto le dejaba salir de su agitada garganta.

 

-¡me caso contigo Sasuke-baka!-grito feliz y emocionado el rubio.

 

Sus miradas se encontraron y sus labios se curvaron en la mejor sonrisa que se abrían regalado en todo el día.

 

-creo que es inevitable que deje de sonreír contigo a mi lado Naruto Namikaze-Sasuke le acaricio una hebra dorada.

 

-creo que fue inevitable conocerte Sasuke Uchiha-contraataco Naruto.

 

Y sin más se fundieron en un lento y amable beso, que los dejo tirados, uno encima del otro en aquella bella habitación que los vio en el inicio de su nueva vida.

 

Notas finales:

bien, no tengo perdon de nadie. u.u

pero les agradeseria un rr, solo falta el epilogo y esta historia bra acabado !la verdad me he divertido! como espero ustedes lo ayan hecho.

solo les dire: ¿qué abra pasado con aquella revista donde Sasuke vio por primera vez a Naruto? ¿apareseran Nar´s y Sasu´s pekes? ¿abra lemon?

todo esto y un poco mas en el epilogo ¡no dejen de seguir el fanfic en su ultimo capítulo. recuerden:

 

EL YAOI ES FUENTE DE ERGUÍA n_n


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).