NUBE NEGRA.
A Ron Weasley le daba flojera levantarse temprano, sinceramente ese nunca fue su punto fuerte pero esta mañana era la excepción cuando su sueño fue interrumpido con pensamientos homicidas hacia un conductor imprudente y sus deseos de dormir cómodamente enredado en las cobijas de su cama se esfumaron por completo. Se levanto desganado recordándole el diez de mayo hasta la tatarabuela al alcohólico drogadicto que casi lo mata, bostezando caminó a la cocina a buscar algo para zamparse para alejar su mal humor. Reviso la alacena, estado: vacía, miro la mesa y se encontró con el frutero brillaba por ausencia de valga la redundancia frutas, fue a la nevera y se encontró con la mitad de un emparedado a medio morder, frascos medio llenos de conservantes y un cartón de leche que olio ¡Rayos! ¿Desde cuándo tenía esa porquería allí? Tiro todo el contenido del refrigerador a la basura (Ninguna perdida que lamentar) suspiro derrotado tomando nota mental de ir al super a surtirse con lo básico en alimentos para un hombre soltero (entiéndase latas y comidas congeladas).
Decidió bañarse antes de ir a la universidad, entro a la ducha abriendo la llave del agua caliente se desvistió y entro al chorro del agua ¡Estaba helada! Así que se dio un baño exprés (tiempo record 2 minutos con 27 segundos) y salió titiritando, busco entre su ropa algo limpio que ponerse encontrando solo esos pantalones grises que le quedaban ajustados en la entrepierna, una camiseta tan vieja que era de color indefinido, no encontró sudaderas limpias así que se tuvo que poner el abrigo verde azulado que era de su hermano Charlie que era dos tallas más grande y sus tenis favoritos estaban hechos un asco. Nota mental numero dos: ir a lavandería urgentemente.
Salió a su clase de las doce topándose con su casero que le comento que la caldera se había descompuesto y para poder repararla tendrían que subir la renta, casi le da un infarto ¡Pero si ya estaba por las nubes! Refunfuñando en contra de la injusticia del dueño de los departamentos, molesto con el pantalón que le apretaba al caminar y sin desayunar a se fue a tomar el autobús.
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Al menos su día en la universidad paso sin problemas, a la salida de su ultima clase de las ocho se topo con sus amigos Hermione y Harry los cuales lo invitaron a tomar un café, abrazo fuertemente a sus amigos feliz de que por fin su día tuviera algo bueno.
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Se sentaron cómodamente en el confortable café al cual solían ir ordenando cada uno lo que se les apetecía.
-Y bien chicos ¿Qué tal sus vidas?- Pregunto Ron tomando un sorbo de su moka.
-Pues lo de siempre, corriendo a todos lados y tener que soportar a Snape – dijo Harry a la mitad del camino entre su boca y su expreso.
-¿Acaso no ha cambiado la manera de verte ahora que eres su asistente? -Pregunto Hermione tomando una galleta de cortesía del platito esperando que se enfriara su latte.
-Al parecer su odio viene recargado, no deja de joderme que soy un arrogante presumido y dejarme horas extras corrigiendo ensayos-
-Mmm… interesante, pareciera que quiere centrar tu atención en él- comento la chica del grupo dándole un mordisquito a la galleta.
-¿Eh?- Cara de confusión en ambos hombres.
-¿Y eso que significa? – el moreno pregunto temiendo la respuesta.
-Que parece que le gustas- dijo Hermione con toda la naturalidad del mundo tomando un poco de su café... aahh delicioso.
-O.O ¿Cómo?-
-O.O ¿Disculpa?-
-Buenooo son suposiciones mías. Pero se comporta como los niños cuando les gusta alguien aunque de manera más “sofisticada” que un jalón de pelo o un pellizco- aclaro.
-No me lo creo- balbuceo consternado Ron.
-Este café debe estar adulterado- Harry le dio una mirada dudosa al contenido de su taza.
-Como sea, solo piénsalo-
-Sigo sin creerte- musito Harry avergonzado.
-Mejor cambiemos de tema, Snape y comida no son una buena combinación – dijo Ron con cara de asco.
