UN AMOR FORZADO.
I LOVE YOU (II)
……10 años después.
Me he acostumbrado al ritmo de vida que llevo en estos momentos, nada me ha desagradado. Anteriormente podría decir que era un hombre feliz pero hoy igual lo soy, mucha gente no sé explica por qué pero al final del tiempo siempre te terminas acostumbrando a todo.
Después de la boda creí que no podría con todas las reglas que mi pareja ponía día con día; me gané mi fama de ser un mujeriego pero hoy nada de eso queda. En casa debo estar antes de que oscurezca o tendré problemas; cada fin de semana no debe haber trabajo; por eso debo matarme algunas noches trabajando.
Mi vida no es como la imaginaba, se fue por un camino que no pensé recorrer pero aquí estoy, y creo que aunque hay caminos más fáciles que recorrer no me alejaría de éste; algunos lo llaman costumbre pero simplemente después de vivir mi pequeña aventura con Shuichi Shindou prefiero está vida, ya viví demasiadas emociones.
Después de diez años mi hermana sigue con vida y eso es lo importante, creo que nunca me arrepentiré de mi decisión, cada día la veo cumplir una meta más y con una sonrisa hermosa; me molesta un poco que diga que tiene un padre y una madre que la aman pero ¿Dónde ve a la madre? Mi pareja no merece aquel título, por más que llegue a apreciar lo que ha hecho nunca la llamaría “esposa”. Mi padre viene de visita diariamente, con un poco de simpatía logró aceptar a su propia hija y ahora la ve más seguido.
Mi madre vive igual que siempre, entre lujos y un falso mundo; ella sola crea historias de amor entre nosotros, dice que mi vida está llena de sorpresas y que espera que la siguiente sea un hijo, no, yo no deseo eso…aún pienso que es un amarre a mi relación, y ante todo, no me veo como un padre, no sería muy bueno sería mala influencia.
Lo único que me hace enojar, o me duela la cabeza es ver cómo es que Tatsuha y K son enormemente felices, tienen unas parejas que los aman y que cada día que salen de casa les hablan lindo para que regresen y otra vez su cálido amor los envuelva. K se casó hace tres años con Hiro el amigo de Shuichi, un lazo remoto que nos une, la boda no fue nada parecida a la mía, en ella había millones de empleados, los padres de Shuichi, todo el pueblo de donde eran originarios Hiro y Shuichi; tenía todos los ojos puestos en mí que sólo abrazaba con susto a mi hermana pequeña.
El padre de Shuichi no soporta verme, generalmente siempre que por azares del destino nos miramos a la cara, siento que sus ojos apuñalan mi garganta, corazón, y alma sin piedad. Yuki Eiri dejó de ser lo que era, ahora sólo es un simple esposo, un editor, un empleado….alguien que es manejado por otra persona.
Después de esa boda vino la de mi hermano Tatsuha con Ryuichi, mi padre estaba que se moría pero terminó aceptando a ese peliverde que veo todo los días y que sigo queriendo matar día tras día, pero hace demasiado feliz a mi hermano que le perdono todo; incluso aquellos días en que enojado recuerda mi relación con Shuichi y la forma en la que lo trate; no son recuerdos gratos excepto él…Shuichi.
No puedo evitar ver nuevamente sus ojos llorosos en mi mente el día que lo rechace, no puedo evitar sentir esa agonía y las ganas de abrazarlo, he pensado que me dio algo para nunca poder olvidarlo y que necesite aunque sea una foto suya antes de dormir. Sinceramente creo que lo sigo amando como aquel día en que enojado me dijo que aceptaba el juego de ser mi pareja, o quizás sin darme cuenta siempre estuve enamorado de él. Recuerdo todo lo que vivimos y no hay forma de explicar lo que siento en mi corazón, a veces rio, a veces lloró, pero siempre terminó preguntándome si hice lo correcto y la respuesta es….
****Flas back*****
La gente se quedó mirando fijamente a Yuki quien se trataba de reponer de aquel acontecimiento, sabía que quizá Shuichi sentía algo por él pero nunca pensó que se atrevería a viajar hasta su casa e impedir la boda; Ayaka lo miraba molesta por eso se integró nuevamente a su lugar.