-Muy bien ¿Y a ti que tal Ron? – Presuroso Harry cambio el tema rápidamente, no lo culpaba ese profesor causaba repulsión con su manera de ser.
-Pues lo de siempre, soportar las llamadas de mamá, tratar de vivir con mis trabajos y la uni y haciendo milagros para llegar a fin de mes con mis sueldos, nada del otro mundo-desestimo su vida a fin de cuentas siempre era aburrida –Bueno… a excepción de ayer que al salir del restaurante un borracho por poco me atropella.
-¿Estás bien? ¿Fuiste al hospital?- Presurosa Hermione tomo su rostro examinando si tenía heridas.
-¿No te paso nada?- Los ojos de su amigo brillaron preocupados.
-Naa, nada más el susto y las ganas de partirle la cara al patán ese, ¿Qué se cree que con su auto del año está en la F1°? ¿O que con su ropa de marca, su tamaño, cara de malo y ojos negros nadie la va a decir nada? Aunque pareciera que desde la madrugada me va mal- se zafo de las manos de su amiga que se afanaba en revisarlo.
-Esta bien Ron, no es nada solo es tu imaginación que dramatiza las cosas por el susto de acabar en la tumba– lo conforto su amigo.
-Tienes razón Harry-
- Caray Ron parece que dejo una fuerte impresión en ti- dijo burlona su compañera.
-¿Podría ser de otra manera sí casi me mata? – Le mando una mirada hosca a su amiga que habría funcionado de maravilla si no se hubiera puesto rojo.
- Ya, ya- tranquilizo Harry ya que las peleas entre esos dos eran épicas- Y que me dices de tu serpiente rubia Herm-
- Pues estamos planeando… – Así continúo la plática hasta ya entrada la noche con sus amigos hasta que tuvo que marcharse a hacer sus compras.
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En el super tomo una canasta y recorrió los estantes buscando lo necesario para sobrevivir en la semana, le ayudo a una anciana a tomar unas latas que se encontraban en la repisa más alta ganándose una sonrisa agradecida de la abuela así como un comentario extraño: -Todo cambiara a partir de hoy muchacho- dándole unas palmaditas en la mejilla dejándolo descolocado, encogió los hombros sin darle importancia tal vez esa era la manera de bendecir de la señora y se fue a pagar. Ya en la caja al momento de pagar se le cayo un billete al agacharse a recogerlo se oyó un sonoro “Graash” ¡Noooo! ¡Su pantalón se rompió! Avergonzado se levanto presuroso cubriendo su trasero viendo una sonrisa burlona de la cajera termino de pagarle y salio volando de allí jurándose no volver por un tiempo.
Llegó a su departamento haciendo malabares para cubrirse y llevar sus compras, entro dejando las bolsas en la mesa y puso a calentar un platillo en el microondas mientras metía sin orden todo lo perecedero al congelador, oyó la alarma del microondas y se dispuso sentarse a comer con un apetito voraz su primera comida decente del día. Satisfecho se levanto al baño para asearse e irse a dormir.
En su cama tapado hasta la barbilla rememoro las palabras de la anciana, no es que lo asustaran sino que se le hicieron extrañas, cerró sus ojos y rezo porque las cosas estuvieran bien y así se durmió.
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Adrian Pucey estaba sentado en la sala de espera aguardando que su jefe tuviera un momento para atenderlo mientras tanto recordo la información que traía con él, no entendía la razón del repentino interés de su jefe ya que por lo general le daba una semana para buscar información ahora solo le dio dos días, bueno no era su asunto.
-Adrian puedes pasar- le aviso Millicent.
Entro a la oficina con un suave con permiso.
-Buenas tardes- Saludo hallando a sus dos jefes sentados revisando un montón de papeles.
-Oh Adrian cuanto tiempo, por favor siéntate- saludo Bojan dejando sus papeles a un lado.
-Gracias así estoy bien señor tengo algo de prisa-
-Buenas tardes Adrian ¿Tienes lo que te pedí?- cuestiono Viktor ¿Ansioso?
- Si señor- extendió la un CD donde traía en informe entregándoselo a Viktor
- Fue fácil encontrar al sujeto con los datos y las características que me dio. La investigación no arrojo nada turbio o fuera de lo normal. Todo lo que encontré esta detallado así como fotos tal como lo pidió.
-Buen trabajo Adrian- Viktor sonrió satisfecho- Pasa con Millicent que te entregue tu cheque y un bono extra.
-Gracias señor me retiro- Adrian Pucey se fue de la oficina después de cobrar aun sin entender que tenia de especial lo recabado para que incluso le dieran un bono, en serio sus jefes tendrían algo urgente que arreglar con alguno de sus clientes para tanto misterio por algiuien que a él parecia simple a comparación de las demás personas que estaba acostumbrado a investigar para ellos.
-Bueno mientras me paguen no me interesa –
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Al cerrarse la puerta Bojan se paró de su silla como impulsado con resorte ubicándose detrás de Viktor.
-Muy bien, conozcamos a tu gatito callejero Viktor-
Aspiro profundamente antes de meter el disco al lector de su lap top nervioso, no sabía que se encontraría aunque por las palabras de Adrian no debía de temer.
-Apúrate hombre que me voy a hacer viejo- Bojan zarandeo a Viktor impaciente.
-Me permites esta cargando- abrió la carpeta y en la pantalla apareció una foto de Ron con una camisa blanca sencilla y unos jeans. Ahí estaban de nuevo esos ojos azules tan hermosos. Lo miro a detalle recreándose en la figura de Ron notando por ejemplo que tenia pecas en sus mejillas, la nariz larga y fina, una figura delgada, manos grandes y un …
-Vaya que tiene un buen trasero el chico Viktor- Bojan miraba un legajo de papeles con las fotos de Ron.
-¿En qué momento sacaste eso?-
-Cuando te quedaste como idiota viendo la pantalla con cara de pervertido Viky. En serio que debes estar enfermo para querer violarte el monitor- se burlo de él.
-Quién diablos te dio permiso de leerlo eso, es más ¿Por qué estás aquí todavía?-
-Oww, solo quería conocer a quien te trae babeando como un perrito siberiano ¿o debería decir como lobo hambriento y en celo? -
-Devuélveme eso Zec- Hizo amago de quitarle los papeles pero Bojan fue más rápido y corrió a la puerta aun con los papeles un una mano siendo interceptado por Viktor que le hizo un candado en el brazo libre.
-Ouch, me rindo, me rindo- dijo pero aun así poniendo fuera del alcance de Viktor los papeles leyendo ávidamente antes de que se los pudiera quitar.
-Creo que esto te va a interesar – su brazo dejo de ser presionado.
-¿Qué cosa?- Palabras mágicas, ahora su atención se encontraba en lo que fuera a decir su amigo y no en destrozarle la mano.
-El chico tiene tres trabajos y uno de ellos es en el bar llamado “Shinjuku” hoy en la noche -
Las neuronas de Viktor empezaron a trabajar deprisa ante la revelación, eso quería decir que podría ver de nuevo a Ron sin que a este le diera una conmoción por verlo.
-Muy bien, entonces me voy a preparar- su amigo arrojo las hojas al aire sin importarle el desorden.
- ¿A ti quién diablos te invito?-
-Lamento romper tu burbuja pero a ese club solo pueden entrar clientes y sus invitados y yo como tú buen amigo te llevaré ya que soy cliente frecuente – tomo el pomo de la puerta -Además me lo debes por la noche que me tuviste como idiota preocupado por ti-
- Esta bien- Suspiro derrotado.
-Pasa por mí a las once, te toca ser el conductor designado- se fue dejando malhumorado a Viktor en la oficina
-Maldito, ya se había tardado en cobrárselas.- Cerro la puerta, miro el piso y recogió una de las fotos tiradas, en su mente empezaron a rodar imágenes del encuentro y todos los posibles finales (felices y/o subidos de tono)
Esperaba con ansia esa noche.
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F1° Abreviación de Fórmula 1, si de casualidad no saben que es es un conjunto de carreras de automoviles que se denomina así. Es la reyna de las competencias automovilisticas ya que compiten grandes consorcios y sus pilotos son los más famosos.
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