Ayaka sin pensar más tomo el acta de matrimonio y la firmo, dándosela a Yuki quién sólo sonrió para sí mismo, nunca había estado en un apuro tan enorme. Volteo a ver a su padre y este le susurro que firmara en ese preciso momento, así que Yuki firmo y acto seguido pidió estar solo, dejando la ceremonia a mitad pero ya había consumado su matrimonio.
Entro rápido a su acuarto, empezó a arrojar sus cosas a diversos lados, sentía una asfixia, que no lo dejaba pensar claramente, las lágrimas caían sin cesar, en su mente la palabra “cobarde” no dejaba de susurrar y eso era, un cobarde que nunca puede dejar lo seguro por lo incierto, que nunca había decidido algo por sí mismo sin que tenga que ver con otros. En ese momento se escuchó la puerta abrirse y vio a su hermana de pie.
—Deberías estar en la fiesta, debes irte.
—Eso mismo digo, es tu boda pero estas aquí llorando… ¿Quién era el chico de hace unos momentos?
—No te metas en líos de adultos pequeña, son cosas que sólo a nosotros nos preocupa; ve a jugar.
-Él se fue llorando, se fue muy triste… ¿no deberías haberle dicho algo?
—Son cosas que aún no entiendes.
—Son homosexuales, no tiene nada de malo; estoy enferma más no tonta. Sé que mi padre te amenaza conmigo pero no debes temer, no por mí.
—¿Sabes lo que dices?
—Sí, Tatsuha me lo explico, te enamoraste de ese joven, pero te tienes que casar por mi salud con Ayaka, ¿es injusto no crees?
—Nada que tenga que ver contigo es injusto.
—Pero eres famoso, ¿A qué le temes?
—A la vida, en realidad hermanita creo que esto lo hago más por mi seguridad que por la tuya, así que mejor es hora de irnos a la fiesta antes de que nuestro padre note nuestra ausencia.
—¿Y no te arrepentirás?
—No, estoy seguro que mientras estés conmigo, y nunca me dejes yo haré todo por ti.
—Sí eso es verdad quiero que hagas algo mí.
—Lo que la princesa diga.
—Preséntame ahora a Shuichi.
La respuesta de Akira hizo que Yuki sintiera un ligero mareo y quisiera desmayar pero en lugar de eso, sólo miró fijamente a su hermana.
—Vamos, ahora nadie nos busca y en lugar de llorar puedes hablar con él.
Quizá fue porque necesitaba saber dónde había ido Shuichi, quizá quería disculparse por portarse de esa manera pero en diez minutos estaban fuera de un enorme jardín.
—¿Cómo sabes que aquí estará?
—No lo sé, sólo es una corazonada; siempre decía que cuando se estresaba acudía a este lugar ¿podría ser una opción?
—Creo que sí.
—Akira…
—Nada de eso, ahora entremos, quiero conocer más a Shuichi.
Entraron al enorme jardín, tenía figura de coliseo; pero cada escalón rumbo a la arena estaba lleno de flores y arboles variados y en el centro en lugar de arena y luchadores, había una fuente con dos enormes aves en él. Sentado a un costado estaba Shuichi.
—Shuichi.
—Sí…—al ver a Yuki Shuichi se quedó impactado— ¿qué demonios haces aquí? Ya dijiste todo lo que tenías que decir, ya me humillaste todo lo que podías. ¿Ahora qué? A caso vienes a rematarme, pues hazlo si así eres feliz, entonces hazlo y largarte que tienes una mujer más que te espera en tu cama ¡AH! cierto, no sólo es una mujer más…es tu esposa. Lárgate.
—Shuichi yo…
—¿Quieres jugar más conmigo? — Shuichi rompió en llanto y se desvaneció en el piso— ¿Cuánto más me quieres humillar?....Yuki…te odio.
—¿Es cierto eso? —la voz de Akira llegó a Shuichi quien levanto su mirada y miró a la niña, se parecía tanto a Yuki y sin embargo no sabía qué hacía ahí.
—¿Akira?
—Tú no odias a mi hermano, ni él a ti; quizá lo único que le faltó decirte es que está perdidamente enamorado de ti.
Yuki volteo hacia su hermana quien con inocencia se agachaba a donde Shuichi.
—Tú lo amas tanto, o más que él.
—Yo…lo amaba hasta que él me dijo esas palabras en su boda.
—¡Por Dios Shuichi! —Yuki empezó a gritar y a llorar a la vez — ¿Qué querías que hiciera? ¡Qué me pusiera a decirte lo mucho que te amo frente a mi padre que tiene mi vida amarrada a él; o querías que te pidiera perdón con el riesgo de que no volviera a ver Akira!
—¡Quería que tuvieras los tamaños suficientes como para decirme las cosas! ¡No sabes lo que tuve que pasar, libre a mi orgullo para ir a humillarme en tu casa!
—Así que es cierto mi padre te amenazó conmigo— Akira interrumpió la conversación— no debiste dejarte…además yo quisiera ser adoptada por ti, y como dices ¡deja de tener miedo de separarte del nombre de la compañía! Eres bueno en lo que haces, no temas Yuki…podemos ser una familia….los tres.
—No Akira— Shuichi respondió— lo de tu hermano y yo jamás será, porque nunca se puede forzar el amor, porque ni un contrato puede hacer que un ser humano le permanezca a otro, porque un amor forzado no llegaría lejos, es más ni siquiera existiría.
—Es cierto, pero debes tener en cuenta que esto no es un amor forzado como dices, se dio solo no hay nada que lo evite si me das una oportunidad, te podré dar todo lo que tengo…sacaré adelante a ambos, sé que mañana no estaré seguro de lo que estoy haciendo pero si tú estas a mi lado a nada temo, si tú no me dejas si permaneces a mi lado entonces yo seguiré junto a ti. Te lo prometo…Shuichi…por favor dame una oportunidad.
—¿Sabes que te odio? Pero aun así…te amo demasiado como para dejarte ir. No importa que pase, yo seré tu soporte pero siempre…seguirás me reglas.
—-¿Entonces debemos preparar un divorcio?
—En realidad no firme con mi firma original así ese papel no vale…y es hora de irnos y luchar por esta familia de tres.
******Fin de Flash Back*******
Sí, hice lo correcto, pero sigo arrepintiéndome cada vez que peleamos, cada vez que me lleva la contraria, cada vez que no me deja tocarlo en fin, haberme casado con Shuichi puede ser lo peor que haya hecho en el mundo, pero en estos diez años de matrimonio me la he pasado enormemente enamorado de él, sus reglas tontas de no dejarme llegar noche ¿cómo puede creer que lo engañaría?; sus enojos constantes y el odio que me tiene su padre porque por mí culpa no tendrá nietos, pero bueno quiere a Akira como una nieta, Shuichi la quiere como una hija pero nunca dejaría que le dijera madre, ella tiene dos padres, bueno un intento de padre o sea yo.
Sí, envidio a K porque Hiro lo trata amablemente, Shuichi es un mandón y a cada rato me castiga, pero siempre su cuerpo, su hermoso cuerpo está listo para mí por las noches; y los días en que no está recuerdo como lo lastime y busco su foto para dormir, sin él mi vida es nada.
Sí alguien me contara mi historia y me dijera en el pasado que esto pasaría en mi vida, le diría que estaba totalmente loco, jamás hubiera creído que terminaría con mi asistente, que fuera mi mayor tesoro y que hiciera que los títulos en mi vida no fuera de trabajo sino de amor y cariño; y que de la vida hay que esperar tantas sorpresas como sea posible.
—Yuki ¿Qué demonios haces viéndome así?
—Me gusta el panorama.
—Lo sé, soy hermoso.
—Lo eres, y sabes que te amo más que mi vida.
—Eso no es cierto, al menos no quiero que lo sea…
—¿Por qué?
—Quiero que hagas espacio para Akira en tu corazón.
—Mi corazón es de ustedes dos, no me imagino otra vida así…
—Debes imaginarlo.
—¿Por qué Shuichi Shindou? ¿Por qué actúas así?
—Quiero tener un hijo.
Aunque quizá algunas sorpresas puedan sorprenderte más que otras, el amor forzado no existe pero nunca imagine verme como padre….pero de todas maneras esa es otra historia y en otro momento se contará.
FIN.